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Las negociaciones de los ganaderos con las industrias para lograr una subida de precios de la leche arrancaron por uno de los huesos más difíciles de roer, Lactalis. La industria francesa, líder en volumen procesado en Europa, en España y también a la cabeza en Galicia, le trasladó a los productores su negativa a una subida de los precios antes de abril. La Plataforma en Defensa del Sector Lácteo de Galicia, que aglutina a los ganaderos, tiene previsto iniciar esta semana conversaciones con otras industrias, pero de manera paralela emprenderá ya protestas y acciones de boicot sobre Lactalis. Para este viernes se ha programado una concentración ante la planta de la marca gala en Vilalba.
La estrategia de los productores con las industrias es similar a la utilizada en diciembre, cuando los bloqueos a las cadenas de distribución. En aquella batalla, los ganaderos aprendieron la importancia de concentrar fuerzas y objetivos. El bloqueo sobre Carrefour se prolongó dos semanas, pero tras el acuerdo con la cadena francesa, el resto de grupos de la distribución cayó en horas sin necesidad de gran presión.
Si en diciembre, la lucha se centró en Carrefour, las próximas semanas pintan bastos para Lactalis. A la concentración prevista este viernes ante su planta de Vilalba, hay que sumar la campaña de boicot que iniciarán los ganaderos contra los productos de la industria francesa. Está prevista una ronda de contactos de la Plataforma con todas las cadenas de supermercados para pedir la retirada de los productos de la empresa gala de los lineales. Se iniciará además una campaña de información a los consumidores y en redes sociales ya se están difundiendo gráficos explicativos de las principales marcas utilizadas por Lactalis, como Lauki, Puleva o President.
Subidas de la distribución a la industria
La Plataforma entiende que la industria gala está haciendo una “apropiación indebida” de dinero que debía ir a parar a las granjas. En diciembre, los ganaderos lograron compromisos con las principales cadenas de la gran distribución para iniciar una subida de la leche en cadena. Primero, en los pagos del supermercado a las industrias. Segundo, en los pagos de la industria al ganadero. La primera parte se cumplió. Las industrias cobran desde diciembre 2 céntimos más por la leche de marca blanca, pero la segunda parte no, pues el ganadero continúa cobrando lo mismo.
Solo Leche Celta subió medio céntimo en los pagos de sus granjas. Lactalis, que se benefició de las subidas aplicadas por Carrefour y Alcampo, le trasladó a los productores que antes de abril no está dispuesta a hacer ninguna subida. El conflicto está servido.
