La Consellería de Medio Rural, a través de la Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal, acaba de comunicar la concesión de ayudas para el impulso de la buena gobernanza en las comunidades de montes vecinales en mano común a 1.056 beneficiarias por un importe de más de 6,1 millones de euros. Son objeto de ayudas un total de 1.870 expedientes, ya que cada comunidad beneficiaria puede ser suscriptora de más de un expediente. Esta convocatoria del año 2021 es la primera de esta naturaleza.
La Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal acaba de informar de manera electrónica la concesión de estas ayudas, que van dirigidas a cuatro tipos de actuaciones. En primer lugar, las referidas al apoyo técnico profesionalizado a la gestión forestal, con subvenciones a la gestión administrativa y técnica para el desarrollo de los instrumentos de ordenación o gestión forestal aprobados. También se contempla sufragar la certificación forestal del monte o el seguimiento de las actuaciones relacionadas, como la obtención de permisos administrativos, redacción de proyectos, memorias o informes, tramitación de ayudas públicas o direcciones de obra.
En segundo término, se prevén aportaciones para croquis, que se concretarán, por ejemplo, en la revisión de aquellos que recogen los límites de los montes vecinales, ya que una buena parte de ellos presentan inexactitudes o errores cartográficos. La tercera línea de ayudas se refiere a los deslindamientos parciales entre las comunidades de montes, para poder delimitar legalmente y de una manera consensuada los límites entre las distintas propiedades. La cuarta actuación que se subvenciona tiene que ver con los deslindamentos parciales entre las comunidades y terrenos de particulares, con la misma finalidad que la anterior.
Estas ayudas están bianualizadas y prácticamente la totalidad de la cuantía concedida (sobre el 90%) se corresponde al primer semestre del año 2022. Una vez aprobada la modificación de la financiación de las ayudas de la convocatoria, las actuaciones número 1 (Apoyo técnico) y número 2 (Croquis), están financiadas por el Plan de recuperación, transformación y resiliencia de España financiado por la Unión Europea-NextGenerationEU, lo cual constituye una novedad en el ámbito forestal de Galicia y del conjunto de España.
Tal y como se contemplaba en la orden original, las actuaciones número 3 (Deslindamentos parciales entre las comunidades) y número 4 (Deslindamientos parciales entre las comunidades de montes vecinales en mano común y terrenos de particulares) están cofinanciadas por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) en el marco del Programa de desarrollo rural (PDR) de Galicia 2014-2020, con una aportación del Feader del 75 %, del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Gobierno de España del 7,5 % y de la Xunta de Galicia del 17,5 %.
Datos por provincias
Todas estas ayudas van destinadas exclusivamente a las comunidades de montes vecinales en mano común inscritas en el Registro de Montes Vecinales al contado Común regulado en la Ley 7/2012, del 28 de junio, de montes de Galicia. Por provincias, en la de A Coruña se aprobaron 124 expedientes a 85 comunidades, por un importe total de casi 400.000 euros; en la de Lugo se dio luz verde a 656 expedientes correspondientes a 328 beneficiarios, por un presupuesto conjunto de más de 2,1 millones de euros; en la de Ourense se aprobaron 650 expedientes a 367 comunidades de montes vecinales en mano común por un importe total de casi 2,1 millones de euros y, finalmente, en la provincia de Pontevedra fueron 440 los expedientes aprobados, de 276 comunidades por un valor de más de 1,5 millones de euros.
Respeto a los objetivos de las ayudas, la Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal persigue la puesta en valor de los montes vecinales en mano común para contribuir a la fijación de población en el rural, así como a la multifuncionalidad de estos terrenos y al desarrollo sostenible de los recursos mediante instrumentos de ordenación o gestión forestal que ayuden en la anticipación a los fuegos incendios.
En esa línea, se busca además incrementar el número de montes con certificación forestal bajo los sistemas PEFC o el FSC, contribuir a la lucha contra el cambio climático mediante una gestión adecuada que fije mejor el carbono y reduzca las emisiones a la atmósfera y, por último, fomentar la consolidación de las masas de especies frondosas autóctonas, ya que los montes que alberguen este tipo de masa forestal que estén registradas o en proceso de inscripción en el registro correspondiente tendrán prioridad para acceder a las ayudas.
Según los datos del Registro de Montes Vecinales en Mano Común, existen en la actualidad 3.312 montes clasificados por los jurados provinciales, totalizando 664.230 hectáreas, lo que da una cifra media de 220 ha por monte. Según los distritos forestales, el rango de la superficie media varía de 92 a 430 ha. Las cifras indican la gran importancia superficial y social de este tipo de propiedad personal y colectiva, aunque la distribución de los montes vecinales en mano común no es homogénea en las cuatro provincias gallegas. Así, el 39,2% de estos montes se sitúan en Ourense, un 30% en Lugo, el 21,7% en Pontevedra y sólo un 9,1% en A Coruña. Por otra parte, el número total de comuneros en Galicia es de 122.734, con un promedio de 44 comuneros por monte.
Otras líneas de gestión forestal
Por otro lado, la Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal tramitó hasta ahora pagos por más de 14 millones de euros, en otras diferentes líneas de ayudas en materia de gestión forestal activa en los montes gallegos, que presentaron el final de los trabajos en el año 2021. En concreto, se trata de las órdenes bianualizadas
Pastero en Porto do Son para prevenir incendios en el monte vecinal
La Xunta acaba de ejecutar un pastero de casi 31 hectáreas en los montes vecinales en mano común de Baroña, en el ayuntamiento coruñés de Porto do Son, para establecer un área cortafuegos en una zona afectada habitualmente por los incendios forestales. Así, el director general de Ganadería, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, José Balseiros, supervisó este lunes estos trabajos llevados a cabo en el marco de la primera fase del Plan de pastos de Galicia, con una inversión próxima a los 145.000 euros.
Las referidas labores se localizaron en los lugares sonenses de Raña, Calvelle y Udres. En concreto, consistieron en la implantación y recuperación de los pastos con la previa preparación del terreno, su fertilización y la siembra de especies pratenses para el alimento del ganado. Posteriormente, se colocaron y se mejoraron los cercados perimetrales, se establecieron pasos canadienses y se dotó a la comunidad de montes de una manga de manejo.
Desde la Consellería aseguran que en la primera fase del Plan de pastos se ejecutaron 14 pasteros en montes vecinales gallegos que superaban en total las 500 hectáreas. En la segunda fase, está previsto duplicar las cifras, actuando en una treintena de pasteros que suman cerca de un millar de hectáreas.