El aumento de los costes de producción en el sector agroganadero está motivando el desarrollo de la innovación y de la investigación en el entorno de las materias primas. La mezcla para el ganado fue el punto de atención de la jornada organizada en Mazaricos por Fertiprado, en colaboración con Fertiberia Tech, Botica del Xallas y la SAT Busto-Corzón. El objetivo era mostrar siete campos demostrativos diferentes con distintas soluciones de mezclas anuales biodiversas, todas ellas ricas en leguminosas.
En este caso se examinaron las posibilidades de un sólo corte caracterizadas por la alta cantidad de producción, y por ricos contenidos en fibra y proteína. La finalidad de estos ensayos se centró en extraer conclusiones a cerca de la viabilidad de la producción de forrajes propios, bajo las condiciones de uso, climáticas y de los suelos presentes en Galicia. Los resultados cumplieron las expectativas de los promotores de los campos de ensayo, permitiéndolos incentivar la puesta en marcha de estos cultivos.
Iniciativa, variedades utilizadas y pauta de abonado
“La adaptabilidad de las mezclas biodiversas a Galicia nos llevó a promover el desarrollo de estos campos de ensayo con las posibilidades más adaptadas a esta región”, explica el gestor de producto de Fertiprado, Joel Presa. De este modo, el año pasado, la empresa portuguesa Fertiprado planificó, en colaboración con Fertiberia Tech y la Botica del Xallas, la puesta en marcha de un campo de ensayo de cultivos anuales biodiversos, sembrando franjas siete mezclas diferentes. La superficie utilizada forma parte de la propiedad de la SAT Busto-Corzón (Mazaricos).
Para llevar a cabo esta comprobación a pie de campo, se seleccionaron siete tipos diferentes de mezclas anuales, seis de ellas concebidas para la alimentación ganadera, y una última únicamente de leguminosas destinada a la captación de nitrógeno para un posterior cultivo de maíz.
En la parcela 1 se plantó ‘Speedmix XL’ (30 kg/ha); en la 2, ‘Fertifeno XL’ (35 kg/ha); en la 3, ‘Avex AC’ (40 kg/ha); en la 4, ‘C-Mix AC’ (40kg/ha); en la 5, ‘Centauro AC’ (40g/ha); en la 6, ‘Tritimix L’ (65kg/ha); en la 7, ‘Max AC’, para enterrar y así producir abono verde y captar nitrógeno, en una proporción de 35 kg/ha.
Dentro de las seis primeras mezclas forrajeras, destacaron las variedades de leguminosas, tales como el trébol persa Maral, trébol vesiculoso Fertiseta, trébol squarroso Fertirrosa e a veza villosa Amoreiras combinadas con varios tipos de raygras y cereales.
En la parcela únicamente de leguminosas las especies cambian radicalmente pasando a formar parte de la mezcla variedades como la serradella Orniferti, trébol encarnado Diogene, veza Piedade, tremocilla Mister y Baryt, Altramuz Karo y Rumba.
Estas variedades fueron sembradas el 13 de octubre del año pasado, con una única pauta de abonado de 500 kg/ha de ‘Corbigran’, introducida el 25 de febrero de 2022. En este caso “Fertiberia Tech apostó por una fertilización más sostenible con menos unidades de aplicación, para que sea mejor tanto para el ganadero cómo para el medio ambiente, sin tener que recurrir a abonos nitrogenados que suponen un aumento de los costes de producción”, detalla el director regional de Fertiberia Tech, Nemesio García.
Resultados y conclusiones obtenidos
“Aún falta entre una o dos semanas para terminar y hacer el ensilado”, avanza Joel Presa, pero con un ciclo de cultivo casi completado, las agrupaciones que llevaron a cabo el proyecto organizaron unas jornadas para la presentación de los resultados en los campos demostrativos. El gerente de la Botica del Xallas, Pepe Agra, explicó que “hace falta partir de la satisfacción percibida por la producción obtenida con una reducción de un 60-70% de los costes de abonado”.
Por su parte, el presidente de la SAT Busto-Corzón, José Manuel Fernández, afirmó que “con la semilla de Fertiprado, notamos un ahorro bestial este año porque prácticamente no utilizamos nada de purín y apenas abonamos”. Además, el ganadero concluye haciendo hincapié en que “hay un gran forraje, y pensamos que vamos a sacar una gran cantidad de kilos y con una gran calidad en base a proteína”.
El punto de vista del gestor de producto de Fertiprado, respalda las percepciones de José Manuel, explicando que “se demostró que es posible producir forrajes de alta calidad, optimizando recursos y utilizando menos abonos nitrogenados; de hecho, se observa como hierbas como el raygrass tiene buen color y buen tamaño gracias al aporte de las leguminosas y a la biodiversidad de la semilla, por lo que en Galicia se puede conseguir producir reduciendo costes”.
En conclusión, Joel Presa cree que “este tipo de mezclas biodiversas ricas en leguminosas (MBRL) son una buena solución para la rotación de cultivos, protección del suelo, fomento de la biodiversidad y reducción de la huella de carbono en las explotaciones introduciendo prácticas de agricultura regenerativa”.