“Casi todas las granjas y la mayoría de las vacas del municipio están afectadas por la EHE”

Sergio González (Montederramo, Ourense)

“Estoy tratando 37 vacas y el resto presenta síntomas leves”

Sergio González y su familia viven en primera persona el impacto de la EHE en su rebaño. Con 130 cabezas, a día de hoy tienen 37 vacas en tratamiento, con antiinflamatorios y antibióticos. “Son los casos más graves, con síntomas como la lingua hinchada o la boca con úlceras. El problema es que algunas vacas no comen ni beben”, relata. “Los veterinarios clínicos no dan hecho con los casos más graves”.

El escenario es similar en la mayoría de las granjas del ayuntamiento. “Diría que estamos afectados el 100% de las granjas e igual un 95% de los animales, porque la vaca que no tiene síntomas le están saliendo”, valora Sergio. “Hay muchos animales con síntomas leves, que les lloran los ojos o que tienen leves cojeras, pero el problema principal son los casos graves”.

En los casos más graves, ya hay granjas que registraron muertes puntuales de animales, que en teoría son indemnizadas por la Xunta. “El problema es que el 80% de las vacas están sin analizar porque no hay veterinarios oficiales para hacer el sangrado. Entonces, si muere un animal por EHE pero no hay confirmación por análisis de que tuviera la enfermedad, qué va a pasar”, se pregunta Sergio.

“Necesitamos apoyo para los tratamientos y más veterinarios. Es el deber de la Administración”, recalca el ganadero, que señala que esta tarde tienen prevista una reunión con el jefe territorial de la Xunta en Ourense para abordar la situación.

Sobre la vacuna que comenzó a comercializar estos días Vetia, accesible para las granjas mediante receta veterinaria, Sergio opina que llega tarde para Ourense. “A nosotros ya nos vacunó el mosquito. Para zonas que estén aún sin casos, más al norte, podría ser que fuera útil”, opina.

Javier Vázquez. Montederramo

“Lo peor son los animales que dejan de comer y de beber, tengo que hidratarlos con una manguera”

Javier Vázquez compara el caos que está dejando la EHE en las granjas de su zona con lo que hizo el Covid en los humanos. Si bien la EHE solo se contagia a través del insecto vector, no entre vacas enfermas, el impacto está siendo alto en las ganaderías afectadas. “En Montederramo estamos casi todas las granjas afectadas, con más o menos gravedad. Igual tenemos un 80% de vacas afectadas por la EHE”, calcula Javier.

“Desde principios de mes, llegaron muchos casos juntos a las granjas. Podías encontrarte en un día con 10 – 15 casos nuevos. Estoy medicando las vacas más graves, según la prescripción del veterinario, con antibióticos y antiinflamatorios. Lo peor son los animales que paran de comer y que no beben porque les salen bultos en la lingua. A esos tengo que darles yo agua con una manguera o con botellas, para tratar de mantenerlos hidratados y que no mueran”, explica.

De las 67 vacas adultas de su rebaño, Javier calcula que puede tener entre 40 y 50 casos. A eso hay que sumarle síntomas en los terneros: “Ves a algunos que andan a trompicones, como mareados, y también me murió una ternero que estaba débil, que venía de salir de una neumonía y que pienso que me remató la EHE”, sopesa.

En su granja, solo le sangraron un animal para analizar: “Lo normal sería que los veterinarios oficiales priorizaran esta situación y que retrasasen otras actuaciones de saneamiento, que no son tan urgentes”, opina.

Herminia Barazal. Vilardevós

“Tenemos un lote afectado, con 14 animales enfermos, y la vaca más grave sufrió un aborto”

Con 90 cabezas, entre vacas adultas y terneras, la ganadería de Herminia Barazal se divide en dos lotes, uno afectado por la enfermedad y otro libre por el momento. “Son lotes que están a 12 kilómetros uno del otro. En un de ellos tenemos 14 vacas afectadas, de las que hay 4 o 5 bastante tocadas, pero en el otro lote por ahora no nos entró”, explica.

En el lote afectado, los síntomas que describe Herminia son similares a los que cuentan el resto de ganaderías consultadas. “Los animales presentan flojera de piernas, se habla de cojera pero es más bien que flojean, están con fiebre y luego hay casos en los que se les forman heridas en la boca y no pueden comer, echan la lengua fuera y en el caso más grave, tuvimos que sondear a un animal durante una semana para alimentarlo”, explica.

De cara a la Administración, Herminia pone el foco en la prevención. “Para la semana, nos van a hacer la vacunación oficial contra la lengua azul, que es un problema que aquí por el momento no tenemos, cuando lo lógico sería que hubiera una vacunación contra la EHE en las ganaderías o lotes que no estén afectados”, valora.

“Pregunté si podía vacunar después de la EHE, con prescripción veterinaria, el lote que tengo por ahora libre de la enfermedad, y me dijeron que tenía que esperar como mínimo 20 días después de la vacuna de la lengua azul”, cuestiona.

Otra de las necesidades son apoyos para tratamientos y para cubrir las pérdidas, pues en el caso de Herminia una de las vacas afectadas sufrió un aborto.

Enrique García

“Es necesario vigilar los animales todos los días; si se hace así, hay salida”

Enrique García describe en Vilardevós un panorama con todas las granjas afectadas. “En mi caso tengo un rebaño de 69 vacas adultas y de estas, 25 están con tratamientos de antinflamatorios y antibióticos”, explica. “Es necesario vigilar los animales todos los días porque si te despistas y te das cuenta cuando el animal lleva ya 2-3 días mal, la situación va a ser más grave”, advierte.

La EHE está obligando a las granjas a una dedicación total a la enfermedad. “Todos los días tienes que meter animales en las mangas de manejo para tratarlos. Entre vigilar y tratar, ocupas el día todo, y aparte hay que tener en cuenta que cuanto más metes los animales en la manga, menos quieren ir, lo que dificulta el manejo y obliga a ir con más cuidado”, explica.

En los casos más graves, Enrique optó por bajar los animales a la casa, ya que no quieren comer y hay que suministrarles agua y comida para evitar que mueran. “Los tratamientos están yendo bien, el veterinario nos dio un spray que en 2-3 días logra mejorar mucho los síntomas del hocico y de la boca, pero ya digo, es importante coger los animales lo antes posible”, insiste.

Sobre los tratamientos, Enrique incide en la importancia de apoyos de la Administración. “Con las 3 primeras vacas gasté alrededor de 380 euros en tratamientos, ahora tengo 25 tratadas, echas cuentas y es un palo importante”, señala.

En los 3 primeros animales enfermos, gasté 380 euros; echas cuentas de todos y es un palo grande

Aparte de los animales que están en tratamiento, otra parte del rebaño también pasó por síntomas leves. “Para mí esto es un caso semejante al que pasó con la Covid en las personas, que había quien lo pasaba casi sin síntomas. En las vacas, el EHE es igual, hay algunas que ves que les lloran los ojos y que andan con algo de flojera, pero comen y recuperan”, valora.

Sobre los análisis de la EHE en su rebaño, Enrique señala que las primeras analíticas las hizo por medio de un veterinario particular y el resto se las hicieron los veterinarios de la campaña de saneamiento de lengua azul, aprovechando las visitas para vacunar.

En la última semana, en su ganadería no ha detectado casos nuevos, una cuestión en la que considera que ha contribuído la aplicación de repelentes contra insectos en el cuerpo de los animales, una operación que planea repetir cada pocos días.