Importante caída del comercio internacional de productos lácteos y bajada de precios, sobre todo de la leche en polvo desnatada, y en menor medida de la mantequilla; bajadas del precio de la leche en origen y un consumidor que compra productos lácteos de menor valor, como leche UHT o queso barra, para afrontar un escenario económico incierto. Estas son algunas de las consecuencias que está provocando en el sector lácteo francés la crisis del coronavirus Covid-19 y que fueron analizadas este jueves en un webinar organizado por el Institut de l’Elevage (IDELE) francés.
Bajo el título de “El sector lácteo ante el Covid-19”, el responsable del servicio de Economía del IDELE, Gérard You, presentó los primeros datos sobre el impacto que está provocando en el mismo el confinamiento de la población y la reducción del comercio internacional, unas consecuencias que, con excepciones, son extrapolables a las principales potencias lecheras. En el caso de España la situación varía ya que no es un país exportador de lácteos, sino que es deficitario, por lo que los ganaderos y la industria -sobre todo la de elaboración de quesos de gran cosumo- tienen más margen de crecimiento para cubrir la demanda nacional.
Estos son los cambios que está provocando el coronavirus en el sector:
-Desplome de las ventas en las restauración, pero también en la industria alimentaria y en las exportaciones:
Los datos de Francia revelan que en el mes de marzo las ventas de leche y derivados lácteos en la restauración cayeron un 85%; pero también cayeron en un 25% las ventas a la industria alimentaria (pastelerías, repostería…etc), el mismo porcentaje que bajaron también las exportaciones, un problema en el caso francés ya que casi el 40% de los 25 millones de toneladas de leche que produce el país se destinan a la exportación.
Lo grave es que esta situación no fue compensada por el aumento del consumo en los hogares. “Es cierto que subió un 22% el consumo de leche y de derivados lácteos en los hogares, sobre todo de leche UHT, yogures, mantequilla y quesos de menor valor, mientras que bajó el consumo de los productos de mayor valor precio, como los amparados por Denominaciones de Origen o Indicaciones Geográficas Protegidas. Es decir, la tendencia en el consumidor es ir a lo básico debido a la incertidumbre económica, por lo que si bien en términos de volumen aumentó el consumo en los hogares, no así en términos de valor”, explicó Gérard You.
En cuanto a las exportaciones, el análisis que hacen en el IDELE es que en el caso de las ventas dentro de la Unión Europea hubo a raíz de la crisis del coronavirus un proceso de renacionalización, particularmente visible en los casos de Francia o de Italia, de suerte que se promueve el consumo de leche y derivados producidos en el propio país. Esto se ve favorecido también por las trabas a la circulación entre estados, al extremar los controles sanitarios, y por un problema logístico que también afecta la otros sectores: la creciente dificultad de las empresas de transporte para encontrar camioneros.
“En cuanto a las exportaciones fuera de la UE, si bien es cierto que los contratos de venta se están respetando, el comercio se redujo pues los compradores están a la espera de que los precios bajen más para realizar nuevas operaciones, añadió el responsable del Institut de l’Elevage.
-La industria de envasado de leche líquida y de fabricación de quesos a bajo precio sale beneficiada de la situación:
En cuanto al impacto que está teniendo la crisis del coronavirus en la industria láctea es muy desigual:
-Las industrias lácteas orientadas a fabricar productos de más valor añadido y que comercializaban sobre todo a través de la restauración se están viendo muy penalizadas. En el lado de los ganaderos, la situación es especialmente negativa para a los de ovino y caprino de leche.
-Salen beneficiadas en esta situación las industrias lácteas especializadas en envasar leche UHT, debido al aumento del consumo de este tipo de producto.
-Las industrias lácteas presentes en distintos canales de venta (supermercados, restauración…etc) amortiguan el impacto, compensando las pérdidas al tener diversificada la comercialización y también los productos que elaboran.
-Las cooperativas de recogida de leche están más o menos expuestas según el porcentaje de leche que vendan en el mercado spot. “Si tienen contratos de suministro para un año o varios meses pueden mantener los precios, pero de lo contrario se van a ver muy prejudicadas, pues la leche spot en este momento en Francia bajó hasta los 200 euros la tonelada”, advierte Gérard You.
-En Francia todas las industrias lácteas le piden a los ganaderos que reduzcan entregas:
Tal y como avanzó Campo Galego esta semana, las industrias lácteas francesas le están pidiendo a las ganaderías que moderen las entregas de leche ante los problemas de mercado que provocó el coronavirus.
En concreto, la industria láctea francesa acordó un plan de 10 millones de euros para reducir la producción en abril en 31 millones de litros. Le pagará a las granjas 32 céntimos por litro que dejen de producir si su bajada de entregas está entre un 2 y un 5%.
Además, la interprofesional láctea francesa ya demandó al gobierno que reactive las ayudas para el almacenamiento privado y prepara una campaña de comunicación para relanzar el consumo de lácteos con DOP o IGP, los más afectados por esta crisis.
“La idea es reducir la producción para mantener los precios, y manteniendo la cabaña ganadera para no perder nuestro potencial de crecimiento una vez que finalice esta crisis”, añade Gérard You.
-Caída de los precios de la leche en origen:
La previsión que hacen en el IDELE es de una caída de precios para los próximos meses debido a la crisis del Covid-19.
En concreto, prevén una caída de entre 2 y 3 céntimos el litro para el segundo trimestre de este año, con respecto al precio medio de 0,355 euros el litro de enero y febrero. Esta cotización de comienzos de año fue un 3% superior al mismo período de 2019, en buena medida gracias a la Ley EGALIM, la norma de equilibrio en las relaciones comerciales en el sector primario que impulsó el gobierno francés.
“El precio a partir de abril se prevé que se sitúe entre 0,315 y 0,335 euros el litro según las industrias lácteas”, señalan desde el IDELE.
-Mercados internacionales de productos lácteos a la baja:
“El problema de las exportaciones de productos lácteos en estos momentos es que todos los operadores que compran están apostando a la baja, esperando una caída mayor de las cotizaciones”, advierte Gérard You.
La peor situación es la de la leche en polvo desnatada, el principal derivado lácteo que exporta la Unión Europea junto con el queso. En el caso de la leche en polvo en Francia en el mes de marzo se situó en los 2000 euros la tonelada, con una importante caída respecto a los alrededor de 2600 euros con los que comenzó el año. “Y nos podremos acercar al precio de intervención, de 1.700 euros la tonelada”, advierte.
La buena noticia, según el IDELE, es que los stocks de leche en polvo desnatada a precio de intervención son bajos en la Unión Europea, unas 125.000 toneladas en enero, por lo que consideran que habría más margen de maniobra para activar mecanismos de compra pública para mantener los precios en el mercado.
En el caso de la mantequilla, el otro derivado lácteo que en estos últimos años alcanzó precios de récord, ayudando a mantener los precios de la leche en el campo, el comienzo del año tampoco esta siendo positivo. En el caso de Francia, a finales de marzo cayó hasta los alrededor de 3100 euros la tonelada, el nivel más bajo desde 2017.
“El problema puede venir ahora en primavera, cuando suba la producción en toda Europa y Estados Unidos y se empiece a acumular mantequilla y puedan caer más los precios”, advierte el experto francés. De hecho, el gobierno de Irlanda ya solicitó a la Unión Europea la compra pública de mantequilla, ya que en su caso el 40% de las entregas anuales de leche son en primavera, un porcentaje que sube al 70% si se le suman los meses de verano.
El Institut de l´Élevage también analizó la evolución del precio de la leche en Francia transformada en leche en polvo y mantequilla. “En el mes de marzo cayó un promedio de 5 céntimos el kilo, de los que 2,7 céntimos bajó en la tercera semana de marzo”, explica Gérard You.
Recomendaciones para los ganaderos en Francia para hacer frente a esta situación
Las recomendaciones que hacen a los ganaderos franceses desde el IDELE para superar esta crisis es reducir el máximo posible los costos de producción manteniendo el rebaño para volver a incrementar la producción cuando se supere esta crisis. De hecho, la previsión a medio plazo para el sector lácteo que hacen los distintos organismos internacionales, desde la FAO al IFCN, siguen siendo positivas, debido a la creciente demanda de leche y derivados por una población en aumento y con mayor poder adquisitivo.
En concreto, recomiendan reducir la compra de concentrados y aumentar la alimentación del ganado en base a forrajes propios (silo de maíz, silo de hierba, hierba fresca…etc) y al pastoreo.
Otras recomendaciones para no aumentar o bajar las entregas son alimentar a los becerros con leche de las vacas, hacer un solo ordeño el domingo o aumentar un días el período de secado.