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La Estación Fitopatológica de Areeiro, centro dependiente de la Diputación de Pontevedra, emitió este viernes su boletín en el que informa de la situación de los viñedos en la provincia de Pontevedra.
Mildio:
Desde la emisión de la anterior información fitosanitaria, las temperaturas nocturnas estuvieron bajas o muy bajas según el día y/o la estación meteorológica, a excepción de la noche del martes 11, cuando en algunas zonas se superaron ligeramente los 12 ºC.
Por lo tanto, aun habiendo, en general, varias horas de humedad foliar, no se registraron condiciones para la infección secundaria. Esto se reflejó en la situación observada en la mayoría de las viñas que visitaron en esta semana: ausencia de manchas nuevas y síntomas antiguos bien controlados. Bien es cierto que todas, o prácticamente todas, habían recibido un tratamiento antes o después de la ciclogénesis del jueves 6, pero tampoco en las plantas testimonio los técnicos apenas observaron nuevas manchas.
Eso sí, en aquellas viñas en las que no se había logrado controlar la enfermedad en las infecciones previas, la situación, no siendo muy desfavorable, tampoco era idónea, pues aún encontraron manchas con avance, manchas necrosadas que aun así mostraban cierta frutificación y también alguna mancha nueva.
Se da la circunstancia de que alguna de estas viñas más afectadas, o con mildiu no perfectamente controlado, eran viñas que habían sido tratadas en alguna ocasión en esta campaña en días con vientos incompatibles con una buena protección, o con maquinaria no bien calibrada. En estas circunstancias, los tratamientos no pudieron frenar la infección y los síntomas fueron acumulándose desde entonces.
Según las agencias meteorológicas consultadas, puede haber cierta precipitación, parece que de cuantía insuficiente como para lavar los productos aplicados en la última intervención, entre viernes y hoy sábado, pero también en diferentes días entre martes, miércoles y/o jueves.
Para la semana vuelven las condiciones favorables para el mildio
Cuanto a las temperaturas mínimas, tienden a recuperarse, ligeramente en los días inmediatos y de una manera más evidente hacia mitad de la semana próxima. .
En este sentido, la mayoría de las viñas dentro del período de protección de los productos aplicados la semana pasada, no debería haber problemas serios en aquellas en las que no hubo apenas síntomas hasta ahora, aunque habrá que estar alerta, en especial en las que se vaya a cumplir el plazo de protección teórico y sobre todo donde aún se observan síntomas no bien controlados. Es más, si las temperaturas mínimas son compatibles con las infecciones secundarias, en estas últimas será conveniente renovar la intervención el antes posible.
En algunas hincas, y debido al clima cambiante de esta primavera, con lluvias alternando con períodos de sol y calor, hay un exceso de vegetación en la propia viña que impide la buena penetración de los fungicidas. En estas viñas es conveniente hacer labores de eliminación de los brotes no o poco productivos, despuntes e incluso ya alguna deshoja suave que exponga los racimos a los tratamientos y facilite su aireación e insolación.
Oídio:
En esta semana se encontraron síntomas en dos hojas de una viña en la que no se habían hecho aún tratamientos frente al hongo, y también en un racimo «rebusco» de una viña muy vigorosa donde precisamente la elevada masa foliar impidió totalmente la penetración de los productos. En el resto de fincas no los encontraron, pero bien es cierto que entramos en uno de los momentos más críticos en relación a la esta enfermedad, por lo que a partir de ahora cualquier intervención antimildiu debe ir acompañada de un producto frente a este otro hongo.
Black rot:
En la revisión de esta semana los técnicos de Areeiro no notaron un incremento en la presencia de síntomas en las parcelas tratadas.
La recomendación es mantener la vigilancia, y en aquellas fincas con las típicas manchitas del hongo, aplicar un producto que también tenga efectos frente a este patógeno cuando se den tratamientos antimildiu o antioídio.
Los síntomas sobre el racimo son marchitez de granos, que secan rápidamente (en 3-4 días) adquiriendo la piel un color violácea y cubriéndose de cuerpos fructíferos que tienen la forma de puntitos negros. Pero atención: en un mismo racimo pueden coexistir granos con distinto grado de ataque, de manera que habrá uvas totalmente dañadas y otras sólo parcialmente afectadas.
