Dinamarca y Bélgica, escenarios de nuevos acuerdos de precios de la leche

"Si aquí no ganamos la batalla del precio de la leche, estamos echándonos tierra por encima", advierte Román Santalla (Unións Agrarias) en una asamblea informativa en la Semana Verde

Los compromisos de las cadenas de distribución para mejorar el precio de compra de los productos lácteos se extienden por toda Europa. Primero fue Francia, luego Gran Bretaña y ahora han trascendido nuevos acuerdos en la misma línea en Dinamarca y en Bélgica. «En Bélgica, las cadenas elevaron el precio de compra de la leche en 2,7 céntimos y en Dinamarca en 7 céntimos, con la idea de que ese dinero repercuta en el ganadero», explicó Román Santalla (Unións Agrarias), en el transcurso de una asamblea informativa celebrada en la Semana Verde. ¿»Si en Bélgica, Dinamarca o Francia son posibles estos acuerdos, por qué no aquí?», se pregunta Santalla.

Son días de efervescencia y movilización en el agro por las reuniones clave de hoy en Bruselas y del jueves 10 en Madrid. Antes de estas citas, Unións Agrarias desarrolló en la noche de ayer una asamblea informativa en la Semana Verde (Silleda) con un centenar de productores de las distintas comarcas ganaderas de Galicia para explicarles la marcha de las negociaciones.

Tomaron la palabra para dar cuenta de las conversaciones el secretario general de Unións, Roberto García, y el responsable de ganadería de Upa -la matriz estatal de Unións Agrarias-, Román Santalla, ganadero de Cercio (Lalín). «La situación es la siguiente. Hay sobre la mesa un acuerdo para el jueves en el que se habla de que se le pague al ganadero un precio sostenible y de que la distribución le pague a la industria un precio que permita remunerar convenientemente al ganadero. Las incógnitas son dos. Cómo se va a determinar cuál es el precio sostenible y cómo se va a hacer hacer cumplir», expone Santalla.

Lactalis, Dia y Eroski son reticentes a firmar un acuerdo que además deja muchas cuestiones en el aire

Desde Unións Agrarias apuestan por regular el precio sostenible para el ganadero a través de un mecanismo de formación de precios que sitúe ese valor en un arco entre los 32 y los 36 céntimos. Demandan también una cobertura legal a modo de sanciones para aquellas empresas que incumplan los acuerdos.

Esas cuestiones habría que resolverlas después del jueves. Primero tendrá que verse si hay consenso de industrias y distribución para firmar el acuerdo. Por lo que ha trascendido de las conversaciones previas a la reunión del jueves, la mayoría de las industrias y de las cadenas de distribución estarían dispuestas a firmar, con la excepción de Lactalis y de las queserías en la parte industrial, y de Dia y Eroski en la parte de la distribución, según Unións.

Situación a corto plazo
En cualquier caso, en Unións entienden que la simple firma del acuerdo no sería suficiente. «Es necesario además que de manera inmediata se eliminen los contratos basura que hay actualmente y que se sustituyan a primeros de octubre por contratos de precios sostenibles», advierte Roberto García.

De no lograrse todas esas garantías, el endurecimiento de las movilizaciones está sobre la mesa. «O ganamos la batalla del precio de la leche o estamos echándonos tierra por encima. Lo que está en juego es el mercado español de la leche. Si se lo llevan los franceses y los alemanes o va a seguir siendo nuestro», resume Santalla.

De cara a las movilizaciones de estos días, Unións lanza un mensaje de unidad entre las protestas de Santiago y Lugo y sitúa el foco en la cuestión clave: ganar la batalla del precio de la leche.

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