Los datos de entregas de leche en el mes de abril, el primero tras el fin del sistema de cuota láctea, revelan un aumento de la producción española de alrededor del 3%. En abril de 2014, las industrias habían recogido 575.200 toneladas, que se elevaron a 593.900 en abril de este año, según las cifras provisionales del Fondo Español de Garantía Agraria (Fega). Galicia, según esas estimaciones provisionales, quedaría al margen del aumento generalizado de la producción.
El fin del sistema de cuotas ha abierto la posibilidad a una producción liberalizada, si bien la mala situación de mercado y los bajos precios en origen de la leche desincentivan los aumentos de producción. Con todo, en España las entregas a las industrias crecieron en torno a un 3%, una situación distinta de la registrada en Galicia, donde los datos iniciales del Fega apuntan a entregas inferiores a las del mismo mes del pasado año.
Los aumentos de producción se concentran en Andalucía y Castilla La Mancha
Si en abril del 2014, Galicia había producido 220.000 toneladas (ajustadas por materia grasa), en abril del 2015, el Fega computa, según sus datos provisionales, 201.000 toneladas sin ajustar por materia grasa, por lo que la cifra final será ligeramente inferior. El Fega aún no tiene todos los datos de los primeros compradores de leche y calcula que le restan por computar alrededor de 22.780 toneladas, pero aunque buena parte de esa cantidad corresponda a Galicia, como es previsible, la comunidad apenas igualaría la producción de abril del 2014.
En Galicia, las entregas sí crecieron entre las explotaciones más profesionalizadas, como reflejan los datos de Africor Lugo, pero en el conxuto del sector, la tendencia es otra. Entre tanto, las entregas de leche están aumentando de manera significativa en comunidades como Castilla La Mancha, que pasa de 20.000 a 26.000 toneladas (este último dato sin ajustar aún por materia grasa), o Andalucía, que pasa de 41.000 a 48.000 toneladas.
Temor a la deslocalización de la producción
Los datos del Fega confirman los temores del sector agrario gallego a una ligera deslocalización de la producción de leche. En Galicia, las industrias están restringiendo la recogida y tratan de limitar los aumentos de producción de las explotaciones, en tanto en el resto del Estado, en comunidades deficitarias en la producción de leche o más próximas a los grandes centros de consumo, las entregas crecen.
El caso de Asturias, con un emplazamiento y situación en el mercado similar a Galicia, no se corresponde sin embargo con esos patrones, pues en la comunidad vecina también creció la producción de leche, que pasó de 48.000 a 50.000 toneladas (sin ajustar este último dato por materia grasa). El diferencial de precio también es significativo. Galicia está en 28,7 céntimos por litro, el precio más bajo de España, en tanto Asturias supera los 33 céntimos. La media española se sitúa en los 31,1 céntimos y ninguna comunidad, salvo Galicia, baja de los 30 céntimos por litro.