Tras meses de negociación, Unións Agrarias UPA se congratula de que el Ministerio de Agricultura flexibilizara los requisitos para adaptarse a las nuevas exigencias de ocupación de las granjas y se tendrán en cuenta nuevos parámetros que podían perjudicar a las granjas porcinas.
La organización enmarca la modificación como un logro que lleva trabajando desde las negociaciones de su acuerdo de 43 medidas con el Ministerio de Agricultura y por lo tanto valora positivamente las modificaciones que se aplicarán al RD 159/2023, tras salir la consulta pública previa la elaboración de un nuevo Real Decreto.
De este modo, los ganaderos tendrán más tiempo (hasta tres años desde 2023) para adaptarse a las nuevas exigencias que se aplicarán a las granjas, y se tendrán en cuenta nuevos parámetros, además de la superficie disponible para los animales.
Los productores trabajaron con Agricultura para definir los parámetros que se tendrán en cuenta para no obligar a las granjas a reducir su capacidad productiva, con el consecuente impacto económico que podría llevar. Puntualizan que el porcino es un sector de enorme importancia para el medio rural gallego ya que cuenta con casi 96.000 plazas de reproductoras y 1.161.792 plazas de cebo en explotaciones de porcino industrial. El censo de animales es de cerca de 1,7 millones de los cuales 795.000 sonido de cebo (más de 50 Kg de peso vivo) y 530.000 lechones (hasta 20 Kg peso vivo).