La sección ‘Noticias de empresa’ incluye informaciones de actualidad empresarial, así como las notas de prensa de firmas colaboradoras.

Galicia cuenta con la primera estrategia consensuada para el sector forestal, con una inversión de 4900 millones de euros hasta el año 2040

Galicia cuenta con la primera estrategia consensuada para el sector forestal, con una inversión de 4900 millones de euros hasta el año 2040

El Plan Forestal de Galicia (PFG) contempla una inversión de 4.900 millones de euros de fondos públicos y privados en el monte gallego hasta el año 2040. Tras un largo proceso de debate entre todos los agentes del sector que comenzó en el año 2015, la revisión del Plan Forestal -que tendrá finalmente forma de Decreto- continuará su tramitación ambiental y se remitirá al Consejo Forestal de Galicia y al Parlamento para culminar este año con su aprobación por el Consello da Xunta.

El documento, que se elaboró dando cumplimiento a las recomendaciones del Dictamen de la Comisión Forestal del Parlamento de Galicia, se está ultimando bajo la premisa de conseguir un amplio consenso sectorial y de la sociedad gallega en general. Establece una proyección del monte del futuro para el período 2021-2040, con una serie de grandes objetivos e indicadores.

Mejora de las masas de robles y potenciación del castaño

Una de las principales líneas pasa por promover la regeneración natural de frondosas caducifolias, hasta llegar a una superficie total ocupada por estas masas autóctonas de 425.000 hectáreas en 2040. Además, la superficie de frondosas objeto de gestión activa mediante tratamientos silvícolas se incrementará desde las 5.000 ha en el primer quinquenio hasta las 20.000 ha en el último. Por su parte, el programa de recuperación de bosques de ribera abarcará otras 20.000 hectáreas.

En el caso concreto del castaño, el PFG contempla un programa estratégico para contribuir a la conservación y puesta en valor de esta especie, con actuaciones en 8.000 hectáreas hasta el año 2040 para recuperar sotos tradicionales en producción mediante medidas de rehabilitación. Asimismo, se prevé crear nuevos sotos tanto para la producción principal de castaña como para generar madera, cada una de las líneas con 8.000 hectáreas de actuación.

Eucalipto: más madera producida en menos superficie

En relación al eucalipto, se marcan programas de actuación e iniciativas que contribuyan a una reducción de la superficie con presencia de eucalipto del 5%, al final del período. Para eso, se priorizará la mejora de la gestión y la productividad de las masas de eucalipto ya existentes, se reforzará el control de las nuevas plantaciones y se aplicará un programa de transformación de eucaliptales degradados. Asimismo, se potenciará la silvicultura del eucalipto y se reducirá la combustibilidad de las masas mediante la gestión activa, incrementando tanto la tasa de aprovechamiento de la especie como la certificación y las iniciativas de gestión conjunta. Así, dentro de esa reducción, un total de 20.000 hectáreas se convertirán en masas de otras especies.

El objetivo es que en el 2040 Galicia cuente con una superficie menor de eucaliptales, mediante la transformación en plantaciones de otras especies. Paralelamente, se mejorará la productividad en aquella superficie en la que se circunscriban las masas de eucalipto, incrementando la tasa de aprovechamiento con el objetivo de alcanzar un 90% del crecimiento corriente anual. Así, con una menor superficie de eucalipto, la productividad de las masas va a ser mayor como consecuencia de las medidas adoptadas.

Pasar de 9 a 12 millones de metros cúbicos de madera cortada al año

En base a estas premisas se establece, por ejemplo, el objetivo de movilizar los recursos madereros que permitan atender, como recurso de cercanías, las demandas de la actividad industrial ligada a la madera y a la biomasa. Así, se marca un incremento de la movilización de recursos madereros con una tasa global de extracción de todas las especies (incluida a conífera) de manera tal que pase del 60% hasta el 70% de la posibilidad, con unas cortas anuales de hasta 12 millones de metros cúbicos al final del período, una cifra que ahora se sitúa en algo más de 9 millones.

Pino de calidad

En relación con las coníferas, especialmente el pino, en el plan se contempla fomentar a través de líneas de ayuda las repoblaciones y reforestaciones de alta calidad genética, incrementando mediante esta vía la superficie que ocupan estas especies en 20.000 hectáreas en el plazo de 20 años. También se aplicarán actuaciones silvícolas en un total de 50.000 hectáreas de coníferas hasta el año 2040 y se irá incrementando el porcentaje de volumen de talas con destino a sierra o usos estructurales hasta un 75% en ese tiempo.

El control de las especies invasoras (especialmente de las acacias) mediante un programa de control que abarcará 1.000 hectáreas en total, el fomento de la multifuncionalidad del monte o la regulación de su uso socio-recreativo son otras líneas de trabajo.

Otro programa destacado, junto con la mejora de la genética forestal, es el de los llamados “montes protectores”. Se trata de inventariar y registrar aquellos montes o terrenos forestales que tengan un especial carácter protector del suelo y regulador del ciclo hidrológico. Así, se planifica la creación e inscripción de montes protectores, para llegar a un total de 90.000 hectáreas amparadas por esta figura en el horizonte del plan. Todo esto, con un aumento progresivo de la superficie forestal gestionada con criterios de protección (incluyendo la que adquiera la administración, la gestionada por contratos de gestión pública o la de gestión privada), llegando en el año 2040 hasta las 130.000 hectáreas. Además, se pondrá en marcha un Programa de conservación de recursos genéticos que abarcará 15.000 ha y se promocionará el uso social o turístico del monte mediante el establecimiento de una red de infraestructuras verdes en entornos urbanos y en zonas de especial interés paisajístico de forma progresiva, actuando en 25.000 hectáreas hasta el año 2040.

En el ámbito de la salud y vitalidad del monte, el Plan Forestal de Galicia intensifica los trabajos de lucha biológica contra la avispilla o el cáncer del castaño, así como frente al gorgojo del eucalipto, la plaga de los alisos o la procesionaria del pino, entre otras enfermedades, unos trabajos que se llevarán a cabo en función del avance de los organismos.

Otra línea de trabajo es la movilización de las tierras agrarias infrautilizadas o abandonadas -especialmente mediante proyectos liderados por agrupaciones forestales de gestión conjunta- para recuperar el rural y fijar población en las aldeas, apoyando las explotaciones resultantes mediante incentivos fiscales, ayudas directas o de discriminación positiva. Para esto, en 20 años se crearán un millar de aldeas modelo, se actuará en 150.000 hectáreas al amparo de proyectos de movilización de terrenos agroforestales y se movilizarán otras 35.000 ha de tierras forestales mediante actuaciones de gestión conjunta, creando una línea potente y consolidada de superficie bajo algún tipo de figura de gestión conjunta para llegar a las 150.000 ha en 2040.

Otros aprovechamientos forestales

Dentro del fomento de los recursos forestales no madereros, se pondrá en marcha un programa de aprovechamiento de pastos y forrajes en monte y de establecimiento de sistemas silvopastorales, concretándose cómo objetivo final llegar a las 225.000 hectáreas de superficie para esta actividad en toda Galicia en 2040.

El fomento de proyectos de ordenación de montes e instrumentos equivalentes de gestión forestal sostenible es un campo que también se aborda en el plan. De este modo, se marca cómo objetivo llegar a una superficie total ordenada al final del plan de 850.000 hectáreas. De ellas, se procurará que cuando menos 650.000 dispongan de la certificación forestal mediante cualquiera de los sistemas reconocidos internacionalmente. Asimismo, se prevé que la superficie registrada de silvicultores activos sea de 360.000 hectáreas en 20 años, con el apoyo de 50 millones de euros.

Otro ámbito de actuación es el de la cadena monte-industria. Se va a incidir en su modernización y en procurar que sea altamente cualificada, productiva y que elabore productos de madera o basados en madera con un alto valor añadido. Se hará mediante iniciativas como el programa de divulgación y comunicación de la cultura forestal, con, entre otras, 250 acciones de formación y profesionalización de propietarios y/o gestores de montes en los siguientes 20 años. También, con un programa de fomento de la investigación, desarrollo e innovación forestal dotado con 135 millones de euros en todo el período de vigencia y promoviendo la cooperación y coordinación para mejora de la formación forestal universitaria y profesional en Galicia.

Nuevo marco legal de protección y extinción de incendios

En el marco del PFG, se prevé tener lista en la primera mitad de esta legislatura una nueva legislación en materia de prevención y defensa contra los incendios forestales, un proceso totalmente participativo.

Además, se revisarán y se actualizarán los planes de defensa y prevención de los incendios forestales de los distritos y se elaborará un inventario de la red de franjas de gestión de biomasa forestal. Asimismo, se elaborará anualmente el Plan preventivo que integre las actuaciones de los medios propios y contratados en los montes de gestión pública, en los Perímetros de Alto riesgo (PARI), en el marco de los convenios con la Administración Local y en las acciones subsidiarias en cumplimiento de la legislación vigente, por ejemplo, en las franjas secundarias. La previsión es actuar en unas 120.000 hectáreas hasta 2040.

A mayores, se elaborará de manera participativa un plan plurianual para la definición de las instalaciones, de los equipos y de los recursos necesarios para las sedes de distrito, talleres, almacenes, garajes, puntos de encuentro, puntos de vigilancia y bases de medios aéreos, recogiendo las necesidades de equipos personales, de parque móvil y de recursos tecnológicos e informáticos.

Cuanto a la colaboración con las entidades y administraciones locales, se impulsará el convenio para la gestión de las franjas secundarias, se reforzarán los destinados a tener disponibles las brigadas de prevención/extinción y los camiones de extinción, se integrarán los convenios para la limpieza de márgenes de pistas municipales y se seguirán elaborando y actualizando los Planes municipales de prevención y defensa contra los incendios forestales. En relación a las tareas preventivas en parroquias priorizadas, se continuará incidiendo en la gestión de biomasa en las franjas secundarias, actuando en las 10 ha que puede solicitar anualmente cada ayuntamiento en virtud de las acciones subsidiarias y en los 10 km anuales que pueden solicitar a mayores para tener limpias las vías de titularidad municipal. En este capítulo, se prevé una inversión de 200 millones de euros hasta 2040, para alcanzar las 20.000 ha de acciones subsidiarias, los 20.000 kms de vías municipales con gestión de biomasa, las 20.000 ha de franjas secundarias priorizadas gestionadas y el 100% de los ayuntamientos adheridos con Plan Preventivo.

Además, se desarrollará un plan continuado de formación del personal del Servicio de prevención y defensa contra los incendios y con la puesta en marcha de un Centro Integral para la Lucha contra el Fuego que se situará en Ourense, en la provincia más afectada por los incendios. Así, el antiguo hospital de Toén se reconvertirá en un centro de referencia, en el que se cuente con los mayores especialistas en el comportamiento y análisis de los incendios forestales para dar formación a los bomberos forestales, concienciar a la sociedad civil a través de la educación medioambiental y desarrollar análisis e investigación.

Valoraciones del sector

20191214__Consello_Forestal_galicia_02

Francisco Dans (Asociación Forestal de Galicia): “Los ejes de este plan responden a la realidad y a las necesidades del sector forestal gallego”

Francisco Dans del Valle, presidente de la Asociación Forestal de Galicia, entidad que agrupa a los propietarios forestales privados el 97% de la superficie forestal gallega es de titularidad privada- valora de forma positiva el último documento que se conoce de la revisión del Plan Forestal, un proceso en el que la asociación participó desde sus inicios.

“Los ejes estratégicos del Plan Forestal responden a la realidad y a las necesidades del sector forestal gallego y de la cadena de la madera, pero en todo caso el plan hay que desarrollarlo y que implica unos compromisos de inversiones y de iniciativas para parte de la administración pública a largo plazo, contando también con los propietarios forestales y con la industria de la madera”, subraya.

En cuanto a las medidas que demandaba la Asociación Forestal de Galicia para impulsar el sector, Francisco Dans destaca que se reconoce el papel del propietario forestal privado y de las comunidades de montes, que están haciendo una gestión forestal sostenible a través de la figura del silvicultor activo.

Además, se establece un horizonte de inversiones públicas que se incluyen en el plan. Se recogen también en el Plan aspectos complementarios como líneas de investigación forestal para la mejora genética de las especies, de la sanidad forestal, y también de formación, tanto reglada, como para los propios agentes del sector. “Estos aspectos complementarios son decisivos”, subraya Francisco Dans.

Asimimo, se establece un control y seguimiento del cumplimiento del Plan Forestal de Galicia. “Esto es algo clave, -destaca- pues detectamos que un fallo del anterior Plan es que no hubo un seguimiento y evaluación sistemática ni de las inversiones ni de los indicadores temáticos y económicos para cumplirlo. En este sentido, pedimos que el Consejo Forestal haga un seguimiento del cumplimiento de las inversiones públicas relacionados con el plan”.

Igualmente, desde la Asociación Forestal de Galicia destacan que se fomentan los aprovechamientos de frondosas para productos de alto valor, con planes específicos.

Por otra parte, Francisco Dans incide en que “el plan anuncia en sus principios que se va a acometer una simplificación administrativa y normativa y que donde existan restricciones a la actividad del propietario forestal en sus derechos por motivos ambientales o de interés público, existirían compensaciones económicas. Esto está enunciado en sus principios”.

Habrá por primera vez una estatítica forestal, con datos actualizados del sector (superficie que ocupan las especies, cortas, empleo del sector, etc.) lo que va a permitir seguir de forma continua el Plan y va a ser un apoyo muy importante para poder tomar decisiones.

“Todo eso en su conjunto, y a la espera de conocer el documento definitivo, nos da una idea general del Plan que es próxima a los principios e ideas que planteamos desde la Asociación Forestal de Galicia”, concluye Francisco Dans.

Alfonso Fernández Braña (SERFOGA): “Se van a destinar fondos europeos para el sector forestal gallego”

La asociación de Servicios Forestales de Galicia (SERFOGA) representa a unas 30 empresas del sector y desde sus comienzos también participó activamente en el proceso de revisión del Plan Forestal de Galicia.

Su vicepresidente, Alfonso Fernández Braña, destaca que este documento estratégico “es algo imprescindible que tiene que tener el monte gallego”. “Por nuestra parte estamos satisfechos del trabajo realizado, que fue muy meditado y consensuado, y del que hizo la Consellería de Medio Rural en el último año y medio, poniendo de nuevo a andar este Plan. Es de esperar que parlamentariamente haya un consenso, que se dote presupuestariamente y que se cumpla”, afirma.

Entre las demandas de SERFOGA que se vieron recogidas en la revisión del Plan Forestal de Galicia, Alfonso Fernández destaca que los montes vecinales en mano común dejan de estar tutelados por la Xunta y pasan a ser regidos y gobernados por los comuneros, como una propiedad privada más y con un proyecto de ordenación.

Fondos europeos también para el sector forestal

“Peleamos para lograr para el sector forestal más de 300 millones de euros de fondos europeos en el último quinquenio. Esperamos que en la negociación del próximo PDR de Galicia se siga el mismo camino y la misma proporcionalidad, que ya se está notando en el sector en Galicia, con planes de ordenación para casi 200.000 ha de monte”, destaca.

Además, destaca la puesta en marcha de un inventario permanente de especies de crecimiento rápido. En concreto, el vicepresidente de SERFOGA pone de relieve que “va a ser muy importante para adecuar las especies que plantamos a lo que demanda el mercado, pues la realidad es que en el caso del eucalipto es no está habiendo un aprovechamiento eficiente, y que tenemos un gran déficit de pino de calidad para los próximos 20 años”.

Roque Rodríguez (catedrático de silvicultura de la USC): “La revisión del Plan Forestal fue un proceso muy participativo y consensuado”

Roque Rodríguez es catedrático de silvicultura de la Universidad de Santiago de Compostela y uno de los coordinadores del grupo de trabajo creado en el 2015 dentro del Consejo Forestal de Galicia para la revisión del Plan Forestal de Galicia.

“Fue un proceso de debate y de trabajo largo, en el que estuvieron representadas en un principio 26 organizaciones y a partir de ahí se acordaron las directrices de la revisión del Plan Forestal”, destaca. En el propio proceso de redación hubo varias etapas con participación de empresas consultoras y del propio Sistema Universitario gallego. 

El PFG 2020-2040 supone una apuesta clara por la Gestión Forestal Sostenible bajo Instrumentos de ordenación o gestión forestal, la certificación forestal, el desarrollo de la figura de silvicultor activo, la movilización de tierras forestales, la gestión conjunta y el asociacionismo forestal.

El Plan da cabida en el monte a la actividad ganadera, a los montes protectores, a las infraestructuras verdes o la conservación de recursos genéticos, en un marco de necesaria adaptación del monte al cambio climático, y de mantenimiento de la resiliencia,  salud y vitalidad forestal. El plan desarrolla iniciativas de mejora de la estadística forestal (Inventario Forestal Continuo de Galicia) y apuesta por la innovación, la digitalización y la mejora de los recursos en los ámbitos cuantitativo y cualitativo.

El catedrático considera importante contar con este documento de planificación, pero subraya que “la clave es su cumplimiento”. En cuanto a las líneas estratégicas destaca que “el monte en Galicia debe ser un mecanismo para dinamizar el medio rural, apostando por la diversificación de actividades y de especies, con distintas opciones productivas, además del eucalipto”.

Respecto a los recursos madereros, el PFG contempla desarrollar un programa de mejora de la productividad de los eucaliptales existentes, un programa de fomento y valorización de coníferas, un programa estratégico del castaño u otro de gestión activa de frondosas autóctonas. 

A su juicio, la revisión del PFG, sigue el ejemplo de Portugal en cuanto al relacionado con las plantaciones de eucaliptos. “Tenemos planteamentos muy parecidos: Estabilizar la superficie ocupada por estas especies y tener plantaciones con un buen nivel de producción y con menor riesgo de incendios”, destaca.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *