El director general de Planificación y Ordenación Forestal de la Consellería de Medio Rural, José Luis Chan, participó este viernes en Madrid en el acto de conmemoración del 25 aniversario de PEFC España, una de las certificaciones de la gestión forestal sostenible más empleadas en el mundo. Esta celebración estuvo precedida ayer jueves por la 77ª reunión de la junta directiva de PEFC España, a la que también asistió el director general.
Galicia es la segunda comunidad española con mayor superficie forestal bajo la certificación de gestión forestal sostenible PEFC, con casi 478.000 hectáreas, solo superada por Castilla y León, con cerca de 838.000. Hace falta destacar que, con estos datos de superficie, ya está a punto de conseguirse el objetivo marcado en la primera revisión del Plan Forestal de Galicia 2021-2040 «Cara a neutralidade carbónica» para el año 2035. Así, este documento de planificación establece en su Eje VI el objetivo de conseguir las 500.000 hectáreas certificadas en el dicho año. Este importante incremento en la ordenación de montes registrada en los últimos años se vio apoyada por las ayudas de la Xunta de Galicia.
La Consellería de Medio Rural, a través de la Dirección General de Planificación y Ordenación Forestal, gestiona actualmente 645 montes con certificado PEFC -mayoritariamente montes vecinales al contado común que tienen convenio con el Gobierno gallego-, que suman alrededor de 161.000 hectáreas.
Así pues, desde la consellería destacan que «el Gobierno gallego mantiene su compromiso con este tipo de certificaciones, que garantizan una gestión de los bosques respetuosa con el medio ambiente mientras cumple otras funciones ecológicas, económicas y sociales, por lo que la superficie se incrementará en los próximos años. Esto se producirá porque la Xunta incluye automáticamente en su Sistema de Gestión Forestal Sostenible los montes gestionados por la Administración autonómica que disponen de un instrumento de ordenación y gestión forestal».
Estos certificados suponen un compromiso para no dañar los bosques y para mejorar su estado. Además, la madera y otros productos obtenidos en los espacios certificados garantizan al consumidor, a través del sello que figura en ellos, su sostenibilidad.
A mayores, iniciativas de este tipo trabajan a favor de los retos y oportunidades que se demandan en el Pacto Verde Europeo y la transición a la bioeconomía. En ese contexto, se presentan como clave el potencial de ecomateriales substitutivos basados en la madera, en sectores como la construcción, el textil, el químico o lo de envasado, siguiendo el principio de «Reconstruir de nuevo haciéndolo mejor».