En junio, la Xunta abrió una convocatoria de ayudas para la plantación de castaños de fruto con la que calculaba que se acometerían unas 1.000 hectáreas de nuevos castaños. Para esas plantaciones, se precisarán entre 50.000 y 100.000 árboles, en función de los marcos de plantación que se elijan. Problema, los viveros gallegos carecen en la actualidad de tal oferta de plantas de variedades autóctonas.
La situación trascendió estos días en unas jornadas sobre el castaño que organizó el Centro de Investigación Forestal de Lourizán. Se advirtió del problema en la mesa redonda que puso el cierre a las jornadas, con participación de los viveros forestales, de la IGP Castaña de Galicia y de profesionales del sector. “No hay planta de variedades autóctonas para hacer las plantaciones comprometidas en las ayudas de la Xunta”, señaló Diego Quintas, ingeniero técnico de Landa Medioambiente y presidente de un monte vecinal en Allariz.
«Renunciamos a presentar solicitudes de ayuda porque o engañas a la gente o no haces las plantaciones» (Diego Quintas)
“Tanto nosotros como otros técnicos renunciamos a presentar solicitudes de ayuda para la plantación de castaños, o presentamos muy pocas, porque o engañas a la gente o no las haces” -cuestiona Quintas-. «Estas ayudas no se van a aprovechar porque es irreal que se puedan plantar 1.000 hectáreas, como se dice, ya que es imposible conseguir la planta».
Los viveros reconocen la falta de planta de las variedades autóctonas, aunque también señalan que las ayudas permiten la plantación de portainjertos (clones híbridos), que deben ser injertados al año siguiente de la plantación.
Tiempos
La presidenta de la asociación Viveiros Forestales de Galicia (Vifoga), Inma López, del vivero O Rego, recuerda las dificultades y los tiempos que requiere la producción de plantas: «Los viveros en Galicia hasta hace unos años se centraban en la producción de clones de castaño orientados a madera. Ahora cambió el mercado y hay más demanda de castaños para fruto», contextualiza.
El mercado del castaño se orientaba hasta hace poco a plantas para madera. Los viveros precisan tiempo para adaptarse a la demanda actual
«En castaños de fruto, se van a proponer una serie de híbridos como portainjertos o como productores directos de castaña, pero tenerlos a disposición de la gente llevará su tiempo. Pensemos que son precisos 4 años para tener una planta madre en condiciones de reproducción y 4 años más para optimizarla. Hablamos de 8 años en total», calcula la presidenta de Vifoga.
López advierte también de que parte de los híbridos aptos para producción forestal, de los que hay una oferta suficiente en los viveros, no se pueden injertar para castaños de fruto. Otro problema radica en el tiempo que se precisa para disponer de pugas de variedades autóctonas para injertar. «Tenemos que plantar las plantas madre y hasta dentro de 3 años no dispondremos de injertos», señala Ramón Martínez, del vivero O Pomariño.
Mesa de la Castaña
El sector de los viveros demanda una mayor presencia en las decisiones de política forestal. «Tenemos la sensación de que no se cuenta con nosotros lo que se debería. Nos enfrentamos al reto de suministrar las plantas en la cantidad que se nos demande, por lo que las normativas y órdenes de ayudas hay que planificarlas conjuntamente con nosotros. También precisamos de seguridad en el tiempo y de garantías de que los clones y las variedades de las que ahora se habla van a tener demanda en un futuro».
La presidenta de Vifoga aboga por una pronta creación de la Mesa de la Castaña, anunciada hace meses por la Xunta, pues entiende que es el foro adecuado para abordar estas cuestiones.
Presentadas unas 400 solicitudes a las subvenciones
La orden de ayudas para plantación de castaños, publicada por la Xunta el pasado mes de junio, aún está pendiente de resolución. El proceso se dilató, en parte por el alto número de solicitantes, unos 400, según explicó en las jornadas Josefa Fernández, de la Subdirección Xeral de Recursos Forestales. La Consellería está ahora en la fase de requerirle a los solicitantes documentación que falta y que es subsanable. Después procederá a establecer la prioridad de las peticiones de ayuda según unos criterios objetivos y publicará el listado de beneficiarios.
Dado el retraso del proceso, la justificación de las plantaciones se permitirá en principio hasta el 15 de junio de 2017, según señaló la representante de la Administración. En cuanto a las variedades incluidas en la orden de ayudas, desde la Xunta señalan que están abiertos al diálogo para modificar convocatorias futuras, pues hay variedades con demanda comercial que no se incluyeron este año.
mesa de la castaña… eso si que es una castaña.
Plantar castaños en mil hectáreas, no solo es impensable… el precio de la castaña caería por los suelos… como la propia castaña. Planta castaños y… cierra las fincas con muros para que no te las roben… dicen que… los rumanos. No lo sé. Pero el sentido común no aflora mucho en la mayor parte de los comentarios. ¡Ave Caesar!