‘Gnomoniopsis smithogilvyi’ es un hongo que causa la podredumbre de la castaña que se detectó hace unos años en muestras en rama y, posteriormente, apareció en erizos. Este patógeno se suma a las amenazas que sufre la producción de castaña, como puede ser la avispilla o el chancro. Por esto, José Gómez Laranjo, de la Universidad de Trás-Os-Montes e Alto Douro (UTAD), ha impartido recientemente en Galicia una charla sobre la enfermedad.
El profesional explica que no tiene datos concretos del incidente de este hongo en Galicia, pero «si miramos la situación portuguesa, vemos que este año hubo bastante menos castaña atacada por esta plaga, quizás menos del 20 %», señala. Añade que esta situación fue similar en Italia y Francia, por lo que, «con alta probabilidad», en Galicia también disminuyó. Asimismo, recuerda que en 2023 se estimó que entre el 40 y el 50 % de la producción estuvo afectada en diversos países europeos.
Estos datos los ofreció durante el Foro de la Castaña que la Diputación de Ourense, a través del Inorde, organizó en Riós. Esta edición se centró en analizar la evolución del sector a nivel internacional y las demandas dos operadores comerciales en cuanto a las variedades y calidades del producto.
La podredumbre ocurre dentro de la castaña, por lo que externamente no aparecen síntomas
Sintomatología que provoca
En cuanto a la sintomatología que provoca este hongo, Gómez Laranjo lo tiene claro: «se trata de una podredumbre que se desarrolla en el interior de la castaña». Explica que la contaminación ocurre durante la floración, permaneciendo el hongo inactivo una vez que es endofítico, dentro de la castaña, hasta la cosecha.
Si durante la cosecha ocurren temperaturas elevadas para la época y precipitaciones, puede derivar en la activación del hongo dentro de la castaña, comenzando a desarrollar la podredumbre: «Empieza con un color acastañado y evoluciona para uno más negro». Como la podredumbre ocurre dentro de la castaña, externamente no aparecen síntomas. «Este hecho provoca que el rastreo y la detección sean muy difíciles en las líneas de la agroindustria».
Actualmente, la situación climatológica está cambiando, por lo que las situaciones de temperatura y de precipitaciones en Galicia derivan en la alta presencia de este hongo, ya que las temperaturas son más altas y hay menos lluvias.
Lucha contra la plaga
«La lucha debe comenzar en el soto», resalta el profesional. En el ámbito del EuroCastanea (la Asociación Europea de la Castaña) fue creado un grupo de trabajo compuesto por investigadores para estudiar el tratamiento de esta dolencia. La gravedad de la situación en 2023 aceleró la toma de decisiones, obligando a este grupo a preparar un protocolo de emergencia para el tratamiento de la dolencia. Según este protocolo, se debe aplicar un tratamiento con bioestimulantes durante la floración, que es el momento en que ocurre la contaminación. en Portugal emplean un bioestimulante con un 1% de sulfato magnésio, 0,02% de molibdato de sódio y 1% de sulfato de zinc.
Galicia posee la mayor área de soto de Europa, con cerca de 40 000 hectáreas en producción
Gómez Laranjo recomienda: «los productos usados tienen que ser biológicos y la lucha debe ser complementada con una cosecha rápida de la castaña, para así impedir la activación del hongo por las temperaturas y humedad más elevadas». Una de las medidas clave es mantener la castaña guardada a bajas temperaturas (menos de 5ºC) y, en caso de su venta, entregarla en el menor plazo posible a la agroindustria.
A nivel de prevención para la siguiente campaña, se recomienda además la retirada de los erizos afectados del soto, así como de la madera muerta.
Situación del castaño a nivel global
En los últimos 30 años la producción mundial pasó de cerca de 400 mil toneladas a 2 millones de toneladas por año, según los datos aportados por este profesional del sector. No obstante, en Europa la producción se fijó entre las 250 000 y las 300 000 toneladas por año, con un crecimiento escaso. Dos factores han contribuido fuertemente para esta situación: la dolencia de la tinta continúa a matar miles de castaños en Europa y el aumento de la temperatura y sequía en verano.
En cuanto a la situación de los países más productores, Gómez Laranjo destaca a Turquía como el líder de esa clasificación, ya que avanza cerca de las 70 000 toneladas/año. Dentro de la Unión Europea, España es el país con mayor área de soto, con cerca de 90 000 hectáreas, que tienen una producción estimada de cerca de 35 000 toneladas. Portugal e Italia ocupan la segunda posición con cerca de 50 000 hectáreas, para una producción anual de cerca de 40 000 toneladas.
Considerando el contexto regional, «Galicia posee la mayor área de soto de Europa», con cerca de 40 000 hectáreas en producción, de las cerca de 70 000 hectáreas de sotos multiseculares existentes. Sin embargo, son áreas de soto con baja productividad, pues, «de acuerdo con la Red Estatal de la Castaña, la producción estimada es de unas 20 000 toneladas por año».
En Galicia están instaladas varias agroindustrias ligadas a la transformación de la castaña, que contribuyen para su valorización y crecimiento
El profesional subraya que «hoy miramos para Galicia y vemos un sector en crecimiento, gracias al importante apoyo del Gobierno Regional, nombradamente para la recuperación de las áreas abandonadas de soto para cambiarlas a zonas productivas, y a la contribución de su IGP Castaña de la Galicia». Añade que también es necesario destacar que en Galicia están instaladas varias agroindustrias ligadas a la transformación de la castaña, que contribuyen para su valorización y crecimiento, para llevar a la región a ser referencia en la hilera europea de la castaña.
Tras os Montes produce el doble de castaña que Galicia con una superficie parecida de sotos
Sigue la región de Tras-os-Montes (Portugal) con cerca de 45 000 hectáreas en producción, representando una producción de unas 45 000 toneladas anualmente. «Es una región bastante contrastante con la Galicia, ya que la gran mayoría de los sotos tiene menos de 50 años, teniendo en cuenta que de las 45 000 hectáreas, cerca de 16 000 hectáreas tienen menos de 15 años», describe. La expectativa es de crecimiento de la producción con la entrada de las nuevas áreas en producción, con la probabilidad de que a medio plazo se pueda consolidar su posición de mayor región productora de castaña de la Unión Europea.
Finalmente, Campânia (Italia) ocupa la tercera posición con cerca de 10 000 hectáreas. Aquí, contrariamente a las otras dos regiones, el área de soto tiende a reducirse, pues en el inicio del siglo XXI, el área llegó a abarcar cerca de 15 000 hectáreas. La principal causa de esta reducción puede estar en el fuerte ataque de la plaga del Dryocosmus kuriphilus (avispilla), que provocó enorme caída en la producción y abandono de áreas, teniendo también impacto arrasador en la agroindustria instalada en esta región.
Los precios en Portugal en esta campaña de 2024 variaron entre los 2,5 euros/kilos y los 4 euros/kilos
Tendencia de precios
La formación del precio de la castaña, como de cualquier producto, depende de una conjugación de factores que comienzan en la calidad del producto y acaban en el equilibrio entre oferta y demanda. Normalmente las variedades de calibre mayor, más dirigidas para el consumo en fresco, son más valorizadas.
La castaña en Europa es un recurso que está lejos de ser excedente. «Las campañas de los últimos dos años fueron bastante abajo del normal, acentuando aun más el carácter deficitario de esta producción», puntualiza. Este contexto crea una valorización para la castaña muy buena y esta tendencia se deberá mantener.
Gómez Laranjo pone de ejemplo los precios pagados a la producción en Portugal en esta campaña de 2024, «por ser los datos que manejo». Variaron entre los 2,5 euros/kilos y los 4 euros/kilos, «notándose un equilibrio de precios entre los principales países europeos productores de castaña, posicionados en un mercado cada vez más global», concluye.