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El italiano Giuseppe Beltramino se crió en una granja de Turín de un centenar de vacas frisonas, una explotación en la que todavía sigue involucrado junto a sus hermanos. Trabaja como director de exportaciones de la firma italiana especializada en genética de vacuno Intermizoo y también ha colaborado con algunos de los mejores criadores europeos como instalador profesional.
Giuseppe es juez oficial de la asociación nacional italiana de la raza Frisona (Anafi) desde hace doce años y este pasado sábado fue el responsable de evaluar a las más de 160 vacas inscritas en el XXVIII Concurso Autonómico de la Raza Frisona Fefriga 2019 y el XXXV de Frisona Gandagro 2019, celebrados ambos en el marco de la Feira Internacional de Maquinaria, Agricultura e Gandería, Cimag-Gandagro, en Silleda (Pontevedra).
¿Qué cualidades has valorado en Rey 747 July High Octane, de la ganadería lucense Rey de Miñotelo, la vaca Gran Campeona de Galicia, que también ha sido la vaca Gran Campeona del Concurso Internacional?
Realmente es una vaca de nivel internacional, tal y como comenté ya en el concurso y con algunos criadores. Es una vaca a la que resulta difícil encontrarle defectos. Es una vaca para competir en Europa o en todo el mundo.
¿Tiene trayectoria de futuro?
Desde luego, es una vaca con mucho futuro. Antes de juzgar un concurso, un juez espera siempre encontrarse este tipo de vaca, este tipo de perfección, ya que así es mucho más fácil hacer el trabajo.
“Las vacas gallegas tienen mucho carácter lechero y calidad de hueso. Se nota que hay un trabajo genético desde hace muchos años”
¿Son realmente este tipo de vacas de concurso factibles en una explotación?
Si, por supuesto. Es una vaca grande, pero tampoco demasiado, y no hace falta tampoco que sea más grande ya que ahora intentamos que la raza no sea de mayor tamaño. En los últimos tiempos se está intentando controlar la estatura de los animales para que sea más fácil su manejo y cuidado. En este caso es realmente una vaca muy correcta.
¿Qué tienen las vacas gallegas para llegar a ser campeonas?
Las vacas gallegas tienen mucho carácter lechero y mucha calidad de hueso. Se nota que hay un trabajo de selección genética desde hace muchos años ya.
¿En qué aspectos crees que se debería seguir mejorando en Galicia?
Simplemente hay que seguir, al igual que estamos haciendo en el resto de sitios, ajustando el tamaño para no tener ejemplares de mucha altura. Como en toda la raza Holstein, el futuro en Galicia puede estar en una vaca con una estatura un poco menor.
¿Qué opinión tienes de la evolución morfológica de las vacas Holstein en Galicia?
Me parece que las vacas gallegas son muy buenas, no es la primera vez que estoy en Galicia y yo mismo he comprado ya en Galicia una de las vacas de mi explotación y que es, además, a la que más cariño le tengo. Es una vaca que compré en 2014 a Marcelino Pozo. Por eso, ya no me sorprende ver tan buenas vacas en Galicia. Creo que se está haciendo un muy buen trabajo por parte de los ganaderos gallegos.
“Como en toda la raza Holstein, el futuro en Galicia puede estar en una vaca con una estatura un poco menor”
Precisamente esa vaca gallega, criada en Lugo, y que se convirtió en la mejor de esa edición en Cospeito y solo un año después también validó el título como mejor frisona productora de leche en Italia, ¿consiguió más títulos?
Después de eso fue dos veces mención de honor en el concurso Swiss Expo, en Suiza, uno de los concursos europeos de mayor nivel internacional. También fue a la confrontación europea en Francia en 2016. Es una vaca que ganó muchas veces en su sección y es un animal que juega un papel muy importante.
¿Sigues teniéndola en la explotación?
Por supuesto que sigue en nuestra ganadería y recientemente hemos vendido a Holanda una hija, una ternera, que ha ganado en Swiss Expo ya la primera sección, que es muy larga y difícil.
¿Qué tipo de vacas te gusta tener en tu ganadería?
Busco para mi ganadería lo mismo que cuando ejerzo de juez en los certámenes. Busco vacas correctas, de mucha leche, vacas muy femeninas, con calidad de hueso. Procuro vacas que se ordeñen fácil y que tengan esa naturaleza lechera.
¿Cómo surge tu vinculación con los concursos morfológicos?
Empecé a concursar con mi hermano cuando tenía 15 años y las primeras veces que salimos de la región normalmente quedábamos de últimos o casi en los últimos puestos. Pero seguimos aguantando, trabajando sin perder nunca el ánimo y ahora la verdad es que vamos teniendo buenos resultados, aunque siempre se puede mejorar y seguimos trabajando para ello. Aunque para nosotros ahora en la explotación no es solo un tema de ganar concursos sino de contar con un nivel alto cada año, luego aunque quedes tercero no pasa nada si vas asegurando año tras año estar en ese nivel. Hay mucho nivel, criadores muy buenos, por lo que lo importante es contar con vacas de alto nivel, que estén en buenas condiciones de salud y bienestar.
“Cuando las ganadoras son vacas que producen mucha leche todo el mundo debería de estar de acuerdo y reconocer su calidad”
En un momento en que la pureza de la raza Holsteien y los concursos están en el punto de mira, ¿qué le replicarías?
Los concursos a veces tienen razón a la hora de elegir buenas vacas, otras veces no. Cuando las ganadoras son vacas que producen mucha leche todo el mundo debería de estar de acuerdo y reconocer su calidad. La vaca que gana en la pista tiene que ser campeona en la sala de ordeño. Si la vaca no saca mucha leche, aunque la morfología sea correcta no puede ganar.
Una vaca ganadora tiene que sacar mucha leche y aguantar mucho tiempo en la granja. Luego es también un tema de ambiente, la vaca tiene que estar en unas condiciones de bienestar adecuado, hay que cuidar también su alimentación. Si la vaca come bien, vive bien, trabajan bien y sacan buenas produciones y puntuaciones.
