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El proceso de venta de Lácteos Pérez Olveira a TGT está llegando a su fin, después de que el juzgado mercantil de A Coruña haya autorizado la venta de las unidades productivas de A Pereira (Santa Comba) y O Pino al grupo catalán TGT, una de las principales firmas queseras a nivel estatal. El juzgado se había opuesto a la venta a inicios de octubre, pero finalmente tuvo en cuenta las alegaciones presentadas por TGT y autorizó la operación.
Si no se presentan alegaciones, el auto judicial que autoriza la venta será firme a finales de noviembre, momento en el que Lácteos Pérez Olveira activará la transmisión de sus instalaciones y marcas a TGT. El proceso incluye la subrogación de todos los trabajadores de las plantas de Pérez Olveira, y será preciso también elaborar nuevos contratos con las explotaciones suministradoras.
Desde Pérez Olveira explican que hasta el momento mantuvieron contratos a corto plazo con las granjas, dada la situación de provisionalidad en la que se encontraba la empresa, pero es previsible que TGT ofrezca contratos anuales, cuestión a la que está obligada por la legislación, por otra parte.
La operación de venta de Pérez Olveira se cerró finalmente en 5,6 millones de euros, de los que 4,3 fueron retenidos por el Grupo Teodoro García Trabadelo en concepto del crédito hipotecario de las instalaciones de A Pereira y O Pino, un crédito que TGT había adquirido en su día, cuando ya pujaba por la compra de las plantas de la firma gallega.
En principio, las partes no esperan alegaciones al auto judicial que autoriza la venta, ya que tanto la administración concursal como Lácteos Pérez Olveira están de acuerdo con la operación. Desde Pérez Olveira señalan que iniciarán reuniones con TGT para afrontar la transmisión de activos en cuanto el auto sea firme, a finales de este mes, si no hay alegaciones.
