Las granjas avícolas y de porcino, dos sectores en auge en Galicia

La estabilidad de los precios, las ayudas de la administración y las propias necesidades de estos sectores son algunas de las razones que motivan que se apueste por abrir nuevas granjas o incluso por la reapertura de antiguas instalaciones

Las granjas avícolas y de porcino, dos sectores en auge en Galicia

Tanto el sector avícola como el porcino atraviesan nos últimos tiempos una cierta estabilidad en los precios que motiva la apertura de nuevas granjas centradas en esta producción. Incluso, aunque en menor medida, también se está produciendo la reapertura de antiguas instalaciones.

Además de los precios, también está contribuyendo a este desarrollo las ayudas de la administración, buena parte de ellas procedentes de fondos europeos, como coinciden en señalar desde distintos ámbitos de estos sectores. Los planes de mejora y de incorporación de jóvenes, fueron herramientas indispensables para que muchos ganaderos hayan afrontado las inversiones precisas para poner en funcionamiento estas granjas.

Ambos sectores constatan este ligero auge sin embargo, cada uno presenta distintos factores que lo propiciaron y también un desarrollo diferenciado. Las características propias de cada actividad y la situación del mercado están condicionando su evolución, segundo explican profesionales de estos sectores.

El Porcino: un crecimiento derivado de la evolución del sector

En el caso del sector porcino, el crecimiento atiende a que «había una demanda grandísima de granjas de cebo después de que se hubiese incrementado la productividad de las granjas de madres, que pasó de 22 a 30 lechones por cerda», segundo explica Marcos Fuentes, ingeniero agrónomo en Nudesa.

El aumento de la productividad en las granjas de madres y la necesidad de renovar las granjas de cebo propicia nuevas aperturas

De este modo, y tal y como ratifica Fuentes, esta apertura de granjas que se constata a lo largo de los últimos tres años, no está derivando en un incremento de la producción sino que está cubriendo las necesidades que había en Galicia. Recuerda que la entrada en vigor de nuevas normativas en materia de bienestar animal hace unos años motivó que buen número de granjas de madres, que carecían de relevo generacional y que estaban centradas en la venta a particulares, no llegasen a ponerse al día y hayan optado por ir reduciendo la actividad y cerrar. Por lo que, ahora hay quien está aprovechando también estas antiguas instalaciones para retomar la actividad convertidas en cebaderos.

Pero, al margen de suplir la demanda de las granjas de madres, el ingeniero agrónomo también incide en que buena parte de las granjas de cebo tenían, de promedio, más de 50 años, por lo que se hace preciso su renovación. Fuentes, matiza que, «lo que aún no llegó fue la rehabilitación de cebaderos antiguos que ya tienen muchos años y que tendrán que afrontar la renovación de las instalaciones pronto».

Complemento del vacuno de leche

El sector porcino está resultando especialmente atractivo para gente joven y como complemento de otra actividad profesional, como confirma el ingeniero agrónomo. Así el sector está notando también la incursión de otros trabajadores ajenos a esta actividad que optan por contar con una granja de cebo. «Hay gente, sobre todo relacionada con el mundo de la construcción, que contaba con capacidad de financiación y que ante la bajada de carga de trabajo de los últimos años, decidió montar un cebadero», detalla Fuentes.

Las granjas de porcino proporcionan a los ganaderos abonos ideales para las praderas

Las granjas de cerdo son también un aliado de las explotaciones de vacuno de leche. «Se convierten en un complemento que además de aportar beneficios económicos directos y estables proporciona un abono rico en nitrógeno y fósforo, de los que normalmente son deficitarias las ganaderías de leche y que son ideales para las praderas», puntualiza el ingeniero.

La comarca del Deza es una de las zonas en las que más cebaderos se están construyendo en los últimos años, aunque desde Nudesa constatan que es una tendencia de toda Galicia. «Sarria, era una antigua zona de producción de porcino con bastantes granjas de madres semiabandonadas que habían dejado de ser viables hace 15 o 20 años y que están volviendo a reconstruirse», comenta. También la zona de Vilalba y Melide están constatando esta creación y reapertura de granjas. «Se está notando también una profesionalización del sector que antes no había. Se están haciendo más granjas, más modernas y con gente con una dedicación más profesional», detalla Fuentes.

El aumento de granjas también lo ratifican desde la ADS de porcino del Deza. «Gente que ya tenía una nave decidió aumentar la capacidad o incluso construir una nave o dos más», comenta Beatriz Toimil, veterinaria de la ADS. Incluso hay quien decidió apostar por el cebo ibérico en intensivo, una opción que resulta atractiva también a los criadores segundo explican desde la ADS.

Un nuevo cebadero situado en Silleda.

Un nuevo cebadero situado en Silleda.

Reabrir el cebadeiro, un complemento a tiempo parcial

Aunque la mayoría de cebaderos son de nueva construcción, también hay quien decide poner a punto antiguas instalaciones adaptadas a las nuevas exigencias. Este es el caso de Almudena Costoya, que acaba de construir una nueva granja en Silleda al lado de una antigua, que también reformó para un mejor aprovechamiento. En su caso, compagina el cebadero con otra actividad profesional totalmente ajena a este sector.

En cuanto cuente con las dos granjas dispondrá de una capacidad de casi 1.000 cerdos (570 en la más antigua y 430 en la de nueva construcción) que le suministra Nudesa. «En cuanto volvió a meter cerdos en la granja, varios ganaderos de la zona fueron a preguntarle por el abono para poder emplearlo en sus praderas. Hay mucha demanda», explica Marcos Fuentes.

Interior de las nuevas instalaciones.

Interior de las nuevas instalaciones.

Además, Costoya optó por construir una nave con luz natural tanto en el tejado como con ventanas que le permite una regulación de la temperatura en verano y fomenta más actividad de los animales. También cuenta con un sistema de ventilación natural y una estructura en el techo de madera que integra con bloque de hormigón celular. Tal y como explican, estas instalaciones le permitirán trabajar con comodidad y centrar las horas de trabajo en la atención y cuidado de los animales, ya que buena parte de los procesos, como la alimentación están automatizados.

Nuevas granjas de pollos

Al igual que muchos ganaderos optan por cebaderos de cerdos, también las granjas de pollos son una alternativa en auge. En este caso, la estabilidad de precios registrada desde 2007, sin producirse picos de sierra en estos años, es también un aliciente para los criadores. El precio del pollo en Galicia se sitúa entre los 0,65 y los 0,80€. Pese a eso, y la que muchos optan por esta actividad animados también por los planes de mejora, hay quien alerta de que la situación del sector no es tan buena para todos como puede parecer.

El vacío del pollo Cuk

Desde el sindicato Unións Agrarias, inciden en dos problemáticas que están dejando huella en el sector. Por una parte la ruptura del contrato de Mercadona con el Grupo Sada, que representa el 28% de la producción de Galicia, para su pollo Cuk. Este tipo de pollo diferenciado y alimentado a base de maíz, se criaba en Galicia por lo que la ruptura del acuerdo afecta directamente a las granjas gallegas. «Está habiendo muchas granjas vacías, sin producción al no tener salida para este tipo de pollos», explica Javier López, de Unións .

Por cada granja nueva que se abre en Galicia cierran 4 de las viejas

Por otra parte, las nuevas granjas, más modernizadas y tecnificadas, equipadas con modernos sistemas de ventilación y calefacción que le permiten meter más pollos por m2 están ejerciendo una importante competencia con las granjas más antiguas. López alerta de que estas granjas más viejas están condenadas a cerrar. «Por cada granja nueva que se abre en Galicia cierran 4 de las antiguas», sentencia.

Según los datos que maneja el sindicato, en el 2016 en Galicia se contabilizaban 782 granjas, 35 más que en el 2012. Y si se compara la producción, en 2016 se incrementó en 8.983.000 por los sacrificados en Galicia, situándose en los 78.701.000, con respeto a los 69.718.000 contabilizados en el 2012.

«Es un buen momento del sector con un repunte para las nuevas incorporaciones pero las antiguas están cada vez más condenadas», concluye López. «Las granjas más antiguas están ya amortizadas pero tendrán que acabar modernizándose porque las nuevas son cada vez más competitivas», coincide en destacar Juan Serrano, gerente de Aviporto. Con casi treinta años de experiencia en el sector, Serrano apunta a que estas granjas precisan una reinversión continua e incide en la gran influencia que tienen las grandes empresas integradoras en el devenir del sector así como el escaso margen de maniobra de los criadores.

2 ideas sobre “Las granjas avícolas y de porcino, dos sectores en auge en Galicia

  1. Angel Gomez Barrio

    Hola ,me interesaría saber mas sobre el tema de las granjas de pollos ya que llevo tiempo dándole vueltas y me e decidido a abrir una nueva granja o adquirir un en alquiler pero no tengo mucha información sobre el tema.
    Espero su respuesta.
    Saludos y gracias.

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  2. adelso salvador

    Buenos días agradeciéndole su atención estamos en proceso de invertir en una granja de pollo de engorde o gallinas ponedoras en vigo pontevedra cabe la posibilidad de subvención después de la inversión o a donde me dirijo para informarme..

    saludos
    adelso salvador

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