La Asociación Gandeiros Galegos de Suprema, que representa a productores de carne inscritos en la IGP Ternera Gallega Suprema, considera que los criterios de reparto de la nueva PAC 2023-2027 son “destructivos” para las explotaciones de vacuno dedicadas a la producción de carne de calidad.
En un escrito registrado este martes ante la Xunta, la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema muestra su “disconformidad” con las modificaciones realizadas por la Consellería do Medio Rural, a la que pide que adopte las medidas necesarias “para paliar los efectos nocivos para el sector”. Asimismo, cuestionan el reparto de las ayudas asociadas para ganadería marcado por el Ministerio de Agricultura.
El presidente de la Asociación, Santiago Rego, considera que con el régimen de ayudas a aplicar a partir próximo 1 de enero “una explotación de vacuno de carne ubicada en Galicia podría llegar a perder hasta el 23% del importe económico que venía percibiendo hasta este momento”. Una situación, dice, que agravaría aún más el contexto actual de “venta a pérdidas”.
“La nueva PAC puede suponer el golpe definitivo al sector de vacuno de carne en Galicia y provocar el cierre definitivo de cientos de explotaciones a las que les será imposible subsistir en un contexto continuista de venta a pérdidas y de reducción de ayudas PAC”, asegura.
De no producirse modificaciones en las ayudas planteadas, es imposible que las explotaciones lleguen vivas al final del próximo periodo PAC; supondrá la sentencia de muerte y el completo desmantelamiento del sector en Galicia
Los cambios “más dañinos” para las explotaciones de vacuno de carne en la nueva PAC, según la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema, son la retirada del pago por zona con limitaciones naturales en áreas no consideradas de montaña, la congelación de las ayudas asociadas por vaca nutriz, la falta de criterios de priorización de las explotaciones de vacuno de carne en el acceso a los fondos para agricultura ecológica -al menos en 2022- y la limitación de las ayudas por ataques del lobo a determinados ayuntamientos.
Por ello, los productores de Suprema consideran el nuevo periodo de la PAC “claramente lesivo para todas las explotaciones de orientación cárnica de Galicia” y advierten que “de no producirse modificaciones en las ayudas planteadas supondrá la sentencia de muerte y el completo desmantelamiento del sector en Galicia, siendo totalmente imposible que la mayor parte de las explotaciones lleguen en funcionamiento al final del periodo PAC que ahora se inicia”, aseguran.
Eliminación de las ayudas ZLN fuera de las zonas de montaña
“Esta decisión supone condenar al cierre a un número considerable de explotaciones. La retirada de esta ayuda es más gravosa si cabe debido a que quienes la perciben son en su totalidad explotaciones cuyos titulares son profesionales, que cotizan por el régimen de la Seguridad Social en el régimen especial agrario y que subsisten exclusivamente de la actividad agraria y ganadera. Es decir, se está castigando y penalizando a los titulares de explotaciones que se dedican únicamente a esta actividad y que no tienen ningún ingreso de otra clase”, argumentan los productores de Suprema.
Por eso, «las explotaciones de vacuno de carne que no se encuentren en zona de montaña sufrirán una pérdida muy importante con la supresión de esta ayuda, que no se verá compensada de ninguna manera, al contrario de lo que sucede en el vacuno de leche con el incremento de un 30% en la línea asociada al pago por vaca de leche”, afirma Santiago Rego.
“Discriminación injustificada” frente a los productores de leche en el pago asociado
En el escrito presentado ante la Xunta, la asociación que reúne a los ganaderos de Suprema denuncian “discriminaciones injustificadas” frente a los productores de leche en el pago de las ayudas asociadas a la producción, una cuestión en este caso que depende del Ministerio de Agricultura.
“En la anterior reforma de la PAC del año 2015 el sector de vacuno de carne salió muy perjudicado y claramente discriminado a respecto del vacuno de leche. Así, la cuantía que se percibía en el actual período por vaca nutriz presente en una explotación era un 40% inferior a lo que percibía una explotación por una vaca con orientación lechera. Pero en el nuevo período PAC esta diferencia se agranda todavía más de forma totalmente incomprensible”, aseguran.
La ayuda asociada por vaca lechera se incrementa un 30% mientras el pago asociado por vaca nutriz se congela
“El presupuesto para el pago por animal de orientación lechera presente en una explotación se incrementa un 30%, lo que va a provocar que la prima por cada uno de estos animales se dispare hasta los 157,96€ en zona no de montaña y hasta los 181,66€ en animales presentes en zona de montaña. Por el contrario, la ayuda por vaca nutriz se mantiene exactamente igual que en período PAC anterior (90,25€/vaca nutriz), sin ni siquiera actualizarse el incremento del IPC que se ha producido desde el año 2015, lo que a efectos prácticos supone una nueva pérdida de poder adquisitivo de los productores de vacuno de carne frente a los productores de vacuno de leche”, indica Santiago Rego.
«Nos resulta muy difícil de entender y completamente inexplicable que al sector de vacuno de leche, que ya partía con una ayuda por animal muy superior al que tenía el de vacuno de carne, se le incremente todavía más esta ayuda por animal, disparándose la diferencia entre lo que una explotación ganadera percibe por un animal con orientación lechera y uno con orientación cárnica, hasta llegar a ser prácticamente el doble. Es decir, cobrará lo mismo un productor de leche por 1 animal que un productor de carne por 2 vacas nutrices”, compara.
Cobrará lo mismo un productor de leche por una de sus vacas que uno de carne por dos
Para paliar esta “discriminación”, piden que la Xunta habilite una línea específica de ayudas a los productores de Ternera Gallega Suprema. “Esta ayuda se cobraría por animal y debería contar con un importe que permita al menos mantener la diferencia en el pago de ayudas asociadas a producción que existía hasta este momento entre animal de orientación cárnica y animal de orientación láctea, es decir, que esa diferencia se mantenga en el 40% actual, pero que no se dispare hasta casi un 100%”, proponen.
Para ello, el importe de ayuda debería situarse en 37€/vaca reproductora, calculan. “Esta ayuda específica para productores de Ternera Gallega Suprema serviría también para compensar la pérdida económica que supondrá para muchos productores de vacuno de carne la desaparición de la ayuda por zona de limitaciones naturales en zonas distintas a las de montaña”, justifica Santiago Rego.
«Las explotaciones de carne debemos tener preferencia en los fondos para ganadería ecológica y compensación de los ataques del lobo»
Desde la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema defienden que la Xunta fije un criterio de priorización que dé preferencia de los productores de carne frente a los productores de leche a la hora de acceder a las ayudas agroambientales de ganadería ecológica, fomento de pastos y compensación por ataques del lobo.
“Son todas ellas ayudas claramente asociadas a una actividad de completa extensificación, que los productores de orientación cárnica realizamos de forma considerablemente más intensa que los productores de orientación láctea”, justifican.
Los productores de Suprema critican además el mapa publicado por la Consellería en el que se incluyen los ayuntamientos en los que se podrá cobrar la nueva ayuda por ataques del lobo, que no cubrirá la totalidad del territorio de la comunidad.
Presupuesto insuficiente para ganadería ecológica
Las explotaciones de vacuno de carne gallegas destacan por su carácter extensivo, con prácticas de pastoreo sostenibles y compatibles con el medio ambiente y las vacas de carne actúan como “desbrozadoras naturales”, argumenta Santiago Rego, ayudando de este modo a conservar el paisaje tradicional en Galicia y contribuyendo a evitar el abandono y la posterior propagación de incendios forestales.
Se plantean unas ayudas agroambientales de ganadería ecológica y fomento de pastos con unas cuantías presupuestarias claramente insuficientes
Por eso, dice, la falta de un volumen presupuestario suficiente para las nuevas ayudas agroambientales de ganadería ecológica y fomento de pastos y la ausencia de un mecanismo de discriminación positiva de las ganaderías de vacuno de carne frente a las de vacuno de leche, “muy beneficiadas en el resto de las ayudas PAC y con un volumen de días de pastoreo muy inferior en la mayoría de los casos”, va a provocar, aseguran, “que muchas explotaciones extensivas de vacuno de carne no vayan a poder percibir estas ayudas”.
En muchas ganaderías de leche las vacas no pastorean, sólo pasean
“No se da ningún tipo de preferencia a las explotaciones de vacuno de carne, que realizan un pastoreo en extensivo durante 24 horas al día los 365 del año, frente a las explotaciones de vacuno de leche, a las que se les lleva permitiendo desde hace muchos años cobrar unas ayudas por pastoreo cuando en la mayor parte de las ganaderías de orientación láctea que las perciben los animales no pastorean, únicamente pasean. Es decir, salen al exterior pero no comen, debido a que en el interior del establo se les dan raciones muy elevadas en base a pienso y carro mezclador para incrementar los volúmenes de producción de leche”, razona Santiago Rego.
Extensión de las ayudas por ataques del lobo
Desde la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema piden además extender los ayuntamientos susceptibles de cobrar la nueva ayuda planteada para luchar contra los ataques del lobo a todos aquellos municipios en los que se ha comunicado algún ataque de lobo a algún animal en los últimos 5 años.
“Si ha habido ataques, sean en mayor o menor número, es síntoma de la existencia de manadas de lobo en estos ayuntamientos, por lo que los ganaderos afincados en ellos deberían poder cobrar esta ayuda”, razonan.
La limitación de las ayudas por ataque de lobos a determinados ayuntamientos resulta incomprensible cuando no hay barreras físicas entre los municipios que impidan a estos animales moverse y atacar en cualquier punto de la geografía
Y, al igual que en el caso de las ayudas para ganadería ecológica, piden que el vacuno de carne tenga prioridad en el cobro. “Por simple estadística y también por datos que la propia Administración posee, se sabe que más del 80% de los ataques de lobo producidos a ganado bovino se producen sobre ganado bovino de carne, explicable por el hecho de que el ganado bovino de carne se encuentra en extensivo las 24 horas del día durante los 365 días del año y pastoreando zonas mucho más alejadas de las casas, al contrario de lo que sucede con las vacas de orientación láctea, que duermen normalmente todos los días en el establo”, argumentan.
Por eso, consideran que puede darse la circunstancia de que explotaciones cárnicas, “víctimas de más del 80% de los ataques del lobo”, se queden sin cobrar esta ayuda y, sin embargo, sea percibida por explotaciones de vacuno de leche, “con incidencias de ataques de lobo mínimas y en su mayor parte inexistentes”.
“Para finalizar el sinsentido y el mal planteamiento de esta ayuda, se opta por excluir de la misma a los productores de carne que están en ecológico, como si por ello no fueran objeto de ataques de lobo, en una decisión que carece de lógica alguna”, añaden.
Incremento de la burocracia
Finalmente, los productores de carne critican el “incremento exponencial de la burocracia” que, en su opinión, se dará en el nuevo período PAC. “Este incremento recae en el ganadero, exigiéndole unas competencias digitales inalcanzables para la mayor parte de los productores”, argumenta Santiago Rego.
Por lo que en el escrito presentado ante la Consellería pide habilitar una línea de ayudas anual de cara a subvencionar un servicio de asesoramiento a los productores de vacuno de carne. “La complejidad en la tramitación de las ayudas y los requisitos de control son cada vez mayores”, argumentan, debido a la introducción de figuras como los eco-regímenes, que incrementan las exigencias a cumplir, volviéndose estas mucho más complejas”, consideran.