Los datos oficiales confirman que este año no fue favorable para la vespa velutina, que sufrió un retroceso en todo el territorio gallego. La empresa pública Seaga, encargada del control de la plaga y la retirada de los nidos, recibió hasta el 31 de octubre un total de 23.454 avisos, frente a los 56.598 contabilizados el año pasado, según detalló este sábado su gerente, Luisa Piñeiro, en el Simposio Internacional sobre velutina celebrado en Chantada.
De los casi 23.500 avisos recibidos, se atendieron un total de 20.000. En un 15% de los casos no se trataba de nidos de velutina. “Hay un gran número de avisos que no son de velutina”, reconoció la gerente de Seaga.
De los 20.000 nidos sobre los que se actuó, 6.626 fueron retirados y 7.591 neutralizados mediante el lanzamiento de perdigones envenenados. En el resto de los casos, o bien el aviso estaba duplicado, el nido ya estaba inactivo, o no se pudo intervenir por encontrarse en el entorno de cauces fluviales o en una ubicación inaccesible.
De los 20.000 nidos sobre los que se actuó, 6.626 fueron retirados y 7.591 neutralizados con perdigones
Por provincias, A Coruña (8.862 nidos) y Pontevedra (6.029) fueron las que concentraron más avisos atendidos este año, mientras que Lugo y Ourense, con 2.585 y 2.544 avisos respectivamente, mantienen un nivel de incidencia inferior. “La parte oriental de Lugo y Ourense son las zonas de Galicia donde menos avisos se recogen”, indicó Luisa, quien reconoció que esta realidad está directamente relacionada con el grado de despoblamiento de estas áreas de montaña.
En los últimos 5 años (2020-2024), la población gallega dio un total de 191.000 avisos a través del teléfono 012 por nidos de velutina, con una media de casi 42.500 avisos por año, cifra que fue ampliamente superada en 2023 pero que se encuentra por debajo en este 2024.
Este año el ciclo de la velutina llega más tarde: permitió recoger la miel pero está comenzando a asediar los colmenares
“Hubo muchísima menos actividad de esta especie en el territorio este año, y se debe a dos factores: la climatología y el trampeo realizado en toda Galicia”, aseguró la gerente de Seaga. Los mayores descensos se registraron en Lugo y Ourense. “Lugo tiene este año los mejores resultados desde 2020; el número de avisos en 2024 es tres veces menor que el del año pasado: 2.711 este año frente a los 8.955 de 2023”, detalló.
Agosto volvió a ser el mes con mayor actividad en la retirada de nidos (6.424 avisos), frente a los más de 4.000 registrados en julio, septiembre y octubre. La actividad se mantiene alta en noviembre, ya que el ciclo de la velutina este año llega más tarde y, al caer las hojas de los árboles donde se encuentran, los nidos son más visibles.
Campaña de trampeo primaveral
Tras verse sobrepasada en el año 2023, cuando se acumularon retrasos de tres semanas en la atención de los avisos, la Xunta optó por primera vez en este 2024 por realizar una campaña de trampeo primaveral para capturar reinas fundadoras de nuevos nidos en el momento de su salida de la hibernación, cuando necesitan buscar comida y materiales para construir los nidos embrionarios y primarios.
Solo 3 ayuntamientos colaboraron en la campaña de trampeo puesta en marcha por la Xunta
La gerente de Seaga aportó los datos de la campaña realizada, en la que se colocaron un total de 20.545 trampas, que capturaron en conjunto 113.274 reinas. En la colocación de las trampas, además del personal contratado por la empresa pública, colaboraron las brigadas forestales de la Consellería do Medio Rural y las asociaciones de apicultores, pero solo 3 ayuntamientos.
Se ha hecho un trampeo geolocalizado, selectivo y controlado
Luisa Piñeiro defendió la utilidad del trampeo realizado, destacando aspectos como la protección de otras especies. “Este trampeo contaba con la autorización de la Consellería de Medio Ambiente; nuestro objetivo era hacer algo que no perjudicara a la biodiversidad. Por eso fue un trampeo muy selectivo y muy controlado, no fue un trampeo masivo al azar, sino que los lugares de colocación de las trampas estaban predefinidos en función de los lugares donde se habían retirado nidos el año anterior”, explicó.
“Estamos esperando a ser convocados a la Comisión de Seguimiento; tenemos mucho que aportar”
El Simposio Internacional sobre la lucha contra la velutina celebrado el sábado en Chantada fue organizado por la Asociación Galega de Apicultura (AGA), que insiste en la necesidad de mantener y perfeccionar la campaña de trampeo iniciada este año.
Para ello, esperan ser incluidos por la Xunta en la Comisión de Seguimiento prevista para analizar los datos de esta campaña. “Estamos esperando ser convocados; tenemos mucho que aportar”, asegura José María Bello. “Parece que el Gobierno gallego se está tomando el tema más en serio y es más receptivo”, añade.
El trampeo se inició este año de manera tardía y con deficiencias: modelo de trampas, ubicación y mantenimiento
“Este año la campaña de trampeo tuvo fallos, pero es un gran paso que la Administración accediera a llevarla a cabo”, reconoce. “Sin embargo, hay que perfeccionarla; todavía hay mucho margen de mejora y seguimos tropezando en la misma piedra, porque no se toma en consideración la experiencia que tenemos los apicultores. Ninguno de nosotros habría colocado esos modelos de trampas porque no son las más eficientes”, afirma.
Hay que valorar que se ha dado un paso, pero hay que mejorarlo
Tras las pruebas realizadas en la comarca del Morrazo, se decantan por el modelo antiguo de Avispaclac, el tipo de trampa repartido durante años por la Consellería do Medio Rural. “Mejora sustancialmente la eficacia de las capturas, porque cuando la temperatura se eleva se acelera la fermentación y el atrayente funciona mejor”, insiste.
Aunque, advierte, “es una trampa que requiere más mantenimiento”. “Al principio, a finales de febrero y primera quincena de marzo, puede estar 25 días, pero luego el período de mantenimiento se reduce a 4-5 días cuando la temperatura diurna asciende. Con temperaturas superiores a 22 o 25 grados es conveniente colocarla en zonas de semisombra para evitar que el sol incida directamente en las horas centrales del día y degrade el atrayente”, recomienda Chema.
El modelo de trampa colocado no es adecuado y el atrayente utilizado tampoco
Al igual que el modelo de trampa colocado no fue el adecuado, el atrayente utilizado tampoco. “Los líquidos comerciales que se usaron no son los apropiados”, dice. Él recomienda una mezcla de jugo de arándanos (400 ml), azúcar (150 g) y levadura (12 g). “Por cada trampa, la cantidad de atrayente necesaria sería equivalente a 3 vasos de yogur de jugo, 1 vaso de azúcar y media pastilla de levadura”, detalla.
“Es mejor poner menos trampas y atenderlas mejor”
El lugar de colocación de la trampa y su mantenimiento son también dos factores fundamentales para su eficacia. “Es mejor poner menos trampas y atenderlas mejor. Nosotros en la comarca del Morrazo, con 400 trampas, capturábamos 20.000 reinas, con medias de entre 40 y 60 reinas por trampa, mientras que las medias de la campaña de Seaga este año son de 5 velutinas por trampa”, compara.
“Hay que tener muy claro cuándo colocar las trampas en cada punto del territorio y prever cuándo realizar el mantenimiento. No es lo mismo colocarlas en las comarcas de las Rías Baixas que en A Mariña, aunque ambas sean zonas costeras, ni colocar una trampa en Lalín que en Bandeira, aunque estén cerca, porque los condicionantes locales varían mucho”, destaca.
Por ello, recomienda recurrir a Meteogalicia, ya que “puede realizar un trabajo de apoyo a Seaga para indicar en qué lugares se está dando ya el punto de partida para la colocación de las trampas, a partir de 11 grados de temperatura mínima”.
Es necesario un mayor grado de formación y capacitación del personal encargado del trampeo
“El trampeo es una cuestión muy compleja”, asegura Chema. Por eso, dice, “es necesario un mayor grado de formación y capacitación del personal encargado de realizarlo”. “No es lo mismo colocar la trampa en un sauce o en una alambrada detrás de un contenedor de basura que en un camelio en flor que quizás está al lado, aunque no todos los camelios sirven. La del sauce capturará 10 velutinas en toda la campaña, mientras que la del camelio logrará 50 o 60 capturas”, ejemplifica.
“Lo que ocurre este año es una ilusión”
Desde AGA piden a la Administración que no baje la guardia por la menor incidencia de la velutina este año, ya que advierten: “Lo que ocurre este año es una ilusión y, si no se toman medidas, en uno o dos años estaremos de nuevo en la misma situación”, afirma el veterinario Joaquín Lozano.
Su compañero Gonzalo Calvo pide combinar distintos métodos de lucha, como el trampeo en primavera y el envío de troianos en verano. “Lo verdaderamente eficaz es el control remoto en sus distintas variantes”, asegura.
“Nuestro territorio es tremendamente favorable para la expansión de la especie por varios factores: primero, la climatología, tanto las condiciones de temperatura como de humedad; y segundo, por el despoblamiento y la baja densidad de población. Donde menos avisos hay es precisamente donde menos población hay; no es que allí no haya velutinas, sino que no hay ojos para verlas. En esos lugares, la velutina campa a sus anchas”, dice Chema.