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La Xunta dispone de una herramienta informática, la Xorfor, para la tramitación de los proyectos de ordenación forestal. Es una aplicación que obliga a registrar los datos de cada plan, así como todas las parcelas asociadas al mismo y la cartografía complementaria. Se trata de un proceso de por sí lento, que derivó en caos cuando la Xunta decidió cambiar, sin previo aviso, la configuración de la aplicación, introduciendo nuevas tablas y requisitos.
El cambio del sistema Xorfor se hizo el 13 de septiembre, a dos días de que concluyera uno de los plazos de presentación de proyectos de ordenación que eran beneficiarios de subvención. Tal modificación del Xorfor derivó en que todos los técnicos que tenían proyectos cargados pero aún sin presentar, pendientes de una última revisión, se vieron imposibilitados de entregar los proyectos en tiempo, pues precisaban de nuevo modificar todos los proyectos, un proceso que en algún caso exigirá de semanas de trabajo.
Las modificaciones introducidas en el Xorfor colmaron la paciencia de los técnicos, que trasladaron por distintos canales su enfado y malestar. Uno de los afectados señala que los errores y cambios en el sistema Xorfor se suceden desde hace años, hasta tal punto que “lleva mucho más tiempo subir un proyecto al Xorfor que hacer al propio proyecto de ordenación forestal en sí”.
Consultada sobre la situación la gerente del Colegio de Ingenieros Técnicos Forestales de Galicia, Patricia González, confirma los problemas. “Hay un enfado importante de los técnicos por el hecho de que las actualizaciones se están haciendo sin previo aviso. Se podía poner en la plataforma un aviso indicando, por ejemplo, que en 15 días se hará una actualización, de forma que los técnicos tengan margen para finalizar la presentación de los proyectos en trámite y no se vean de un día para otro con que tienen que rehacer los proyectos”, explica.
El malestar viene también derivado de que los cambios se hayan hecho a dos días de que acabara uno de los plazos de presentación de proyectos de ordenación. “Ante esa situación, desde el Colegio hablamos con Medio Rural y se consiguió una ampliación de plazo. Del 15 de septiembre, se amplió al 30 de octubre, en tanto los proyectos que tenían fecha límite de entrega el 15 de octubre pasan al 15 de noviembre” -explica Patricia-. “La cuestión de fondo es que los profesionales tienen su trabajo organizado y planificado y de un día para otro vieron como se enfrentan a semanas adicionales de trabajo por la modificación del Xorfor”, concluye.
Desde Medio Rural, por su parte, señalan que los cambios en el Xorfor vienen motivados por la necesidad de recabar datos adicionales sobre los proyectos de ordenación, ya que el Plan Forestal de Galicia establece 70 indicadores de cumplimiento, sobre los que la Administración debe llevar un control.
Entre las novedades introducidas en el Xorfor, figura la delimitación de zonas de alto valor natural o la indicación del dióxido de carbono absorbido por el monte. Medio Rural precisa que, en todo caso, la indicación de estos nuevos datos en los proyectos es voluntaria, no obligatoria.
Por último, la Consellería recuerda el importante esfuerzo que está haciendo para apoyar la ordenación del monte en Galicia. En el 2020 existían cerca de 300.000 hectáreas ordenadas en Galicia -un 15% de la superficie forestal de la comunidad-, y la Xunta concedió el pasado año ayudas para ordenar otras 196.000 hectáreas, con una subvención total de 4,3 millones de euros.
