El proyecto de Orden Ministerial por la que se modifica el Anexo del Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y el Catálogo Español de Especies Amenazadas, sigue cosechando rechazo en Galicia. Desde distintos ámbitos, tanto desde el sector agroganadero como desde la esfera política gallega, se critica la decisión del Ministerio para la Transición Ecológica de incluir al lobo en este régimen de especial protección, lo que implicaría prohibir su caza al norte del río Duero.
Los últimos en sumarse a la ola de críticas han sido los Concellos de la Serra do Xistral, en la provincia de Lugo, una de las zonas con mayor presencia de lobos de toda Galicia y donde los ataques al ganado son habituales. Los alcaldes de Abadín, Alfoz, Cervo, Muras, Ourol, O Valadouro, Viveiro, Xermade y Xove, de todos los colores políticos, rechazan la decisión del Ministerio y acaban de registrar alegaciones al cambio normativo.
La posible inclusión del lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial implica el paso de la consideración del lobo como especie regulada por las normas cinegéticas a especie protegida por las leyes de patrimonio natural
«La publicación de una norma genérica para regular la situación del lobo en toda España, no es efectiva, ni justa, ni apropiada, dado que, no son uniformes las zonas (hábitats) donde coexiste el lobo con otras especies y con la población del entorno, y de esta forma, se hace necesario contar con estudios pormenorizados que reflejen la realidad existente y determinen las acciones necesarias en cada caso específico», esgrimen.
Los alcaldes solicitan en su escrito conjunto de alegaciones «un aplazamiento en la toma de decisiones relativas al lobo ibérico y la apertura de diálogo con todos los sectores afectados: los Gobiernos autonómicos, los Ayuntamientos, así como los ganaderos y sus representantes» y también «que se reconozca la actividad ganadera de cría de caballos y ganado vacuno en libertad en O Xistral, así como en otras montañas gallegas, como una actividad económica, patrimonial y cultural a proteger así como sus beneficios para el medio ambiente y el modo de vida del interior de la provincia de Lugo», para lo que piden que «todos aquellos instrumentos normativos y dotación de recursos favorezcan la viabilidad de esta actividad económica en las mejores condiciones, con el propósito de frenar su declive y propiciar su recuperación para las próximas décadas».
Los ataques al ganado se han cuadruplicado en los últimos 7 años
«Esta coexistencia entre el caballo y el lobo se produce en contados lugares del planeta (Galicia, Norte de Portugal, Mongolia y pocos otros) y cuando se llega al desequilibrio, hecho contrastado, por exceso poblacional del lobo (pasamos de 237 avisos de ataque en 2013 a casi 1000 en 2020, sin contar los no denunciados por diversas cuestiones) se aboca a la actividad ganadera al abandono ante el riesgo de ataques a sus animales, fundamentales para la conservación de todo el entorno», argumentan los regidores en sus alegaciones.
En O Xistral se ha pasado de 237 avisos por ataques de lobo en 2013 a un millar en el año 2020
«El manejo ancestral que han hecho los pobladores de esta sierra se ha caracterizado por la tradición de mantener una ganadería extensiva en estado salvaje o semi-salvaje conformada por manadas de caballos y rebaños de vacas, los cuales han pastado en libertad y preservado la peculiar vegetación de este hábitat. Son los caballos y vacas que pastan en O Xistral, su manejo secular, sus curros y sus rapas una de las mayores manifestaciones culturales, etnográficas y turísticas de nuestra comarca. A nuestro pesar, este patrimonio natural, económico y cultural-identitario de nuestro territorio sucumbe por un declive acelerado de esta peculiar forma de criar ganado equino y vacuno en libertad, en un fenómeno común a otros lugares fruto del olvido de las distintas Administraciones estatales y autonómicas, lo que conlleva al mundo rural al abandono, despoblamiento y cambios de usos más agresivos en el territorio», prosiguen.
Riesgo para la mayor reserva de turberas de cobertura de Europa
La Serra do Xistral es un espacio natural incluído en la Red Natura 2000, en la que se hallan localizadas el 90% de las turberas de cobertura de toda Europa, paraje único e irrepetible, cuya conservación depende en gran medida de la ganadería extensiva, en especial del ganado equino. «La excesiva presión del lobo sobre esta actividad ganadera extensiva, intensifica la renuncia a la misma, poniendo en serio peligro el ecosistema. La inexistencia o escasez del ganado equino que en esta zona habita en forma libre (caballo salvaje) y que actúa como auténtico limpiador ecológico, practicando un desbroce natural, sitúa en serio riesgo de incendio a nuestro territorio por la invasión de especies altamente inflamables, cuyas consecuencias pueden llegar a ser fatales para las turberas», indican.
El lobo es sólo un habitante más de su entorno. No es el único problema ni la única solución
Dada la importancia que tiene la Serra do Xistral los alcaldes piden «que se considere por parte del Gobierno del Estado y del Gobierno autonómico este territorio como un enclave natural prioritario en la puesta en marcha de actuaciones e inversiones para generar experiencias y modelos demostrativos que hagan viable este tipo de ganadería y su coexistencia con el lobo». Finalmente piden que se implementen los mecanismos necesarios para la coordinación entre los Ministerios competentes, así como con los Gobiernos Autonómicos, los Ayuntamientos afectados y los agentes sociales para la puesta en marcha de «estudios técnicos que determinen las pautas a seguir en los próximos años para alcanzar el objetivo real del reequilibrio natural de los ecosistemas», puesto que, aseguran, «el lobo es solo un habitante más en su entorno».
Anuncio de concentración
Desde el ámbito de las organizaciones agrarias, Unións Agrarias anuncia también alegaciones y una concentración ante la Delegación del Gobierno, probablemente el 9 de marzo, aunque la fecha depende de la evolución de la pandemia. La organización también cuestiona que la Consellería de Medio Ambiente tenga sin pagar «todas las indemnizaciones por daños de lobo correspondientes al 2020 y parte de las del 2019», por lo que no descarta otros posibles actos de protesta ante la Consellería.
El aumento de la protección del lobo generó en las últimas semanas una reacción mayoritaria de oposición en el campo. En el ámbito estatal, Asaja, Upa (la matriz de Unións Agrarias) y Coag están protagonizando acciones de protesta unitarias. En Galicia, a mayores de la concentración anunciada por Unións, también expresaron su oposición a la medida la Asociación Agraria de Galicia y la Asociación de Ganaderos del Macizo Central de Ourense (Agromacen), entre otros colectivos.