Los probióticos en la miel natural: ¿una fuente de salud?

Una nueva investigación revela que la miel cruda también tiene propiedades especiales de estimulación inmunológica gracias a un probiótico presente en el néctar y el polen de las plantas. Artículo del apiterapeuta José Castro.

Los probióticos en la miel natural: ¿una fuente de salud?

La miel aporta muchos beneficios para la salud y la ciencia apenas está comenzando a descubrirlos. Ahora, una nueva investigación revela que la miel cruda también tiene propiedades especiales de estimulación inmunológica gracias a un probiótico presente en el néctar y en el polen de las plantas, que las abejas transportan a la colmena.

Diversas investigaciones demostraron que la capacidad de la miel para estimular el sistema inmunológico tiene mucho que ver con el hecho de que los néctares de las flores contienen polifenoles vegetales y otros fitoquímicos. Ahora se puede añadir otra razón que justifica la capacidad de la miel de estimular el sistema inmunológico: una bacteria probiótica particular endémica entre las abejas melíferas.

El descubrimiento y estudio de este probiótico revela una serie de elementos clave con respecto a la miel y las abejas melíferas, con respeto a la digestión de la fructosa y hasta el colapso de la colonia de abejas melíferas.

 Lactobacillus kunkeei: el probiótico de la colmena

La bacteria probiótica es la Lactobacillus kunkeei. Esta bacteria se estudió inicialmente en el proceso de elaboración del vino, porque a menudo se encontraba cuándo este se estropeaba durante el proceso de fermentación.

Pero recientemente la Lactobacillus kunkeei se encontró también entre las abejas melíferas, y un nuevo método de secuenciación empleado en la Universidad de la Prefectura de Hiroshima encontró que esta bacteria probiótica no solo es utilizada por las abejas melíferas: también está presente en la miel, el pan de abeja y la jalea real producida en la colmena.

Bacterias que aumentan la inmunidad

Esto significa que al comer miel cruda, podemos estar consumiendo también esta bacteria probiótica. ¿Es bueno para nosotros?

Para investigar los efectos de esta bacteria probiótica, los investigadores primero probaron dos cepas de la bacteria en células dentro del laboratorio. Cuando las células fueron expuestas a la bacteria Lactobacillus kunkeei YB38, matada previamente por calor, estas iniciaron una respuesta con Inmunoglobulina A (IgA), lo que significa que los procesos de inmunidad de las células se estimularon.

Los investigadores entonces dieron 1.000 miligramos de Lactobacillus kunkeei YB38 matado por calor a 11 adultos sanos durante un mes. Los investigadores encontraron que el Lactobacillus kunkeei YB38 aumentó las concentraciones de IgA de saliva, lágrimas y secrecciones gastrointestinales, genitourinarias y respiratorias entre los sujetos. Esto significa que estimuló significativamente el sistema inmunológico.

Los investigadores confirmaron el descubrimiento con esta información: «Este es el primer informe que analiza la microbiota de la miel y la jalea real y demuestra la eficacia del L. kunkeei de los productos de la abeja en el sistema inmune de los humanos.

Implicaciones de la miel cruda versus la miel refinada

Esta eliminación de Lactobacillus kunkeei por calor es lo que ocurre normalmente en la mayoría de la producción de miel convencional, ya que la miel convencional se calienta y luego se filtra. Este proceso de calentamiento permitirá que la miel pase más fácilmente a través de un filtro para que las partículas no deseadas puedan ser eliminadas.

Sin embargo, una miel cruda verdadera no se calienta, ni se filtra. Esto significa que una miel cruda contendrá las formas vivas de esta bacteria probiótica que estimula el sistema inmune.

La existencia de este probiótico puede explicar por que la miel cruda no solo es inmunoestimulante, sino también antibiótico. Y se debe a que los probióticos segregan numerosos compuestos naturales para eliminar las bacterias que amenazan sus territorios.

Por otro lado, la miel también contiene fitoquímicos del néctar de las plantas que estimulan el sistema inmunológico. De hecho, otras investigaciones demostraron que aquel procedente de plantas que estimulan la inmunidad (como las flores de Manuka) tiene más propiedades antimicrobianas que la miel de las abejas que cosechan plantas comunes.

Probióticos de las flores

Las abejas almacenan la miel como fuente de energía para el invierno, cuando teóricamente no tienen de que alimentarse. Pero las flores parece ser que proporcionan algo más que el polen y el néctar: también proporcionan las bacterias imprescindibles para el almacenamiento y la protección de la miel.

Una abeja sana produce miel mezclando el néctar de las flores con su saliva, regurgitándola a continuación e intercambiándola colectivamente con otras abejas (trofalaxia). Este proceso mezcla el polen y el néctar con las bacterias probióticas de sus jugos digestivos, protegiéndolas así contra enfermedades. Sin embargo, esta protección no solo proviene de los jugos digestivos, sino también de las bacterias probióticas que albergan las abejas. ¿De donde sacan esta bacteria?

Varios investigadores de la Stellenbosch University, en Sudáfrica, estudiaron numerosas cepas de L. kunkeei, recolectadas de flores, miel y de la producción de vino. La parte llamativa del estudio es que las flores se analizaron recogidas en fresco, directamente de la planta. En otras palabras, se descubrió que la bacteria L. kunkeei tiene una relación simbiótica no solo con las abejas y por lo tanto con los humanos, sino también con las flores, que por medio del néctar, proporcionan bacterias a las abejas.

Las bacterias probióticas ofrecen numerosos beneficios a sus huéspedes. Estos incluyen proporcionar una función antibiótica directa, ayudar y estimular el sistema inmunológico, y proporcionar enzimas para la digestión junto con otros productos químicos utilizados por el metabolismo del huésped.

Esta investigación sobre las bacterias presentes en las abejas demuestra que la bacteria L. kunkeei proporciona actividad probiótica a las flores que contienen néctar. Y esto significa que las abejas no solo están recolectando el néctar y el polen de las flores: también están recolectando estas bacterias beneficiosas, que proporcionan servicios probióticos a la colmena.

Transmisión de los probióticos de la miel a los seres humanos

En el néctar pecoreado por la abeja melífera, los beneficios probióticos proporcionados por la bacteria L. kunkeei se transmiten entonces a los seres humanos que cosechan la miel almacenada en la colmena. Y por supuesto a los que comen esas mieles crudas, sin calentar ni filtrar.

Al igual que otras bacterias probióticas, estas bacterias producen ácido láctico y ácido acético, los cuales ayudan al pH correcto de nuestros tractos intestinales. Estos ácidos también crean un ambiente que ayuda a prevenir el crecimiento de muchos tipos de bacterias patógenas y de levaduras.

Miel cruda y azúcar en sangre

Los probióticos nos ayudan a digerir y procesar nuestros alimentos y L. kunkeei también puede realizar esta función. Los investigadores de la Universidad de Stellenbosch encontraron que la bacteria L. kunkeei se alimenta del complejo D-fructosa, que proporcionan los néctares de flores y las mieles. Este hecho revela el beneficio de comer miel cruda y por lo menos una razón por la que la miel es una de las formas más saludables de edulcorantes en términos de control del azúcar en la sangre.

Los probióticos mejoran la respuesta fructosa/glucosa

El hecho de que estas bacterias se alimenten de la fructosa significa que también descomponen la fructosa que puede ser responsable, en sus formas puras, de aumentar nuestro nivel de azúcar en la sangre.

En otras investigaciones se demostró que la fructosa de la fruta cruda contiene fibras complejas que ayudan a prevenir la aparición de la fructosa en la sangre. Este proceso se ve retrasado aún más por los probióticos intestinales que se alimentan de la fructosa, rompiendo así estas cadenas de polisacáridos en componentes sanos como los ácidos lácticos y los ácidos acéticos.

Pero la miel proporciona otro nivel por enzima de esto (siempre que se consuma miel cruda, no procesada): entrega los probióticos que reducen la absorción de fructosa. Esto también proporciona el eslabón perdido que demuestra que la suplementación probiótica mejora la respuesta fructosa/glucosa.

Un artículo de José Castro, apiterapeuta de www.apiterapia.center

 

Comienza el programa de formación de la Asociación Gallega de Apicultura con un curso básico de apicultura en A Cañiza

APICULTURA_AGA_ASOREY_2_standarLa Asociación Gallega de Apicultura AGA comienza su programa de formación esta primavera con un curso básico de apicultura en A Cañiza, los días 7 y 8 de abril. Este curso va dirigido a personas que quieran iniciarse en el interesante mundo de las abejas y también para las que ya tienen colmenas pero necesiten actualizar conocimientos. El programa general de AGA incluye un total de 12 cursos básicos que serán impartidos por toda Galicia durante esta primavera.

Como todos los años La Asociación Gallega de Apicultura ponen en marcha en primavera un amplio programa de formación apícola, que incluye jornadas y cursos por toda la geografía gallega. El programa está estructurado en tres grandes bloques: cursos básicos, de especialización y formación de las delegaciones comarcales.

El primero de los cursos básicos tendrá lugar en el ayuntamiento de A Cañiza los días 7 y 8 de abril. Este curso, de 12 horas de duración, incluye una parte teórica, en la que se tratarán temas como la biología de las abejas y el manejo de las colmenas. También se informará sobre cómo cuidar la salud de la colmena, entre otras cosas técnicas para hacer frente al ataque del tártago asiático (Vespa velutina), sin que se vea perjudicada la supervivencia de las abejas y su producción.

Se hablará también sobre la apicultura como una actividad multifuncional que aporta muchos beneficios, desde su valor medioambiental con la labor polinizadora de las abejas hasta la obtención de sus saludables productos. La producción de la colmena puede dirigirse al autoconsumo pero también puede tener un fin profesional y destinar los productos a la venta comercial. El curso también tendrá una parte práctica, con la visita a un apiario.

El programa completo de los cursos e información sobre las inscripciones en la web www.apiculturagalega.es, en el e-mail [email protected] o en el teléfono 981 508 142.

4 ideas sobre “Los probióticos en la miel natural: ¿una fuente de salud?

  1. La Ciudad Perdida

    ¡Muy buenas consideraciones sobre la ingesta de miel natural!
    Sin duda, se trata de un alimento de exquisito sabor y una amplia gama de beneficios para la salud. En https://laciudadperdida.net/ recomendamos su añadido en cualquier dieta de manera considerada. Eso sí, apostando siempre por variantes naturales. Gracias a ellas conseguirás unos hábitos de vida saludables.
    ¡Un saludo!

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  2. José Ignacio Espinosa Palmett

    Extraordinario artículo, importante. Mi familia tiene el negocio de la apicultura en Colombia en el Municipio de Corozal departamento de Sucre. Actualmente yo la comercializo en ciudad de Cartagena departamento de Bolívar. Miel natural cruda.
    Ya conocía algunas propiedades de la miel pero sin duda es una excelente investigación que aporta conocimiento a los apicultores del planeta.
    Atentamente
    Lic. Biología y Educación Ambiental
    Administrador Agricola y Pecuario

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