Un hijo de la conselleira do Mar, Rosa Quintana, que tiene 21 años y cursa una carrera universitaria en Santiago, fue beneficiario de una subvención concedida por Medio Rural en diciembre para una explotación ganadera de Ordes, según una información publicada por el periódico Economía Digital. El beneficiario, Marcos Luis Ortega Quintana, habría renunciado posteriormente a esa ayuda, según señala la Consellería de Medio Rural.
El asunto originó hoy una polémica política, con acusaciones del PsdeG de trato de favor por parte de la Xunta al hijo de la conselleira do Mar. Desde la Consellería do Medio Rural, publicaron esta tarde una nota de prensa en la que dicen desmentir el supuesto trato de favor al hijo de la conselleira do Mar: “La Consellería de Medio Rural quiere desmentir las graves acusaciones vertidas en el día de hoy por un partido político -en alusión al PsdeG- sobre este departamento al respecto del reparto de ayudas de la convocatoria para inversiones en explotaciones agrícolas, para la creación de empresas para agricultores jóvenes y para la creación de empresas para el desarrollo de pequeñas explotaciones”.
El hijo de Rosa Quintana había visto aprobada su solicitud para la creación de una empresa para desarrollar una pequeña explotación, una línea que cuenta con una aportación estándar de 15.000 euros por beneficiario. “Esta subvención para el desarrollo de pequeñas explotaciones -detalla la Consellería- se concede a las personas que sean ya titulares de una pequeña empresa agraria, inscrita en el registro de explotaciones agrarias de Galicia y que tenga por objetivo poner en marcha un nuevo plan empresarial que permita mejorar esa compañía existente. En el caso que nos ocupa, el solicitante cumplía con todos los requisitos y, como el resto de demandantes que los cumplían (un total de 154), se le concedió una ayuda de 15.000 euros a la que finalmente renunció”.
Medio Rural mantiene que “estamos hablando de una solicitud de ayuda a la que el propio beneficiario renunció por cuestiones ajenas al cumplimiento de las condiciones de la subvención, a pesar de cumplir estrictamente con todas y cada una de ellas, haber acreditado su solicitud para el desarrollo de una actividad en la que lleva trabajando varios años y a pesar de tener todo el derecho a pedirla como cualquier ciudadano”.