“El Pago por Resultados de Conservación a las Comunidades de Montes puede ser el futuro para las personas que desarrollan sus actividades ganaderas en zonas naturales protegidas de Galicia, como la Red Natura 2000, y a las que se les reconoce un papel fundamental en su conservación”.
Esta es una de las conclusiones más destacadas del Informe Layman, un documento recientemente publicado y que pasa revista al proyecto LIFE in Common Land: Gestión en común de la tierra, un modelo sostenible de conservación y desarrollo rural en Zonas Especiales de Conservación.
Esta iniciativa, cofinanciada por LIFE Naturaleza y Biodiversidad de la Unión Europea, se desarrolló en once Montes Vecinales en Mano Común del Espacio Red Natura 2000 Serra do Xistral que ocupan unas 11.000 hectáreas. La iniciativa está coordinada por la Deputación de Lugo y participan como socios la Universidade de Santiago de Compostela y la Universidade da Coruña.
Científicos gallegos determinan que el Modelo de Gestión por Resultados de Conservación, ya implementado en montes del norte de Lugo, “puede ser el futuro para los comuneros de los espacios protegidos de Galicia”
El Informe Layman detalla los trabajos y resultados obtenidos a través de la colaboración entre los agentes implicados en la conservación del Espacio Red Natura 2000 Serra do Xistral, ubicada en el norte de Lugo. El trabajo también alerta del riesgo de extinción del ecosistema.
Y lanza un urgente SOS: “Conservar para las generaciones futuras hábitats tan importantes como las turberas y brezales húmedos de la Serra do Xistral requiere de una apuesta urgente por la gestión comunal, los sistemas tradicionales de ganadería y los caballos salvajes”.
300.000 euros en pagos efectuados según los resultados de conservación
El proyecto LIFE in Common Land desarrollado en Galicia apuesta por el innovador Modelo de Gestión por Resultados de Conservación, que se aplica en el territorio a través de Proyectos de Ordenación Forestal de los Montes y que trata de integrar las actividades ganaderas y el manejo tradicional de los caballos salvajes con la conservación de hábitats.
Este modelo incluye la protección y conservación del ecosistema en la gestión que las Comunidades de Montes realizan en sus terrenos. “Y no lo hacen como algo impuesto, sino poniendo en valor y reconociendo la función que los caballos y el ganado vacuno cumplen para mantener estos espacios de montaña en Galicia”, destacan los autores del informe, que estima que en la Serra do Xistral existe una población de entre 1.500 y 2.000 caballos salvajes.
La Serra do Xistral mantiene una población de entre 1.500 y 2.000 caballos salvajes
El novedoso Modelo de Gestión a través de Pago por Resultados de Conservación se ha implementado en las Comunidades de Montes de la Serra do Xistral con una cantidad económica recibida que alcanzó los 300.000 euros y representa “un cambio de cara al futuro”. «Estos pagos pueden ser el futuro para estas personas que desarrollan sus actividades ganaderas en zonas protegidas y a las que se les reconoce un papel fundamental en su conservación”, indica el informe realizado, que incluye 54 encuestas y 32 entrevistas a comuneros y besteiros. El pago se realizó en función de la superficie y estado de conservación de los hábitats objeto del proyecto: turberas de cobertor, turberas altas activas y brezales húmedos atlánticos.
Un modelo habitual en Europa
El Pago por Resultados de Conservación es un modelo exitoso en otras zonas de Europa. El programa Burren en Irlanda “es sin duda el ejemplo más notable”, comentan los autores del Informe Layman. La filosofía de esta herramienta es clara y sencilla: “Los comuneros no solo producen alimentos, sino que también garantizan la biodiversidad de los hábitats que gestionan y reciben un pago por ello”.
El programa Burren en Irlanda sería uno de los ejemplos más destacados
“De ganaderos a guardianes de la biodiversidad, un nuevo rol valorado por la sociedad y por el cual recibirán un pago”, reiteran los autores del Informe Layman, que consideran que supondría “un cambio en la valoración de la Red Natural 2000, de limitaciones a un patrimonio natural que los propios comuneros conservan a través de su propia actividad”.
La implantación de esta herramienta en otras zonas de Europa generó y desarrolló marcas de bienes y productos de agricultura y ganadería asociados a la conservación de la biodiversidad. Por ejemplo: carne, productos lácteos, miel, vinos o sidra.
Dar continuidad a los pagos a través de la PAC
El Informe Layman cree que está pendiente una última fase que consideran “necesaria” y que, a su vez, que reclaman también las Comunidades de Montes participantes en esta iniciativa que cuenta con el respaldo financiero de la UE: “Dar viabilidad y continuidad a este sistema de pagos por medio de los Planes Estratégicos de la Política Agracia Común (PAC)”.
El Modelo de Gestión por Resultados de Conservación de hábitats de LIFE in Common Land “se convertiría así en una opción de futuro para las personas que van a seguir habitando y conservando la Serra do Xistral y otras zonas de la Red Natural 2000 en Galicia”, aseguran.
El ‘Informe Layman’, que pasa revista al proyecto ‘LIFE in Common Land’, plantea un último reto: implementar nuevas herramientas de gestión y restauración de hábitats que impliquen a la población local
LIFE in Common Land realizó también acciones de mejora y restauración de hábitats. Los técnicos del proyecto destacan con orgullo su actuación estrella: la eliminación de pinares para la restauración de turberas de cobertor. “Lo importante es hacer ver a los ganaderos que trabajan en estos montes que restaurando hábitats ganamos todos”, asegura el equipo de investigadores, que recurrió a técnicas tradicionales para la saca de madera, usando animales de tiro.
«Los hábitats sensibles de las turberas tienen la propiedad de capturar el carbono que se libera a la atmósfera, pero actualmente se encuentran en riesgo”, concluye el Informe Layman, que propone “implementar nuevas herramientas de gestión, legislativas y proyectos de restauración” para proteger estos ecosistemas.