SAT Arenas: La ganadería líder de Cantabria en producción y pionera en robotizar la alimentación

Eduardo Entrecanales y Alfonso de la Fuente son los propietarios de SAT Arenas, una ganadería cántabra innovadora que ha logrado situarse como líder regional en producción, con una media de 13.900 litros a 305 días por lactación. Han sido también los primeros de España en incorporar el robot de alimentación Lely Vector

SAT Arenas: La ganadería líder de Cantabria en producción y pionera en robotizar la alimentación

Alfonso de la Fuente y Eduardo Entrecanales ante el Lely Vector que han instalado en SAT Arenas

La ganadería cántabra SAT Arenas ha logrado convertirse en los últimos años en un referente en innovación y buena gestión en vacuno de leche, no solamente en Cantabria sino a nivel español.

Propiedad de dos ganaderos socios, Eduardo Entrecanales y Alfonso de la Fuente, esta explotación con 122 vacas en ordeño, ha acometido en los últimos años importantes mejoras en bienestar animal, manejo de cultivos y robotización que le han permitido situarse como líder en producción en Cantabria, con una media de 13.900 litros por vaca y lactación normalizada a 305 días, una longevidad media de 4 partos por animal y solamente un 18% de reposición.

Situada en el municipio cántabro de Camargo y socia de la cooperativa Agrocantabria, la historia de SAT Arenas se remonta varias generaciones atrás. “Mi abuelo, Gerardo Entrecanales empezó con la ganadería, y ya en los años 50 ordeñaba 30 vacas. Luego cogió el relevo mi padre, Tino Entrecanales, que aumentó el rebaño, instaló el circuíto de ordeño y posteriormente una sala de 5×2 puntos”, explica Eduardo, que se incorporó a la ganadería familiar en 2003 mientras estudiaba empresariales.

“Fue en ese año cuando creamos la sociedad formada por mi, Alfonso de la Fuente, otro joven ganadero de Escobedo; mi padre tino, hoy fallecido, y mi madre Bea, siendo Alfonso y yo ganaderos a título principal. Fuimos creciendo y pasamos a una media de 100 vacas en ordeño, hasta el año 2010 cuando decicimos instalar dos robots de ordeño, modelo Lely A3, y aumentamos hasta 122 vacas en producción”, añade.

Hasta hace poco esta granja de 122 vacas en ordeño y 1,8 millones de litros de producción, era atendida únicamente por los dos socios. “Hace dos años contratamos a Tino, un estudiante que hizo aquí las prácticas del curso de agropecuaria de Centro Integrado de Formación Profesional La Granja, con la idea de coger más tiempo libre”, explica Eduardo. Esto les ha permido librar 1,5 días a la semana y disfrutar de unos 20 días de vacaciones al año.

Producción media y ración

En la actualidad SAT Arenas produce algo más de 1,8 millones de litros de leche al año, con unas calidades del 3,79% de grasa y 3,32 de proteína en lo que llevamos de año.

La media de producción por vaca es de 13.900 litros a 305 días a 3 ordeños, lo que la convierte desde hace tres años en la más productiva de Cantabria. Pero más que esos datos, Eduardo Entrecanales destaca las lactaciones vitalicias, “pues estamos de media en algo más de 60.000 litros por vaca”. “Incluso tenemos 8 vacas presentes con más de 100.000 quilos de producción vitalícia y varias con más de 90.000 kilos. Es decir, contamos con muchas vacas con más de 30 kilos por día de vida, lo que es el dato importante, e incluso tenemos una vaca con 5 partos que ha llegado a los 37,5 kilos producidos por día de vida. En definitiva, estamos logrando una producción eficiente”, subraya.

Para lograr estas producciones la alimentación del ganado se compone de la siguiente ración: Las vacas en producción reciben 27 kg de silo de maíz, 18 kg de silo de raigrás, 1,2 kg de paja picada de trigo y cebada, 7 kg de pienso y en robot entre 7 y 7,5 kilos de pienso, en función de la época del año y momento de la lactación.

“Como contamos con robot, que da el pienso en función de la producción de cada vaca, hay una ración base y otra personalizada. El pienso del robot no se varía nunca y es más energético; el que si cambia es el pienso del pesebre, en función de las calidades del forraje”, precisa. Para mejorar las calidades de la leche han empezado a añadir metionina en la ración, lo que les ha permitido pasar de 3,15 de proteína y 3,5 de grasa a 3,79 de grasa y entre 3,20 y 3,32 de proteína.

Genética y bienestar animal

Junto a la alimentación, otra de las claves de SAT Arenas para mejorar la rentabilidad es la selección genética. “Buscamos una vaca balanceada, por lo que a la hora de elegir los toros tenemos en cuenta el tipo, que tenga buenas ubres y patas, producción alta, sólidos por encima de la media y todos los caracteres de salud (longevidad, fertilidad hijas, RCS por debajo del promedio)”, explica este ganadero.

Desde 2013 también genotipan todas las terneras para recriar únicamente los animales de mayor potencial genético. “La genónomica nos ayuda a tomar decisiones de que vacas criar y de cuales no y a las mejores les sacamos embriones. Estamos satisfechos con los resultados, y de hecho llevamos 3 años siendo los primeros de Cantabria en índices genéticos en ganaderías con más de 75 reproductoras”, destaca.

En las vacas de menor valor inseminan con razas cárnicas. Así, entre 35 y 40% de las vacas en producción son fecundadas con semen de Azul Belga, buscando toros con facilidad de parto.

Gracias a la mejora en los datos de longevidad la tasa de reposición de SAT Arenas ha bajado hasta el 18%. En cuanto a la recría desde al año 2005 la envían a Rancho Las Nieves, en Zaragoza, por problemas de espacio en el establo y de mano de obra. “Estamos contentos, porque nos quita bastante trabajo y las novillas vienen muy bien criadas”, valora.

Pero sin duda, un aspecto fundamental para incrementar los datos productivos y de longevidad de esta ganadería ha sido la mejora en bienestar animal. Así, recuerda que “en 2008 ampliamos el establo y las vacas pasaron de estar en colchoneta a cubículos de arena, y sólo con esa mejora ya notamos entre 4 y 5 litros más de leche cada día y un descenso en las células somáticas”.

Otras mejoras de bienestar han sido la instalación de ventiladores de helicóptero y el derribo de las paredes de bloque para mejorar la ventilación de la nave. Para ello, instalaron portones de chapa microperforada que permanecen abiertos todo el tiempo, menos cuando llueve o cuando el sol da en el pesebre.
También han instalado suelo de goma en toda la nave, tanto en pasillo de cornadiza como en pasillo de acceso al robot para mejorar el confort de patas.

Además, destaca que “la instalación del robot de ordeño también ha supuesto otra mejora importante para el bienestar animal, además de permitirnos mejorar la longevidad y pasar de 35 litros de producción a un media de 42”.

Manejo de la base territorial

Por lo que respecta a la gestión de la base territorial, en SAT Arenas cuentan con 46 hectáreas de superficie repartidas en varias fincas en un radio de 2 kilómetros alrededor del establo. 3 hectáreas son en propiedad y el resto en alquiler. “Aquí han ido cerrando muchas ganaderías y quedamos solamente 5, pero el terreo es justo y no hay muchas posibilidades de aumentar”, reconoce Eduardo.

Tino, Eduardo e Alfonso diante dun dos dous robots de muxido cos que contan

Tino, Eduardo y Alfonso ante uno de los dos robots de ordeño con los que cuentan

En 28 hectáreas siembran maíz, normalmente un ciclo 300 o 350, del que en los últimos años han logrado buenas producciones, con una media de 50 toneladas de materia húmeda por hectárea. Han probado también a sembrar ciclos 500 y 600, sobre todo en parcelas a barbecho, llegando a las 60 toneladas por hectárea.

En la elección de la variedad priman la digestibilidad, aunque pierdan en porcentaje de almidón, que se stiúa en una media de entre el 30 y el 32%, con un 30% de materia seca.

En el resto de la superficie se reparte del siguiente modo: en 22 hectáreas rotan el maíz con raigrás italiano, 4 hectáreas están a barbecho, en 3 cultivan alfalfa y el resto, unas 15 hectáreas, son praderas permanentes de raigrás inglés o praderas naturales.

“Decidimos realizar un ensayo con la alfalfa y estamos consiguiendo buenas calidades, con entre un 17 y un 20% de proteína, y unos 6 cortes. El problema que le vemos es que complica el manejo, porque tenemos que hacer bólas, y si les das mucha a las vacas baja la ingesta, pues les resulta menos palatable. La ventaja es que con la alfalfa ese terreno se oxigena mas y se fija nitrógeno, con lo que si después de 4 años decidimos sembrar maíz los resultados productivos deberían ser buenos”, explica Eduardo.

Otro ensayo que han realizado es el añadido de bacterias a la fosa de purín para reducir las emisiones amoniacales. “Llevamos poco tiempo, y si que es cierto que los malos olores han bajado mucho. En cuanto a la mejora en la capacidad fertilizante del purín aún no podemos dar datos”, asegura.

Donde si cuentan con resultados fiables en con PROFER, el programa de fertilización a la carta de la cooperativa DELAGRO. “Empezamos hace 4 años: Primero los técnicos analizaron el terreo, luego formularon un abono químico adaptado a las necesidades de cada parcela y la verdad es que durante los últimos tres años hemos logrado cosechas de maíz muy buenas, ayudados también por la climatología, pues llovió cuando debía para el desarrollo de la planta”, reconoce este ganadero.

Pioneros en España en instalar el Lely Vector

SAT Arenas también es la explotación de vacuno de leche donde se ha instalado el primer Lely Vector en España, el sistema automatizado de alimentación, que se ha sumado a los dos robot de ordeño Lely Astronaut A3 con los que cuenta desde hace una década.

Entre sus ventajas destaca “el ahorro en gasoil, ya que consume entre 2,5 y 3 euros al día de electricidad; los animales disponen de alimento fresco 10 veces al día según demanda, así como que el almacenamiento de la comida se realiza cada tres días, los lunes, miércoles y viernes, con lo que hemos reducido nuestro tiempo de trabajo”. El vector realiza la mezcla, la distribuye en la cornadiza, y la arrima cuando es necesario.

Además, Eduardo Entrecanales valora que “la eficiencia es absoluta, ya que con este suministro frecuente de comida las vacas consumen un 4% menos de alimento, pero producen un 3% más de leche, con una media de 41/42 litros por vaca y día”.

Antes de comprarlo para substituír al carro mezclador arrastrado, en SAT Arenas realizaron una visita a varias ganaderías de Italia que constaban con este sistema de alimentación robotizado. “Teníamos miedo de que se calentasen los tacos de la comida, sobre todo los de forraje, pero vemos que están frescos, a pesar de llevar varios días. Otro temor era que se parara la máquina a menudo, pero hemos visto que funciona sin interrupciones”, afirma.

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