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Mari Carmen Gayoso representa la tercera generación de Maderas Gayoso. Hace cuatro años decidió dar continuidad a la empresa familiar, con sede en la parroquia de Nete, en Vilalba, y centrada en la explotación forestal y en el aserrado de madera de castaño para construcción.
Después de estudiar Ciencias del Mar, Mari Carmen se especializó en aspectos como el medio ambiente o la prevención de riesgos laborales, lo que la llevó a trabajar en grandes empresas como Citroën en Vigo o Alcoa en San Cibrao.
Pero en el año 2018 decidió trasladar todo ese bagaje a la empresa fundada por su abuelo Alejandro y continuada por su padre, Juan Pablo. En la actualidad en el aserradero procesan unos 3.500 metros cúbicos de castaño al año y tienen en mente ampliar las instalaciones y sumar nuevos procesos de segunda transformación a una madera de alto valor y demanda creciente.
No somos muchas las empresas en Galicia especializadas en castaño y por eso queremos dar más valor al producto final
– Como muchas empresas del sector forestal en Galicia, la vuestra es una empresa familiar. Cuéntanos cuál es la historia de Maderas Gayoso.
– La empresa nació hace 45 años. Empezó mi abuelo con una pequeña empresa de tala de madera. Luego continuó mi padre, Juan Pablo, que hace unos 18 años construyó un aserradero para darle valor a la madera de castaño que cortaba en el monte. Así que yo son ya la tercera generación.
– ¿Cuándo te decidiste a dar continuidad a la empresa y por qué?
– Mis raíces nacieron en el sector forestal y llegó un momento en el que quise poner en valor todo ese esfuerzo que hizo mi familia en esos más de 40 años y por eso decidí romper con mi trayectoria profesional para continuarla aquí.
Yo soy licenciada en Ciencias del Mar pero tomé la decisión de continuar con el negocio familiar y pienso que fue una decisión totalmente acertada
Yo soy licenciada en Ciencias del Mar y me especialicé en medio ambiente y prevención de riesgos laborales, lo que me llevó a trabajar en grandes empresas como Citroën o Alcoa, pero hace 4 años, en el 2018, tomé la decisión de venirme para aquí, y pienso que fue una decisión totalmente acertada. Detrás de esa decisión hay una parte sentimental y otra de responsabilidad.
– ¿Qué crees que aporta la visión de una mujer a una empresa forestal?
– Hoy la mujer en el sector forestal afortunadamente está cogiendo mucha fuerza. Siempre se asoció el sector forestal a los hombres pero ahora se está viendo con ejemplos variados que no solo hay presencia femenina en la gerencia y en la gestión de las empresas, sino que hay también operarias de aserradero, maquinistas o motosierristas mujeres, personas que están rompiendo esos estereotipos y poniendo en firme que la mujer puede trabajar igual que cualquier otra persona en el sector forestal, en igualdad de condiciones y de responsabilidades, como vemos en los encuentros de #ElasXeranSector.
La mujer está rompiendo estereotipos y demostrando su valor en el sector forestal
– ¿Cuáles son las actividades principales de Maderas Gayoso?
– Tenemos por un lado la explotación de madera en pie, donde en esta zona lo que cortamos sobre todo es pino, entre un 60 y un 70%, y entre un 15 y un 20% frondosas autóctonas, sobre todo castaño y roble. El resto sería eucalipto. Y por otra parte tenemos el aserradero, que está centrado en la transformación del castaño. Consumimos alrededor de 3.500 metros cúbicos de castaño al año.
Cortamos todo tipo de especies pero serramos sobre todo castaño. En total somos 12 personas entre aserradero y monte, sin contar con las empresas subcontratadas
– ¿El hecho de cerrar vosotros mismos todo el proceso os hace más competitivos?
– Hacer todo el proceso nos sirve para acortar plazos, abaratar costes y dar un mejor servicio a nuestros clientes. Al tener explotación forestal optimizamos mucho más todo el proceso. Nosotros lo hacemos todo desde la corta en el monte hasta la entrega del producto al cliente final. Tenemos equipos en el monte, cortamos todo tipo de especies, pero el castaño que cortamos ya lo traemos directamente para nuestro aserradero, además de recibir también madera de otros proveedores.
– ¿Quiénes son vuestros clientes principales?
– El principal destino de nuestra producción es la construcción, tanto restauración como obra nueva, desde madera estructural, tejados, suelos, carpinterías o mobiliario. Mandamos a toda Galicia y algo también para fuera, pero más del 50% de nuestros clientes están en la zona de A Terra Chá.
Alguna cosa ya estamos haciendo para fuera de España, pero es un mercado difícil porque competimos con otros productores a nivel europeo como Francia e Italia
Por ahora lo único que hacemos es el proceso de aserrado, con distintos grosores y acabados, tanto a cuanto vivo como acabado rústico. Es un producto final muy personalizado, sobre pedido y ajustado a las necesidades del cliente. El castaño se basa más en dar un acabado de calidad porque estamos hablando de un producto noble. De cara al futuro nuestra idea es dar un mayor valor añadido desde el origen al consumidor final avanzando en procesos de segunda transformación.
“Buscamos una sostenibilidad del monte a largo plazo, que garantice una función social y ambiental al mismo tiempo que materia prima de calidad”
Mari Carmen Gayoso, en una finca de castaños de su propiedad
En su formación, Mari Carmen se especializó en temas relacionados con el medio ambiente y esa concienciación la está trasladando a la filosofía de trabajo de Maderas Gayoso. “Buscamos una sostenibilidad del monte a largo plazo, que garantice una función social y ambiental al mismo tiempo que materia prima de calidad”, dice.
– En el monte en Galicia especies como el eucalipto han ido ganando terreno en las últimas décadas. ¿Os es difícil ya encontrar madera de castaño en Galicia?
– Por el momento nosotros no notamos esa falta de suministro para abastecer nuestra producción, pero tenemos que trabajar en el campo de la silvicultura para que a largo plazo podamos asegurar el suministro y conseguir madera de calidad aquí en Galicia.
Una de las dificultades que tenemos en el sector del castaño es la falta de cuidados a los árboles, pero si se hace selvicultura podremos obtener madera de calidad en Galicia
El castaño es una especie con alto valor y si se hace silvicultura podremos conseguir madera de calidad en Galicia. Es cierto que a veces tenemos que recurrir a suministrarnos en otros países, como puede ser Francia, para conseguir producto de mayor calidad. Allí hacen selvicultura y obtienen fustes limpios, rectos y de mayor longitud.
– ¿Puede ser rentable producir madera de frondosa?
– Por supuesto, seguramente tanto o más que otras especies, pero el retorno no es tan rápido, en el caso del castaño hay que irse a turnos de corta de unos 40 años y apostar por la selvicultura. Hoy en día el castaño es una especie que está reconocida por su valor en el cliente final pero el problema que tenemos es la falta de cuidados en el monte por parte de los propietarios.
No queremos que el castaño quede relegado a un segundo plano en los montes, puede ser una especie tan rentable como otras
Una plantación de castaño no puede ser vista solo como producción de madera en exclusiva, sino que también se saca rendimiento con la producción de castaña de forma anual, así como el aprovechamiento micológico asociado. Por otra parte, la madera de castaño es muy estable y resistente, no requiere tratamientos específicos para su uso.
Nosotros estamos tratando de fomentar la sostenibilidad del sistema, en el monte y en la cadena de valor, incluso promoviendo que donde hoy hay madera de castaño se continúe con ella o con otras especies frondosas autóctonas para alargar en el tiempo la cadena de valor y evitar que estos cultivos queden relegados.
Promovemos que donde hoy hay castaño se vuelva a plantar castaño para alargar en el tiempo la cadena de valor
– ¿Crees que se debería potenciar más la diversidad productiva de los montes en Galicia?
– Galicia tiene mucha extensión a nivel forestal, por lo tanto yo creo que hay cabida para todas las especies. Afortunadamente el sector forestal está en auge y cualquiera de las especies tiene valor y mucho futuro. Tenemos un sector muy dinámico, desde las plantaciones a los clientes finales, por lo tanto yo creo que hay superficie para todas las especies.
