Una ganadería centrada en lograr animales campeones, reconocidos por su genética

En la granja Schweighofer, en la región austríaca de Estiria, llevan más de 10 años consiguiendo animales destacados por su genética y producciones. Con un rebaño de poco más de 100 animales, sus vacas son habituales en los podios de los certámenes y sus toros se encuentran entre los mejores sementales del país

Una ganadería centrada en lograr animales campeones, reconocidos por su genética

Johann y Hannes, están considerados como unos de los mejores criadores de la raza Fleckvieh en el país.

La ganadería Schweighofer, situada en la localidad de Pöllau, en la región austríaca de Estiria, es un referente en la genética de la raza Fleckvieh. Con una granja en intensivo de poco más de 100 animales, han criado algunas de las vacas más destacadas en los certámenes, tanto nacionales como internacionales, además de importantes sementales, que se utilizan en las ganaderías de todo el país.

A finales del pasado año, un grupo de ganaderos gallegos, participantes en el Agrotour organizado por Genetic Austria GmbH, conocieron de primera mano algunos de los ejemplares destacados de la ganadería, así como el manejo que tanto los jóvenes Corina y Hannes, como sus padres, Johann y Elisabeth, realizan. Hannes es la tercera generación al frente de la ganadería y continua la apuesta por la buena genética de los animales, iniciada por su padre en su juventud.

“Somos unos apasionados de la genética y de los certámenes”

El entusiasmo por la genética queda patente desde el primer momento que se llega a la granja, así como sus buenos resultados. Como es habitual en la ganaderías austríacas, buena parte de las menciones de sus éxitos figuran en una zona principal y visible de la ganadería, como la puerta de acceso al tanque de la leche, y en este caso ocupan buena parte de la pared de este espacio. “Somos unos apasionados de la genética y de los certámenes de ganado”, reconoce Hannes ante el resto de ganaderos.

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Algunos de los premios que los animales de la ganadería han cosechado en estos años.

Al margen de su afán por conseguir animales genéticamente interesantes y rentables, esta familia ganadera reivindica tanto su profesión como la implicación con su rebaño. “Si quieres vivir de las vacas, debes convivir con ellas”, apunta Hannes. La mejora genética de sus animales le ha abierto las puertas hacia la comercialización a distintas partes del mundo tanto de embriones como de recría y sementales.

La línea Z

Los primeros resultados que evidencian el trabajo de años de mejora genética y selección de animales llegaron en 2008, que marcó el inicio de una crianza de animales campeones. La vaca Zita, destacada ese año como Campeona Madre de toro en la Exhibición Nacional, inició el camino de la que hoy se conoce como la línea Z.

La vaca Zita fue la primera de una estela de animales campeones que los sitúan en la élite de los criadores de la raza Fleckvieh desde 2008

Bajo esta distinción se incluyen todas sus hijas, con nombres que comienzan también por esa letra y que siguen obteniendo importantes resultados, tanto por su producción como por su condición corporal, dos de los pilares fundamentales de esta raza.

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Algunas de estas vacas fueron premiadas en el certamen nacional y sitúan a la granja entre los mejores criadores.

A lo largo de los últimos años, además de las descendientes de Zita, como Zierde o Zeta, otras cinco vacas de la granja se han colocado entre los puestos destacados de los campeonatos y exhibiciones de la región, así como a nivel estatal.

En Austria, los ganaderos reciben asesoramiento en materia de mejora genética a través de la Asociación Ganadera de cada región. En este caso, la ganadería pertenece a la asociación Rinderzucht Steiermark, que junto con la Noe Genetik de la Baja Austria, son propietarios del centro de inseminación Genostar Rinderbesamung. Este centro de inseminación es también uno de los principales propietarios de Genetic Austria, encargada de la exportación de la raza. Precisamente, tal y como reconocía el ganadero este puente internacional y su fama como criador les ha permitido exportar muchos de sus embriones por todo el planeta.

Altas producciones sin perder la condición corporal

Algunos de los animales más destacados de la ganadería dan buena cuenta de las cualidades y el potencial de la raza también para la producción de leche. Las Fleckvieh son conocidas por ser vacas de doble propósito, con unas cifras de producción de leche competitivas con otras razas leches, pero que permiten un aprovechamiento también cárnico, por su buena capacidad corporal. Entre las producciones que se manejan en la granja se encuentra por ejemplo la vaca Zierde, que encara su sexta lactación con una media de 12.000 litros a 305 días.

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La raza Fleckvieh es de doble propósito, pensada para la producción láctea y el aprovechamiento cárnico.

Hay también otros ejemplares que han logrado ya primeras lactaciones de 13.000 litros para luego subir a los 14.000 litros en la segunda. Hay que tener en cuenta que la raza Fleckvieh se caracteriza por expresar su verdadero potencial productivo a partir de la tercera o cuarta lactancia y llegan a superar las 10 lactaciones. Así, la ganadería cuenta ya con 3 animales que han superado los 100.000 kilos de rendimiento total.

“Estos animales muestran el potencial de la raza, pero no es lo que se busca como objetivo de cría”, explica Alexander Manrique, de Genetic Austria

“Estos animales muestran el potencial de la raza pero no es lo que se está buscando como objetivo de cría. No queremos que nos ocurra como con otras razas especializadas solo en un producto, como las Holstein, que se centraron en incrementar la producción de leche y descuidaron la condición corporal del animal. Nosotros somos muy conscientes de que si no hay una buena condición corporal no se logra incrementar la producción”, apunta Alexander Manrique Gómez, responsable de ventas de Genetic Austria GmbH, que también participó en la visita.

La ganadería cuenta con 55 vacas en ordeño, de los 135 animales que contabiliza. La producción media en 2018 se cerró con 10.659 litros en 105 días en producción, con un recuento somático de 68.000 células y unas calidades de 3,89 en grasa y 3,45 en proteína.

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En la ganadería tienen un semental para la monta del rebaño.

Cría de sementales

Al margen de la producción de leche, uno de los pilares fundamentales de la ganadería es la venta de animales reproductores, tanto novillas en subasta, como la cría de sementales con un alto valor genético y genómico. “Hasta ahora estuvimos haciendo extracciones de embriones en vacas campeonas pero hemos comenzado también a hacerlas en aquellas que tienen un alto valor genómico”, concreta Hannes.

La ganadería busca conseguir entre 3 y 5 toros anualmente para el centro de inseminación, con un valor de entre 30.000 y 100.000 euros

De hecho, uno de los objetivos que se marcan en la ganadería con estas extracciones es conseguir de 3 a 5 toros al año que se destinen al centro de inseminación. Los precios de estos sementales pueden situarse entre los 30.000 y los 100.000 euros por animal dependiendo de sus características. Precisamente, procedente de la llamada Línea Z ya han conseguido 4 toros para el centro de inseminación Genostar.

Aumentar el establo por la recría

Junto a las vacas en producción, en la granja cuentan con un semental para la monta natural, además de 50 novillas y alrededor de 30 terneros de engorde. La apuesta por la transferencia de embriones les ha obligado también a incrementar el número de hembras y aumentar el establo para la recría, de manera que una parte del rebaño permanece en una nave aledaña que sirve también para almacenaje de los forrajes. Así, buena parte de la recría se encuentra en camas de paja o bien en pequeños grupos o en cubículos individuales.

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Las nuevas instalaciones son para la recría y el almacenaje de forrajes.

El resto del rebaño comparte el establo principal, que remodelaron entre 2002 y 2003, donde permanecen en estabulación libre. La ganadería maneja unas 71 hectáreas de terreno, 39 en propiedad y el resto alquilada. La mayor parte de estas tierras son pastizales permanentes, mientras 6 hectáreas son para cultivos forrajeros y otras 12 para cultivo de maíz. La ración está basada en silo de hierba y maíz, bagazo de cerveza, heno y pienso. Las 21 hectáreas restantes son bosques.

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