Agricultura y ganadería conviven en Monte Redondo (Leiria), donde se producen más de 3 millones de litros de leche al año y 150 millones de plantas para huerta. La explotación lechera y los invernaderos comparten espacio y aprovechan sinergias, como una planta de biometano en común.
El creador de las dos empresas es el ingeniero agrónomo Uziel de Carvalho, que hace 40 años comenzó en paralelo con las dos actividades. “En la familia no había tradición de animales y cuando terminé los estudios y una estancia formativa en Francia comencé con la granja con 25 vacas de leche. Tres años después empecé con los semilleros de plantas y desde entonces las dos actividades fueron creciendo a la par”, relata.
La explotación lechera está estabilizada en la actualidad, tras la instalación de robots de ordeño, alrededor de las 300 vacas en producción, que es también la capacidad forrajera con la que cuentan en la superficie agraria que gestionan, unas 160 hectáreas.
Las dos actividades, granja de leche y vivero hortícola, han ido creciendo a la par en estos 40 años
Tienen instalados actualmente 5 robots de ordeño y tienen previsto montar dos más hasta completar la capacidad total de las instalaciones, unas 320 vacas en producción. “No me interesa crecer más”, afirma Uziel.
Plantas y animales híbridos
Uziel de Carvalho es una persona formada y abierta a los cambios, y fue a finales de los años 90 el primer ganadero en Portugal en utilizar embriones sexados en su granja y más tarde también uno de los primeros en cruzar sus vacas frisonas, hace ya más de 10 años.
En ese momento la presión en contra era mucha y había que tener una fuerte personalidad para hacerlo. “Yo lo tenía claro, porque todas las semillas que compramos para el vivero son híbridas y esto era aplicar esa misma filosofía al ganado”, razona.
La granja de Uziel de Carvalho ya había sido en su día la primera de todo Portugal en utilizar embriones
“Buscábamos mejorar básicamente la resistencia a enfermedades y los problemas de patas, y obtener mayor valor de las vacas que van al matadero. Hace unos 15 años hicimos una visita a EEUU, a las primeras granjas que estaban implementando allí el sistema Procross de cruces, y me gustó lo que vi allí. Ese fue el motivo principal para replicarlo aquí en nuestra granja”, recuerda.
Semen sexado
Hasta el momento en esta granja inseminaban a la mayoría de las vacas con semen sexado, ya que incluso necesitaban recría para crecer, pero a partir de ahora tan solo pondrán semen sexado en las novillas, en las primerizas y en las mejores vacas.
De media, en las vacas la primera inseminación tras el parto se produce a los 67 días, utilizando 2,8 dosis por vaca preñada en promedio del rebaño, reduciéndose a dos dosis en las novillas, que están pariendo en este momento a los 24,3 meses de edad. “Económicamente es interesante adelantar el primer parto, aunque la producción en esa primera lactación sea un poco menor, pero desde que cambiamos el sistema de alimentar las terneras, tenemos primerizas con picos de lactación de 47 litros”, asegura.
Económicamente es interesante adelantar el primer parto, aunque la producción en esa primera lactación sea un poco menor
La media de producción de la granja oscila entre los 39 y los 37 litros por vaca y día, debido a una bajada media de 2 litros en verano por el aumento de las temperaturas, con porcentajes de grasa del 3,51% y de proteína del 3,2%. En este momento entregan la leche a la cooperativa Lacticoop, después de haberla vendido durante años a Puleva con destino a España.
Uso de las vacas de baja producción como nodrizas para la recría
Además de los robots de ordeño, instalados en el año 2018, Uziel también optó en su momento por automatizar la alimentación de las terneras de recría mediante el uso de amamantadoras. Sin embargo, en la actualidad han decidido prescindir de ellas y volver a un sistema “más natural” en el que utilizan las vacas de baja producción que salen de los robots como nodrizas para las terneras.
“Fue la solución que pensamos para minimizar los problemas que teníamos con las terneras de recría, porque cuando se acumulan muchas en la amamantadora, se duplica el trabajo y se triplican los problemas. El resultado fue muy bueno, para mí este sistema tiene muchas ventajas, porque reduce las necesidades de mano de obra, mejora mucho los índices de conversión de las terneras y supone un mayor aprovechamiento del ganado en producción”, asegura.
Este sistema reduce muchísimo las necesidades de mano de obra y, principalmente, los errores humanos
“En el último tramo de la lactación, previo al secado, cuando las vacas bajan a 23 o 24 litros, las pasamos a un corral donde están las terneras. Ahí tenemos siempre 4 o 5 vacas, en función del número de animales a amamantar, que van rotando a medida que vamos secando vacas o enviándolas al matadero”, explica.
Las vacas suelen pasar un mes como nodrizas antes de ser secadas 50 días antes del parto. La media es de 3 o 4 terneras por vaca, y las terneras ganan entre 820 y 900 gramos de peso por día. “Nunca logramos tener en la amamantadora índices de conversión tan altos como los que tenemos aquí”, reconoce.
En ese lote de nodrizas también se incluyen vacas con cojeras. “Cuando una vaca de producción tiene un problema de patas y baja, por ejemplo, de los 28 litros en los robots, en vez de estar cayéndose en los corrales y tener que ir a buscarlas para llevarlas al robot a ordeñarse, lo que hacemos es traerlas aquí para que se recuperen mientras amamantan a las terneras”, indica.
Mientras amamantan a las terneras, las vacas que descartamos ganan kilos para ir al matadero, llegando a dejar 1.500 o 1.600 euros
Trabajan mediante rutinas, de manera que una vez por semana (los martes), a partir de los 70 días y en función del tamaño de los animales, destetan terneras y terneros, ya que machos y hembras están mezclados. “Lo que hacemos simplemente es cambiar las terneras de lote y enviar a un cebadero los terneros, pues ya están comiendo pienso y forraje desde el inicio”, cuenta Uziel. “Una vez por semana también secamos vacas”, añade.
Reducción de los casos clínicos de mamitis mediante la vacunación
Además de facilitar y simplificar el manejo del ganado en la granja, este sistema también les ha permitido reducir drásticamente las enfermedades y la mortalidad en la recría, que ha pasado de más del 15% a menos del 5%. “Hemos reducido el 99% del consumo de medicamentos en las terneras. Las diarreas casi no existen y no hay neumonías. Solo hacemos vacunación de las madres y de las terneras en los primeros días”, detalla.
El calostro es mediante sonda; todas las terneras toman 4 litros con más de 27 grados brix antes de venir aquí
Para el lote de nodrizas van vacas cojas o en el final de la lactación, pero no vacas enfermas. “Aquí no vienen vacas con mastitis”, ejemplifica. “Una de mis dudas cuando hace tres años implantamos este sistema de nodrizas era si las vacas que vinieran aquí al final de la lactación correrían el riesgo de desarrollar mastitis, pero eso no ocurre”, aclara.
“Las mastitis que tenemos son casi todas ambientales, por e-coli, y vamos a empezar a vacunar para reducir los casos clínicos”, cuenta. Hace años tuvieron un problema importante provocado por prototheca, un alga sin clorofila que aparece en las camas del ganado. “Provocaba problemas de mastitis con descargas brutales, pero la producción se mantenía y la leche no presentaba características de mastitis. Ese brote nos obligó a sacrificar muchas vacas”, recuerda.
Buscamos simplificar el manejo en la granja: una vez por semana destetamos terneras y secamos vacas
En las camas utilizan serrín, “que cada vez es más caro y más difícil de conseguir”, asegura Uziel, y también compost elaborado a partir de la fracción sólida del purín procedente de la planta de biogás.
Con la llegada del calor, la producción se reducía de manera significativa, con descensos de más de 5 litros por vaca al día, por lo que este verano instalaron aspersores para refrigerar el ganado. “Hemos notado que de junio a septiembre los ordeños en el robot se dan más por la noche y durante la mañana. Tenemos un sistema de tráfico forzado, de manera que para pasar de la zona de camas al comedero las vacas tienen que pasar por el robot”, explica Uziel.
Rotación de maíz con praderas de leguminosas
En la totalidad de la superficie agraria de la granja siembran maíz en rotación con pradera anual de gramíneas y leguminosas, como una forma de fijar nitrógeno ambiental mediante cultivos mejorantes.
En todas sus prácticas apuestan por soluciones respetuosas desde el punto de vista ambiental. Las fincas, por ejemplo, están en producción integrada con mínimo laboreo y, desde hace 6 años, tampoco utilizan insecticidas en la granja, sino únicamente lucha biológica contra las moscas.
Una vez al mes, de marzo a octubre, introducen en el establo una mezcla de depredadores que colocan en botes en la zona de cubículos y alimentación. Ese mix biológico está compuesto por una especie de avispas, otra de moscas parásitas y un protozoo para las camas. “El coste es más barato que el insecticida, y teníamos que estar cambiando todos los años de materia activa porque dejaba de funcionar al crearse resistencias”, comenta.
La instalación de robots de ordeño mejora mucho la cuestión de la mano de obra
Parte del trabajo agrario lo realizan ellos mismos, y otra parte, como la siembra y la recolección de forrajes, la tienen subcontratada por falta de mano de obra, “y en el futuro será así”, reconoce. Las vacas y las tierras son atendidas por un total de 7 personas.
Planta de biogás para tratar el purín
Disponen de una planta de biogás de fabricación casera, hecha por ellos mismos, pero que funciona perfectamente. “Cuando la montamos tampoco había ninguna en Portugal funcionando, ya va para 13 años”, explica Uziel.
Disponen de una planta de biogás que funciona solo con purín
La planta tiene capacidad para tratar todo el purín que genera la granja y una potencia instalada de 65 kW. Utilizan la producción de energía y calor para la propia granja (robots de ordeño, iluminación) y para los invernaderos (climatización, sistema de riego, maquinaria de siembra), ya que solo para la granja sobraría mucha energía y hasta este mismo año no era posible en Portugal la venta a la red de la producción eléctrica generada.
Uno de los viveros hortícolas más importantes de Portugal, especializado en producción de planta ingertada
Germiplanta, el vivero que Uziel de Carvalho puso en marcha hace 40 años en paralelo a la granja de vacas lecheras es hoy uno de los más importantes de todo Portugal, exportando también producto a España.
Cuentan con cerca de 7 hectáreas totales de invernaderos y 84 empleados, entre ellos 7 camiones propios para el reparto de la planta por todo el país, que incluso exportan a las principales zonas productoras de Andalucía, Levante o el sur de Galicia.
Sirven directamente a agricultores de todo Portugal y tienen distribuidores que también venden en Galicia
“La mayor parte de nuestra producción es bajo demanda, es decir, sembramos aquellas variedades que nos piden nuestros clientes agricultores y en las cantidades que nos solicitan. Después también servimos a tiendas agrícolas que actúan como revendedores y que tienen un poco de todo”, explica.
Se trata de un vivero de todo tipo de plantas hortícolas que también produce plantas ornamentales, aromáticas y alguna medicinal. “Fuimos de los primeros en Portugal en producir planta forestal, pero dejamos de hacerlo porque hoy hay muchos viveros que la trabajan y porque la planta forestal necesita mucho tiempo y ocupa mucho espacio en las instalaciones”, aclara Uziel.
Disponemos de una máquina para sembrar que nos permite diversificar mucho las especies que cultivamos
Por eso prefirieron abandonar la producción de árboles forestales y diversificar en el sector de la huerta. “Nuestro vivero es probablemente el que produce más especies diferentes en todo Portugal gracias a que disponemos de un sembrador automático que no necesita ser ajustado para cada especie, lo que nos permite cambiar de una a otra con mayor facilidad”, explica. “Esta máquina es el Ferrari que nunca tuve”, ríe.
Emplean 6 tipos de bandejas diferentes en función de la planta a sembrar en ellas. Cuando regresan del campo o de las tiendas y antes de ser reutilizadas, todas las bandejas son lavadas a alta presión durante 16 minutos a 80 grados y sometidas después a un proceso de desinfección con un producto especial. “De este modo solo el 1 o 2% pasan con fusarium”, indica.
Injerto de tomate, sandía, berenjena y pepino
El sector de la huerta está en crecimiento hoy en Portugal. “Lo que más está creciendo es la planta injertada, y nosotros somos uno de los tres viveros que hacen planta injertada en Portugal, probablemente el que más produce en todo el país”, afirma Uziel.
Están centrados sobre todo en injerto de tomate y sandía, y algo también de berenjena y pepino. “En el tomate, el 50% de la planta que sale del vivero ya está injertada y el porcentaje es cada vez mayor”, destaca.
El injertado incrementa mucho el costo porque se necesitan 2,2 plantas para hacer una
Pero la producción de variedades injertadas incrementa considerablemente el costo de la planta, ya que se necesitan dos plantas para hacer una injertada (una para el patrón portainjertos y otra distinta para obtener el injerto), porque el trabajo de injertado es básicamente manual (“tenemos una máquina automática de injertado, pero no es lo mismo que hacerlo a mano, su efectividad es menor”, explica) y porque el tiempo que debe estar en el vivero es mayor.
Las plantas tardan en salir del vivero entre 2 y 5 semanas, en función de la especie y del tipo de bandeja, que también depende del método de plantación. Disponen de dos cámaras de germinación diferentes.
Realizan varias campañas de producción de planta dentro del mismo año. Comienzan, por ejemplo, haciendo la primera campaña de tomate injertado en el mes de noviembre, luego la de melón y sandía, y después la segunda campaña de tomate en junio.
Mejora de la resistencia a hongos y de la absorción de nutrientes
El ambiente necesario para que prospere el injerto y minimizar el riesgo de fallo debe estar más controlado que en una siembra convencional. En una primera fase, las plantas se colocan en una cámara con luz artificial especial y con temperatura y humedad controladas.
En los últimos años han puesto énfasis en la automatización de los invernaderos, informatizando al máximo posible el control de temperaturas y humedades, así como el sistema de riego. “Tenemos pozos para extraer el agua necesaria para regar y los pivotes de riego de los invernaderos los controlamos a distancia desde el móvil”, explican.
Muchas de las máquinas y sistemas que utilizan los diseñan y fabrican ellos mismos, como por ejemplo las vagonetas para transportar las bandejas dentro de los invernaderos o el sistema de climatización de los mismos.
Cuentan con un sistema propio de climatización mediante tuberías de agua caliente que mantiene constante la temperatura de la raíz de la planta
“Es una de nuestras particularidades. Mediante tuberías de agua caliente por debajo y ventiladores de aire caliente por arriba, conseguimos mantener más uniforme la temperatura en todo el invernadero. Lo más importante para el crecimiento de la planta es la temperatura inferior, la de la raíz, sumado a un sistema de nebulizadores para mantener la humedad en el ambiente”, explica.
Uziel ya tiene a sus dos hijas trabajando con él en el vivero, así como a una nieta, lo que garantiza la continuidad de la producción y el relevo generacional en la empresa, que produce 150 millones de plantas al año, entre convencional y ecológico, sumando injertadas y sin injertar.