Archives

Cómo facilitar el relevo generacional y el acceso a la tierra a personas ajenas al sector agroganadero

El Grupo Operativo TERRACTIVA acaba de publicar una recopilación de experiencias inspiradoras a nivel europeo sobre cómo facilitar el acceso a la tierra agraria tanto a nuevos/as entrantes (personas ajenas al sector agrario con intención de incorporarse al mismo) como a explotaciones existentes que no cuentan con un relevo garantizado. "La compilación de experiencias demuestra el carácter estratégico de este grupo de agricultoras/es emergentes al tiempo que ratifican la necesidad de generar herramientas que faciliten el abordaje de los principales desafíos que enfrentan", destacan desde este grupo operativo, del que forman parte entre otras la EFA Fonteboa, el GDR de As Mariñas, la Fundación Juana de Vega, la cooperativa Horsal y el Laboratorio del Territorio de la USC. Desde Reino Unido, pasando por Austria o Galicia, se detalla cómo cada región desarrolla unas herramientas propias motivadas por las distintas realidades que enfrentan. Asimismo, recoge también los distintos instrumentos de movilidad y de gestión y recuperación de tierras que actualmente existen en Galicia, así como un breve resumen de la situación actual de este perfil a nivel gallego. Facilitar el acceso de personas ajenas al sector Este será el último año de trabajo para el Grupo Operativo TERRACTIVA. El proyecto comenzó a finales del año 2022, centrado en la facilitación de la entrada en el sector agrario de personas ajenas, las llamadas nuevas y nuevos entrantes, finalizando en la actualidad con el desarrollo de diferentes guías especialmente enfocadas en el apoyo a personal técnico de las distintas entidades de acompañamiento y asesoramiento en el campo agrario (GDRs, Oficinas Rurales, Cooperativas, diversas asociaciones y fundaciones, etc.). En los próximos meses se publicarán otros recursos con los cuales el grupo pretende generar una base metodológica y orientativa que las entidades dispuestas deberán “aterrizar” en su territorio para poder trabajar según el método propuesto. Paralelamente, el grupo desarrollará una serie de talleres para el acercamiento de las herramientas al personal objetivo que pueda estar interesado en el empleo de las mismas. Terractiva es un proyecto beneficiario de las ayudas para la ejecución de proyectos de los Grupos Operativos de la Asociación Europea de la Innovación (AEI), cofinanciadas con el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) en el marco del Programa de desarrollo rural (PDR) de Galicia 2014-2020. La publicación está disponible en la web de Terractiva: Apoyo a nuevas y nuevos entrantes en el acceso a tierras: Experiencias inspiradoras.

La Xunta defiende su modelo de movilización de tierras mientras la oposición critica la falta de medidas concretas para el rural

El conselleiro del Medio Rural, José González, compareció en la mañana de este martes día 11 de abril en el pleno del Parlamento gallego para abordar la recuperación de la tierra agraria en Galicia. Sobre este asunto, señaló que desde el año 2020 se han movilizado alrededor de 35.000 hectáreas mediante figuras como las aldeas modelo y los polígonos agroforestales además de concentraciones parcelarias. José González defendió la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia, vigente desde el 21 de mayo de 2021, como fundamental en la lucha contra el abandono del territorio y la despoblación del rural y hacer frente a los incendios forestales. González destaca que la Ley de recuperación busca dar soluciones a las tierras en estado de abandono o infrautilización. Otro objetivo es reducir la complejidad de la estructura de propiedad en Galicia de cara a la viabilidad económica de las explotaciones ampliando su base territorial. El conselleiro destacó que esta norma va pareja a la Ley de mejora de la estructura territorial de Galicia, mediante la que se siguen decretando y finalizando concentraciones parcelarias. Unos objetivos, apuntó, que también contaron con el visto bueno del propio Parlamento y de los agentes sociales, tales como las organizaciones agrarias, las asociaciones del sector primario y diferentes colegios profesionales.
González destaca que la Ley de recuperación busca dar soluciones a las tierras en estado de abandono o infrautilización
Para conseguir dichos objetivos, explicó el titular de Medio Rural, se llevaron a cabo una serie de análisis encaminados a localizar tanto la demanda como la oferta de tierra agraria. Una vez identificada la demanda, se buscaron y se identificaron las zonas preferentes de actuación y desarrollo de diferentes instrumentos para la movilización de tierras. Instrumentos de movilización y recuperación de tierras El conselleiro José González señaló que para frenar la despoblación rural, se está potenciando la figura de las aldeas modelo, que buscan poner en marcha actividad económica orientada a la producción de calidad, siempre desde el criterio de la sostenibilidad social, económica y ambiental. Esa recuperación del territorio permite ejercer la planificación preventiva del mismo, frenando así la afectación de los incendios forestales a través de esa actividad agroganadera. Un escudo natural que en el pasado verano se pudo comprobar con los fuegos que pararon en las aldeas modelo de Parada de los Montes (Pobra do Brollón) y de Osmo (Cenlle). También se busca rehabilitar de forma integral los núcleos de las aldeas, de manera respetuosa con los criterios de arquitectura tradicional. Estos planes nacen de la cooperación pública y privada. González recordó que también se apuesta por las “aldeas inteligentes”, con la conectividad digital, la autosuficiencia energética y las últimas tecnologías en las explotaciones agropecuarias que las integran.
José González señaló que para frenar la despoblación rural, se está potenciando la figura de las aldeas modelo para poner en marcha actividades económicas orientadas a la producción de calidad
Otro tema fueron los polígonos agroforestales, sobre los que González matizó que son una herramienta decisiva para la recuperación de tierras. Estas figuras permiten actuar en zonas de gran extensión y con diferentes características, actuando preferentemente en las concentraciones parcelarias que presentan un abandono superior al 50%. La Consellería también puso en marcha un Plan de pastos de Galicia, mediante lo cuál se están llevando a cabo pastos y obras de infraestructuras asociadas con el fin de poner en valor terrenos que puedan ser empleados para la actividad ganadera. La Consellería le suma además el Plan Forestal de Galicia 2021-2040 “Hacia la neutralidad carbónica”, con la recuperación de castañares tradicionales, estrechamente ligado a la puesta en valor de estas áreas. La figura legal para el desarrollo de las herramientas de recuperación de tierras será el Banco de Terras. El Banco de Explotaciones pondrá en contacto titulares de explotaciones que abandonan la actividad con personas interesadas en incorporarse a la actividad agroganadera. También tienen una gran relevancia en el marco de la Ley de recuperación las permutas de especial interés agrario. Así, el conselleiro indicó que ya está en marcha un proyecto piloto en Friol, al que se le prevé dar continuidad en otros puntos de Galicia.
BNG, el rural gallego tiene nombre propio: abandono
El portavoz de agricultura del BNG, Xosé Luís Rivas respondió a la intervención del conselleiro de Medio Rural que “sobran textos legales” y falta “proyecto de país” para impedir que las explotaciones agrarias continúen cerrando. Rivas calificó de “insuficientes” las 10 mil hectáreas movilizadas y denunció “las largas demoras” en concentraciones parcelarias, destacando las de Sandónigas en el año 1967 o el cierre en precario o enquistado de Catoira y Zona Norte de Mondoñedo. Xosé Luís Rivas criticó las políticas agrarias del Partido Popular desde la reforma de la PAC del 92. Estas llevaron “a este país al abandono de la actividad agraria y a una dependencia alimentaria y productiva suicida”. Esto llevó a que actualmente “Galicia ya no produce cereal” para hacer pan, porque las comarcas cerealistas están “a tojo y matorral”. El portavoz del BNG recordó el breve pero aleccionador periodo de tres años y medio del gobierno bipartito. Durante ese tiempo se apostó por la movilidad de tierras como prioridad urgente y comenzó la labor con una ley que activaba las tierras infrautilizadas y las unidades conjuntas de gestión del monte. Un gobierno, que difundió todos los activos humanos y económicos “a las aldeas para promocionar y darle vida a un rural”, cosa que “el Partido Popular se empeñó en ahogar”.
El BNG denunció “las largas demoras” en concentraciones parcelarias, destacando las de Sandónigas en el año 1967 o el cierre en precario o enquistado de Catoira y Zona Norte de Mondoñedo
Según el representante nacionalista, la Xunta “lleva 13 años agrandando la desagrarización y el caos y después del desastre de octubre del 17, presentan un texto legal por la puerta de atrás” para promocionar las aldeas modelo. “Una propaganda muy cara en inversiones y con escasos resultados” que no revierte la situación del rural en Galicia. Rivas apuntó informes parciales que vaticinan que en Galicia el porcentaje medio de tierra agrícola abandonada en los próximos 10 años será del 35%. Mientras que los informes globales, “los que hacemos todos los días, reflejan que cada año cierran explotaciones porque la recuperación no existe, y sus políticas son maquillaje barato que no lleva a ninguna parte”. Aparte, el diputado nacionalista destacó que el texto legal defendido por el conselleiro José González, tiene un problema de horizonte porque no facilitará tierra agraria para pequeños y medianos proyectos. Los grandes beneficiarios serán grupos empresariales y agroganadería industrial. “Tres consorcios internacionales de capital estadounidense que controlan el 28% del rico territorio ucraniano. Diecisiete millones de hectáreas en manos de Cargill, Dupont y Monsanto”. El diputado del BNG urgió a iniciar una reestructuración de la propiedad marcando dinámicas considerando la “propiedad agraria como un bien social”. Mientras Galicia cuenta con el 23% de SAU, en Bretaña alcanzan el 60% y en Irlanda el 65%. Esos serían los porcentajes a los que debiera aspirar Galicia según Rivas. Por otra parte, también insistió en que el rural gallego tiene un nombre, abandono. “Abandono de la actividad agroganadera, abandono poblacional, caos forestal por exceso de biomasa y falta de relevo generacional en las explotaciones”.
El diputado nacionalista Xosé Luis Rivas destacó que el texto legal defendido por el conselleiro no facilitará tierra agraria para pequeños y medianos proyectos
En su opinión, este abandono puede ser frenado a través de otras políticas porque “sobran leyes y falta un proyecto de país” para dotar a las OACs de personal formado, recursos financieros al Plan Integral, medidas de cara a un horizonte de soberanía alimentaria y recuperar población. Para todo esto, recalcó el nacionalista, es necesaria “voluntad política y no vender nuestro país”.
El grupo socialista denuncia: “Galicia tiene 900.000 hectáreas abandonadas”
El portavoz de Agricultura del Grupo Socialista, Martín Seco, criticó la paralización de la Ley de la recuperación de la tierra agraria de Galicia por la dejadez de la Xunta. En respuesta a la comparecencia del conselleiro de Medio Rural, Martín Seco denunció la “falta de gestión, de programación, de personal y de presupuesto” para cumplir esta norma aprobada en 2021. La norma “podría quedar en nada” si el gobierno gallego continúa reduciendo presupuestos, medios materiales y humanos y con la falta de un cronograma de actuaciones para el cumplimiento de la Ley, apuntó Seco. El diputado del PSdeG señaló el retraso de un año para publicar el plan de acción anual para la recuperación agraria. El plan, según Seco, viene “sin ninguna novedad relevante sobre el banco de tierras, que sigue estando infrautilizado”, sin recursos ni personal. Seco apuntó una serie de puntos sin cumplir por parte de Medio Rural como no desarrollar el banco de explotaciones, no elaborar el mapa de usos agroforestales y la falta de conclusión del catálogo de suelos agropecuarios y forestales. Martín Seco añadió además que “no se va a solucionar el problema de falta de superficie agraria útil con pequeñas actuaciones de recuperación de núcleos abandonados con las aldeas modelo”.
El PSdeG criticó la paralización de la Ley de la recuperación de la tierra agraria de Galicia por la dejadez de la Xunta
El diputado del Grupo Socialista recordó que aun no se envió el informe de evaluación bianual que la Agencia Gallega de Desarrollo Rural había debido enviar al Parlamento, al Consello de Xestión da Terra Agroforestal y a la Comisión de Seguimento. Además, esta última Comisión sigue sin estar constituida dos años después de la aprobación de la Ley, con lo que “demuestran que no quieren que su trabajo tenga una evaluación independiente”. El parlamentario socialista criticó retrasos en la normativa de ordenación territorial y la “ausencia de iniciativas” sobre la mejora estructural de las tierras agrarias. Sobre esto, apuntó una gestión caracterizada por los retrasos en los trabajos de concentración parcelaria, con apenas 450.000 hectáreas, una tercera parte del objetivo.
El diputado del PSdeG señaló el retraso de un año para publicar el plan de acción anual para la recuperación agraria
Martín Seco finalizó su intervención denunciando el “bloqueo sistemático” de la Ley de Montes Vecinales del gobierno del socialista Laxe o de la Ley del Banco de Terras elaborada por el gobierno de Touriño. Advirtió que hoy Galicia tiene 900.000 hectáreas de tierra abandonada, de las cuales 400.000 podrían tener rendimiento, y otras 50.000 son de alto valor agrario, pero, dijo, “en Galicia se han perdido casi 9.000 hectáreas agrarias en 2020”.

Creado un ‘banco de tierras’ digital para 25 municipios da Limia-Arnoia

El proyecto Aterra es una iniciativa puesta en marcha por el Grupo de Desenvolvemento Rural Limia - Arnoia que tiene como objetivo recuperar una parte de la producción agraria abandonada y facilitar el acceso a la tierra agraria. De este modo, es así el primer proyecto de gestión de tierras a nivel comarcal que se implementa desde la base. Su presentación tendrá lugar el próximo día 30 de noviembre a las 12.30h en el salón de actos del concello de Sarreaus. Con su puesta en marcha se creará una plataforma -aterra.gal-para conectar a las personas que demanden tierra para la creación o ampliación de un proyecto agrícola o ganadero con aquellas personas que propietarias de tierras o empresas en funcionamiento interesadas en una cesión, alquiler o venta. En definitiva, lo que se pretende es frenar el abandono de los proyectos agrícolas y poner en contacto a las personas que demandan terrenos con las que los ofertan. El ámbito de actuación de Aterra son los 25 municipios de la provincia de Ourense que forman parte del territorio GDR Limia Arnoia y que pertenecen a las comarcas de Allariz- Maceda, A Limia, Baixa Limia y Terras de Celanova. En esta iniciativa participan también oficinas agrarias comarcales, asociaciones agrarias profesionales y universidad. El programa de la presentación del proyecto es el siguiente: 12:30h: Bienvenida. Marian Novoa (GDR Limia-Arnoia) 12:33h: Presentación e introducción al GDR y a la problemática del acceso a la tierra. Gumersindo Lamas Alvar, Presidente del GDR Limia-Arnoia 12:45h: Mesa de experiencias ‘El acceso a la tierra en el territorio Limia Arnoia en proyectos subvencionados por el Leader’. Modera X.M. Puga (GDR Limia Arnoia) e intervendrán: - Carmen de Ecoleia. 30 años de aprovechamiento del monte comunal para la producción de leche ecológica. Allariz - Isabel Santos, de Cooperativa Bustelo - Ivén Cubillas, de A Vaquería en Baltar - Tonecho, de Ganadería Balín de Verea 13:05h: Presentación y demostración de la iniciativa Aterra

La Xunta anima a los ganaderos y agricultores gallegos a ampliar su base territorial para salir más beneficiados en la nueva PAC

La Xunta anima a los agricultores y ganaderos gallegos a apostar por los instrumentos de la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia para así optar a la ayuda básica a la renta de la reserva nacional de la Política Agraria Común (PAC) del próximo período 2023-2027. Desde Medio Rural destacan que "a instancias precisamente del Gobierno gallego, el borrador del nuevo real decreto sobre derechos de ayuda básica a la renta prevé que puedan solicitar estos derechos superficies acogidas a herramientas como las aldeas modelo, los polígonos agroforestales o las agrupaciones de gestión conjunta". Cabe apuntar que estos derechos de ayuda básica a la renta de la reserva nacional sustituirán en el nuevo período de la PAC a los actuales derechos de pago básico, permitiendo a los beneficiarios percibir la ayuda básica a la renta para la sostenibilidad y, en su caso, las ayudas complementarias *redistributivas y para jóvenes. Para poder recibir estas ayudas directas, cada derecho deberá justificar con 1 hectárea *subvencionable, es decir, con 1 ha de superficie agraria de la explotación. Galicia viene siendo deficitaria en derechos de pago, tanto en el período de pago único 2007-2014 cómo en el de pago básico de 2015-2022. Esto quiere decir que cuentaa con más hectáreas de superficie agraria útil aprovechada por las explotaciones gallegas que con derechos de pago que permitan percibir ayudas directas por esa superficie.

Cambios en la nueva PAC

Sin embargo, en el borrador del nuevo real decreto sobre derechos de ayuda básica a la renta, gracias a las observación hechas desde la Xunta, está prevista para el nuevo período de la PAC una herramienta que contribuiría a la merma del referido déficit. Así, con el objeto de evitar el abandono de tierras, podrán solicitar derechos a la reserva nacional los agricultores cuyas explotaciones se encuentren acogidas a programas de reestructuración relativos a algún tipo de intervención pública regulada por una norma autonómica de rango de Ley para cuyo fin, tales como bancos de tierras o instrumentos de movilización como las aldeas modelo, los polígonos agroforestales, las agrupaciones de gestión conjunta o las permutas. "De este modo, está previsto que puedan recibir derechos de la reserva nacional las explotaciones gallegas incluidas en alguna de las figuras de la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia, así como las que dispongan de hectáreas subvencionables en régimen de arrendamiento mediante el Banco de Terras de Galicia, una razón más para que los ganaderos y agricultores apuesten por estas iniciativas", destacan desde Medio Rural.

Novedades para arrendar parcelas del Banco de Tierras de Galicia

El Diario Oficial de Galicia (DOG) publica hoy la orden de la Consellería de Medio Rural por la que se regula la presentación electrónica de solicitudes de arrendamiento de predios rústicos incorporados al Banco de Terras de Galicia, una novedad que busca mejorar la eficiencia y agilidad del procedimiento al tiempo que se adapta a las modificaciones introducidas por la Ley de recuperación de la tierra agraria.

La orden regula el formulario y la manera de presentación de acuerdo con las reglas de arrendamiento de predios (número de solicitudes, criterios de concurrencia y puntuaciones, duración de los arrendamientos, etc.) aprobadas por Acuerdo del Consejo de Dirección de la Agencia Gallega de Desarrollo Rural el pasado 20 de abril.

Así, se establecen dos períodos anuales para la presentación de solicitudes de arrendamiento. El primero comenzará el día 1 de mayo de cada año y el segundo, el 1 de noviembre, ambos con una duración de 15 días hábiles. De este modo, el próximo 1 de mayo se abrirá el primer período de arrendamiento de parcelas del Banco de Terras adaptado a la Ley de recuperación.

En virtud de la orden publicada hoy, las solicitudes se presentarán preferiblemente por vía telemática a través de la sede electrónica de la Xunta (https://sede.xunta.gal) o desde la página web del Banco de Terras de Galicia (https://sitegal.xunta.gal/sitegal). La presentación electrónica será obligatoria para las administraciones públicas, las personas jurídicas, las entidades sin personalidad jurídica, los trabajadores autónomos y los representantes de alguno de los anteriores. El resto de interesados podrán optar por la vía electrónica habilitada o bien presentar las solicitudes acudiendo en persona a cualquiera de los lugares y registros establecidos.

Más novedades

Cabe apuntar que en los nuevos períodos de arrendamiento se incorporará un nuevo criterio para priorizar las operaciones enmarcadas en instrumentos de puesta en valor de la tierra (aldeas modelo, polígonos agroforestales y actuaciones de gestión conjunta) y se establecerá la duración máxima de los arrendamientos en función del estado actual del predio y de los aprovechamientos productivos y mejoras propuestos para la parcela.

Con todo, la principal novedad incorporada por la Ley de recuperación en este procedimiento es que la concurrencia competitiva solo se aplicará una vez a cada parcela. Así, las parcelas que en el procedimiento de concurrencia competitiva no tuvieran ninguna solicitud válida o cuyas eventuales solicitudes resultaran resueltas negativamente, podrán ser arrendadas, sin procedimiento de concurrencia competitiva, a aquella persona que haga una solicitud que se ajuste a los requisitos fijados en la Ley. En el caso de presentación de varias solicitudes, se dará preferencia a la orden de presentación. Se estima que con esta modificación se podrá reducir hasta tres veces el tiempo medio necesario para el arrendamiento.

Enlace a la orden en el DOG:
https://www.xunta.gal/dog/publicados/2022/20220427/AnuncioG0426-200422-0001_gl.html

«El vacuno de carne equivale a una multinacional con 50.000 trabajos directos en Galicia, pero no se nos valora»

Samuel Formoso Salgado acaba de convertirse en el nuevo responsable del sector de la carne de vacuno en el Sindicato Labrego Galego. Este ganadero de Vilar de Barrio tomó el relevo en la ganadería familiar hace unos 25 años. En aquel momento, cambió el trabajo en un almacén de regalos de Ourense para retornar a la aldea y apostar por la ganadería. Además de ganadero, Formoso es presidente de una comunidad de montes y concejal del BNG en este ayuntamiento de poco más de 1.800 habitantes del Macizo Central. Abordamos con él temas como la caída de precios, la gestión del lobo o la reforma de la nueva PAC, al tiempo que conocemos su ganadería y forma de trabajar.  -¿Cómo afrontas esta nueva labor como responsable de Vacuno de Carne en el Sindicato Labrego? ¿Qué te llevó a dar el paso? -Desde que me incorporé a la ganadería siempre he estado vinculado al Sindicato Labrego, tanto en la directiva de la carne como en la dirección nacional. En los últimos años, he tenido menos disponibilidad por temas familiares. Ahora para renovar la directiva, aunque hay mucha gente más joven que yo y muy preparada, querían una persona que tuviese experiencia, me lo propusieron y no supe decir que no. La verdad es que yo estoy metido en todas las guerras en las que no se gana dinero. -¿Cuáles son las prioridades más inmediatas? -Lo más urgente son los precios, ya que con la crisis del Covid-19 estamos atravesando una época muy complicada con una bajada de los precios del kilo en canal en los becerros entre 50 y 70 céntimos, lo que supone más de 100 euros por animal. A esto se suma que ya arrastrábamos precios de hace 30 o 40 años, puesto que nunca pasamos de los 5 euros por kilo en épocas buenas, y ahora estamos en poco más de 4 euros. Ningún productor debería de cobrar por debajo de los precios de producción, debería de estar regulado también en beneficio del propio consumidor. Cada vez se valora menos los productores no solo de carne sino al campo, pese al peso que tienen. En Galicia, sólo los productores de vacuno de carne suponen unos 50.000 puestos de trabajo directos, ya que tenemos casi 20.000 granjas a las que se suman unas 500 ganaderías mixtas. Es necesario tener en cuenta que, en la mayoría de estas ganaderías trabajan al menos 2 personas. Estamos al nivel de multinacionales como Inditex o Citroën en volumen de puestos de trabajo, pero no se nos valora como tal. En esta época de crisis, donde la creación de puestos de trabajo es tan importante, debería tenerse en cuenta que en las ganaderías se están manteniendo.
"Tenemos que hacer frente a los tratados de libre comercio que utilizan la carne como moneda de cambio"
-¿Qué líneas de acción deberían seguirse para frenar esta caída de precios? -Uno de los temas que debe abordarse es el dumping que nos producen los tratados de libre comercio que utilizan la carne como moneda de cambio para poder vender otros productos en terceros países. Utilizan nuestra carne para hacer tratados con Mercosur o con Canadá de manera que se importa carne a bajos precios, procedente, muchas veces, de zonas que fueron deforestadas en el Amazonas para la producción de esta carne, una realidad que no le cuentan al consumidor. Esta carne compite en los liniales con la carne de calidad que se produce en Galia, donde la mayoría son ganaderías en extensivo. Políticamente también se debería incidir en fijar unos precios mínimos para que nadie produzca por debajo de los costes de producción para que la gente se mantenga en esta actividad y que la juventud vea la ganadería y el rural cómo algo atractivo, para evitar que esto sea un desierto. Cada vez más, los grupos que comercializan la carne son más potentes y se reparten en 5 o 6 grupos que fijan los precios para ganar ellos más. Se está viendo con los precios actuales de la carne: mientras a los productores nos han bajado el precio, el consumidor sigue pagando lo mismo en el supermercado que hace un año. Incluso en épocas de crisis hay quien se está aprovechando para ganar dinero. -Cada vez más productores están optando por la comercialización directa, ¿qué perspectivas de futuro le ves? -No es una alternativa para la gran mayoría. Creo que en zonas puntuales, sobre todo en aquellas ganaderías próximas a las ciudades, es una vía para tener mejores precios, produciendo calidad y menos cantidad. Además permite estar cerca del consumidor, de manera que se logra una confianza que en el mayorista no se tiene. Cada vez hay más gente que opta por eso, que diversifica con otras producciones como los pollos o huerta. Ahora estamos viendo como cada vez hay menos mataderos comarcales, y esto también está limitando mucho este tipo de iniciativas. En Ourense ya sólo tenemos un matadero comarcal. Con todo, en el campo se están llevando a cabo iniciativas muy interesantes, aunque muchas veces no se llegan a conocer como debieran. Creo que debemos apostar más por los pequeños productores. Es preferible que haya 10 productores con 50 vacas que uno solo que tenga 1.000, como está pasando en el Macizo Central, donde quedan cada vez menos ganaderías. -Desde el Sindicato Labrego lleváis años reclamando mayor transparencia en los pesajes de los mataderos con un sistema de control por parte de la Xunta, ¿sigue siendo un problema en los principales mataderos de Galicia? -Es algo que llevamos reclamando desde siempre. Hay la desconfianza de que en los pesos los mataderos no son todo lo transparentes que debieran. Tampoco es una cuestión que afecte sólo el vacuno de carne, sino que se reclaman básculas en muchos sitios y sectores por esa desconfianza. La Administración debería hacer unos controles y que los pesajes sean transparentes. -En los últimos tiempos se ha vuelto a reactivar el debate sobre la presencia del lobo, ¿qué opinión tienes al respeto? -La mayoría de los ganaderos jóvenes no están en contra del lobo, lo que no quieren es que el coste de mantener especies como el lobo o el jabalí en los montes recaiga siempre sobre el ganadero. La presencia de esta fauna en el monte supone un beneficio para toda la sociedad, pero no puede ser sólo la población rural, y en especial los ganaderos, quienes asuman el cueste a base de pérdidas en sus ganaderías. Además, seguimos arrastrando problemas como la burocracia que suponen los ataques para los productores, mientras siguen demorándose los pagos y siendo insuficientes para compensar los daños. Fauna sí, pero el coste no puede ser solo para la gente que vive en el territorio, sino que debe corresponder a toda la sociedad.
"Cada persona que se jubila es una ganadería que cierra, no hay relevo generacional porque a los jóvenes no les resulta atractivo dedicarse a la actividad agraria o ganadera"
-Se dice que el sector de la carne de vacuno es uno de los motores contra la despoblación, ¿lo ves así con tu ganadería y en tu zona? -Por supuesto. Cuando me incorporé, en mi pueblo había unas 15 ganaderías con un promedio de entre 15 y 20 vacas de carne, hoy quedamos 4, la mía es una de las de mayor tamaño y el resto alrededor de unas 20 vacas. Cada persona que se jubila es una ganadería que cierra, no hay relevo generacional porque a los jóvenes no les resulta atractivo dedicarse a la actividad agraria o ganadera. Hay múltiples causas para eso, entre las que se encuentra el desmantelamiento de los servicios que se está viendo. Nadie valora los beneficios que aporta para la sociedad que siga habiendo gente que viva en zonas como el Macizo Central, por el mantenimiento y conservación de la biodiversidad que hacen de esta zona o la contribución en la lucha contra los fuegos forestales y ninguna subvención valora esta contribución y los sacrificios que están teniendo que asumir por la falta de servicios. La PAC debería de recoger las aportaciones de estas ganaderías a la sociedad. Cualquier administración debería de primar el rural. Están muy bien iniciativas como las aldeas modelo, pero es imprescindible que se sigan manteniendo los servicios básicos que ya había en el rural y que son tan importantes para mantenerlo vivo, como las líneas de tren o autobús que se fueron suprimiendo, los médicos o escuelas del rural que fueron cerrando... -¿Cómo es tu ganadería? Los cuentan cómo trabajáis. - Somos de los pocos que quedamos en A Limia como ganaderos en extensivo. Parte del ganado lo tengo en la antigua Laguna de Antela, una zona que estamos recuperando, junto con la Sociedad Gallega de Historia Natural. Estos terrenos eran comunales y pertenecen a la parroquia de Bóveda. Cuando se desecó la laguna, se dividió en dos, uno de ellos pertenece al pueblo de Bóveda y fue plantado de pinos, y otro es del pueblo de Vilar de Gomareite. En este último, cuando se hicieron las concentraciones parcelarias esos terrenos quedaron ocupados por una escombrera y ahora desde la Comunidad de Montes estamos colaborando para recuperarlo. Gracias a subvenciones estamos retirando el plástico y los escombros que allí se vertieron para que quede un mosaico de lo que fue la antigua laguna. Yo tengo una ganadería de unos 93 animales de raza Rubia Galega, luego mi mujer tiene otra ganadería a unos 20 kilómetros donde llegamos a tener 24 vacas. Trabajamos en semiextensivo, una parte del rebaño lo tengo en el monte y otra pastorea más próxima de la ganadería. Este ganado lo traigo para la granja por la noche para evitar que hagan estragos en las fincas de patatas y cereales que se cultivan en esta zona. -¿Cómo comercializas la carne? -Los terneros están con las madres hasta los 7 meses como requieren desde Ternera Gallega y luego los comercializo a los 9 meses a través de una pequeña cooperativa de Maceda con la que estamos asociados a una cooperativa de Monforte de Lemos, lo que nos permite comercializar la carne a través de la cooperativa de segundo grado Artesanos Ganaderos.

"Cada reforma de la PAC nos lo pone más difícil a los pequeños productores. Es una aberración que se pague por superficie en vez de por producción"

- La reducción de base territorial para las ganaderías en extensivo es una de las problemáticas que arrastra el sector desde hace años, ¿cómo valoras la situación actual? -Es un tema que estamos viendo en el día a día, sobre todo con las plantaciones en terrenos agrarios que se están haciendo con eucalipto en los últimos tiempos. Tenemos una herramienta como el Banco de Tierras que no está funcionando, con importantes retrasos en su gestión, mientras que la Consellería se empeña en poner en marcha una nueva ley para movilizar las tierras en vez de poner a funcionar bien el Banco de Tierras. Ahora mismo hay zonas con un importante problema de falta de tierras y en otras, como es el caso del Macizo Central están quedando en manos de 3 o 4 que les interesa tenerlas para ponerlas en la PAC, lo que hace que tampoco haya tierra disponible para la gente joven que se quiere incorporar. -En el Congreso de la Carne también abordasteis la nueva PAC, ¿cómo creéis que os afectará a las ganaderías de vacuno de carne? -Cada reforma de la PAC nos lo pone más difícil a los pequeños productores, se hace sólo mirando a los grandes terratenientes. Es una aberración que se pague por superficie en vez de por producción, así la gente quiere acaparar tierra aunque luego produzca una cantidad mínima. Además, con cada reforma se incrementa la burocracia.
"Tanto los gobiernos como la Unión Europea va a tener que volver a mirar a su sector productivo y comenzar a valorarlo como debe"
-Y en el caso de los fondos New Generation, ¿veis una oportunidad también para el sector de la carne? -Es una de las batallas que estamos teniendo desde el Sindicato para evitar que estos fondos rematen en las manos de unos pocos y que son los que acaparan siempre estas partidas, ya que estos fondos pueden servir para fijar población en el rural con inversiones necesarias y que revitalicen estas zonas. -¿Qué perspectivas de futuro ves para el sector? -Soy optimista. En los últimos años ya hemos tenido que afrontar muchos problemas (Vacas locas, brotes de Brucelosis, arrastramos los precios bajos, ahora la Covid-19 ...) y seguimos resistiendo. Yo soy de los que piensa que a medio plazo la alimentación volverá a dar un cambio, ya que se volverá a incrementar el precio de los carburantes y los insumos, como la soja o maíz, que llegan desde Latinoamérica y ciertas ganaderías tendrán dificultades para resistir, mientras que las más ligadas al territorio resistirán mejor. Tanto los gobiernos como la Unión Europea va a tener que volver a mirar a su sector productivo y comenzar a valorarlo como debe, ya que traer comida de otros países resultará más caro y no tiene sentido tener parte del territorio abandonado en vez de producir lo que se precisa.

Esta es la ley que aspira a recuperar la tierra del abandono en Galicia

El Partido Popular de Galicia registró esta mañana en el Parlamento gallego la proposición de Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia, una norma con la que el gobierno de la Xunta aspira a revertir el abandono de la tierra y la forestación de las fincas de uso agrícola. Si todo va según lo previsto, debería ser aprobada y entrar en vigor a lo largo de este 2021. El objetivo de la normativa es ambicioso pero también estratégico para el futuro de Galicia: La falta de una ordenación efectiva de los usos del suelo y de una política de desarrollo rural eficaz llevó al rural a una situación de abandono de la tierra en amplias zonas de Ourense y Lugo; a una concentración de la producción de leche en unas pocas comarcas, con los riesgos que eso acarrea, y a la forestación masiva con eucalipto en las comarcas costeras. En datos esto se traduce en que en los últimos 30 años, según fuentes del sector, se perdieron 150.000 hectáreas de tierra de uso agrícola que pasaron al abandono o a uso forestal. Hoy por hoy se estima que hay alrededor de 900.000 hectáreas abandonadas y solamente se trabajan menos de 700.000 hectáreas, poco más del 20% del total de la superficie de la comunidad, cuando el promedio europeo en regiones similares ronda el 50%. En este sentido, la ley presentada hoy en el Parlamento de Galicia aspira a revertir este proceso, dando estímulos fiscales y de percepción de ingresos a través del alquiler a los propietarios de los terrenos. No será el primer intento en los últimos años pues en el 2011 ya se aprobó la Ley 6/2011, de 13 de octubre, de movilidad de tierras y en el 2015 la Ley 4/2015, de 17 de junio, de mejora de la estructura territorial agraria de Galicia. Y antes, en el 2008, la del Banco de Tierras de Galicia.

Pedro Puy. “Queremos conseguir el máximo consenso tanto en su aprobación como en su aplicación”

En la presentación de la proposición de Ley, el portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Pedro Puy subrayó que “el texto fue muy dialogado, pensado y trabajado” y que incorpora gran parte de las conclusiones de la Comisión Especial creada en el Parlamento Gallego la raíz de la ola de incendios del año 2017. “En concreto, incorpora 43 de las conclusiones de aquel dictamen, relativas al uso del suelo y la organización del medio rural”, precisó. Pedro Puy incidió en que el objetivo de esta “es poner en producción la tierra, generar riqueza y hacer atractivo para la gente joven dedicarse al sector primario”. Sin embargo, reconoció la complejidad de la realidad sobre la que pretende intervenir la ley: En Galicia hay unos 11 millones de parcelas, case todas en manos privadas, con el 30% con propietarios desconocidos. En este sentido, el portavoz del Grupo Popular reconoce que tocar el tema de la propiedad y usos de la tierra en Galicia es un tema delicado y que puede prestarse a la confrontación política, tal y como sucedió en el 2009 cuando el gobierno de PsdeG-PSOE y BNG creó el Banco de Terras de Galicia. Por eso, subrayó que “queremos conseguir el máximo consenso tanto en lo que es la tramitación como posteriormente en su aplicación”. “Es una ley que se va a aplicar siempre de acuerdo con los propietarios (..) El diálogo va a presidir esta ley”, subrayó.

Los puntos claves de la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia

El consejero de Medio Rural, José González, explicó en la rueda de prensa los puntos claves de la proposición de Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia. Son los siguientes: 1) El propietario del terreno tiene siempre la última palabra: Si una finca está abandonada la Xunta intervendrá de oficio para ponerla a disposición de quien la quiera trabajar (Agentes Promotores Productivos, en la terminología de la ley) mediante alquiler a través del Banco de Terras de Galicia, pagándole al propietario una renta. Si el propietario no está de acuerdo en ceder el uso de la finca, la administración autonómica acatará su decisión pero, eso sí, le exigirá que la tenga desbrozada para reducir el riesgo de incendios. 2) ¿Como pondrá la Xunta en producción la tierra abandonada? Las fincas en las que la Xunta intervenga se destinarán a uso agrícola, ganadero o forestal, según las aptitudes de los terrenos. La intervención de la administración gallega sobre la tierra abandonada para ponerla a producir se hará a través de 3 herramientas, según explicó José González: -Aldeas modelos: El objetivo es proteger las aldeas de los incendios manteniendo limpio su perímetro a través de la actividad agrícola o ganadera, evitándole de paso a los propietarios el coste de tener que limpiar los terrenos. Para ponerlas en marcha se requerirá la aprobación de por lo menos el 70% de los propietarios de las fincas. “Y a aquellos que no estén de acuerdo, no se incluirán sus fincas, pero les exigiremos que las tengan limpias o cultivadas”, precisó José González. La Consellería prevé llegar a 200 aldeas modelo en esta legislatura. -Polígonos agroforestales: Actuarán sobre un mínimo de 10 hectáreas de tierras abandonadas, sin tocar tampoco la propiedad ni los marcos. En este caso, la idea es ofrecer a agricultores, ganaderos o viticultores superficies mayores de terreno para su cultivo y en una sola pieza, aunque esta sea de varios propietarios. Al igual que en el caso anterior, se requerirá que estén de acuerdo como mínimo el 70% de los propietarios y los que no quieran que sus tierras se incorporen al polígono tendrán que mantener limpias sus parcelas. -Agrupaciones de Gestión Conjunta: Se busca la gestión conjunta para reducir costes de las fincas que están en un perímetro, sobre todo para el sector forestal. También se exige acuerdo del 70%, como mínimo, de los propietarios. El consejero de Medio Rural también destacó que otra herramienta que contempla esta ley es favorecer las permutas, para resolver los problemas de los terrenos enclavados dentro de los de las explotaciones ganaderas, favoreciendo así que aumenten su base territorial cerca de las explotaciones. 3) ¿Que pasa con las fincas de propietario desconocido? Sobre todo en zonas del interior de Galicia una parte importante de las parcelas tienen propietario desconocido. Hasta ahora la Agencia Tributaria investigaba la propiedad y si no aparecía el dueño pasaban a ser propiedad del Estado. A partir de ahora será la Xunta la que realice la labor de investigación pero irá un paso más allá: En caso de que no aparezca el propietario la admnistración autónomica gestionará su uso para ponerla en producción. Pero si en los 5 años posteriores aparece el propietario se le devolverá la finca sin necesidad de recurrir a la vía judicial. 4) ¿Donde se va a actuar primero? Primero se actuará en las zonas con mayor demanda y más acuerdo entre los propietarios. 4) Ventajas económicas y fiscales para los propietarios: José González destacó que además de las ventajas económicas para los propietarios -la Xunta les garantiza la percepción de una renta por el alquiler de las fincas y no tendrán el gasto de tener que limpiarlas- el texto presentado hoy incorpora también ventajas fiscales. “Además de las ventajas fiscales que puso en marcha la Xunta para el rural gallego, también incorpora un mecanismo de interlocución con el Estado para que el Gobierno Central incorpore incentivos en el IRPF, impuesto de sociedades e IVA de los que arrenden y alquilen fincas para lograr también una discriminación positiva para el sector primario”, destacó.

Texto de la proposición de ley

‘Bienvenidas las nuevas herramientas de ordenación de la tierra, pero sin olvidar la concentración parcelaria’

En el anterior artículo publicado en este mismo espacio por el grupo de opinión 'Rural Importa', hacíamos un breve repaso de la evolución de la concentración (o reestructuración) parcelaria desde la ley estatal de 1952 hasta la autonómica de mejora de la estructura territorial de Galicia de 2015. Como decíamos en él, con sus defectos, hasta la fecha ningún otro instrumento se ha mostrado tan efectivo en la ampliación del tamaño de las parcelas de cultivo, y de recuperación de la superficie agraria útil (SAU). Mediante las leyes 7/2007, de 21 de mayo, del Banco de Terras de Galicia, y 6/2011, de 13 de octubre, de movilidad de tierras, se buscaron fórmulas para aumentar la base territorial de las explotaciones, que no implicase la modificación de la propiedad y además, obligaran a los propietarios absentistas a arrendar las parcelas en estado de abandono. El Banco de Terras pasó a gestionar la oferta y demanda de las parcelas que los propietarios ponen voluntariamente a su disposición, además de las masas comunes resultantes de los procesos de concentración parcelaria. Constatándose la demanda real de superficie agraria, el Banco de Terras se encuentra de nuevo con el problema del minifundismo, resultando de superficie insuficiente para las necesidades de las explotaciones actuales, la mayor parte de las parcelas ofertadas. De acuerdo con lo que se adelanta desde la Consellería de Medio Rural, la futura ley de recuperación y puesta en valor de tierras agrarias que está ultimando el gobierno autonómico, vienen a reforzar el papel del Banco de Terras y añade dos nuevas herramientas de ordenación rural: los polígonos agroforestales y las aldeas modelo. Aunque varios proyectos de estas últimas se están desarrollando aplicando la Ley 6/2011, de movilidad de tierras, la nueva ley pretende mejorar los mecanismos de declaración de abandono, gestión de parcelas de propietario desconocido e incorporación de predios al Banco de Terras, así como regular el procedimiento. Los proyectos de aldeas modelo están destinados a la recuperación de terrenos abandonados o infrautilizados alrededor de núcleos de población, con la doble finalidad de eliminar la acumulación de biomasa y el consecuente riesgo de incendio, y favorecer una actividad económica en esos núcleos, que evite su despoblación. Por lo tanto, los proyectos de aldeas modelo se conciben como actuaciones destinadas a un problema concreto que en Galicia se presenta principalmente en varias zonas de la provincia de Ourense y sur de la de Lugo, pudiendo convertirse en una herramienta muy útil para fijar población en esas zonas. El otro instrumento que introduce la ley son los polígonos agroforestales. Se trata de poner en producción superficies con potencial agrario o forestal, que presenten un determinado grado de abandono. Se iniciarán siempre que exista un promotor, que presente un proyecto viable y que esté comprometido a realizar las inversiones necesarias en infraestructuras. Para desarrollarse, precisarán del acuerdo de la mayoría de los propietarios y contarán con los mismos mecanismos que las aldeas modelo para la inclusión en el proyecto de parcelas en estado de abandono y de propietario desconocido. Incluso contempla la posibilidad de reestructuración parcelaria conforme a la ley 4/2015, de mejora de la estructura territorial agraria de Galicia, en el interior del polígono. Esta herramienta facilitará que agricultores o inversores que precisen superficie para el desarrollo de proyectos de producción agraria puedan realizarlos, consiguiéndose así una nueva vía de inversiones en el rural. Los proyectos de aldeas modelo y polígonos forestales son dos herramientas que pueden ser muy útiles en los casos concretos en los que son aplicables, es decir, en las zonas en las que existe abandono de tierras agrarias, y siempre que se priorice la recuperación de SAU. Las zonas agrarias productivas de Galicia siguen necesitando incrementar la base territorial de las explotaciones para garantizar su rentabilidad. En estas zonas no existe mas abandono que el de las parcelas que por sus características no son rentables con las técnicas actuales de cultivo. Para estas zonas, la reestructuración parcelaria sigue siendo la herramienta que, además de reunir su propiedad en fincas de mayor tamaño, permite a las explotaciones comprar o arrendar fincas de un tamaño suficiente que haga viable el cultivo. Es un hecho contrastado que muchas explotaciones ganaderas están dispuestas a recorrer varios kilómetros para ir a otras parroquias o ayuntamientos a sembrar maíz o hierba para forraje, siempre que se trate de parcelas de varias hectáreas. En las zonas ganaderas de Galicia, las concentraciones parcelarias rematadas, registran mayor movilidad de tierras que las no concentradas al aumentar la oferta de fincas de más extensión y, consecuentemente, más rentables. Sería muy necesario rematar las zonas de concentración pendientes y, al menos, decretar una nueva zona por cada una que se cierre. En conclusión, aldeas modelo, polígonos forestales y reestructuración parcelaria son tres herramientas complementarias destinadas a incrementar la rentabilidad del medio rural y, de este modo, mejorar sus condiciones de vida, frenar su despoblación y mantener la biodiversidad.