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Recomiendan mantener la vigilancia de la botritis hasta la vendimia

La Estación Fitopatolóxica Areeiro, centro dependiente de la Diputación de Pontevedra, acaba de lanzar el último aviso fitosanitario previo a la vendimia en el que, en líneas generales, aludde al bueno estado general de las viñas, aunque recomienda mantener la vigilancia ante la botritis y advierte también de la aparición masiva de racimos afectados por golpe de calor. En lo que alcanza a la botritis, personal de la EFA recuerda que aunque esta semana no se detectaron nuevos síntomas de la presencia de esta enfermedad, antes de la vendimia podrán aparecer nuevos racimos dañados, en especial se hay humedad, por lo que no hay que descuidar la vigilancia ni las labores culturales que favorezcan la aireación de los racimos. Areeiro señala que en el Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura existen fungicidas sin plazo de seguridad, o con plazos cortos o muy cortos, que aún pueden ser utilizados en caso de condiciones favorables, pero que es imprescindible respetar los plazos recogidos en las etiquetas. Areeiro señala también en su aviso que el calor de estos días supuso un estrés para las plantas, lo que incrementó el número de las que manifiestan síntomas de alteraciones de la madera y supuso que haya plantas pequeñas con síntomas de sequía. Además, las temperaturas más elevadas y la luz solar intensa de estos días provocaron la aparición masiva de uvas con golpes de calor o de sol que pueden ser confundidos con botritis, pero que en la mayoría de casos no lo es. Las uvas afectadas presentan un color semejante a la que adquieren cuando hay podres y, con el tiempo, estas uvas se irán deshidratando. En general, estos síntomas afectan a la cara de los racimos sobre la que incide directamente la luz solar, y las condiciones de sequía o los deshojados excesivos y mal ejecutados están también en el origen del fenómeno. Granos abrasados por el sol. // Imagen. Estación Fitopatolóxica Areeiro. Por otra parte, respeto al mildiu, la EFA destaca que no se encontraron nuevos síntomas en hojas ni racimos rebuscos, que son los que a estas alturas de la campaña podrían tener alguna sintomatología. Teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas para los próximos días, con posibilidad de algunas lluvias débiles y la posterior mejora del tiempo, el personal de la Estación indica que pueden aparecer nuevas manchas hasta la vendimia debido a las posibles lluvias débiles de estos días, pero ya sin incidencia en la maduración por la frondosidad que tienen en general las viñas.
Tras la vendimia, en aquellas viñas muy afectadas por mildiu y dónde siga el avance de la enfermedad, recomiendan aplicar un tratamiento cúprico
Después de la vendimia, y en especial en aquellas viñs donde quede un elevado nivel de inóculo por haber sufrido este año un ataque fuerte en la floración, continuará el avance de la enfermedad en la vegetación, siempre que haya condiciones climatológicas favorables. En estos casos, antes de la caída de la hoja será conveniente un tratamiento cúprico para garantizar el bueno agostado de la madera y limitar la incidencia de la enfermedad en la siguiente campaña. En cuanto a la polilla de la uva, no se detectaron más daños en los racimos en las viñas de la red de seguimiento, pero la situación puede ser diferente en otros viñedos, por lo que la EFA recomienda mantener la vigilancia hasta la vendimia debido a la influencia que pueden tener las perforaciones de las orugas sobre la podredumbre. En principio, se estima que no será preciso dar tratamiento alguno por la relativa cercanía de la vendimia, pero si en las revisiones se encuentran daños por encima del 3-5% de racimos afectados en las variedades más sensibles o de 5-8% en las restantes, será conveniente realizarlo eligiendo insecticidas con plazo de seguridad corto, que en todo caso debe ser respetado. Por último, en el caso de los cicadelidos, Areeiro advierte que siguen siendo recogidos en las trampas el Scaphoideus titanus, y recuerda que controlarlo es una de las pocas formas existentes para contener la grave enfermedad de cuarentena que transmite: la flavescencia dorada. En lo que se refiere a las capturas de mosquito verde en las trampas instaladas en las viñas de la red de seguimiento, estas fueron bajas.

Recomiendan aplicar en el viñedo un tratamiento contra la botritis tras las recientes lluvias

Ante las infecciones por botritis detectadas esta semana, debido al estado fenológico de la uva (muy próxima a la maduración) y las lluvias que se registraron recientemente, la Estación Fitopatolóxica Areeiro, dependiente de la Diputación de Pontevedra, acaba de lanzar un nuevo aviso fitosanitario en el que aconseja tratar las viñas en las que no se hubiera realizado ninguna aplicación con anterioridad. Las precipitaciones de los últimos días provocaron un rápido incremento del tamaño de los granos, lo que en algunos casos hizo reventar su piel. Esto, junto con las perforaciones en algunos predios de orugas de Lobesia y ataques de pájaros en las uvas, dieron lugar a la aparición de micelio en racimos de muchas viñas. Por esta razón, Areeiro recomienda aplicar un antibotrítico si no se realizó este tratamiento con anterioridad. El personal señala que en el Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación existen fungicidas autorizados para el control de esta enfermedad con características y plazos de seguridad muy diferentes, por lo que debe ser considerado cada caso concreto según el estado de maduración de la uva y la presencia actual de síntomas o heridas en los granos. Por otra parte, el aviso se vuelve a referir de nuevo a la enfermedad de la flavescencia dorada. Areeiro señala que sigue habiendo capturas del Scaphoideus titanus en las trampas, excepto en las viñas en las que se realizaron los tratamientos insecticidas recomendados, y recuerda que combatir este insecto es uno de los escasos medios para luchar contra esta patología. En este sentido, advierte de que las poblaciones de este insecto vector que queden este año estarán fuertemente relacionadas con las de la campaña siguiente y, por lo tanto, con la dispersión de la enfermedad. Respeto del mildiu, el aviso señala que con la entrada en el pintado la uva ya no es sensible a este patógeno, y solo pueden aparecer síntomas en la vegetación y en los racimos de los brotes nietos, en los que aparecieron precisamente en las revisiones efectuadas esta semana. Con la previsión de altas temperaturas para los próximos días, el centro indica que en principio no será necesaria ninguna intervención más que, opcionalmente, en los predios que hayan tenido fuertes ataques en esta campaña si la densidad de manchas es tan elevada que puede provocar defoliación y comprometer la maduración en curso. Por último, el aviso de la Estación Fitopatolóxica se refiere también a las hortícola. Recuerda que los restos vegetales son el soporte que utilizan varias plagas y patógenos para pasar el invierno, de manera que en este momento, cuando se están levantando algunos de estos cultivos, Areeiro aconseja que se eliminen estos restos para reducir la problemática que se pueda tener el próximo año.

Recomiendan vigilar los daños por botritis en los viñedos

La Estación Fitopatolóxica del Areeiro recomienda mantenerse alerta ante los daños por botritis que pueden darse en los viñedos. El riesgo por mildiu y oídio es cada vez menor, al encontrarse ya buena parte de las cepas en el pintado. En el caso de la botritis, el hecho de que ya prácticamente en todos los predios y variedades los racimos se encuentran en la fase de pintado, estado en el que son más sensibles al ataque de este hongo oportunista, motiva que haya que mantenerse más alerta ante posibles daños. Además, desde la Estación, dependiente de la Diputación de Pontevedra, recuerdan que el incremento de la humedad, las temperaturas suaves, el incremento del azúcar en la uva, los racimos compactos, los racimos secos por mildiu o los daños en los granos favorecen la aparición de este patógeno. Por eso, si no se aplicó aún un antibotrítico, aconsejan hacerlo después de las lluvias que se esperan para los próximos días, en especial si finalmente llueve de manera abundante, para evitar o reducir las posibilidades de que se instale el hongo. En aquellos viñedos que fueron tratados con cobre para prevenir ataques por mildiu, este puede ser suficiente por el momento para frenar la incidencia. Las lluvias y las temperaturas mínimas elevadas también pueden favorecer la aparición de nuevas manchas y lavarán los tratamientos aplicados contra el mildiu. Aunque el riesgo de contagio es cada vez menor, recomiendan renovar los tratamientos de cobre por lo menos en aquellas viñas donde no se hubieran dado antes o donde se hubieran producido daños a lo largo de la campaña. Mientras, si las lluvias previstas son intensas se reducirá el riesgo de aumento de síntomas de oídio en hojas, pámpanos y racimos rebuscos. Así, en el último boletín emitido por la Estación solo aconsejan aplicar un tratamiento antioídio al tratamiento de cobre para el mildiu en aquellos predios con variedades que tengan la enfermedad.

Capturas del vector de la flavescencia dorada

Desde la Estación Fitopatolóxica recomiendan mantenerse alerta por el vector de la flavescencia dorada, Scaphoideus titanus. Por el momento solo lo han capturado en trampas colocadas en las comarcas de O Rosal y O Condado. Con todo, recuerdan la importancia de los tratamientos para frenar el avance de la enfermedad, puesto que el insecto puede estar aún presente hasta bien entrado septiembre. Además, deben cortarse y eliminarse las plantas de viñas abandonadas, para evitar que se conviertan en refugio para el vector.

Mal del plomo en los frutales

Como detallan en su último aviso sanitario, ya están detectándose frutales afectados por el mal del plomo. En el caso de localizar daños, recomiendan eliminar las ramas afectadas, si se trata de un ataque localizado, o incluso los árboles dañados, para evitar la expansión de la enfermedad. También aconsejan hacerlo ya en verano, para reducir el nivel de inóculo presente en la parcela. Para reducir el riesgo de contagio en la planta, después de cada corte hay que aplicar una pasta fungicida y antes de podar la siguiente rama deben desinfectarse bien las tijeras. Finalmente, todos los restos podados deben retirarse de la finca. Estas mismas recomendaciones, pueden aplicarse a los manzanos y pereiras que estén afectadas por cáncer.

Recomiendan mantener la vigilancia de las viñas ante el mildiu, oídio y botritis

El último aviso fitosanitario emitido este viernes por la Estación Fitopatolóxica Areeiro recomienda continuar la vigilancia de la viña ante el mildiu, oídio y botritis. El centro dependiente de la Diputación de Pontevedra advierte de la importancia de aplicar tratamiento debido al aumento del oídio y también preparados antimildiu en aquellas viñas en las que, por el desarrollo de la vegetación, no llegaron los tratamientos. Además, Areeiro advierte sobre el aumento de la erinosis de verano y sobre nuevos síntomas de enfermedades de madera. En lo relativo el mildiu no se ha detectado empeoramiento en las viñas. No obstante, en aquellas zonas más frondosas, donde no llegó el tratamiento, sí se han encontrado nuevas manchas. Debido a la previsión de posibilidad de precipitaciones que se espera para los próximos días, se recomienda tratar las viñas con un fungicida a base de cobre. La falta de lluvia de los últimos días favoreció la presencia del oídio en las viñas. Areeiro detectó un incremento en el número de racimos afectados entre los cuales, los más dañados son las variedades sensibles y en racimos rebuscos. Puesto que el pintando no está completo, el centro dependiente de la Diputación recomienda aplicar un antioídio a la par del fungicida de cobre. También se recomienda el control y tratamiento de la viña ante el avance de la botritis. En especial en viñas donde hay cepas de diversas variedades tempranas, en las que el avance en la fenología conduce a un mayor contenido de azúcar de los granos y hay más afectación. En este caso, así como en variedades sensibles, es aconsejable aplicar un tratamiento dirigido a los racimos. A consecuencia del calor de los últimos días la sintomatología de las enfermedades de madera se ha acentuado, así como el desequilibrio hídrico que está afectando a algunas de las viñas. También sigue aumentando la erinosis de verano.

Areeiro recomienda continuar con los tratamientos contra el vector de la flavescencia dorada

La Estación Fitopatolóxica de Areeiro, de la Diputación de Pontevedra, advierte en su último aviso fitosanitario de la necesidad de continuar aplicando tratamientos fitosanitarios contra el Scaphoideus titanus, el cicadelido vector de la flavescencia dorada. Inciden en la importancia de hacer estos tratamientos en los viñedos del sur de la provincia de Pontevedra, dado el número de adultos recogidos en las trampas. “Aplicar tratamientos es una medida imprescindible para intentar limitar el avance de la flavescencia, además de eliminar y destruir las plantas abandonadas y prestar atención cuando se compren plantas”, recoge el aviso fitosanitario. Además, ya tuvieron avisos de los síntomas de ataques de estos cicadelidos en los viñedos. Con todo, alertan que muchas veces, los síntomas se confunden con déficits hídricos, carencias nutricionales o acidez del suelo, por eso las trampas son un método fiable para conocer la incidencia del insecto y tratar solo en los casos necesarios.

Vigilancia frente al mildiu, oídio y botritis

También recomienda mantener la vigilancia de mildiu y renovar los tratamientos en caso de que proliferen síntomas o las precipitaciones sean abundantes en los próximos días. “La vigilancia debe ser elevada en las viñas con uva sana o pocos daños, pero también en aquellos predios donde ya se perdió toda la cosecha de cara a reducir los daños para la próxima campaña”, detallan. Aconsejan mantener la vigilancia y renovar las aplicaciones de tratamiento contra el oídio, cuyos síntomas aún pueden seguir apareciendo hasta el pintado. Aunque no detectaron nuevos daños por black rot, también aconsejan incluir materias activas contra este hongo si es preciso hacer tratamientos contra mildiu u oídio. Esta semana detectaron los primeros racimos afectados de botritis en una variedad temprana sensible, por lo que recomiendan prestar mucha atención a la aparición de este patógeno, sobre todo bajo condiciones de elevada humedad relativa o lluvias. Por su parte, las capturas de polillas de la uva siguen siendo bajas, pero Areeiro advierte que se ha observado ya la primera penetración de una oruga en las parcelas de seguimiento del centro. Al respeto, anima a mantener la vigilancia y hacer seguimiento a las trampas.

Recomiendan mantener vigiladas las viñas ante la previsión de lluvias y el riesgo de mildiu

El anuncio de lluvias desde este viernes en Galicia hace que sea preciso extremar las revisiones del viñedo, tal y como recomiendan en el último aviso fitosanitario emitido por la Estación Fitopatolóxica de Areeiro, dependiente de la Diputación. Los viñedos se encuentran ahora en una fase crucial del desarrollo de la uva. “De cumplirse las previsiones, el riesgo de infección por mildiu será sensiblemente más elevado que los días pasados y deben revisarse muy bien las viñas, aunque estén dentro del período de protección teórico del tratamiento anterior”, aconsejan desde Areeiro. Además, de detectarse síntomas o haber sospechas de que puede darse una contaminación anterior mal tratada, los técnicos recomiendan tratar las viñas para prevenir un ataque de mildiu. Hace falta tener presente, que algunos de los tratamientos fueron aplicados con condiciones desfavorables de viento, lo que reduce la protección de la viña.

Oídio y black rot

También recomiendan tratar contra el oídio en las aplicaciones de tratamientos que se hagan, dadas las condiciones favorables para su propagación. El personal técnico de Areeiro detectó en sus revisiones sobre el terreno daños por black rot en parcelas abandonadas próximas a una viña comercial, con el consiguiente riesgo que esto supone, convirtiéndose en una fuente de inóculo importante, por lo que debe eliminarse. “Las condiciones climatológicas previstas son muy favorables al hongo, en un momento en el que la uva es sensible”, explican. Así, también aconsejan tener en cuenta este patógeno en los tratamientos que se realicen en las cepas. Los fuertes vientos registrados en estos días han provocado la rotura de brotes en los viñedos. Los especialistas recomiendan retirar esta vegetación afectada para evitar que con las lluvias lleguen a instalarse en ellos hongos oportunistas como el causante de la botritis. El crecimiento vegetativo de las cepas también está siendo excesivo, por lo que para mejorar la sanidad de los viñedos recomiendan despuntarlas después de la floración. Además, hay ya una gran vegetación en las parcelas que debe controlarse para evitar la retención de humedad que pueda favorecer la aparición de patógenos.

Extractos de plantas y aminoácidos para combatir las enfermedades fúngicas en viñedo

Laboratorio del Grupo Soaga en Vilanova de Arousa, donde ha sido desarrollado el prototipo del nuevo produto

Soaga, el grupo gallego que fabrica y comercializa la conocida marca de abonos Fertimón, acaba de conseguir un importante éxito en Italia con su nueva gama de productos bioestimulantes y protectores.

Fertimón Guard, desarrollado y fabricado íntegramente en las instalaciones de la empresa en Vilanova de Arousa, ha demostrado su eficacia para prevenir y tratar algunas de las enfermedades fúngicas más habituales en viñedo, como son el oidio, el mildiu y la botritis.

Aunque de momento se trata solo de un prototipo que no ha salido todavía al mercado, sus resultados han despertado ya el interés de importantes empresas a nivel europeo, como Agricola 2000, responsable del campo de demostración llevado a cabo en la región de Apulia, en el sureste de Italia.

Fertimón Gard ha sido desarrollado en el nuevo laboratorio de Soaga y fabricado en sus instalaciones de Vilanova de Arousa

Los resultados del ensayo serán presentados este martes día 11 de octubre dentro de un importante evento que se celebrará en la localidad italiana de Palagiano, perteneciente a la provincia de Taranto, conocida por su producción de uva y de otras variedades de fruta, como las clementinas.

Un bioprotector de origen natural

El desarrollo de Fertimón Guard reafirma la apuesta del Grupo Soaga por el I+D+i. “Se trata de un producto bioprotector de desarrollo propio elaborado a base de extractos botánicos y aminoácidos, complementado con microelementos esenciales beneficiosos”, destaca Rafael Gago, responsable de Innovación y nuevos productos de Soaga.

Esta nueva solución biotecnológica posee un doble efecto: por un lado protege y fortalece a la planta y, por otro, con la ayuda de los sustratos botánicos, contraataca a las enfermedades fúngicas más comunes.

Posee doble función:  fortalecimiento de la planta y efecto de choque contra los hongos

El prototipo probado en Italia forma parte de la nueva gama Fertimón Tech de Soaga, lanzada este año por la empresa gallega y con la que busca introducirse en el segmento de los abonos líquidos. El catálogo incluye bioestimulantes y correctores en base a productos naturales como algas o ácidos fúlvicos y húmicos, con importantes aplicaciones en agricultura ecológica.

Condiciones de humedad equiparables a Galicia

La región de Apulia es junto a la Toscana una de las principales zonas de producción de vino de Italia, tanto en blancos como en tintos. Se trata de una área próxima al mar, con mucha incidencia de mildiu, al igual que Galicia.

“Las condiciones de humedad son similares a las que se dan en zonas como pueden ser Rías Baixas”, afirma Rafael Gago, lo que haría prever también el éxito del producto en las variedades más habituales presentes en Galicia.

«En el caso concreto del ensayo levado a cabo en Italia, el producto ha sido probado en uva de mesa con resultados muy positivos, sobre todo contra oidio y botritis, aunque pensamos que en uva de vinificación funcionará incluso mejor», avanza el responsable de Innovación y nuevos productos de Soaga.

Los viñedos encaran la recta final antes de la vendimia con buena sanidad

Las lluvias registradas en toda Galicia a lo largo de los últimos días casi no han tenido incidencia en el estado sanitario de los viñedos. Así lo recoge el último aviso fitosanitario emitido este viernes por la Estación Fitopatológica de Areeiro, entidad dependiente de la Diputación de Pontevedra. Las viñas apenas presentan incidencia de patologías habituales como el mildiu. Detectaron muy pocos síntomas en los brotes terminales, incluso en la plantas de viñas que llevaban más de un mes sin aplicar tratamientos o en las que mantienen sin intervención en toda la campaña. Los vientos del norte y la previsión de tiempo seco para los próximo día hacen que siga siendo improvable la aparición de daños por mildiu. Los síntomas de oídio que había detectado el personal de Areeiro en la revisión de la semana anterior tampoco han evolucionado durante estos días, y solo detectaron daños mínimos y casos puntuales. Aunque las lluvias podían favorecer los daños por botritis, en la mayoría de los casos fueron precipitaciones muy ligeras y la humedad no se mantuvo durante mucho tiempo en la vegetación, por lo que no se aprecian daños de importancia. La previsión de tiempo seco también reduce al mínimo el riesgo para los próximos días. Si se producen daños para los que sea preciso tratar y teniendo en cuenta la proximidad de la vendimia en algunas zonas, desde Areeiro recuerdan que existen fungicidas antibotríticos con 14 días de plazo de seguridad y otras soluciones naturales que o bien no tienen tiempo de espera o solo se debe aguardar un día. Esta semana se ha incrementado la presencia y capturas de machos de polilla del racimo, en especial en una de las trampas gestionadas por Areeiro en viñas de O Condado, donde capturaron 72 ejemplares. También se incrementó el número de perforaciones de las orugas en los racimos, aun así se encuentra por debajo de los umbrales en los que sería preciso realizar un tratamiento. A pesar de las precipitaciones registradas esta semana, las viñas siguen acusando estrés hídrico y patologías de madera. Además, la fuerte insolación hace que se manifiesten de manera más notoria los golpes de sol en las uvas. Esta semana, el personal de Areeiro ya detectó los primeros racimos en fase de maduración afectados por pájaros.

El adelanto de la vendimia limita el uso de fitosanitarios químicos en el viñedo

Las altas temperaturas y días muy soleados de este verano han provocado que muchos viticultores estén preparándose para el inicio de la vendimia, por eso la mayoría de las grandes bodegas tienen ya limitado el uso de fitosanitarios químicos y convencionales en los viñedos. Además, las olas de calor y el avanzado estado fenológico en el que se encuentran las uvas reducen los riesgos de daños por patógenos como el mildiu. Con todo, en aquellos viñedos menos vigorosos y que se hayan visto afectados por la incidencia de mildiu, desde la Estación Fitopatológica de Areeiro recomiendan prestar atención a estos síntomas ya que, aunque no provoque daños directos en el racimo, podría llegar a afectarle a la salud de la planta si se producen defoliaciones a causa de manchas en las hojas. Por este motivo, en el último boletín fitosanitario emitido por Areeiro este viernes, recomiendan tratar estas viñas afectadas con soluciones cúpricas, que prácticamente en su totalidad tienen un plazo de seguridad de 15 días. Además, destacan los efectos beneficiosos del cobre tanto sobre la piel de la uva como para el endurecimiento de la madera. En sus revisiones en los viñedos, el personal de Areeiro detectó esta semana un incremento de los daños por oídio, en especial en las plantas de zonas con influencia marina. Incluso llegaron a detectar racimos rebusco afectados en algunas parcelas ya tratadas, aunque fueron daños de poca intensidad. Dado que el patógeno ya no puede afectar a la uva, por lo general ya no será preciso realizar ningún tratamiento fitosanitario. Mientras, si se detectan síntomas de oídio recomiendan evitar excesos de vegetación y realizar labores de eliminación de brotes nietos. Aunque por el momento la incidencia de botritis está siendo también mínima, la previsión de tiempo húmedo para los próximos días hace incrementar los riesgos. En caso de que la uva esté en buen estado, no es probable que se produzcan daños de importancia en los racimos, a pesar de que haya condiciones favorables para su aparición. Con todo, desde Areeiro inciden en que puntualmente puede ser aconsejable tratar para evitar daños. En caso de tener que tratar, el Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio incluye fungicidas antibotríticos con un plazo de seguridad de 14 días y productos naturales con un plazo de seguridad de un día o incluso sin tener que esperar para cosecharla. Tampoco se detectó incidencia de la polilla del racimo, que favorece la aparición de daños por botritis en las heridas que provoca en las uvas. Pese a que capturaron varios machos en las trampas de las que dispone la Estación Fitopatológica en los viñedos, este reducido número de capturas hace prever que la presencia del insecto tampoco haga tener más incidencia de la botritis, teniendo en cuenta además que se prevé un adelanto de la vendimia. En las visitas a los viñedos realizadas en las últimas semanas, el personal de Areeiro detectó la presencia de Trips en viñedos de O Salnés y el Rosal, con síntomas en las hojas, sin llegar a producirse daños en los racimos. De localizar estos insectos y ser preciso un tratamiento, entre las soluciones autorizadas hay un producto autorizado para su control y que no tiene plazo de seguridad. Tras varias campañas sin constatar su presencia, esta semana localizaron síntomas de acariosis en las parcelas de seguimiento de la Estación Fitopatológica. En las cepas afectadas, el personal especializado detectó también la presencia de ácaros beneficiosos fitoseidos, que posiblemente sean capaces de controlar el ataque. Además, siguen detectándose daños en los racimos y cepas por golpes de calor, alteraciones de la madera, estrés hídrico y erinosis de verano.

Robots 4.0 en viñedos gallegos para facilitar la vendimia

“La robótica en agricultura tiene y va a tener mucho sentido e incluso menos limitaciones que otros ámbitos en los que hay puestas muchas esperanzas, como los coches autónomos”. Así de clara se mostraba la investigadora Ángela Ribeiro, que trabaja en el Centro de Automática y Robótica, centro mixto entre el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad Politécnica de Madrid, durante su participación en el Ciclo de Conferencias en robótica agrícola y ganadera celebrado recientemente en Lugo.
“En España ya se están diseñando y desarrollando soluciones tecnológicas muy interesantes. Deberíamos crear y vender tecnología”
Ribeiro reivindicó además los importantes avances en robótica y digitalización del agro que se están llevando a cabo en España y que sitúan al país en la vanguardia tecnológica. “En España ya se están diseñando y desarrollando soluciones tecnológicas muy interesantes. Deberíamos crear y vender tecnología”, recomienda. La investigadora señala que, mientras en tareas como la preparación de los suelos y la siembra se ha avanzado mucho en la robotización, en la producción de la cosecha aún queda mucho sobre lo que trabajar. Uno de los ejemplos sobre este avance de la robotización en el campo en el manejo de la cosecha es el proyecto Flexigrobots, en el que está trabajando Ribeiro en estos momentos. En este caso buscan el desarrollo de una plataforma para sistemas multi-robot autónomos, flexibles y heterogéneos que facilite la automatización inteligente en el manejo de precisión de cultivos. Se trata de un proyecto internacional en el que participan también empresas y organismos de países como Finlandia, donde se centran en el cultivo de colza; así como en Centroeuropa, donse trabajan en plantaciones de arándanos. En España, el CSIC trabaja en viñedo. Además, se está desarrollando en viñas gallegas, gracias a la colaboración de la bodega de Rías Baixas, Terras Gauda, situada en la subzona do Rosal. Primer prototipo de robot de asistencia a la vendimia. Colaboración con una vendimiadora en las Bodegas Terras Gauda en septiembre de 2021.

Facilitar la vendimia

Aunque el proyecto aún está en plena fase de desarrollo, ya han llevado a cabo pruebas en los viñedos gallegos durante la pasada vendimia y han patentado la plataforma de asistencia a la vendimia, que está pensada para facilitar la vendimia, y que resulta especialmente interesante en aquellas zonas donde arrastrar las cajas de las uvas se vuelve un trabajo físico agotador. La plataforma, en la que se carga la caja, sigue al operario mientras este vendimia. Se trata de que identifique y siga a un operario concreto, adaptándose a su ritmo de recogida y permaneciendo a una distancia de menos de medio metro. “En las primeras pruebas la persona que vendimiaba estaba pendiente del robot e intentaba inconscientemente adaptarse a él, pero buscamos justo lo contrario, que sea el robot quien se adapte al ritmo del vendimiador”, explicaba Ribeiro.
El objetivo del robot es acortar los tiempos que la uva pasa en la caja esperando a su traslado
El robot reconoce y sigue a un único viticultor que localiza mediante un identificador situado en un medallón que lleva colgado. Además, el sistema cuenta con un receptor GPS para los desplazamientos que tenga que realizar a los puntos de recogida y carga. El objetivo del robot es acortar los tiempos que la uva pasa en la caja esperando a su traslado, ya que se trata de que una vez que la caja esté llena, otro robot venga a sustituirlo y este mientras pueda trasladar la caja hasta el punto de recogida. En este sentido, más que un único robot, la idea con la que trabajan desde el CSIC es en desarrollar una flota de robots que trabaje cooperativamente con los vendimiadores.

Flotas de pequeños robots 4.0

Al igual que plantean en el proyecto Flexigrobots con la automatización en la vendimia, Ribeiro apunta hacia un nuevo salto en la robotización de la agricultura, en el que se apueste por las flotas de robots de pequeño tamaño que puedan realizar labores de forma autónoma y bajo la supervisión de un operario. “Defendemos la implantación de la robótica en el campo con flotas de pequeños robots”, explica Ribeiro. La utilización de estas flotas de pequeños robots presenta ventajas como: -Son menos peligrosos. Al tratarse de robots de pequeño tamaño los riesgos y consecuencias derivados de que se produzca un fallo son menores para el ser humano. Con este tipo de tecnología se incrementa la seguridad. -Fácil sustitución. Al trabajar con una flota si uno de los equipos se estropea puede sustituirse por otro de manera que pueda realizarse la tarea, a diferencia de lo que ocurre con las grandes maquinarias automatizadas, donde un fallo puede atrasar de manera importante la tarea o incluso comprometer el cultivo al ser más compleja su sustitución. - Al tratarse de robots de menor tamaño también se reduce la compactación del terreno, que suele ser uno de los inconvenientes de utilizar grandes maquinarias en agricultura. -También suponen un menor gasto en comparación con el desembolso que suponen otras maquinarias de mayor tamaño. -Al igual que la maquinaria tradicional y de mayor tamaño, estas flotas, a pesar de ser autónomas, requieren por seguridad de la supervisión de un operario.

Aprovechar y adaptar tecnología para el campo

Más allá del desarrollo de nuevas propuestas tecnológicas innovadoras, también se está trabajando en aprovechar y adaptar a los trabajos en el campo soluciones ya existentes. Es el caso, por ejemplo, de la adaptación que han hecho desde el CSIC de un vehículo eléctrico convencional transformándolo en un vehículo automatizado que se emplee en el muestreo del viñedo, para detectar plagas como la Botrytis. Robot autónomo basado en Twizy para la inspección de viñedos. La Rioja 2017. Así, han optado por utilizar el modelo de coche eléctrico Twizy de Renault para este uso. Las prestaciones que presenta este vehículo, como su robustez, su autonomía de 80 kilómetros, su recarga mediante un enchufe convencional o su bajo precio (11.000 euros frente a los 60.000 euros que pueden costar otros robots de campo equivalentes) lo han convertido en una opción competitiva para su automatización. Con él han realizado muestreos en viñedos de la Rioja con cámaras RGB-D, que aportan profundidad en la toma de imágenes y que permiten una mayor precisión en la elaboración de mapas de volúmenes que permiten contar con información de utilidad como el grado de afectación de patógenos del viñedo, como la Botrytis, para su posterior tratamiento. “Con estos muestreos se puede extraer mucha información sobre el viñedo, útil para el gestor”, apunta la investigadora. Cabe destacar que, en esta línea de automatización y adaptación de la tecnología, el equipo de investigadores liderado por Ribeiro en el CSIC ya ha dado importantes pasos, puesto que fueron de los primeros en integrar la utilización de drones en los tractores, comenzando ya en 2007 con su uso. La flota de robot terrestres RHEA y la Estación Base desde donde se supervisaba el trabajo de la flota de robots utilizando una Interfaz Gráfica de Usuario, que proporcionaba una recreación realista en tiempo real del trabajo de los robots. Además, ha participado en el desarrollo de proyectos europeos de gran impacto como RHEA (Robot fleets for Highly Effective Agriculture and forestry management), con el que consiguieron los primeros pasos en tractores autónomos que realizaban el trabajo de campo supervisados por un operario desde una estación base, con el apoyo de programas informáticos para la detección rápida de los problemas que surgían durante el trabajo y la búsqueda de soluciones eficaces para atajar los mismos lo antes posible, preferiblemente sin la intervención del operario y sin detener el trabajo de los robots.

Bio-herramientas para el control de plagas en los viñedos, alternativas para reducir el uso de pesticidas

España se encuentra entre los 3 países en los que la viticultura ecológica tiene un mayor peso en Europa, con unos 2,1 millones de hectáreas con este tipo de producción. Mientras, en Italia y Francia, los otros dos países que completan el ranking de la producción ecológica europea, apenas se cuenta con 1,9 y 1,7 millones de hectáreas, respectivamente. “La viticultura ecológica en España es un sector importante al que apoyar y brindar herramientas”, reivindica Raquel Campos Herrera, investigadora Ramón y Cajal del Instituto de Ciencias de la Vid y del Vino (CSIC-UR de la Rioja), durante su participación en el Seminario Internacional de Viticultura: Avances y desafíos coyunturales, organizado por la plataforma Vitivin.
“La gestión integrada de plagas en el viñedo adolece de un uso reiterado de pesticidas y requiere de un avance en métodos más sostenibles para reducir los residuos en viñas”
Dado el espacio que reclama la viticultura ecológica y el impacto ambiental que supone la producción convencional, donde llegan a aplicarse hasta 30 tratamientos fungicidas por campaña dependiendo de las condiciones climáticas, las alternativas biológicas y sostenibles para combatir las principales plagas del viñedo se hacen cada vez más necesarias. “La gestión integrada de plagas en el viñedo adolece de un uso reiterado de pesticidas y requiere de un avance en métodos más sostenibles para reducir los residuos en viñas, tanto en suelos como en el agua”, apunta la investigadora. El grupo de trabajo en el que participa la investigadora ha abordado en los últimos 3 años el uso de bio-herramientas que puedan contribuir en el control de plagas y enfermedades de la vid. Una de las estrategias de control de plagas en las que se están centrando es la utilización de los nematodos entomopatógenos, empleándolos como agentes de control biológico y organismos de modelo ecológico para el control de plagas como la polilla del racimo, entre otros.

Los nematodos, aliados en el viñedo

Del mismo modo que ya se están empleando en otros cultivos, el grupo de investigación ha abordado la utilización de los nematodos entomopatógenos, sobre cuyo uso en viñedo apenas se han llevado a cabo investigaciones por el momento. Pero, ¿cómo pueden los nematodos convertirse en una herramienta contra plagas? Su propio ciclo natural en el suelo les lleva a acabar con su hospedador, es decir, el insecto; una vez que liberan las bacterias, de ahí que puedan ser de utilidad para combatir determinadas plagas propagadas por insectos. “Una vez que los nematodos penetran en el insecto, proliferan y liberan una serie de moléculas y toxinas que afectan a órganos como el intestino y que acaban por provocar la muerte del insecto, que después los nematodos seguirán aprovechando para reproducirse, proliferar y volver al suelo en busca de una nueva víctima”, detalla la investigadora.
Sus investigaciones se han centrado en la polilla del racimo, la cigarra espumadora y las arañas roja y amarilla
Conociendo este proceso, el grupo ha echado mano de los nematodos entomopatógenos para desarrollar herramientas biológicas, en parte desarrolladas por el investigador Ignacio Vicente Díez, como parte de su tesis doctoral. Se han centrado en tres insectos para observar de qué manera los nematodos pueden convertirse en un aliado para su control en los viñedos. En concreto han trabajado sobre la polilla del racimo, la cigarra espumadora y las arañas roja y amarilla. Centrarse en estos insectos ha motivado que sus trabajos vayan más allá de lo desarrollado para otras plagas que sobreviven en la tierra, donde también se localizan los nematodos. “Todas estas especies se desarrollan en la parte aérea, lo que ha obligado a desarrollar una tecnología paralela”, detalla la investigadora. Llevan aplicando en campo esta nueva tecnología desde 2015 con distintos modelos de aplicación. “Con la tecnología desarrollada hemos conseguido que estos nematodos sobrevivan el tiempo suficiente como para que se puedan utilizar en la parte aérea y que penetren en estos insectos”, detalla Campos. Además, en los últimos años han ido más allá de utilizar el propio nematodo sino que han planteado utilizar todas las bacterias que el nematodo produce dentro del insecto, ya que estas bacterias pueden crecer en un medio líquido, es decir en un cultivo artificial, de manera que luego se pueda utilizarlas de distintas formas.

Herramientas biológicas y plagas

Por el momento, ya han comprobado que la utilización de estos extractos es eficaz contra la araña roja, así como contra la cigarra espumadora, la polilla del racimo e incluso para el control de la botritis . “Los trabajos realizados con estos extractos muestran que tienen una elevada eficacia para controlar ácaros como la araña roja”, detalla la investigadora. En el caso de su uso para controlar la cigarra espumadora, han comprobado que la espuma producida por este insecto es un hábitat ideal para que actue el nematodo. También comprobaron que estos nematodos resultan muy eficaces para matar las ninfas de este insecto. Además, confirmaron que no solo los propios nematodos sino los extractos estaban resultando de gran utilidad para acabar con el insecto a los 3 o 4 días. Tasa de mortalidad de la cigarra espumadora expuesta a nematodos. En sus trabajos sobre el uso de nematodos entomopatógenos como de los extractos para controlar la polilla del racimo, se han centrado en distintas fases del insecto y han confirmado que en el caso de la fase 3 de larva el uso de los extractos de los nematodos consigue una mortalidad del 80%. “Son resultados muy prometedores y sobre los que necesitamos seguir trabajando”, reconoce la investigadora, ya que los trabajos apenas comenzaran en el verano pasado. La tasa de mortalidad de las larvas de Lobesia botrana (polilla del racimo) llega casi al 100% al quinto día. Teniendo en cuenta la relación que existen entre la polilla del racimo y el desarrollo de la botritis, ya que este insecto actúa como vector del patógeno, los investigadores quisieron comprobar también si el uso de estos nematodos o los extractos podía ser un método de control de este patógeno, consiguiendo resultados prometedores aún por confirmar. Además, en sus trabajos están estudiando cuáles son los mejores co-adyuvantes que se podían utilizar en el viñedo para conseguir la mejor supervivencia de los nematodos entomopatógenos en la parte aérea. “Se busca que podamos mejorar la prevalencia de los nematodos en los viñedos”, explica la investigadora. Así, estas investigaciones abren la puerta a la utilización de nuevas alternativas biológicas y con un menor impacto para el control de plagas en el viñedo.  

-Consulta aquí algunos de los artículos de referencia para este proyecto. 

-Utilización de los nematodos en el control de la polilla del racimo.  -Efectos insecticidas de los nematodos contra la cigarra espumadora. 

Soluciones naturales para el control de mildio, oídio y botritis en viñedo

En la Península Ibérica nos encontramos con varios de los problemas endémicos tradicionales del viñedo como son el oídio (Uncinula necator), el mildiu (Plasmopara viticola) o la podredumbre gris (Botrytis cinerea). En cuanto hablamos de la expansión e incidencia de estas patologías, las condiciones ambientales son fundamentales en el desarrollo tanto del mildiu como de la botritis, por este motivo la zona de influencia atlántica suele ser la más perjudicada y donde más atención hay que prestar a la aparición y desarrollo de éstas. Si bien es cierto que las variaciones climáticas acontecidas en los últimos años, está propiciando una mayor incidencia en toda la península donde tradicionalmente se ha considerado un problema menor, pero que aparece de forma recurrente cada cierto tiempo.

Por otra parte, el oídio es una enfermedad bien presente año tras año en prácticamente todos nuestros viñedos, con requerimientos superiores de temperatura, pero que no precisa de una precipitación abundante para su aparición y desarrollo.

Frente a la persistencia de estos problemas fitopatológicos, se presenta una nueva realidad en el sector de la sanidad vegetal. Un periodo de transición dirigido por las instituciones europeas a través de la estrategia de La Comisión “De la granja a la mesa” y que marca el horizonte de aquí a 2030: reducir al 50% el uso de plaguicidas químicos y aumentar la superficie agraria dedicada a producción ecológica hasta un 25% del total de todas las tierras agrícolas, entre otros objetivos.

Este contexto socio-político, al que se suma una mayor demanda de los mercados y consumidores de alimentos más saludables, sostenibles y sin residuos de fitosanitarios, pone de manifiesto la necesidad de implementar soluciones de garantía menos agresivas y más sostenibles, para lograr un control eficiente de los problemas causados por plagas y enfermedades, como el oídio y el mildiu en el caso del viñedo, que pueden mermar considerablemente tanto la producción como la calidad de la uva.

Programas Blue Heron para la prevención y control de oídio, mildiu y podredumbre gris

El bagaje de más de una década de Blue Heron en el manejo de enfermedades externas del viñedo supone una alternativa contrastada y eficaz a la gestión convencional de este tipo de enfermedades, desarrollando diferentes programas para la protección del viñedo que, además, ofrecen otras ventajas adicionales (productos sin plazos de seguridad ni residuos de materias activas de síntesis).

Protección frente a oídio

Dos son los productos que intervienen principalmente en el programa de manejo del oídio en vid: IRIDIUM®, producto de origen botánico con acción barrera multipunto específica anti-oídio, con efecto preventivo, curativo y secante; y TORERO®, suspensión de alta concentración en azufre y sílices, con efecto secante frente a oídio y que adicionalmente presenta una acción disuasoria frente a poblaciones de ácaros. Ambos productos pueden emplearse por separado, en una estrategia preventiva, o incluso alternarse en diferentes tratamientos; o bien emplearse en mezcla en el caso de ataques severos del hongo.

Protección frente mildiu y Botrytis

En este programa intervienen por un lado MÁXIMO®, compuesto por un complejo cúprico con aminoácidos no proteicos, vitaminas y ácidos orgánicos procedentes de extractos de algas, con acción vascularizante, desinfectante y cicatrizante; y por otro BIOSILENCE®, barrera protectora con efecto secante a base de extractos vegetales, boro y sílices (de origen botánico y mineral).

De esta forma, al efecto específico antimildiu y antibotrítico del cobre, con una gran sistemia ascendente y descendente gracias a los agentes complejantes orgánicos de MÁXIMO®, se le suma el fortalecimiento de tejidos vegetales propiciados por el boro y el silicio, así como el efecto secante que proporciona BIOSILENCE® para inhibir la germinación de esporas y el desarrollo de las estructuras fúngicas.

En la prevención y protección frente al mildiu, los primeros tratamientos se deben realizar poco después del desborre, repitiendo el tratamiento a los 10-15 días en función del riesgo. Los tratamientos dirigidos a evitar daños por Botrytis se recomiendan hacia el estado fenológico L, de cerramiento de racimo, pudiéndose repetir el tratamiento en envero, según condiciones.

Así pues, con la experiencia recogida durante varios años, fruto de la colaboración con bodegas de reconocido prestigio y los viticultores más exigentes y profesionales, Blue Heron ofrece alternativas de garantía frente a estas amenazas y las pérdidas que ocasionan en la producción vitícola, acordes con el nuevo contexto de la sanidad vegetal, basadas en soluciones naturales de menor impacto y recomendadas para su empleo tanto en agricultura ecológica como convencional.

Claves para el tratamiento de las principales plagas del viñedo

Buena parte de las plagas que afectan al viñedo hoy en día llevan siendo una amenaza desde hace años, en algunos casos como el Oídio, una enfermedad originaria de América del Norte, ya se detectó en Europa en 1845. Pero, la evolución de las plagas a lo largo de los años es constante y también se va modificando su tratamiento. Los nuevos conocimientos que se van teniendo de ellas, la introducción de nuevas especies en los ecosistemas, el cambio de variedades, las nuevas técnicas de control que alteran los ecosistemas o el cambio climático son algunos de los factores que señaló como determinantes para la evolución del tratamiento de las plagas del viñedo la ingeniera agrónoma Nuria de Prado Ordás, de la Estación de Avisos Agrícolas del Bierzo, durante su participación en la jornada de Asesoramiento en Gestión Integrada de plagas organizada desde el Servicio de Explotaciones Agrarias de Ourense. “La investigación en umbrales de tratamiento y métodos de control debe ir aparejada con dicha evolución”, reivindica la especialista.
“La investigación en umbrales de tratamiento y métodos de control debe ir aparejada con dicha evolución”
Mildiu, Oídio, Botritis o la Polilla del racimo fueron algunas de las patologías en las que se centró De Prado y sobre las que aportó información en cuanto a la lucha integral que se está realizando desde el centro especializado de León. La especialista incide en la importancia de la detección de las plagas y la necesidad de ajustar el tratamiento a la fase en la que se encuentre, para lograr una mayor efectividad.

Detectar el Mildiu

A la hora de detectar los ataques del Mildiu pueden constatarse infecciones primarias o secundarias en base a las condiciones meteorológicas y el estado de la viña. Las infecciones primarias suelen aparecer con temperaturas alrededor de los 11 grados y unas condiciones de humedad de 11 litros por metro cuadrado. Es necesario que la viña tenga brotes de al menos 11 centímetros, y que haya oscuridad: las infecciones primarias solo se producen por la noche. Aunque, como matiza De Prado, estas son indicaciones orientativas, ya que las infecciones primarias pueden aparecer con temperaturas mucho más bajas, puesto que en El Bierzo han detectado Mildiu incluso con 4ºC y con lluvias también muy inferiores a los 11 litros por metro cuadrado. Aunque las infecciones primarias suelen ser más frecuentes cuando aparecen los botones florales separados, pueden producirse desde que los racimos son visibles hasta el envero. Mientras, las infecciones secundarias aparecen al registrarse lluvia o alta humedad por más de 2 horas y una temperatura de entre 10 y 30 grados.

Tratamientos contra el Mildiu

La prevención es clave para enfrentarse al Mildiu, por eso es recomendable recurrir a fungicidas de contacto antes de que se produzca la infección. Una vez que se produce la penetración del hongo en la planta, el micelio del hongo comienza a crecer y a invadir el tejido vegetal. En esta fase, sólo es posible detener el crecimiento del Mildiu con tratamientos curativos, a base de fungicidas sistémicos y penetrantes. Pero hay que tener en cuenta que estos tratamientos solo son eficaces durante los dos primeros días transcurridos desde que penetra el hongo en la planta (momento de la infección). Después ya el micelio está demasiado extendido para que los fungicidas puedan detener su crecimiento. 
Pasados esos dos primeros días, en los siguientes días de fase de crecimiento del hongo dentro del tejido de la vid, no es eficaz aplicar tratamientos
Durante la fase de crecimiento del hongo dentro del tejido de la vid, que puede durar entre 8 y 20 días, no es eficaz aplicar tratamientos. Mientras, transcurrida esta fase, cuando los síntomas se manifiestan y aparecen manchas en las hojas, pelusilla en el envés de las hojas, los racimos, en flor, o en recién cuajados es momento de aplicar tratamientos antiesporulantes. En el caso del Mildiu, la prevención es fundamental. “Se debe tratar cuando hay condiciones de riesgo, pero en todo caso en el Bierzo debemos tratar preventivamente para proteger el racimo desde que aparecen los botones florales separados hasta el envero”, detalla la ingeniera agrónoma. Principales características de los grupos de productos para el tratamiento de Mildiu. En cuanto a los tratamientos químicos del Mildiu, De Prado apunta soluciones para un manejo en ecológico del viñedo que incluyen desde el aceite de naranja al hidróxido cúprico o el óxido cuproso. Tratamientos para el control químico de Mildiu, en convencional y ecológico.// Fuente: Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura. De Prado recuerda que para renovar los tratamientos fungicidas deben darse condiciones de infección y el tratamiento anterior debe haber perdido la efectividad. En los tratamientos sistémicos esto ocurre al cabo de 14 días (aunque varía según el producto), mientras que los fungicidas de contacto persisten 10-12 días si no son lavados por lluvias y para ello deben producirse precipitaciones de más de 12-15 litros por metro cuadrado. La experta recomienda la instalación de un pluviómetro en la parcela para poder conocer mejor la lluvia registrada y saber en qué momento repetir el tratamiento.

El Oídio

La brotación de la viña es el período crítico para la aparición de Oídio (Erysiphe necator), un hongo ectoparásito que surge cuando se registran temperaturas de entre 25 y 28 grados combinadas con humedad. “La humedad ambiental influye en la germinación de las conidias del hongo, pero el agua libre les molesta. También se desarrolla mejor en zonas sombreadas”, detalla la ingeniera agrónoma. El Oídio puede suponer una amenaza para el viñedo hasta que la uva alcanza los 8 grados brix de madurez. Los primeros síntomas se detectan en hojas y racimos, por eso es fundamental revisar las cepas, en especial las variedades y plantas más sensibles. Entre las variedades cultivadas en El Bierzo, las más sensibles al oídio son el Tempranillo y la Doña Blanca.
“El tratamiento más eficaz para la sanidad de la viña en cuanto a oídio es una buena aireación”
“El tratamiento más eficaz para la sanidad de la viña en cuanto a oídio es una buena aireación. Todo lo que facilite la aireación de la vegetación y los racimos y conseguir que los tratamientos cubran bien los racimos es fundamental”, explica De Prado. Por eso, es recomendable evitar el exceso de vigor, realizar poda en verde, así como llevar a cabo deshojados y desnietados de las cepas. También aconsejan colocar los pámpanos en la espaldera y tener en cuenta la orientación de las plantaciones para favorecer la ventilación y aireado de las plantas. En cuanto a los tratamientos para atajar el oído, es necesario ajustar el tratamiento al estado fenológico del viñedo. Así, durante la brotación y la floración es recomendable utilizar tratamientos penetrantes o sistémicos. Mientras que, cuando el racimo está en grano guisante y durante el envero será más adecuado emplear azufre.
Para minimizar la aparición de resistencia a los tratamientos es importante utilizar fungicidas de diferentes familias químicas
Además, la especialista incide en la importancia de utilizar fungicidas de diferentes familias químicas para minimizar la aparición de resistencias por parte de estos patógenos a los tratamientos. En estas soluciones también resulta vital tratar todas las calles del viñedo para que la aplicación cubra por completo todos los racimos. Tratamientos para el control químico de Oídio. //Fuente: Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura. En los viñedos en ecológicos, la ingeniera agrónoma apunta además tres opciones de tratamientos: utilizar carbonato hidrógeno de potasio (bicarbonato potásico), recurrir a la lucha biológica y emplear el hongo Ampelomyces quisqualis, parásito del oídio; o aplicar azufre. En este último caso, es muy importante que la temperatura media a la hora de aplicar el tratamiento se encuentre entre los 18 y los 30 grados, ya que con temperaturas más elevadas con el azufre se produce fitotoxicidad.
Pupa de Polilla del racimo. //Foto. Estación de Avisos Agrícolas del Bierzo.

Polilla del racimo

Otra de las plagas que afecta al viñedo es la conocida como Polilla del racimo (Lobesia botrana). Esta plaga puede tratarse con insecticidas ovicidas o con larvicidas, dependiendo de la fase de desarrollo de esta mariposa. Hay que tener en cuenta que cuando el insecto se encuentra protegido por las propias uvas, el tratamiento resultará poco efectivo. Una de las alternativas en los tratamientos pasa por emplear difusores de confusión sexual para evitar la reproducción de los ejemplares. Las trampas de feromonas, que utilizan como reclamo y atrayente para la polilla sirven para hacer un seguimiento de la plaga y conocer la incidencia que está teniendo en el viñedo.
En la lucha contra la Polilla del racimo pueden emplearse trampas de feromonas así como métodos biológicos e introducir un depredador natural
Al emplear confusión sexual los difusores deben colocarse antes del primer vuelo del insecto. Además, deben situarse en superficies amplias para que resulten eficaces y reforzando los bordes del viñedo. También se puede optar por emplear la feromona pulverizada. Otra de las opciones para atajar la polilla es la lucha biológica e introducir un insecticida natural como es el Bacillus thuringiensis.

Botritis

Entre las principales afecciones del viñedo se encuentra la Botritis (Botrytis cinera) que aparece cuando las temperaturas se sitúan entre los 15 y 20 grados y se producen lluvias o una humedad relativa del 90%. Las heridas en las uvas causadas por la incidencia de otras plagas como el Oídio o la Polilla o por otras causas como el granizo son factores de riesgo para que se produzcan daños por Botritis. La infección en primavera suele aparecer en las hojas mientras que, en verano los daños se concentran en el racimo. Del mismo modo que con el Mildiu o el Oídio, en la Botritis el seguimiento de las condiciones climáticas es fundamental y la prevención es determinante para frenar el ataque del hongo. Mantener la viña aireada, como ocurre con el Oído, es una de las medidas más eficaces para garantizar la sanidad del viñedo. Así, De Prado incide en la importancia de realizar aireados, deshojados y despuntes que favorecen la aireación. “Debe evitarse el exceso de vigor de la planta y si se mantienen las calles enherbadas, es preciso desbrozar con frecuencia”, apunta.
Eliminar otras plagas como el Oídio o la Polilla es una manera de reducir la incidencia de Botritis en el viñedo ya que pueden contribuir a su aparición
Una de las formas para reducir la incidencia de Botritis es atajar otras plagas que puedan desencadenarla, como la Polilla o el Oídio. De Prados también recomienda alternar en el uso de familias químicas y respetar escrupulosamente el plazo de seguridad de la última aplicación. Deshojar el viñedo en espaldera es una medida para reducir el riesgo de Botritis al tiempo que no se reduce el grado alcohólico en cosecha. Control químico de Botritis en ecológico y convencional. //Fuente: Registro de Productos Fitosanitarios del Ministerio de Agricultura.

Black Rot

Otra de las patologías de la viña es el Black Rot (Guignardia bidwellii), que aparece tras registrarse lluvias y temperaturas de alrededor de 27 grados. “A temperaturas inferiores o superiores se precisan períodos de humedad más largos para que se produzca la aparición de Black Rot”, detalla De Prados. Así, con temperaturas por encima de 32 grados ya no se produce la infección. Los fungicidas autorizados para tratar el Black Rot son Ametroctradim y metiram, Azoxistrobin, Difenoconazol, Fenbuconazol, Folpet, Kresoxim-metil, Mancoceb, Miclobutanil, Tebuconazol y Tebuconazol con trifloxistrobin.

Webinar sobre soluciones innovadoras para predicción de enfermedades fúngicas en vid

El lunes 6 de septiembre tendrá lugar el webinar final del Grupo Operativo VITICAST, donde se describirán todos los aspectos técnicos y aplicativos de la herramienta que han desarrollado para optimizar la producción y fomentar el cultivo sostenible de la vid a través de la innovación en el manejo de las enfermedades fúngicas de mayor incidencia (mildiu, oídio y botritis). Además, presentarán los principales resultados obtenidos en el proyecto, que ha alcanzado su fase conclusiva. VITICAST, un Grupo Operativo supra-autonómico, ha desarrollado una herramienta de aviso de posibles infecciones en la que se combinan datos meteorológicos medidos a pie de parcela, la predicción de los estados fenológicos de la vid y la concentración de esporas e inóculo necesario para que se produzca la infección. Esta herramienta permite estimar con antelación la producción de la cosecha, así como reducir los tratamientos antifúngicos aplicados en viñedo. El proyecto de innovación cuenta con la participación de FEUGA, Monet Tecnología e Innovación, la Universidad de Vigo, la Estación Fitopatolóxica Areeiro (EFA, Deputación de Pontevedra) y las bodegas Hacienda Monasterio, Viña Costeira, y Matarromera. VITICAST está cofinanciado en un 80% por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER) de la Unión Europea y en un 20% por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el marco del Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020. Presupuesto total del proyecto: 615.249,11 euros, Subvención total: 599.957,11 euros. Fecha: lunes 6 de septiembre de 2021 Hora: 16 horas Plataforma: ZOOM (con traducción simultánea al inglés) Más información: https://www.infowine.com/es/agenda/soluciones_innovadoras_para_prediccin_de_enfermedades_fngicas_en_vid_sc_19950.htm Inscripción gratuita a través del siguiente enlace: https://zoom.us/webinar/register/7516280823557/WN_Q6q9P7rVQA6wcrZ_Zl-Lvg