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Un estudio con 3.500 vacas lecheras demuestra que los animales híbridos son más rentables en las ganaderías

El profesor Les Hansen, de la Universidad de Minnesota, es uno de los autores del estudio publicado

El mayor estudio continuo del mundo en el que se comparan vacas lecheras cruzadas con holstein de raza pura arroja resultados concluyentes en relación a los beneficios que los cruzamientos aportan para incrementar la rentabilidad de las explotaciones: 33% más de beneficio vitalicio, un coste en tratamientos de salud un 26% inferior y 147 días más de producción de leche.

«Los resultados de este estudio proporcionan evidencias de que el cruzamiento rotacional de 3 razas es una alternativa rentable a la cría de vacas holstein puras para un alto rendimiento en rebaños estabulados intensivos destinados a la producción de leche en climas templados. Específicamente, las razas holstein, montbeliard y roja sueca son adecuadas para este cruzamiento rotacional porque se han seleccionado históricamente por rasgos que se complementan bien entre sí», concluyen los investigadores Amy Hazel, Brad Heins y Les Hansen.

Las vacas holstein generan en las granjas de EEUU unos beneficios de 2.800 dólares por cabeza, mientras que las procross incrementan el rendimiento vitalicio en 900 euros, hasta llegar a los 3.700 dólares

Según las conclusiones económicas de esta investigación, llevada a cabo por la Universidad de Minnesota en 7 granjas lecheras de Estados Unidos y que acaba de ser publicada en el prestigioso Journal of Dairy Science, el medio oficial de la Asociación Americana de Investigadores Lácteos, el ganado Procross, que se selecciona genéticamente utilizando un sistema rotatorio de cruces de tres razas (holstein, montbeliard y roja sueca), proporciona ganancias diarias que se sitúan, de media, entre el 13% entre los animales F1 (holstein x montbeliard) y el 9% de los F2 (holstein x montbeliard x roja sueca).

Los resultados de este estudio proporcionan evidencias de que el cruzamiento rotacional de 3 razas es una alternativa rentable a la cría de vacas holstein puras para un alto rendimiento en rebaños estabulados intensivos destinados a la producción de leche en climas templados

Este ensayo empezó inscribiendo a 3.550 vacas holstein puras en 2008, que se mantendrían en sus rebaños comerciales, cruzando una parte de ellas y manteniendo puras a la otra mitad para de este modo poder comparar en granja el rendimiento de un cruce de dos y tres razas, basado en la genética holstein (HO), montbeliarde (MO) y Viking Red (VR), concluyendo que estas tres razas eran altamente complementarias, por lo que desde entonces se han utilizado en el desarrollo de un programa estructurado de cruzamiento de tres vías, que se comercializa bajo la marca Procross.

Un 9% más de beneficio diario

Los datos concretos del estudio a nivel de campo, en el que se han monitorizado desde el año 2008 al año 2018 los costes y beneficios tanto de animales puros como cruzados que compartían instalaciones en 7 establos reales, indican que los cruces combinados de 2 razas (holstein y montbeliard) tuvieron 47,3 centavos de dólar (13%) más de beneficio diario y que los cruces combinados de 3 razas (holstein, montbeliard y roja sueca) tuvieron 34,2 centavos de dólar (9%) más de ganancias diarias en comparación con sus respectivas compañeras de rebaño holstein.

Las vacas procross generan ingresos diarios por producción de leche un 1% inferiores a las holstein, algo que compensan con creces con un ahorro del 4% en los costes de producción

Para llegar a estas conclusiones se investigó durante una década una amplia gama de parámetros de rendimiento en miles de vacas en el estudio, incluida la producción de leche, grasa y proteína, la esperanza de vida, la fertilidad y una variedad de características de salud y manejo.

El informe concluye que el ganado lechero cruzado que combina las razas holstein, montbeliard y roja sueca es 0,34 dólares (0,28 €) más rentable por día de vida que el holstein puro y 55 céntimos si se tiene en cuenta el mejor índice de conversión de alimento.

Un rebaño de vacas cruzadas proporciona cada año 100 euros más de beneficio por cabeza que uno de frisonas puras

Esto resultó en 173 dólares más de beneficio anual por vaca para la combinación de 2 razas y 125 dólares más en el caso de tres cruces. Los factores que influyen en la mejora de la rentabilidad son numerosos, pero se pueden resumir en la reducción del 4% en los costes de producción, frente a una pequeña pérdida en los ingresos diarios por producción de solo un 1% en comparación con las vacas holstein puras, a las que sin embargo sobrepasan en producción vitalicia.

Mayor producción vitalicia de sólidos

Una vaca holstein produce de media a lo largo de su vida unos 2.200 kilogramos de sólidos, cuando la producción vitalicia de una procross supera esa cifra en casi 350 kilos.“La producción de grasa más proteína a lo largo de la vida fue mayor para las vacas Procross que para sus compañeras de rebaño holstein, lo que se debe a su mayor vida útil en las explotaciones”, dicen los autores del estudio.

Los cruzamientos permiten crecer más rápido a las explotaciones que quieren aumentar su número de cabezas

La vida productiva de las vacas cruzadas es más larga (147 días adicionales), lo que deriva en una mayor producción vitalicia de sólidos (346 kg adicionales de grasa más proteína), lo que equivale a una rentabilidad vitalicia un 33% mayor para las vacas procross. «Este es un dato muy importante a tener en cuenta para los rebaños en expansión», asegura Les Hansen, que el jueves pasado participó en un webinar para presentar las conclusiones del estudio.

Mejor índice de conversión de alimento

El cálculo del beneficio diario y vitalicio comparativo se ha realizado ignorando las posibles diferencias de eficiencia alimenticia, una ventaja adicional del ganado cruzado. Pero fue algo que no se midió en este estudio en particular, sino que se documentó en un ensayo separado, dado que «en las 7 granjas estudiadas tanto las vacas cruzadas como las holstein puras se encontraban mezcladas, por lo que no se pudo medir la ingesta de alimento para cada vaca en este trabajo”, explica. “Sin embargo, un estudio posterior llevado a cabo en la propia Universidad de Minnesota en 2019 monitoreó la ingesta de alimento y observó una mejora de hasta un 8% en la eficiencia de conversión de alimento en el ganado Procross en comparación con animales holstein.

Los animales cruzados son un 8% más eficientes que los holstein puros a la hora de trasladar la ingesta de la ración a producción de leche

“Si aplicamos esos resultados al coste del alimento durante la lactación de las vacas en nuestro estudio, encontramos que el aumento de la ganancia diaria para las vacas cruzadas aumenta de 0,34 dólares diarios (0,28€) a 0,66 (0,55€) en comparación con sus compañeras de rebaño holstein”, indica Les Hansen.

“En una era en la que debemos observar cuidadosamente los recursos utilizados, así como los costes de producir cualquier alimento humano, estas son consideraciones importantes”, añade, porque «producir aproximadamente la misma cantidad de leche, grasa y proteína con una menor rotación de ganado, menos intervenciones para mantener la salud y la fertilidad y potencialmente menos alimento es una ventaja importante en este ganado cruzado», defiende.

Mayor longevidad

Tras hacer un seguimiento pormenorizado a las vacas puras y cruzadas de las 7 granjas norteamericanas que participaron en el estudio, los resultados son concluyentes a respecto de la mayor longevidad del ganado cruzado: los cruces de 2 razas tenían 158 días más de vida productiva en el rebaño y los cruces de 3 razas habían estado produciendo leche 147 días más en comparación con sus respectivas compañeras holstein puras.

La vida productiva de una vaca procross es 147 días (4,8 meses) más larga que la de sus compañeras de rebaño holstein

De hecho, el 16,3% de las vacas holstein eran enviadas a matadero antes de los 45 meses en producción, mientras que este porcentaje de descartes se reducía hasta el 12,4% en el caso de los animales cruzados, donde aproximadamente el 29% de las vacas seguían produciendo leche dos años después del primer parto, frente a sólo el 18% de las holstein.

Gracias a la mayor longevidad de las vacas cruzadas, esto hace que sea necesario un menor porcentaje de reemplazo y, por lo tanto, también de recría, con lo que se ahorran costes por esta vía, incrementando además los ingresos de la granja por la venta de terneros (al generarse excedentes de recría es posible dedicar un mayor número de animales a venta a cebaderos) y el precio en el mercado de este tipo de animales cruzados es también mayor (130 dólares frente a los 100 dólares de los terneros holstein).

Menor coste de reposición

Además, a mayores de la mayor producción vitalicia y el incremento en la venta de terneros, los beneficios se ven amplificados por el hecho de que las vacas procross dejan un 14% más de dinero cuando acaban su ciclo productivo y son enviadas al matadero.

Esta es otra de las conclusiones del estudio, ya que el precio de venta en el momento del sacrificio también resultó ser mayor en el caso de los animales procross en comparación con las vacas frisonas puras. En concreto, las vacas fruto de cruces entre holstein y montbeliard proporcionaron 122 dólares más de ingresos, que se incrementaban hasta los 134 dólares en el caso de vacas trihíbridas holstein, montbeliard y roja sueca.

Las vacas procross dejan un 14% más de dinero cuando acaban su ciclo productivo y son enviadas al matadero por su mejor condición corporal

Su mayor longevidad (158 días en el caso de cruces de dos razas y 147 días en caso de usar de 3 razas) fue la principal razón para un menor coste de reemplazo diario de las 2 razas (20,1 centavos de dólar) y de las 3 razas (21,3 centavos) en comparación con las holstein puras. Los cruces de 3 razas tenían además un menor coste de reemplazo (28 dólares por animal) debido a su menor edad en el primer parto.

La mejor condición corporal de las novillas procross permite adelantar su inseminación. Además, mientras sólo el 37% de las novillas frisonas puras empreña en la primera inseminación, en el caso de las terneras cruzadas el porcentaje de preñez con una sóla dosis de semen supera el 50%, una tendencia que se mantiene también en los siguientes partos.

Tratamientos de salud

«El vigor híbrido dentro de las especies de animales de granja es mayor para los rasgos que afectan la aptitud, y esos rasgos incluyen fertilidad, mortinatalidad, salud y longevidad para las vacas lecheras», explican los autores del estudio. De hecho, la mejora de estos rasgos explicaría en gran medida la diferencia de beneficio diario observado en este estudio para los cruces de 2 y 3 razas en comparación con sus respectivas compañeras de rebaño holstein.

El informe final de este importante estudio sobre cruzamientos acaba de ser publicado en el Journal of Dairy Science

El coste de los medicamentos había sido ignorado hasta ahora en la mayoría de las investigaciones anteriores sobre la rentabilidad del mestizaje. Sin embargo, un menor gasto en tratamientos de salud (6,7 centavos de dólar menos al día en el caso de cruces de holstein y montbeliard y 9 centavos menos en el caso de holstein, montbeliard y roja sueca) en comparación con las vacas hosltein puras del rebaño fue también uno de los motivos importantes que contribuyeron a un mayor beneficio diario de los cruces en este estudio, pues mientras en una vaca holstein el coste en tratamientos se incrementa entre la primera lactación y la tercera de 43 dólares a 109 dólares, en las vacas procross ese gasto se sitúa en 33 dólares en la primera lactación y pasa a 81 en la tercera. 

«El menor coste de reemplazo, el menor coste de los tratamientos de salud y el mayor valor de los terneros fueron los tres elementos de ingresos y gastos más influyentes que llevaron a una mayor rentabilidad del ganado Procross», concluyen los investigadores de la Universidad de Minnesota.

Un programa de reproducción estructurado desde 2014

Las primeras experiencias sobre cruzamientos en razas lecheras empezaron a realizarse en California y Minnesota como un intento de frenar el acelerado declive que la consanguinidad estaba provocando en granjas comerciales de Estados Unidos, sobre todo en aspectos reproductivos y de salud.

Los informes positivos del cruce de tres vías implementado por estos primeros productores lácteos norteamericanos resultaron tan alentadores que desencadenaron el lanzamiento de una empresa internacional en 2014 utilizando las tres razas involucradas: holstein, montbeliard y roja sueca. Este método de cruzamiento rotatorio, que lleva el nombre de Procross, está integrado por la compañía danesa VikingGenetics, la francesa Coopex Montbéliarde, y las estadounidenses Select Sires y Creative Genetics of California, quienes proporcionan la genética de las distintas razas para implementar los cruzamientos.

El programa Procross lleva años afianzado en distintos países europeos, como Holanda, Reino Unido o Portugal y avanza también en ganaderías de toda España

Una de las razones del éxito del programa Procross se debe a la naturaleza complementaria de las razas utilizadas. “Son tres razas que se complementan a la perfección: la holstein ofrece características de producción y de ubre; la montbeliard aporta fertilidad, condición corporal y fuerza; y la roja sueca características de parto, salud de la ubre y fertilidad. Además, las tres razas son también complementarias por su estatura, lo que ayuda a brindar uniformidad de tamaño y facilidad de manejo», destacan los investigadores de la Universidad de Minnesota, la doctora Amy Hazel y los profesores Brad Heins y Les Hansen, autores principales del informe presentado la semana pasada.

Heterosis

Uno de los factores principales en el éxito de este cruce de tres vías es el fenómeno de la heterosis, también conocido como vigor híbrido. Esto confiere un mejor rendimiento a la descendencia de animales no emparentados de lo esperado teniendo en cuenta los índices de producción promedio de los padres. La razón de emplear tres razas y no dos es precisamente la de mantener en el tiempo los efectos positivos de la heterosis, ya que usando sólo dos razas el vigor híbrido se reduciría del 86% al 67%. 

Todos estos factores positivos de la heterosis se reflejaron en el rendimiento del ganado en el estudio, con una mejor salud, fertilidad y esperanza de vida, todo ello contribuyendo a la reducción de los costes de producción del ganado procross.

El vigor híbrido se mantiene alrededor del 86% en un programa de cruzamiento de tres razas, mientras que descendería al 67% si sólo se utilizasen dos

La raza holstein, por el contrario, usada hasta ahora casi como una monocultura para la producción lechera en todo el mundo, ha acabado generando numerosos problemas debido a los altos niveles de consanguinidad, situados por encima del 8% en EEUU y que continúa aumentando en niveles anuales cercanos al 0,4%,

«En 1990 la tasa de consanguinidad en las vacas holstein en los EEUU era del 4,4% pero ha ido subiendo rápidamente hasta llegar al 5,8% en 2011 y situarse hoy ya en el 8,6% como consecuencia de recriar masivamente de sólo cinco toros (Supersire, Mogul, Planet, Shottle e O-Man», detalló el profesor Hansen. 

Esta práctica ha acabado provocando depresión endogámica (el efecto opuesto al vigor híbrido), un fenómeno que roba silenciosamente los beneficios de la mejora genética, especialmente en rasgos que no se perciben a primera vista, como pérdida de embrión, escasa resistencia a enfermedades o mayor tasa de mortalidad.

«Hoy la consanguinidad en la raza frisona es un problema para la rentabilidad de las granjas»

Afirma que las vacas cruzadas son más rentables en las explotaciones que las frisonas puras y aporta datos para demostrarlo. Leslie Hansen es profesor en la Universidad de Minnesota y durante los últimos 10 años ha estado comparando en granjas estadounidenses los costes y beneficios aportados por los distintos animales en siete rebaños comerciales diferentes. El estudio fue presentado el verano pasado tras haber analizado unas 5.000 vacas, la mitad holstein puras y la otra mitad cruces con otras razas, como la montbeliard o la roja sueca, un sistema de cruces trihibrido conocido como Procross.
Se trata de producir el vigor híbrido o heteroxis mediante el cruce entre distintas razas puras
La investigación llevada a cabo, en la que además de Les Hansen participaron los profesores Amy Hazel y Bradley Heins, trataba de encontrar datos concluyentes para una evidencia científica ya demostrada en otras especies tanto de animales como de plantas: al cruzar razas puras diferentes de la misma especie se logra un efecto positivo llamado vigor híbrido o heteroxis. Esta técnica de mejora productiva ya se usó, además de en vegetales, en otras especies animales (aves, cerdos, caballos y bovinos de carne) y desde hace más de una década se está aplicando también a vacas de leche, donde los efectos positivos del vigor híbrido acaban notándose en la producción de sólidos y en la producción vitalicia de las vacas, pero también en la salud y en la reproducción, concluye el estudio llevado a cabo por la Universidad de Minnesota. Niveles de consanguinidad que superan el 8% en EEUU La mejora en la raza frisona ha caminado en las últimas décadas de la mano de la selección genética, mediante la escoja de los animales más productivos, familias de toros y vacas de EEUU o Canadá cuyo semen fue implantado en explotaciones de todo el mundo. Eso hizo que los niveles de consanguinidad en la raza holstein hayan ido aumentando de manera exponencial desde los años 80 hasta la actualidad, pasando en los EEUU del 2% en 1980 a porcentajes superiores al 8% en la actualidad. "En EEUU llevamos décadas cruzando los mejores animales consigo mismos, llevamos 50 años cruzando básicamente los genes de tres toros. Hoy tenemos unos índices de consanguinidad en las vacas hosltein del 8%. Eso es muchísimo, si tenemos en cuenta que si cruzamos una madre con su hijo a consanguinidad sería del 25%", explica.
A partir del 6,25% es como si cruzásemos primos hermanos. El nivel de endogamia en las vacas estadounidenses es insostenible y continúa aumentando a un ritmo anual del 0,4%
En Europa la tasa de consanguinidad es menor que en EEUU y hasta el 6,25% no es un problema (sería el equivalente a la endogamia entre primos hermanos), a partír de ahí es cuando se empieza a notar, explica. "Comienza a notarse con pérdidas embrionarias y mortinatalidad", asegura Les. "La consanguinidad de la raza holstein es un limitante que hace que sea difícil seguir mejorando su potencial de producción, porque a partir del 6,25% es como si cruzásemos primos hermanos y por encima del 12% sería cruzar medio hermanos. El nivel de endogamia en las vacas estadounidenses es insostenible y continúa aumentando a un ritmo anual del 0,4%", explica el profesor Hansen. Efectos no visibles "Esto da lugar a la depresión endogámica, que es el efecto opuesto al vigor híbrido, un fenómeno que roba silenciosamente los beneficios a los productores de leche, especialmente en rasgos que no se perciben a primera vista, como la pérdida del feto, la resistencia ante las enfermedades o la propia supervivencia de la vaca", defiende Les. "La consanguinidad no tiene mucha incidencia en el aspecto productivo en sí, pero sí en aspectos de salud y fertilidad, lo que evidentemente acaba afectando a la producción y generando costes económicos y pérdida de ingresos", asegura.
Los cruces eliminan los problemas de la consanguinidad porque al cruzar se cancelan los genes recesivos y se produce el vigor híbrido
"Los primeros efectos visibles de la consanguinidad son la mortinatalidad embrionaria, embriones con pequeños defectos o mutaciones genéticas que no sobreviven y que se reabsorven a los pocos días. La segunda consecuencia es la mortinatalidad de terneros, el becerro o becerra nace muerto o muere en los primeros días porque no aguanta. En tercer lugar, también a causa de la consanguinidad, estamos viendo terneras infértiles, que no vienen al celo y, finalmente, como una cuarta consecuencia estaría que los genes regresivos y aplotipos, que son infinitos y siempre van a salir, acaban multiplicando los problemas postparto en la ganadería", resume. Esa es para él la principal ventaja de cruzar con otras razas bovinas a las vacas holstein. "El vigor híbrido se produce porque al cruzar se cancelan los genes recesivos, es decir, los cruces eliminan los problemas de consanguinidad", asegura. Ejemplos del vigor híbrido en otras especies Pero, si los cruces entre razas lecheras producen todos esos efectos positivos, ¿por qué no todas las ganaderías los están aprovechando cuando esas ventajas llevan décadas siendo aprovechadas en otras producciones, como por ejemplo en el maíz híbrido o en sectores como el ovino o el porcino? Les Hansen encuentra una respuesta sencilla: "la agricultura es muy tradicional y conservadora, a los ganaderos les cuesta hacer cambios y el sistema Procross de cruces es algo aun muy nuevo tanto en EEUU como en Europa", afirma.
La agricultura es muy tradicional y conservadora, a los ganaderos les cuesta hacer cambios
El sistema de cruces rotacional en vacas lecheras nació en los EEUU en el 2001. Las primeras pruebas se llevaron a cabo en macrogranjas de más de 1.000 vacas en intensivo de California, pero no fue hasta 2014 cuando se creó Procross como empresa, consecuencia de la unión de dos cooperativas europeas: Viking Genetics, que engloba a más de 20.000 ganaderos nórdicos, y Coopex Montbeliarde de Francia. "Hay que despertar a la gente. Podemos mejorar las razas puras pero los cruces siempre aportan un plus a esas razas puras. Y cuanto mejores sean las razas puras que cruzamos mejores serán los cruces que obtendremos. Por eso tenemos que aprovechar el progreso genético logrado en cada raza, usando los mejores toros holstein, montbeliarde y rojo sueco", afirma Les. ¿Por qué se han escogido esas tres razas? El profesor norteamericano dice que porque se complementan muy bien: "la holstein aporta alta producción y ubre, la montbeliarde fertilidad y condición corporal y la roja sueca salud, patas y cascos y facilidad de parto". Además, explica, "usar las tres razas permite mantener el vigor híbrido a un nivel más alto durante más tiempo porque utilizando solo dos razas en vez de tres en los cruces el nivel de heterosis baja del 86% al 67%".
El programa de cruce rotacional nació en macrogranjas intensivas de California en el año 2001 y en la actualidad ya se aplica en ganaderías tanto de los EEUU como de Europa
La motbeliarde es una raza antigua de la montaña especial para la producción de quesos de la que existe una cabaña de un millón y medio de ejemplares. Viking Red es en sí mismo un amalgama de los programas de selección genética de las razas roja sueca, ayrshire finlandesa y roja danesa del que existen ya 300.000 animales. La presión de la industria de semen internacional Pero el hecho de que los animales resultantes no sean homogéneos, como ocurre en las razas puras, choca en la percepción inicial de los ganaderos, acostumbrados a ver hasta ahora en sus granjas como sus vacas eran casi todas iguales.
Hoy la presión de las empresas de genética hace que miren más por su supervivencia que por la supervivencia de la raza
Les Hansen reconoce que como genetista ha sufrido las presiones de la industria de semen americana y asegura no tener prejuicio alguno en relación a la raza frisona. "Yo nací en una granja con vacas hosltein, mi padre vino de Dinamarca y todos mis ancestros vienen de ganaderías en Dinamarca y Noruega", explica. Pero añade que en la actualidad "la raza holstein es como una monocultura para la producción lechera en todo el mundo". "Hoy la presión de las empresas de genética hace que miren más por su supervivencia que por la supervivencia de la raza", concluye el profesor norteamericano.

"Las vacas cruzadas dan ganancias a lo largo de su vida un tercio mayores que las holstein puras"

Leslie Hansen comenzó a seguir y monitorizar a esos primeros ganaderos de California que empezaron a usar Procross. "Esos ganaderos querían un control técnico y me llamaron para hacer comparación con los dos rebaños, hosltein y cruzadas. Querían respuestas claras y científicas", explica. El ejemplo de aquellos ganaderos de California que comenzaron a cruzar su ganado en el año 2001 fue seguido por granjeros de Minnesota en el 2007. "Los 7 establos de Minnesota que comenzaron querían reducir su número de vacas enfermas, era su principal objetivo", explica el profesor de la universidad local, que les ayudó a implantar el sistema.
El estudio analizó durante 10 años el beneficio por vaca, sumando los ingresos por producción, venta de terneros y desvieje y descontados los costes de alimentación, tratamientos y reproducción
"Todos se comprometieron a mantener un 40% de vacas holstein puras en sus rebaños para poder hacer comparación de resultados durante 10 años", cuenta. Eran todos establos de alto nivel, con más de 14.000 litros de producción media por vaca. "Estamos hablando de granjas bien manejadas, que obtienen buenos datos en las holstein puras también", aclara el autor del estudio. El trabajo analizó durante un periodo de 10 años el beneficio por vaca (rentabilidad vitalicia), sumado producción vitalicia (tanto de litros de leche como de sólidos), venta de terneros y valor de desvieje y descontados todos los costes (alimentación, tratamientos, inseminación, etc) con un precio de venta de leche de 38 céntimos por litro y con un coste de alimentación de 23 céntimos por kilo de materia seca.
Las vacas cruzadas obtuvieron una rentabilidad vitalicia un tercio mayor que las frisonas puras
"El resultado fue que las vacas Procross son más rentables porque producen durante más tiempo y cuesta menos mantenerlas en el establo", resume Lees Hansen. Las trihibridas se mantienen produciendo en el establo de media 147 días más que las frisonas, que están un promedio de 886 días dando leche. Las vacas holstein puras tuvieron una rentabilidad vitalicia de 2.842 dólares por vaca, mientras que las cruzadas supusieron una rentabilidad por vaca un 33% mayor (920 dólares más por vaca).
La mejora de la rentabilidad que proporciona el vigor híbrido es de un 13% en el primer cruce y de un 9% en el segundo
Trasladado a ingresos diarios, las conclusiones de este estudio, el mayor realizado hasta ahora comparando vacas cruzadas con frisonas puras, son que los animales híbridos fruto del cruce de dos razas (Montbeliarde x Holstein o Rojo Sueco x Holstein) proporcionan ganancias que se sitúan de media un 13% por encima de las obtenidas con una vaca holstein pura. Cuando el cruce es de las tres razas los beneficios son un 9% más que en el caso de las fisonas cien por cien. Morfología contraproducente en las holstein Rebaño de vacas Procross, de menor tamaño y una menor angulosidad que las frisonas puras "El sector lechero de raza holstein ha tenido un enorme éxito en la selección en base a la producción en los últimos 40 años, pero también se ha seleccionado enfatizando un mayor tamaño y un cuerpo más anguloso, pero esos son rasgos que poseen un antagonismo genético con aspectos como la fertilidad, la salud y la supervivencia por lo que la raza holstein también ha sufrido un rápido deterioro en esos rasgos funcionales", considera Les Hansen.
Queríamos vacas de pasarela y eso hoy sabemos que es contraproducente con salud y con longevidad y en la mayoría de los establos los cubículos se han quedado pequeños. Fue un error seleccionar vacas más altas y angulosas, que requieren más comida para mantener su condición corporal
"Queríamos vacas más altas, vacas de pasarela, y eso hoy sabemos que es contraproducente con salud y con longevidad. Cada vez las vacas frisonas son más altas por la evolución genética de las últimas décadas y en la mayoría de los establos los cubículos han quedado pequeños. Ahora sabemos que fue un error seleccionar vacas más altas y angulosas. Las vacas más altas requieren más alimentación para mantener la condición corporal, el rumen no está proporcionado y por eso las grandes vacas holstein tienen problemas de desplazamiento de abomaso. El problema es revertir esa selección, porque llevamos décadas escogiendo vacas más altas y estilizadas y hoy no es fácil encontrar toros bajos buenos", argumenta. Al igual que el menor tamaño corporal de las vacas cruzadas tiene ventajas respeto de las frisonas, también las tiene la configuración morfológica de la ubre en las vacas Procross, sobre todo de cara a la robotización de los procesos de ordeño. "La distancia entre pezones traseros, muy habitual en las frisonas, es un problema para los robots, lo mismo que los pezones muy cortos, que son una incomodidad para ordeñar en sala pero una auténtica pesadilla para los robots. En el caso de las vacas cruzadas, los pezones son más largos", evidencia. Requerimientos de alimentación inferiores Vaca cruzada Procross El ganado cruzado, afirma, es más fácil de manejar porque enferma menos y da menos problemas y cuesta menos de mantener para el mismo nivel de rendimiento. "La conversión alimentaria es mejor en las procross. Precisan un 4,8% menos de ingesta de materia seca en la primera lactación y un 6,5% en la segunda y tercera lactación a respecto de las holstein puras", asegura Les Hansen. Estas menores necesidades de alimentación se dan tanto durante la lactancia como en el periodo seco. En la actualidad el profesor norteamericano está comparando el comportamiento de las vacas híbridas frente a las frisonas puras cuando reciben una ración baja en almidón y alta en fibra. "La ración habitual tiene un 46% de forraje y la que estamos estudiando tiene un 59%. Con esta dieta con menor presencia de concentrado y, por lo tanto, con un menor coste en alimentación, producen más grasa y más proteína los animales cruzados", indica. Más sólidos y más producción vitalicia Según las investigaciones de la Universidad de Minnesota, las vacas Procross producen un 8% más de sólidos en leche que las holstein puras por kilo de ingesta de materia seca. La producción media anual de las vacas cruzadas estudiadas fue de 13.587 kilos con 512 kilos de grasa y 426 de proteína.
Las vacas Procross duran de promedio 150 días más produciendo leche en los establos
Los niveles de grasa y proteína de la leche de las vacas Procross es mayor, pero al convertir la producción de sólidos a índices de kilos diarios se vio que el ganado cruzado producía un 1% más en el caso de los cruces de dos razas y un 1% menos que sus compañeras de rebaño holstein puras en el caso del cruce de las tres razas, dado que la producción de litros de leche era ligeramente menor en las vacas Procross trihíbridas.
A la cuarta lactación llegan el doble de vacas cruzadas que de frisonas puras, pues solo 2 de cada 10 frisonas llegan a parir cuatro veces frente a 4 de cada 10 cruzadas
Pero la diferencia sustancial está en la producción vitalicia total, tanto de leche como de grasa y proteína. Solo la mitad de las holstein llega al tercer parto y solo una de cada cinco llega a parir 4 veces. En las cruzadas el 60% llegan al tercer parto y dos de cada cinco al cuarto. El nivel de supervivencia del ganado híbrido al cuarto parto dobla, pues, al del frisón puro, ya que mientras en las siete granjas estudiadas tan sólo el 22% de las vacas holstein seguían produciendo leche al cuarto parto, el porcentaje de cruces que seguían dando leche era del 41%, lo que repercute en una menor tasa de reposición y, por lo tanto, en menor necesidad de recría. Los terneros pintos de cruce tienen además mayor valor comercial (en los EEUU valen 30 dólares más que los frisones pintos), igual que las vacas cruzadas de desvieje (dejan 150 dólares más que las holstein al mandarlas a matadero). Menores costes sanitarios y reproductivos Sin embargo, la diferencia más importante entre los dos rebaños, el frisón puro y el cruzado, se dio tanto en los costes sanitarios como en los reproductivos. Las vacas cruzadas enfermaron mucho menos en las granjas estadounidenses analizadas en los 10 años de estudio que sus compañeras holstein puras, al sufrir menos casos de mamitis y menos problemas metabólicos.
El gasto en veterinario y tratamientos es un 23% menor en las vacas Procross con respeto a las holstein puras
Les Hansen detalló los costes de los tratamientos de salud obtenidos en base a los datos reales, sacados de las facturas en veterinarios y medicamentos de los distintos establos. Así, dijo, la salud de una vaca holstein cuesta 43 dólares en primer parto, 68 en segundo y 92 en tercer parto. Esos gastos se reducen en 20 dólares en el caso de las cruzadas en cada lactancia, indicó. Detalló también que el gasto en tratamiento de mamitis es de 12 dólares en una holstein en primer parto frente a 10 de las vacas Procross, 17 frente a 13 en el segundo parto y 23 frente a 18 en el tercero. En el caso de los problemas metabólicos, el coste de tratamiento en la tercera lactación se reduce a la mitad en el ganado cruzado.
La tasa de concepción a la primera inseminación es un 8% mayor en las vacas cruzadas, por lo que pasan menos días abiertos entre lactación y lactación
Ese menor coste también se nota a nivel reproductivo. "Las frisonas puras van perdiendo fertilidad. En el primer parto el 62% de los animales logra parir antes de los 14 meses pero en la segunda lactación el número de vacas que paren antes de los 14 meses se reduce al 46% y en la tercera al 41%. En las cruzadas el porcentaje de las que paren antes de los 14 meses en la primera lactación es del 69% y baja solo hasta el 63% en la tercera", detalla. La mitad de las terneras procross empreñan con la primeira dosis de semen; en las frisonas solo el 37% Solo el 37% de las novillas frisonas puras empreña en la primera inseminación, un porcentaje que en el caso de las terneras cruzadas supera el 50%, una tendencia que se mantiene también en los siguientes partos. "El número de dosis necesarias para que la vaca empreñe se reduce de las 2,4 en las holstein a 1,9 en las cruzadas y la mortinatalidad (muerte de los terneros en las primeras 48 horas de vida) disminuye del 9% en las frisonas puras al 1% de las hijas de las trihibridas", explica Les Hansen, que añade que "en el año 2010 en los EEUU las vacas holstein superaban los dos meses en días abiertos, una cifra que los ganaderos mediante la mejora genética lograron reducir en 2015 a 57 días", pero que en las vacas Procross se reduce de manera muy considerable, pues están de media dos semanas menos abiertas.

Ganadería Rego SC, apuesta clara por la genómica y las calidades de la leche

Fernando, en la nave de producción de la ganadería, ubicada en la parroquia de Armeá de Arriba Los hermanos Fernando y Pedro Rego mantienen una ganadería familiar en Armeá de Arriba, en el ayuntamiento de Láncara, que lleva años trabajando en la mejora genética. Fernando compatibiliza el trabajo en la explotación con el que realiza en Africor llevando el Programa de Acoplamientos. Aprovechamos para hablar con él sobre los avances en genómica. "La primera prueba a la recría que teníamos en nuestra explotación la hicimos en el año 2016 y hoy tenemos a todos los animales del establo genotipados", explica. "Para poder tomar alguna decisión tienes que genotipar todo y después escoger, no tiene sentido genotipar unas vacas sí y otras no, porque no se debería trabajar con valores, sino con porcentajes, por ejemplo, escogiendo el 80% de los mejores animales y en base a eso establecer el punto de corte. El nivel aquí lo ponemos en 3.200 puntos, pero en otra granja puede estar en 2.800 en función del nivel medio de la explotación", argumenta Fernando.
Está entre las mejores explotaciones de la provincia de Lugo teniendo en cuenta el análisis combinado de producción, morfología y genética
Gandeiría Rego genotipa todas las terneras que nacen para decidir con que tipo de semen son inseminadas. "El punto de corte para nosotros son 3.200 puntos ICO. A partir de ahí ponemos sexado y por debajo de 3.000 ponemos cruce aunque sean novillas. En el caso de las vacas adultas, solo ponemos frisón si son muy buenas", cuenta. En esta explotación llevan muchos años apostando por la mejora genética y cuentan con un rebaño con una calificación media de 83 y 2.500 puntos ICO de promedio. Estos valores le sirvieron a Ganadería Rego para entrar varios años en el podio de las granjas lecheras de la provincia de Lugo en la prueba combinada de Africor. "Llevamos muchos años trabajando en la genética. En 1989 tuvimos un vacío sanitario y se habían traído vacas de Francia y a partir de esa base fuimos seleccionando y mejorando", explica Fernando. Las calidades, lo prioritario En el año 1989 tuvieron un vacío sanitario e importaron vacas de Francia Pero a pesar del alto nivel genético de esta explotación, tanto para Fernando como para Pedro es algo que consideran como una herramienta al servicio de la producción y de los objetivos hacia los que enfocan la granja. "Llevamos varios años en Entrepinares y priorizamos la obtención de calidades. Tenemos vacas MB que inseminamos de cruce. Nos fijamos poco en la calificación, miramos sobre todo calidades, nuestro objetivo es la rentabilidad y la prioridad actual para nosotros son la grasa y la proteína", afirman.
El promedio de la lactación normalizada del último año fue de 12.500 litros con altos niveles de grasa y proteína
Se mueven en porcentajes del 3,50 de proteína y entre el 3,85 y el 4% de grasa con 12.500 litros de promedio de producción en la última lactación normalizada. Cuentan con un robot de ordeño VMS de Delaval en el que logran medias de 42 litros por vaca y día haciendo entorno a 2,6 y 2,7 ordeños por animal, aunque es algo que tampoco les obsesiona. "Nuestro objetivo no es incrementar el promedio de ordeños, porque si con 2,5 logras 42 litros, ¿para qué queremos ordeñar más a las vacas? Hay que ordeñar 3 veces a las vacas que dan mucha leche, las otras no es necesario", argumenta Fernando. De las vacas trabadas al robot de ordeño En 2012 hicieron una nave de producción nueva y ahora ampliaron para la recría Ganadería Rego SC es una explotación lechera familiar de muchos años que tiene garantizada su continuidad gracias a la incorporación de los dos hermanos, Fernando y Pedro. Hasta el 2006 los titulares eran sus padres, Antonio y Olga, que comenzaron a producir leche en 1975 en una cuadra con las vacas atadas y ordeñándolas mediante cántara. En 1989 incorporaron un  circuito de ordeño y en 2003 pasaron al sistema canadiense. Las vacas en producción están en camas de arena y la nave cuenta con pasillos amplios Pedro se incorporó a la explotación en 2006 y en 2011 se sumó Fernando y constituyeron la actual SC. Un año después construían la nave de producción actual, de estructura metálica tipo invernadero, pensada para estabulación libre (con pasillos amplios de 5,70 y 4,50 metros y camas de arena) y robot de ordeño. "Pasamos directamente de establo trabado a robot", recuerda Pedro, que trabaja a tiempo completo en la ganadería, que atiende con la ayuda de Fernando y de un empleado que han contratado. En la actualidad esta explotación tiene 64 vacas en producción y 152 cabezas totales, sumando 10 vacas secas (4 están engordándolas para venderlas) y 71 animales entre terneras y novillas. La gran cantidad de recría los obligó a ampliar sus instalaciones con una nave nueva de 60 metros de largo por 15 de ancho al lado de la nave de producción para acoger a la recría. La venta de recría, una fuente de ingresos También engordan las vacas de desvieje para obtener mejor precio por ellas Desde el año 2017 hacen la recría en la explotación. Antes cebaban los terneros machos en casa y mandaban a las hembras al centro de recría Anoca, en Castro de Rei, propiedad de su hermana Carmen. "Hace tres años dejamos de cebar los terneros y aprovechamos las instalaciones para la recría, pero ahora ya no nos cabían", justifican. "Las vacas nos duran bastante, cada vez más, tenemos vacas de 7 partos dando mucha leche y muchas veces hacemos descartes por falta de sitio", indica Fernando. "Las últimas 15 vacas que salieron al matadero acumulaban 3,7 partos de promedio con un intervalo entre partos de 414 días y una producción vitalicia media de 51.200 litros. Para mí ese es un dato muy importante", añade.
Cubren el reemprazo necesario para la explotación poniendo sexado a las mejores novillas y usan semen de carne en el resto de los animales
"Al tener una tasa de reposición baja otra parte de nuestros ingresos vienen por la venta de animales para vida", dice. En 2019 vendieron 33 terneras a otras explotaciones. Pero la venta de recría es un mercado que fluctúa (tiene relación también con el precio de la leche que hay en cada momento) y no siempre hay la misma facilidad para dar salida al exceso de recría. "Este año pasado hubo venta de novillas, pero igual otro año no hay y con el robot estás muy limitado para asumirlas tú", argumenta Fernando. Por eso ahora mismo están poniendo entre el 60 y el 70% de las dosis de semen de carne. Desinfección de los boxes de las terneras Pedro es quien cuida a las terneras El trabajo con las terneras es cosa de Pedro. "Damos leche tres veces al día el primer mes o mes y medio, tanto leche de vaca como leche maternizada comprada, y lo que hacemos es desinfectar los boxes cada vez que se desteta un animal. Evitas muchos problemas y ese tiempo lo ganas después cuando vas a dar la leche", asegura. Desde el destete, que hacen entre los dos meses y medio y los tres meses, hasta el lote de inseminación la crianza es en grupo con cama de viruta de madera. La alimentación es a base de mezcla seca hecha por la cooperativa Aira. "Inseminamos a partir de los 15 meses, no antes, entre otras cosas motivado también por el exceso de recría que tenemos", explica Fernando. A partir del momento en el que están preñadas, las novillas comparten ración con las vacas secas. "Hacemos una ración con hierba seca, pienso y morea o en algunos casos con rollos de silo de hierba seco", cuenta.
A las terneras les dan tres tomas de leche al día y las vacas de desvieje las engordan durante 5 ó 6 meses antes de mandarlas al matadero
Disponen de carro propio, con el que hacen también la ración para las vacas de producción, que varía entre los 32 y 35 kilos de silo de maíz, entre 8 y 11 kilos de silo de hierba, 6 kilos de pienso (más los 5 kilos de promedio de punteo del robot) y medio kilo de hierba seca solo en algunos momentos del año. A las vacas de desvieje les dan silo de maíz y pienso para engordarlas antes de venderlas. "No lo hacemos con todas, si es una vaca que está tocada de las patas la mandamos directamente al matadero, pero si está bien la engordamos. Les hacen falta entre 5 y 6 meses normalmente, pero todas las que cebamos acaban entre los 400 y los 500 kilos/canal", explican. Toma de datos individualizada de cada finca Ganadería Rego maneja una superficie de 25 hectáreas y compra a mayores otras 15 hectáreas de maíz. "Llevamos ya muchos años comprando a los mismos, son dos ganaderías de aquí al lado", cuentan. En sus 25 hectáreas echaron este año 5 a maíz y 7 a sorgo.
Echaron 7 hectáreas de sorgo en las fincas más castigadas por el jabalí con una producción en kilos más alta que la que obtenían con el maíz
"El sorgo fue para echar en fincas donde nos atacaba mucho el jabalí, muchas de ellas al lado del río", indica Fernando. "Es el segundo año que lo echamos y la producción en kilos es un poco más alta que la de maíz en comparación a las producciones anteriores de maíz en esas mismas fincas, pero son solo 2 años de análisis, habría que coger un periodo más amplio, 10 años por lo menos, para tener datos más fiables", aclara. Fernando lleva un control individualizado de las producciones de cada finca, tanto en las que echan maíz como en las de hierba y ahora en las de sorgo y gracias a eso puede sacar conclusiones. Buena parte del trabajo agrícola lo hacen ellos mismos. "Lo único por lo que pagamos es por picar el maíz y por hacer los rollos de hierba. Antes lo encargábamos todo pero ahora compramos maquinaria y lo hacemos nosotros. No sé si compensa o no, seguramente si haces números estrictamente económicos en tan pocas hectáreas no compensa, pero el problema es que tienes que depender de otros y esperar por todo", argumentan.
Prefieren ensilar la hierba en rollos porque gastan poca en la ración y la conservación del silo es mejor que en la pila
El ensilado de hierba prefieren hacerlo en rollos. "La conservación es mucho mejor porque abres silo nuevo todos los días. Comenzamos haciendo rollos para el verano, porque como gastamos poca hierba en la ración el de la pila se nos ponía malo, pero ahora lo hacemos todo en rollos. Menos hacer los rollos, el resto de los trabajos los hacemos todos nosotros (segamos, juntamos, encintamos), por lo que tampoco nos sale excesivamente caro", justifican. En el 2018 hicieron un total de 662 rollos de silo de hierba y en 2019 620.

"Muchas veces hay problemas de fertilidad en las granjas que no están relacionados con la consanguinidad"

Ganadería Rego usa toros genómicos de Xenética Fontao en la mayoría de los casos Fernando lleva trabajando desde el año 2006 como técnico del Programa de Acoplamientos de Africor Lugo, en el que hay incorporadas un total de 430 explotaciones. "Es algo que les aporta comodidad a las ganaderías, porque saben que lo están haciendo bien y que están evitando la consanguinidad permitiéndoles además tomar decisiones individualizadas para cada granja en función de lo que quiera el ganadero, aunque casi todo el mundo quiere más o menos lo mismo porque casi todas las explotaciones buscan leche, calidades y ubres y patas", detalla Fernando.
Un total de 430 explotaciones hacen uso en este momento del Programa de Acoplamientos de Africor Lugo
"La consanguinidad es difícil de medir pero en Africor nos curamos en salud trabajando con un dato muy bajo, 1,56% en nuestro programa informático trabajando con 6 generaciones, que puede equivaler a un 4% de Conafe", explica. "Pero hay muchas veces problemas de fertilidad en las explotaciones que no están relacionados con eso", añade. Les sobra recría por lo que ponen cruce en más del 60% de las inseminaciones Fernando insemina todas sus vacas de la Ganadería Rego con toros genómicos. "Solo uso toros genómicos y la mayor parte, diría que un 90%, son de Xenética Fontao. De fuera cojo solo alguna dosis de semen sexado de vez en cuando", cuenta. Arion, Sanxurxo, Salvame o Donsimon son algunos de los genómicos actuales que está empleando esta explotación de Láncara en este momento con buenos resultados. También implantan algún embrión del programa de Xenética Fontao. "Tenemos una ternera que es la número 21 de España con 4.684 de ICO. Fue una vaca hecha en casa decendiente de embriones de Fontao. La abuela, MACA, salió de un embrión y lleva en 3 partos 47.000 litros producidos", detalla Fernando.

“La consanguinidad no explica la baja fertilidad en la raza Holstein en los últimos años”

El aumento de la consanguinidad en la raza Frisona es uno de los retos a los que se enfrentan los ganaderos de vacuno de leche. Daniel Martínez Bello, cofundador y especialista en asesoramiento genético de Embriovet aborda en esta entrevista el reto de la consanguinidad en la raza Frisona y ofrece a los ganaderos unas recomendaciones para evitarla y no tener repercusiones negativas en la cabaña ganadera. ¿Crees que la consanguinidad es ya un problema grave en vacuno de leche? La consanguinidad va experimentando un ligero aumento continuo en la mayoría de las razas puras, y la Holstein no es una excepción, aunque no es la de mayor consanguinidad. Es conocido que un nivel muy alto de consanguinidad causa perjuicios, pero a la vista de los datos actuales podemos decir que es preciso controlarla sin que suponga aún un problema grave. ¿Qué daños provoca en una granja? Están descritos científicamente efectos negativos a nivel de fertilidad, salud de los animales, vitalidad y supervivencia de las crías y una merma de la productividad asociados a la consanguinidad. Sin embargo, el efecto es muy bajo a los niveles más frecuentes en nuestras ganaderías, así que no explica la bajada de la fertilidad en los últimos años. Eso es una cuestión diferente arrastrada de la selección de las últimas dos décadas que ya empezó a corregirse en la era genómica. La mejora reproductiva por efecto genético ya se está empezando a notar y en un corto plazo creo que será muy evidente y casi señalizada, a pesar del incremento de la consanguinidad. Una cosa es que exista un efecto y otra echarle la culpa de todos los males. Opino que se sobrevalora a menudo el efecto de la consanguinidad. ¿Qué niveles detectáis en las ganaderías con las que trabajáis? La raza Holstein en general está en alrededor de un 7% y la mayoría de las ganaderías de las que manejamos datos están entre un 5 y un 8%. No podemos establecer un valor máximo. Hay que tener en cuenta que se trata de un valor estadístico y estimado, y no real, que aumenta por sí solo con el paso del tiempo por el hecho de sumar generaciones en el pedigrí y que intervienen en el cálculo, sin que signifique mayor aumento real del problema.
"Se sobrevalora a menudo el efecto de la consanguinidad”
Por otro lado, se está comparando muchas veces el valor genómico con el valor tradicional o de pedigrí y no es lo mismo. El valor genómico se calcula de manera diferente tratando de medir la repetición de alelos en el genoma proveídos de ambos progenitores, y son valores superiores frecuentemente. De manera que una parte del aumento que se aprecia en la población viene de la manera de calcularse. El efecto es aditivo, de manera que los efectos de la llamada "depresión por consanguinidad" aumentan proporcionalmente por cada punto que aumenta el coeficiente de consanguinidad. El trabajo científico más relevante a este respecto (Van Doormal, Canadian Dairy Network 2008) dice que el aumento de consanguinidad desde 5 hasta 10% supone una reducción de 92 Kg de leche en la lactación, incremento de 1,4 días abiertos y reducción 65 días de longevidad. La recomendación es tender hacia la menor consanguinidad posible, pero sin obsesionarse. La potencia de la selección genética actual compensa con creces esas mermas, pero no quita que intentemos mantenerla al nivel más bajo posible. Por dar una referencia, cubrir una vaca con su propio padre sería un 25% de consanguinidad, que es una aberración. Tratamos de no superar nunca el 9% y acercarnos solo en casos puntuales y controlando los recesos y haplotipos. ¿En que medida la utilización de toros genómicos está incrementando la consanguinidad? Una de las ventajas que todos pensábamos que tendría la genómica sería el descubrimiento de nuevas líneas genéticas que aportasen sangre nueva para reducir la consanguinidad. Sin embargo, aunque se está dando en cierta medida, por ahora tiene más efecto el éxito que alcanzan en los índices más valorados determinadas combinaciones genéticas. Esto hace que los primeros puestos de los rankings estén copados por toros con pedigrees muy similares que son los que más se están utilizando. En paralelo, van surgiendo los llamados “outcross”, por venir de líneas menos habituales o menos presentes en la población y muchos de ellos con valores muy interesantes, que se pueden usar por lo menos en los animales difíciles de acoplar. ¿Seguirá aumentando en los próximos años con la mayor utilización de toros no probados? Es posible que sí. Pero, como decía anteriormente, se da un aumento natural por incrementar el número de generaciones en registro genealógico y añadir datos, en unión al cálculo más preciso que fue la genómica.
“Escoger toros especializados en salud, calidades o acorne puede ayudar a rebajar la consanguinidad”
Por otro lado, la abundancia de toros muy emparentados con valores muy similares hace que el mercado del semen ofrezca gran cantidad de toros de valores altísimos a buen precio, y como resultado son usados por los ganaderos por el atractivo de la relación calidad/precio, a pesar de aumentar la consanguinidad. La selección por nuevos caracteres como el “acorne” o determinadas proteínas lácteas, o toros especializados en calidades o caracteres de salud, también puede aportar genes renovados para una parte de la población, y por ahí pueden contribuir a compensar un poco este aumento de la consanguinidad. ¿De que herramientas disponemos para reducir la consanguinidad o los efectos negativos de la misma y como valoras su eficacia? La principal es el uso de programas informáticos para los apareamientos, es la forma más sencilla de establecer límites y controlarla. El genotipado de las hembras ofrece una información más precisa de su nivel de consanguinidad y también de su contenido en genes receptivos y haplotipos reproductivos. Evitando cruzar hembras portadoras de alguno de estos genes con toros también portadores se evitan una parte importante de los efectos indeseables de la consanguinidad. Para hacer hacer bien los acoplamientos y de manera constante se precisan softwares específicos. Aquí hay que ser cuidadosos porque la mayoría de los software disponibles solo controlan la consanguinidad por pedigrí al estilo antiguo, y no tienen en cuenta los haplotipos, aunque los animales estén genotipados. Hace falta asegurarse y si no es así chequearlo manualmente. ¿Que aconsejarías al ganadero para no incrementar los efectos perjudiciales de la consanguinidad? Lo más aconsejable es hacer un programa genético acorde a las características y objetivos de la explotación. Un programa global en el que la consanguinidad también se tendrá en cuenta. La reducción del número de toros a utilizar cada año es una buena medida. Si vamos uniformizando la cabaña será mas fácil encontrar esas líneas distintas, pero si vemos uno de cada, será mas difícil encontrar uno distinto para todas.
“En los toros que no están en la cima de la lista es más fácil encontrar líneas genéticas diferentes”
Por otra parte, a la hora de escoger los toros no hay que limitarse a los primeros de las listas. Afortunadamente, hoy hay una oferta de toros muy grande, y muchos de los llamados de segunda línea ofrecen una mejora muy cercana a los primeros, y en ese segmento es más posible encontrar líneas diferentes. ¿Algo más que quieras añadir? La consanguinidad debe controlarse e intentar mantenerla en el nivel más bajo posible. Actualmente el progreso genético es tan rápido que compensa ampliamente los efectos conocidos de la depresión en producción, etc. Pero eso no quita de que esas mermas estén ahí, restando, además de concentrar en paralelo otros efectos indeseables de la consanguinidad. Afortunadamente, queda muchísimo trabajo por hacer en la utilización de la vía hembra, a través de la selección genómica en combinación con las técnicas de reproducción asistida para lograr aumentar el progreso sin depender solamente de los toros y manteniendo la consanguinidad en valores aceptables.

Consanguinidad en vacuno de leche (I): Situación actual y recomendaciones

La consanguinidad en vacuno de leche es uno de los retos a los que se enfrentan los ganaderos. Abordamos este tema con unas entrevistas con expertos que nos ofrecen sus recomendaciones.

José Antonio Jiménez, director del Departamento Técnico de CONAFE: “Con el progreso genético aumenta la consanguinidad, pero por acumulación de genes favorables”

¿Es un problema grave la consanguinidad en vacuno de leche? Es un problema en aquellas ganaderías que no disponen de las herramientas suficientes para gestionarla o en razas con poco progreso genético. Afortunadamente, los ganaderos cuyos animales están inscritos en el Libro Genealógico de la raza Frisona sí disponen de estas herramientas que son el programa de ajustes CONAFEMAT, que usa la genealogía completa de los animales y, por tanto, se estima de forma fiable la consanguinidad, y el genotipado de hembras que permite identificar los riesgos más importantes de cada individuo. ¿Qué perjuicios puede provocar la consanguinidad en el rebaño? La consanguinidad nos indica la probabilidad de que una posición del genoma ( Locus) presente el mismo alelo en ambos cromosomas puesto que proceden del mismo antepasado; es decir, el individuo los recibió uno de su madre y otro de su padre. En este sentido, existen genes con un efecto negativo que solo se expresan cuando el individuo presenta dos copias del mismo alelo. Por tanto, la consanguinidad está indicándonos la probabilidad de que el animal presente estos efectos negativos. En los casos extremos nos encontramos con malformaciones incompatibles con la vida del animal, por ejemplo el Síndrome de la Brachiespina, muertes embrionarias, o problemas menos evidentes pero que limitan el potencial genético del individuo. ¿En que niveles estamos en España y en los países de nuestra entorno? ¿Cuál sería un nivel de mayor riesgo? El promedio de las terneras registradas en el libro genealógico en 2018 fue de 6,86 mientras que el promedio de las vacas vivas está en 5,64. Por tanto, el incremento en los últimos años fue notable debido fundamentalmente a la llegada de la genómica y el mayor progreso genético que trajo. Por ejemplo, en 2012, el año en el que comenzamos a publicar evaluaciones genómicas, el promedio de consanguinidad de las terneras nacidas fue 5,6 y el ICO 1950; en 2018, el ICO medio estaba en 2965 y la consanguinidad en 6,86. Es decir, pasamos de 348 a 432 puntos de ICO por punto de consanguinidad. La mejora genética consiste en la acumulación de alelos favorables mediante la selección como reproductores de los individuos que los portan, lo que implica directamente un incremento de la consanguinidad, en este caso positiva.
“Hubo un incremento de la consanguinidad con la llegada de la genómica, pero en buena medida fue por acumulación de genes favorables”
Si comparamos las medias por año de valor ICO y nivel de consanguinidad, hasta la fecha, las vacas inscritas en el libro presentan mayor progreso genético que incremento de consanguinidad. Por tanto, una gran parte de ese incremento de consanguinidad sabemos que se debe a la acumulación de genes favorables. Por lo comentado antes, todo incremento supone un mayor riesgo, pero si conseguimos un buen progreso genético, utilizamos programas de ajuste e identificamos los principales relacionados con genes recesivos, el riesgo a nivel de granja está controlado. ¿Seguirá aumentando en los próximos años con la mayor utilización de toros no probados? Sí, pero no es un problema si el progreso genético aumenta más y continuamos identificando y evitando los problemas más graves. ¿De que herramientas disponemos para reducir la consanguinidad o los efectos negativos de la misma? Los ganaderos reciben junto a las evaluaciones genéticas su situación respecto de la consanguinidad, tanto el promedio de la granja como por año de nacimiento. Estos son los valores de referencia. También los pueden consultar en SINBAD dentro de la web de CONAFE. Con el programa de ajustes CONAFEMAT pueden diseñar ajustes limitando la consanguinidade en base al nivel actual de la granja. Además, genotipando pueden conocer los 14 genes relacionados con la consanguinidad que provocan los problemas más graves. Simplemente evitando cruzar una vaca portadora de alguno de ellos con un toro que también lo sea, el problema desaparece. De nuevo el programa CONAFEMAT realiza esta tarea de forma automática. ¿Que aconsejarías al ganadero para no incrementarla hasta niveles perjudiciales? Registrar sus animales para tener la genealogía controlada, ser muy cuidadoso con la información de la inseminación y el parto para evitar errores de filiación, usar el programa CONAFEMAT. teniendo cuenta el nivel de consanguinidad de la granja y, si se quiere controlar con las máximas garantías, genotipar las terneras para asegurar la filiación y conocer la información de recesivos y utilizar genética de alto nivel para tener mucho progreso genético. Por último, puntualizar que una ventaja de una raza con un censo tan grande como tiene la raza Holstein, es la posibilidad de alcanzar un gran progreso genético y al mismo tiempo, gracias a los programas de evaluación, evitar aquellos individuos donde la consanguinidad se pueda traducir en problemas para el ganadero.