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Así funcionan las 30 compactadoras forestales de Greenalia que procesan 500.000 toneladas de biomasa en Galicia

La gestión de los restos forestales que quedan tras la tala de una plantación (ramas, cortezas…) es hoy en día una parte más de los trabajos de silvicultura. Mientras que durante años estos restos se consideraban residuos, ahora comienzan también a verse como un recurso más del monte. Pero, ¿cómo se gestiona esta biomasa para su aprovechamiento?

Uno de los destinos de esta biomasa residual de las talas es emplearla para la producción de electricidad y en esta labor es fundamental contar con equipos adecuados que faciliten el procesado de la biomasa, tal y como indican desde Greenalia, una de las principales empresas que está utilizando los restos forestales para este fin en su planta de Curtis-Teixeiro (A Coruña).

Para emplear esta biomasa, en Greenalia optan por compactarla en el monte, para lo cual cuentan con 30 unidades compactadoras forestales Monra ENFO-2000, fabricadas por la empresa asturiana Talleres Ramón Castro S.L. La mayor parte de estas compactadoras están trabajando en plantaciones de las provincias de Lugo y A Coruña. “La gestión de esta biomasa es una manera de convertir un residuo en energía, creando valor en la cadena y empleo de calidad en el campo rural”, apunta David Vila, responsable de gestión de biomasa de la empresa gallega.

La compactadora forestal ENFO-2000

En Greenalia optaron por la compactadora Monra ENFO-2000 por las prestaciones que ofrece esta máquina, única a nivel mundial. “Estas compactadoras optimizan todos los procesos de la cadena de suministro, desde la recogida hasta la gestión en la planta de biomasa de Curtis-Teixeiro”, apunta Vila. De hecho, el sistema de prensado y atado que utiliza esta máquina le permite compactar los restos de las talas hasta un 80% de su volumen inicial, lo que les facilita tanto su manejo como el transporte hasta el destino final.

La compactadora forestal ENFO-2000 permite compactar los restos de tala hasta un 80% de su volumen inicial, lo que facilita el su manejo y transporte

Estos equipos para compactar fueron pensados y están adaptados a las exigencias del sector forestal, donde es habitual trabajar en pronunciadas pendientes y encontrarse con terrenos difíciles. Sus fabricantes destacan el diseño fuerte, compacto y funcional, así como el empleo de materiales de alta calidad en su fabricación, lo que permite utilizarlas en aquellas zonas más desfavorables sin ningún tipo de restricciones en cuanto a la longitud del fardo o al tipo de madera que estén procesando.

La gran adaptación a terrenos difíciles que demuestra la compactadora forestal Monra ENFO-2000 es una de sus principales ventajas. // Foto: Greenalia.

La unidad niveladora, compuesta por 2 potentes cilindros hidráulicos controla la nivelación de la compactadora en terrenos con pendientes pronunciadas. Dispone también de una unidad alimentadora equipada con 4 rodillos (2 horizontales y 2 verticales) con rascadores para evitar los atascos de material y que al mismo tiempo le proporcionan un gran potencia de tracción.

Además, esta compactadora está pensada para poder ser acoplada y desacoplada con facilidad y rapidez al vehículo base, mediante un sistema de enganche rápido hidráulico. Se trata de un sistema de acoplamiento opcional, pero que ofrece un uso más ágil de la compactadora, una mejora que la hace mucho más manejable en el día a día.

La mayor parte de las pacas forestales son de biomasa de eucalipto y pino. // Foto: Greenalia.

Gestionar 500.000 toneladas de biomasa

Desde que su planta de Curtis-Teixeiro comenzó a funcionar a mediados del pasado año, en Greenalia están gestionando alrededor de unas 500.000 toneladas de biomasa al año. Buena parte de esta biomasa procede del empacado y de la retirada de los restos de tala, de ahí que sea fundamental contar con un importante número de compactadoras. En la actualidad, sólo con las compactadoras están trabajando unas 60 personas, todas ellas de las zonas rurales en las que se desarrollan los trabajos. Sin embargo, en toda la cadena de suministro trabajan directamente cerca de 150 empleados.

Cada una de las compactadoras forestales Monra ENFO-2000 consigue una producción de unas 20.000 toneladas al año. La mayor parte de las pacas forestales son fundamentalmente de eucalipto y pino. “Las plantaciones de eucalipto son las que más biomasa residual generan”, explican desde Greenalia.

“Las pacas de biomasa que hacemos tienen una medida y peso óptimos para adecuarse a los medios logísticos y de carga y descarga”: David Vila, responsable de biomasa en Greenalia

Estas compactadoras también le permiten obtener unas pacas de biomasa fáciles de transportar y gestionar. Suelen elaborar pacas con una longitud de 2,50 metros. Sin embargo, el peso es variable, dependiendo del grado de humedad y el tipo de madera que se emplee, pero van de los 300 hasta los 450 kilos. “Las pacas de biomasa que hacemos tienen una medida y peso óptimos para adecuarse a los medios logísticos y de carga y descarga”, señala el responsable de la gestión de biomasa de la firma gallega.

Tecnología fiable y de proximidad

En el aprovechamiento de la biomasa que hacen en el monte en Greenalia, las compactadoras forestales Monra ENFO-2000 están siendo una herramienta indispensable. Estas máquinas cuentan además con destacados sistemas hidráulicos y electrónicos que proporcionan un funcionamiento rápido, fiable y preciso. Tanto es así que desarrollaron un sistema electrónico específico para las funciones de esta máquina. “Una vez introducidos todos los parámetros, el proceso se realiza automáticamente y la pantalla táctil muestra las operaciones que están siendo ejecutadas”, explican los fabricantes.

La colaboración directa entre fabricante y cliente le ha permitido incluir mejoras que incrementan las prestaciones de las compactadoras

“Las mejoras desde las primeras unidades es muy notable, el trabajo de desarrollo de la Monra ENFO-2000 ha hecho que aumentara la productividad de los equipos”, valora Vila. El perfeccionamiento de estas máquinas ha incluido mejoras en el sistema hidrostático o de tracción, lo que le confiere mayores prestaciones. “Las mejoras que se fueron añadiendo hacen que la máquina sea muy fiable, con la única tarea de hacer los mantenimientos indicados en el momento preciso”, afirma el responsable de biomasa de la planta.

Al margen de las prestaciones que están proporcionando las compactadoras en el monte, Vila también destaca la importante colaboración que establecieron con los fabricantes, lo que está redundando directamente en una mejora de los equipos y en un servicio más eficiente para el tratamiento de la biomasa que requieren. “La compactadora de ENFO-2000 es muy fiable y para nosotros es muy importante que se fabrique aquí cerca, dado que así podemos trabajar codo a codo en continuas mejoras”, concluye David Vila.

Cinco proyectos forestales de la Xunta aspiran a fondos del plan europeo de recuperación

La Xunta le ha presentado hoy al sector forestal cinco proyectos que pretende impulsar con fondos europeos del plan de recuperación económica, conocido como ‘ Next Generation’. El más ambicioso es la construcción de una planta de viscosa, que precisaría de una inversión aproximada de 950 millones de euros, según los cálculos del Gobierno gallego. La viscosa es una fibra textil derivada de la madera que está ganando mercado en los últimos años, pues al obtenerse de los árboles, es percibida por el mercado como más sostenible que las fibras sintéticas, derivadas del petróleo, o incluso que el algodón, un cultivo cuestionado por su impacto ambiental. El objetivo de la Xunta es crear una planta que produciría 250.000 toneladas de viscosa al año, para lo cual precisaría alrededor de 1,5 millones de toneladas de madera. El proyecto del Gobierno gallego encuentra una iniciativa gemela en la línea de viscosa planificada por Ence Navia (Asturias), que aspira a ampliar su planta en los próximos años para producir al menos 100.000 toneladas de viscosa anuales, así como una nueva gama de productos higiénicos absorbentes ( pañais, compresas, etc.). Ence paralizó su iniciativa a comienzos de este año por problemas financieros, pero la compañía ha asegurado en los últimos meses que pondrá en marcha en breve las ampliaciones previstas en Navia. Si las iniciativas de Ence Navia y de la Xunta van adelante, una duda que surge es hasta que punto hay capacidad forestal en Galicia y en la Cornisa Cantábrica para ofertar madera suficiente, pues la demanda adicional de ambos proyectos superaría los 2 millones de toneladas de madera. En el caso de Ence Navia, la ampliación de capacidad se cubrirá en exclusiva con madera de eucalipto, según las previsiones iniciales, si bien en el caso de la factoría proyectada por la Xunta esa cuestión está por definir. Las perspectivas apuntan a que la principal materia prima que emplee la planta promovida por la Xunta sea eucalipto, pero podrían entrar otras especies forestales e incluso papel y cartón para reciclar, segundo anunció hoy el presidente de la Xunta en la presentación del proyecto. El objetivo de la Administración es que toda la madera que entre en la nueva planta proceda de aprovechamientos sostenibles, realizados bajo sellos de certificación forestal. El Gobierno gallego por el momento no aclara cómo acometería la puesta en marcha de la planta de viscosa, que asegura que crearía 1.000 empleos, pero desde las distintas organizaciones del sector se da por seguro que se buscaría una vía de colaboración público – privada. Planta piloto de nuevos materiales Otro polo de innovación proyectado por la Xunta pasa por la puesta en marcha de una planta piloto de nuevos materiales derivados de la madera. El objetivo es trabajar en la obtención de nuevos materiales que puedan tener uso en las “industrias gallegas estratégicas”, según avanza la Xunta. Esta planta piloto estaría ligada al actual centro tecnológico de la madera, el CIS Madera. Para este proyecto la Xunta solicita 4 millones de euros.

Apoyo a la construcción estructural en madera

Entre los nuevos espacios que está ganando la madera, figura el de la construcción estructural, que ya cuenta con una primera planta de fabricación en la comunidad, en Coirós, dedicada al CLT ( Cross Laminated Timber), una madera contralaminada apta para muros de carga, tabiques y forjados de entreplantas y cubiertas. El CLT está ganando mercado a pasos agigantados en Europa, si bien su uso en Galicia y en el resto de España se encuentra en una etapa inicial. Para incentivar su empleo, la Xunta proyecta destinar 26 millones de euros a apoyar proyectos públicos y privados de construcción en madera estructural. Con esos fondos, se espera impulsar la construcción de cientos de viviendas con madera estructural, así como de edificios de uso público, comercial e industrial.
Digitalización y descarbonización Los fondos del plan de recuperación ‘ Next Generation’ se enfocan a dos cuestiones fundamentales, que la Comisión Europea considera prioritarias: una economía más verde y el apoyo a la digitalización. El sentido de fondo de los proyectos que presenta la Xunta para optar a los fondos se enfoca principalmente a promover iniciativas forestales que contribuyan a mitigar el cambio climático, pues como es sabido, los árboles captan dióxido de carbono de la atmósfera, que queda después almacenado en la madera y en los distintos productos en los que se convierte. Esa capacidad de ser una de las pocas materias primas con una huella de carbono negativa le abre grandes perspectivas de uso para las próximas décadas. Los otros dos proyectos diseñados por la Xunta para optar a los fondos europeos, ambos presupuestados en 4 millones de euros, se orientan precisamente en las dos grandes líneas de los fondos Next Generation: la descarbonización de la economía (reducción de la huella de carbono, promoción de la economía circular, etc.) y la digitalización del sector forestal, de cara a mejorar procesos productivos y trazabilidad de la madera. Valoraciones del sector Desde las industrias forestales y de la madera, que asistieron hoy virtualmente a la presentación realizada por el presidente de la Xunta, se reciben con ilusión los proyectos. En concreto, la Asociación de Empresarios de Primera Transformación de la Madera de Lugo subraya que estas iniciativas demuestran que “el aprovechamiento de la madera es una oportunidad para Galicia y para el rural, convertiéndose en una punta de lanza de la economía”. Sobre la posiblidad de que Galicia y la Cornisa Cantábrica puedan suministrar madera suficiente para los dos proyectos de viscosa que hay sobre la mesa, el de Ence Navia y el de la Xunta, en la Asociación lo dan por seguro, puesto que el Plan Forestal de Galicia prevé aumentar las talas sostenibles de madera en 3 millones de metros cúbicos en los próximos 20 años, pasando de 9 a 12 millones de metros cúbicos de madera cortada anualmente.

Alboroto en el sector forestal

El sector forestal atraviesa unas últimas semanas de alboroto, con acusaciones cruzadas y polémicas varias. En el ojo del huracán, el Plan Forestal de Galicia, en proceso de revisión, y el papel que se le asigna al eucalipto en el futuro del monte gallego. Hay división en el sector, con la Organización Galega de Comunidades de Montes y otros colectivos nacionalistas de un lado, y del otro el resto de la cadena de la madera, con posturas diversas y no homogéneas. La Organización Galega de Comunidades de Montes celebrará este domingo una movilización en Santiago (12 horas, salida de la estación de tren) en contra de un Plan Forestal que considera al servicio del “lobby forestalista”. La Organización argumenta que el Plan contempla para los próximos años un incremento de la superficie de eucalipto (un 8%). Apoyan su protesta Adega, la Fruga y el Sindicato Labrego, entre otros colectivos. Postura de la Xunta El Plan Forestal es interpretado de manera distinta por la Xunta, que sostiene que el Plan no proyecta ningún incremento del eucalipto, sino que se trata de un pronóstico de la ocupación actual de la especie, a falta de un inventario actualizado. La idea anunciada por la Administración es la de hacer una regulación del eucalipto y del resto de especies en los Planes de Ordenación de Recursos Forestales (Porf), que se definirán en un futuro para cada uno de los 19 distritos forestales de Galicia. Las críticas contra el Plan Forestal le llegan también a la Xunta por motivos opuestos a los de la Organización Galega de Comunidades de Montes. Desde parte de la industria de la madera hay una oposición clara a la regulación proyectada por la Xunta en los Porf. Tal oposición es explicada de la siguiente manera por el director xeral de Ordenación e Producción Forestal, Tomás Fernández Couto: “Las industrias de la madera me dijeron: ‘Queremos la tierra toda que precisemos y la que quede, para los demás’. Así de claro”. Dictamen sobre el eucalipto La polémica por el Plan Forestal se enredó aun más en los últimos días, después de que un comité científico que asesora al Ministerio de Agricultura haya declarado al eucalipto como especie invasora, una declaración a la que después se opuso el propio Ministerio y que no tendrá efectos en la legislación forestal. Lo que sí está generando el ruido contra el eucalipto es un fuerte descontento en los colectivos de productores de madera del norte gallego, que consideran que la especie se está “criminalizando” sin motivos. Los propietarios forestales del norte -la principal zona de eucalipto en la comunidad- señalan que se está demonizando al eucalipto como favorecedor de los fuegos, cuando -dicen- la realidad es que el porcentaje de eucaliptales quemados es inferior al porcentaje de su ocupación del monte. También defienden la riqueza que genera el eucalipto para millares de familias y critican que se esté legislando en el ámbito forestal sin consultarle a los propietarios. Regulaciones actuales Entre medias, otras asociaciones de propietarios, como la Asociación Forestal de Galicia o la Asociación Sectorial Forestal Galega (Asefoga), tienen manifestado valoraciones sobre el Plan Forestal en las que incluían aspectos positivos y otros negativos. Desde la Asociación Sectorial Forestal Galega (Asefoga), ligada a Unións Agrarias, se planteó que, antes de decretar nuevas regulaciones, se hagan cumplir las actuales en aspectos como las plantaciones ilegales en tierras agrarias, una cuestión sobre la que la industria de la madera tiene otro parecer. La diversidad de posturas y de intereses sobre el monte es alta, aunque para la Organización Galega de Comunidades de Montes la cosa es simple. El resto de la cadena de la madera integra lo que definen cómo “lobby forestalista”, incluidas Asefoga -”la portavoz oficial del lobby”, dice la Organización Galega-, la Asociación Forestal de Galicia y Promagal.

Incógnitas sobre los montes vecinales

La protesta coordinada por la Organización Galega de Comunidades de Montes para este domingo tiene un segundo punto reivindicativo, aparte del Plan Forestal. Este año, la Xunta propició un cambio legislativo para que los montes vecinales sin gestión o en estado de abandono puedan pasar al Banco de Terras por un periodo de 50 años, pudiendo durante ese periodo estar gestionados por empresas. Para la Organización Gallega de Comunidades de Montes, se trata de una “privatización encubierta” que busca poner los montes vecinales a disposición de empresas personales. La protesta de este domingo en Santiago es apoyada por Fruga, Cig, Sindicato Labrego, Adega, Atrifoga, Asociación Pola Defensa da Ría y la red Cousa de Raíces, que promueve una iniciativa legislativa popular en defensa del bosque autóctono y a favor de la prohibición del eucalipto nitens en Galicia.

Propuestas de la Asociación Forestal de Galicia para el monte

La Asociación Forestal de Galicia (AFG) ha mantenido en las últimas semanas reuniones de trabajo con los cuatro grupos del Parlamento gallego con el objetivo de trasladarles las preocupaciones de las comunidades de montes socias, así como de los propietarios forestales particulares. La AFG espera que estos encuentros sirvan para que se adopten medidas que respondan a las necesidades de los silvicultores gallegos. La AFG señala que las reuniones se han producido en un tono cordial y les pidió a todos los grupos que en el campo forestal prioricen los intereses de país, al margen de enfrentamientos partidistas. Entre las principales propuestas que se abordaron en los encuentros, figuran las siguientes: - Plan de restauración de las zonas afectadas por los incendios forestales. Las comunidades de montes y los propietarios forestales particulares carecen de los recursos precisos para la restauración de las zonas afectadas por la ola de fuegos del otoño. Si no se pone en marcha un plan público que ayude a la regeneración de las zonas afectadas, existe un claro riesgo de abandono y de “selvatización” del territorio, opina la Asociación Forestal de Galicia. En la provincia de Pontevedra, la superficie afectada de socios de la Asociación Forestal de Galicia fue de 5.000 hectáreas, distribuidas en 68 montes. El coste total de la restauración se estima en 10,9 millones de euros. Otra de las preocupaciones derivadas de los fuegos se sitúa en el retraso de la saca de la madera quemada, sobre todos en los montes con convenio con la Administración autonómica. - Aprobación de un Plan Forestal, con un inventario actualizado de las existencias del monte gallego, fundamental para cualquier planificación. - Reformulación de las ayudas públicas al monte. La Asociación Forestal es partidaria de que las ayudas públicas se liguen a los instrumentos de gestión de los que se está dotando cada monte. De este modo, opinan que se apoyaría una planificación forestal sistematizada, en lugar de financiar actuaciones puntuales que pueden no responder a las prioridades para cada monte. - Mejora de la fiscalidad forestal, de forma que se incentive la silvicultura activa. Puesta en marcha de un plan contable específico para el sector forestal. - Impulso de las agrupaciones de propietarios forestales particulares, de cara a superar el minifundio, que dificulta una gestión racional del monte. La AFG considera preciso mejorar la fiscalidad y el modelo de gestión de las Sociedades de Fomento Forestal (Sofor), así como crear otra figura que permita ligar a pequeños propietarios con comunidades de montes. - Compensaciones de rentas cuando existan restricciones de uso. La Asociación Forestal plantea, por ejemplo, la necesidad de ayudas para la creación de franjas de frondosas en las áreas de protección contra incendios forestales, en torno a núcleos de población. - Aclaración del futuro de los montes en convenio con la Xunta. Los convenios que la Administración mantiene con parte de los montes vecinales expiran en el 2021, por lo que la AFG señala que es preciso clarificar lo antes posible un procedimiento consensuado para que las comunidades de montes que quieran, puedan hacerse cargo de la gestión de sus montes. En los casos en que no sea así, habría que definir los contratos de gestión pública que sustituirán a los convenios.

“La industria de la madera me dijo: ‘Queremos toda la tierra que precisemos y la que quede, para los demás»

La oposición que está generando en la industria de la madera el nuevo Plan Forestal de Galicia, en fase de tramitación, llevó al director xeral de Ordenación e Produción Forestal, Tomás Fernández Couto, a descubrir todas las cartas sobre la mesa. "Este plan satisface a todas las cadenas del monte que no son de la madera -en alusión a sectores como la castaña o la ganadería extensiva-. Con la cadena de la madera, lo que sucedió es que la industria me dijo: ‘Queremos el territorio todo que precisemos y lo que quede, para los demás’. Así de claro. Es un planteamiento de difícil consenso", criticó ayer en el Parlamento. Dos tercios del territorio gallego son monte, alrededor de dos millones de hectáreas, pero ese terreno no da para todo, al entender de Fernández Couto: "El reparto de usos del monte no puede hacerse solo en base a las necesidades de la industria de la madera. Tiene que ser un reparto equilibrado", defendió el director xeral en la comisión parlamentaria que estudia el problema de los incendios forestales.
"Tengo la impresión de que no se quiere que haya una planificación del territorio" (Tomás Fernández Couto)
Los números que se manejan en el proyecto del Plan Forestal, que dibujan objetivos para los próximos 20 años, reservan algo más de la mitad del monte para usos madereros de pino y eucalipto: 1.060.000 hectáreas -67.000 hectáreas más que en la actualidad-. Otras 400.000 hectáreas serían para frondosas caducifolias (robles, rebollos, abedules, etc.) -15.000 más que ahora- y 71.000 para castaños, principalmente de fruto -25.000 más que en la actualidad-. La parte del monte sin arbolado, que está a matorral o con arbolado ralo, representa en la actualidad 600.000 hectáreas e incluye espacios de Red Natura (170.000 hectáreas) y de usos ganaderos, así como tierras sin manejo. El objetivo para los próximos 20 años es reducir ese espacio a menos de 500.000 hectáreas, potenciando en esa superficie la ganadería extensiva. "No vamos reforestar 200.000 de las 500.000 hectáreas que están abiertas porque estamos comprometidos en potenciar la ganadería extensiva", defiende Fernández Couto. Petición de concreciones Los grupos de la oposición parlamentaria le apuntaron al director xeral que el Plan Forestal constituía una mera declaración de intenciones, sin concreción de las actuaciones orientadas a alcanzar los grandes objetivos anunciados en el Plan, a saber: aumento de las masas de pinos en un 25%, congelación de la superficie de eucalipto y aumento de la superficie ganadera en el monte.
"Están pidiéndonos un cheque en blanco. ¿Cómo van a hacer lo que dicen que van a hacer?" (Xaquín Fernández Leiceaga)
Esa concreción que se pide para el Plan Forestal llegará, según Fernández Couto, en los próximos años, por medio de los Planes de Ordenación de Recursos Forestales (PORF), previstos para cada uno de los 19 distritos forestales de Galicia. Eucalipto "Haremos una ordenación del territorio en cada distrito y se dirá dónde puede haber determinadas especies y donde no" -asegura Fernández Couto-. "En su día presentamos en el Consello Forestal una propuesta de decreto para limitar las plantaciones de eucalipto en el interior de Galicia y el sector forestal nos dijo que así no. Aquí abordármos de nuevo el tema del eucalipto y tampoco gusta. Me da la impresión de que lo que no se quiere es planificación del territorio", cuestionó. El grupo popular presumió de que "congelará" la superficie de eucalipto en Galicia, algo que desde la oposición se pone en tela de juicio. "¿Cómo lo van a hacer? ¿Van a limitar la superficie que puede ocupar el eucalipto? Si es así, ¿van a sacar derechos de plantación?. ¿O van a limitar zonas en las que no podrá haber eucalipto y que en el resto el propietario plante lo que quiera?” -inquirió el socialista Xaquín Fernández Leiceaga-. "Si no nos concretan más, están pidiéndonos un cheque en blanco para este Plan Forestal", concluyó.
"El Plan no prevé alternativas al eucalipto como las frondosas de crecimiento rápido, caso del abedul, con posible uso para pasta de papel" (David Rodríguez)
Por parte del Bng se demandó un plan para reducir la superficie de eucaliptos y se pronosticó que en las actuales masas mixtas, con mezcla de pinos, eucaliptos y frondosas, se producirá un avance del eucalipto en los próximos años, frente a los anuncios de "congelación del eucalipto" comprometidos por el grupo popular. Pinos, maderas nobles y frondosas Tanto el Bloque como el PsdeG advirtieron asimismo de la progresiva reducción de la superficie de pinos y de su sustitución por eucaliptos. "Dicen que van a aumentar la superficie de pinos, pero la tendencia de los últimos años va en sentido contrario. ¿Cómo lo tienen pensado hacer? ¿Van a ir contra las tendencias del mercado?", inquirió Fernández Leiceaga. En Marea, por su parte, echó en falta en el Plan Forestal alternativas al eucalipto: "No se aborda la posibilidad de producir maderas nobles en Galicia ni otras opciones, como las plantaciones de frondosas de crecimiento rápido, caso del abedul, el fresno o el aliso, incluso con posibles usos para pasta de papel", señaló el diputado David Rodríguez. Proceso El Plan Forestal de Galicia, en fase de tramitación, se someterá a un proceso de información pública -según avanzó Fernández Couto- y se aprobará previsiblemente a lo largo de este año en el Consello da Xunta mediante decreto. "Estamos abiertos al diálogo y al consenso porque buscamos un plan estable, pero no todo vale. Hay que pensar que la evolución de determinadas especies -en alusión a la expansión del eucalipto nitens- podría variar el mercado y los precios de manera importante en los próximos años", concluyó Fernández Couto.

La pastera lusa Navigator descarta la expansión barajada a Galicia

Las restricciones al eucalipto legisladas en Portugal en 2017 llevaron a la mayor industria pastera del país vecino, The Navigator Company (antigua Portucel), a valorar su expansión en Galicia para garantizarse el suministro de materia prima. Así lo había anunciado la compañía en una conferencia con inversores el pasado verano, si bien Navigator, consultada estos días sobre sus planes en Galicia, asegura que en los próximos años proyecta continuar con su presencia actual, descartando una inmediata expansión. Navigator mantiene una actividad de compra estable en Galicia, con tres bases logísticas en Coruña, Ferrol y en la estación de tren de A Susana (Santiago), puntos desde los que exporta por barco y tren a Portugal. La compañía considera que esas bases son suficientes para sus necesidades, por lo que no tiene proyectos para crear nuevas bases, según señaló en respuesta a una consulta de Campo Galego.
Navigator mantiene en Galicia tres parques logísticos en A Coruña, Ferrol y A Susana, con los que proyecta continuar
La pastera lusa señala también que su intención pasa por proseguir con las actuales relaciones comerciales que tiene con los principales maderistas gallegos, que se encargan de intermediar en la compra de la madera con los propietarios forestales y de trasladar esa madera a las tres bases logísticas de la compañía en Galicia. Evolución de las exportaciones Las ventas de madera de eucalipto gallego a Portugal llegaron a alcanzar en 2013 los 1,5 millones de toneladas (alrededor del 40% del total de las talas de la especie), pero el cierre de Ence Huelva en el 2014 reconfiguró el mercado estatal, de forma que las pasteras lusas aumentaron sus compras en el sur de la península y redujeron las compras en Galicia. Desde 2015, las ventas de eucalipto gallego a Portugal bajaron casi a la mitad, representando alrededor de 800.000 toneladas anuales. La bajada de la presencia portuguesa consolidó a Ence, con factorías en Pontevedra y Navia (Asturias) como el comprador dominante de eucalipto en Galicia. Las asociaciones de propietarios del norte gallego, en especial las de la Mariña lucense, tenían expectativas en que una posible expansión de Navigator a Galicia aumentara la competencia en el mercado. De cara a los próximos años, sin embargo, las perspectivas apuntan a que se mantendrá el estatus quo actual, con un dominio de Ence del mercado y la continuación de las actuales ventas a Portugal y a otras zonas de España, como el País Vasco.

Reactivación en el mercado del eucalipto y lentitud en el pino tras los incendios

El mercado de la madera ha iniciado el año con una cierta reactivación de las ventas de eucalipto, después de que subieran los precios dos euros por tonelada por la mejora de la cotización internacional de la pasta de papel. En pino, los incendios de octubre afectaron a amplias superficies de coníferas, sobre todo en la provincia de Pontevedra, por lo que las empresas madereras se están centrando en la saca de esa madera, en tanto el resto de las talas y operaciones se ven ralentizadas. La mejor situación de mercado se da en el eucalipto, que además registró un menor volumen de madera afectada por los incendios del otoño. El repunte de la cotización internacional de la pasta de papel elevó los precios del eucalipto globulus certificado (sin Iva) hasta los 32-33 euros por tonelada, según destaca el responsable de comercialización de madera de la Asociación Forestal de Galicia, Xosé Covelo. En madera sin certificar, los precios se quedan en torno a los 27-29 euros por tonelada en lotes medios-grandes. En el caso del eucalipto nitens, se mantiene un precio unos siete euros inferior al globulus.
El eucalipto globulus certificado se ha situado tras la revalorización en 32-33 euros por tonelada, sin Iva
La reactivación del mercado del eucalipto se está notando en la costa norte gallega, la principal zona productora de la comunidad, si bien desde Promagal, la federación que aglutina a las asociaciones de propietarios de la Mariña lucense y Ortegal, consideran que la subida de la madera no es suficiente. “Tenemos un acuerdo con Ence para que se pague un precio base de 31,75 euros por tonelada en madera certificada por las asociaciones, que puede subir en torno a un euro más en función de los acuerdos que haya con cada colectivo” -explica el presidente de Promagal, Ramón Reimunde-. “Si tenemos en cuenta que el precio internacional de la pasta de papel ronda los 1.000 dólares -unos 800 euros-, y que con menos de tres toneladas de eucalipto globulus se hace una tonelada de pasta, se deduce que Ence, con un gasto de 100 euros en madera va a obtener 800 euros. Es una diferencia excesiva y el propietario debería obtener un beneficio mayor”, defiende Reimunde. Saca de la madera afectada por los incendios Los incendios del otoño han afectado en especial a masas de pino del sur de la comunidad, sobre todo en la provincia de Pontevedra, donde alrededor del 90% de las talas de coníferas se están centrando en la saca de la madera quemada, según calculan desde la Asociación Forestal de Galicia. “Las empresas madereras están priorizando la tala de madera quemada, lo que es necesario para evitar la depreciación de la madera para sierra”, señala Xosé Covelo.
La retirada de madera afectada por los incendios marcha a buen ritmo, si bien hay problemas con las autorizaciones de Patrimonio
En la zona demarcada por el nematodo del pino, existe también el problema de que a partir del 31 de marzo están limitados los movimientos de madera para fuera de la zona, lo que obliga a acelerar las talas. “Si no se lograra cortar toda la madera quemada antes de abril en la zona demarcada, es de esperar una cierta flexibilidad de la Administración”, esperan desde la Asociación Forestal de Galicia. La depreciación de la madera afectada por el fuego fue por el momento escasa, según Covelo, que cifra en alrededor de 4 euros la bajada de precios de un lote medio. “En lotes quemados, el rendimiento suele ser menor, pues puede haber pies que ya estén en turno de tala, pero junto a otros que están en mitad de turno, lo que hace bajar el precio medio del lote”, explica. A partir de ahora, conviene tener en cuenta, no obstante, que pasados 3-4 meses desde los incendios, la madera que podría ser para sierra probablemente ya estará afectada por hongos, lo que obligará a destinarla a trituración, bajando sensiblemente su precio. Retrasos en las talas Las ventas de madera en montes gestionados de manera directa por los propietarios y comunidades de montes estuvo marchando hasta ahora a buen ritmo, si bien en la provincia de Pontevedra se produjeron problemas en las masas con afecciones de Patrimonio o de la Confederación Hidrográfica, pues el retraso de las autorizaciones administrativas está paralizando parte de las talas. También hay inquietud entre los propietarios por los retrasos que se están dando en la saca de la madera de los montes conveniados con la Xunta, pues hay subastas de madera afectada por los fuegos que se acaban de convocar en los últimos días, ya más de tres meses tras los fuegos, con lo cual es previsible una depreciación mayor de esa madera. Las talas tras los incendios están retrasando en toda la comunidad las ventas de madera en verde, si bien hay operaciones en marcha, como el envío de un nuevo barco de madera de pino radiata a China, que contribuyen a reducir el estancamiento.

Pendiente la resolución de las ayudas para retirada de madera quemada no comercial

La Xunta ha realizado estos días balance de las nueve líneas de ayudas convocadas tras los fuegos del otoño. En total, la Administración recibió 1.275 peticiones por un importe total de 22 millones de euros. La línea que tuvo más solicitudes fue la convocada por Medio Rural para retirada de madera quemada no comercial y para paliar daños en pistas, captaciones de agua y explotaciones agrarias. Hubo un millar de solicitudes para esa línea, con un valor conjunto que supera los 5 millones de euros, si bien el presupuesto consignado por Medio Rural es en principio de 1,5 millones de euros. Desde el sector forestal, se está pendiente de la resolución de las ayudas para la retirada de madera quemada sin valor comercial. Esa retirada es especialmente prioritaria en la zona demarcada por el nematodo y en la franja tampón con Portugal (una banda de 20 kilómetros hasta la frontera), donde esa madera debería estar retirada antes del 1 de abril, fecha en la que se estima que ya está en vuelo el insecto vector de la plaga, el ‘Monochamus galloprovincialis’. En cuanto a otras líneas de ayudas, convocadas por las distintas Consellerías, la Xunta informa de que hubo 158 solicitudes de ayuda por daños de los fuegos en viviendas y otras 27 por la afección de los incendios a establecimientos comerciales o industriales.

Ence prevé obtener plantas de eucalipto con tolerancia a la plaga del gorgojo

La plaga del gorgojo (‘Gonipterus platensis’) trae de cabeza a los propietarios forestales gallegos, sin que los esfuerzos en lucha biológica hayan logrado significativos avances en la contención del problema. El sector calcula que cada año dejan de producirse en Galicia alrededor de 800.000 toneladas de madera de eucalipto a causa de la plaga, ya que las masas de la comunidad sufren una merma media en su crecimiento superior al 20%. Ence trabaja ahora en nuevas vías para reducir el impacto de la plaga. La compañía papelera, la principal consumidora de eucalipto en Galicia, proyecta lanzar al mercado clones de eucalipto globulus con mayor tolerancia al "Gonipterus platensis". "El problema de las plantaciones actuales es que son poco tolerantes al gorgojo, pero en el marco de nuestro programa de mejora genética, tenemos una población base en la que sí identificamos individuos y familias que presentan ese rasgo de tolerancia al gorgojo", explica el coordinador del programa I+D+i Forestal de Ence, Federico Ruiz, que ayer participó en una jornada organizada por el Centro de Investigación Forestal de Lourizán sobre los programas de mejora silvícola en Galicia.
"Con la misma presión de la plaga, los nuevos clones conservarán más masa foliar que las actuales plantaciones" (Federico Ruiz, I+D Forestal de Ence)
Sobre la base de las familias que presentan menor impacto de la plaga, Ence está desarrollando cruces para obtener un nuevo clon. "Hay posibilidades de mejora en la resistencia al gorgojo de hasta un 50% a partir de los individuos que sufren menos daños, que ya tenemos seleccionados", destaca Federico Ruiz. Plazos Ence ya lleva tres años con el proyecto de obtención de un nuevo clon y calcula que en el plazo de 6-7 años estará en condiciones de lanzar al mercado plantas con una tolerancia significativamente superior a la plaga, una vez que pueda evaluar sus ensayos de campo. "Serán clones que con la misma presión de la plaga, conservarán más masa foliar que las actuales plantaciones", apunta Federico Ruiz. Los clones que tiene Ence en la actualidad en el mercado cuentan con una escasa resistencia al gorgojo, si bien presentan, en mayor o menor medida, estrategias de resistencia pasiva en base a generar hoja nueva cuando son defoliados. "Con esa estrategia, el clon que está en cabeza en la actualidad en tolerancia a la defoliación es el "Piedras", que además tiene también un buen crecimiento y es líder en rendimiento de madera en pasta" -detalla Federico Ruiz.- "Se precisan 2,64 toneladas de madera del clon "Piedras" para elaborar una tonelada de pasta. El promedio de nuestros clones está en 2,8 toneladas de madera para una tonelada de pasta", compara. Jornada de Lourizán sobre la mejora genética y silvícola en Galicia. Lucha biológica Entre tanto la vía de lograr clones con más tolerancia a la plaga no cristaliza, la industria orienta su esfuerzo a potenciar la lucha biológica contra el gorgojo. "Estamos tratando de mejorar los tratamientos y el funcionamiento de las biofábricas del "Anaphes nitens", el actual insecto parasitoide de los huevos de la plaga. También detectamos la oportunidad de mejorar el control biológico con nuevos parasitoides y para 2018 tenemos previsto iniciar sueltas del "Anaphes inexpectatus", con el que ya están haciendo ensayos en Portugal", detalla Federico Ruiz. Otras innovaciones en la lucha biológica de la plaga están siendo evaluadas por la Estación Fitopatológica de Arenero, dependiente de la Deputación de Pontevedra, que maneja un parásito del gorgojo que se piensa que tiene ciclos biológicos más sincronizados con la plaga, el "Anaphes tasmaniae". Existe además una tercera vía en la que también tiene esperanzas Ence, la de un insecto parasitoide de las larvas, el "Entendon magnificus", con el que la compañía pastera tiene proyectos. La Consellería del Medio Rural, por su parte, informó estos días en el Parlamento de un significativo aumento de la lucha biológica que realiza la Xunta cada año. Si en el periodo 2012-2015 se colocaban cada año en los montes gallegos alrededor de 6.000 bolsas con depósitos de huevos del parasitoide "Anaphes nitens" -según la Xunta-, en el 2016 fueron 10.000 y en el 2017 un total de 10.600.

Perspectivas para el eucalipto nitens

Dada la virulencia que alcanzó en los últimos años la plaga del gorgojo en algunas comarcas, parte de los propietarios forestales ha optado por sustituir sus plantaciones de eucalipto globulus por eucalipto nitens, más resistente a los daños del "Gonipterus". También hubo una expansión de las plantaciones de nitens en el interior de Galicia, en altitudes superiores a los 300-400 metros, donde el globulus no prospera. La incógnita por despejar es el aprovechamiento industrial futuro que tendrá esa madera y a qué precios.
La mejora genética del eucalipto nitens aumenta el interés de la especie para producir pasta de papel
Ence lleva años advirtiendo de que su prioridad de consumo pasa por el eucalipto globulus, que es la madera que le ofrece mayores rendimientos y calidades, si bien la compañía también reconoció recientemente que en los últimos tres años triplicó sus compras anuales de nitens, que se acercan ya al 20% del total. "Claro está que no nos gustaría aumentar las compras de nitens, ya que implica reducir nuestra producción total de pasta de papel, pues precisamos procesar más madera para obtener la misma cantidad de pasta" -explica Federico Ruiz.- "Ahora bien, nosotros también vendemos semillas de eucalipto nitens y nuestra apuesta con esta especie pasa por lograr una madera de mayor densidad, que se acerque a la densidad del globulus. Comercializamos semillas procedentes de Australia que logran una ganancia de densidad de hasta el 6% en relación a las plantaciones actuales. Esa ganancia de densidad parece pequeña, pero a nivel de impacto en nuestro proceso industrial, es equivalente a lo que representa un aumento del 40% en la producción de toneladas de madera por hectárea". La línea de mejora genética del nitens, en la que también trabajan viveros gallegos y otras empresas, puede abrir nuevas perspectivas para esta especie. El coordinador de I+D Forestal de Ence reconoce que ese nitens mejorado representa una opción para las plantas del grupo, si bien elude hacer pronósticos sobre el consumo de nitens que puede asumir Ence, al quedar el campo industrial fuera de su departamento.

Cadena de custodia, madera certificada del monte al consumidor

La certificación forestal está creciendo de forma progresiva en Galicia por la exigencia de los mercados internacionales. El consumidor quiere garantías de que la madera o papel que utiliza procede de una gestión sostenible del monte, cuestión que se garantiza a través de los sellos de certificación forestal FSC o PEFC, visibles en el producto final. Hablamos con el Grupo Alvariza, uno de los que opera en Galicia en el ámbito de la certificación forestal, para conocer más del proceso de certificación de la cadena de custodia.

La cadena de custodia garantiza la trazabilidad de la madera certificada que se extrae del monte, de forma que haya un seguimiento de la misma desde el cargadero a pie de monte hasta el consumidor final. Todos los operadores que intervienen en el proceso, desde el rematante que corta la madera en el monte hasta el aserradero y la industria que transforma la madera, tienen que estar certificados en la cadena de custodia.

«Básicamente, la cadena de custodia obliga a llevar un registro de todas las entradas y salidas de madera, con indicación de la que está certificada, siempre con la justificación de los correspondientes documentos de origen», explica Raquel González, de Asefor, la firma que gestiona el Grupo de Certificación Alvariza.

Trazabilidad
Tanto FSC como PEFC ofrecen diferentes sistemas para garantizar la trazabilidad en la cadena de custodia, de cara a que cada empresa elija el que mejor se adapta a su actividad. De este modo, por ejemplo un aserradero no tendrá que separar físicamente el material certificado del que no lo está, pudiendo utilizar un sistema de créditos para la venta de material certificado. Cuanta mayor sea la cantidad de madera certificada introducida en la cadena, mayores serán los créditos de los que dispondrá la línea de producción.

El sistema es «sencillo», valora el Grupo de Certificación. «Nuestra filosofía es que la cadena de custodia no le suponga una carga a las empresas. Tratamos de solucionarles el trabajo y que no les suponga un esfuerzo añadido a mayores, o el menos posible» -subraya Raquel González.- «El asesoramiento es continuo, bien en persona o telefónicamente, y nos encargamos de todas las tramitaciones y auditorías internas, cuando tocan. También acompañamos a la empresa en las auditorías externas que hacen tanto FSC como PEFC», detallan.

En caso de rematantes o pequeños autónomos que no estén acostumbrados a llevar un registro digital de las entradas y salidas de madera -cuestión exigida en la cadena de custodia FSC-, el Grupo Alvariza incluso se ocupa de la gestión del registro digital.

Certificación doble
La certificación se suele hacer siempre doble, tanto en el sello FSC como PEFC, a fin de que la empresa pueda satisfacer la demanda de cualquier cliente. «El sistema de certificación funciona a la inversa. El cliente final es el que hace presión sobre toda la cadena, hasta llegar al propietario forestal, en demanda de madera certificada. En un principio, la certificación comenzó con el eucalipto, pues los sellos FSC y PEFC son hoy en día imprescindibles en la venta internacional de pasta de papel, pero en la actualidad la demanda de la certificación se está extendiendo al pino. Las industrias y los aserraderos tienen clientes que ya les demandan, por ejemplo, tableros o palés de madera certificada», apunta Raquel González.

Cinco problemas del monte gallego que destapa la tragedia de Portugal

El trágico incendio forestal que está viviendo Portugal, con más de 60 muertos y unas 40.000 hectáreas arrasadas, ha abierto un debate en Galicia sobre las medidas a adoptar para prevenir catástrofes incendiarias. Los grupos de la oposición apuntaron hoy en la comisión de Agricultura del Parlamento varios frentes de trabajo, si bien no hubo consenso y ninguna iniciativa salió adelante. El Plan Forestal de Galicia, que se presentará previsiblemente en la próxima semana, es esperado como punto de partida para trabajar en un nuevo monte gallego. Las principales cuestiones de prevención que quedan sobre la mesa son las siguientes.

1) Impunidad en la forestación de tierras agrarias

Las tierras de cultivo y los prados venían actuando de cortafuegos naturales frente a los incendios. Si se sustituyen por plantaciones forestales, que terminan por rodear los núcleos de población, se fomenta la continuidad de la masa forestal, sin fragmentaciones que eviten la expansión de los fuegos. Los grupos de la oposición recordaron hoy en el Parlamento que en Galicia hay más de 30.000 hectáreas agrarias forestadas de forma ilegal, la mayoría con eucaliptos. Desde el grupo popular fueron contundentes en asegurar que estaban en contra de la forestación de tierras agrarias, pero la oposición entiende que no se está haciendo nada para frenar esa situación, prohibida por la Lei de Montes de Galicia (Lei 7/2012): "No hacen nada para evitarlo. Se puede ver en cualquier concello de Galicia", se cuestionó desde el grupo de En Marea.

2) Franjas de gestión de la biomasa en el entorno de los núcleos rurales

La normativa obliga a mantener despejados de matorral 50 metros en el entorno de núcleos de población, viviendas o edificios aislados. Pinos y eucaliptos deben guardar además una distancia de 30 metros. Uno de los problemas que se vivió en Portugal fue que el monte llegaba a la puerta de las casas, por lo que varias aldeas quedaron arrasadas por el fuego. "En Galicia tenemos millares de núcleos de población sin una franja de seguridad. La ley dice que si el propietario no se encarga de limpiarla la responsabilidad es de los Concellos, pero los Concellos no tienen capacidad para afrontar ese problema. No es función de los Concellos, es función de la Consellería", defendió hoy en el Parlamento el diputado del Bloque Xosé Luis Rivas "Mini". La misma postura expresó ayer la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), que advirtió de que los Concellos no contaban ni con medios técnicos ni con personal para acometer esos trabajos.

3) Distancias del arbolado a vías de comunicación

La Lei de Montes obliga a que las nuevas repoblaciones de pinos y eucaliptos mantengan una distancia de 10 metros a carreteras convencionales. En pistas forestales, la distancia se reduce en general a cuatro metros. Velar por el respeto a esas distancias garantizaría una mejora progresiva del actual escenario, con el monte pegado en muchos puntos a las vías de comunicación, sin apenas retranqueo. Otra cuestión que queda abierta es si, en determinadas zonas, sería preciso actuar para alejar el arbolado ya existente de las vías de comunicación. "Cuando vengo a Santiago desde Boimorto, cruzo por muchas carreteras provinciales que discurren entre hileras de árboles. No crecen en la cuneta porque por la cuneta pisan los tractores. Si me pilla un fuego ahí en medio, estoy perdido" -reflexiona el diputado del Bloque Xosé Luis Rivas "Mini"-. "Estamos vendidos y la Administración no reacciona".

4) Monocultivos

El grupo En Marea pidió hoy medidas que eviten la continuidad de grandes masas de eucalipto, ya que considera que esta especie facilita la propagación de los incendios a una mayor velocidad. "Deberían romperse los monocultivos cada 5 hectáreas", sugieren a efectos de crear en los montes un mosaico en el que se combinen eucaliptos o pinos con frondosas y tierras agrarias, espacios en los que el fuego o se detiene o avanza con menor rapidez. Desde el grupo popular, declararon que estaban en contra de presentar el eucalipto como la personificación del mal, pero coincidieron en la necesidad de medidas contra el monocultivo. "El monocultivo sí es un problema", reconocieron.

5) Asociacionismo forestal

La mayoría del sector forestal coincide en un mismo diagnóstico sobre los fuegos de Portugal. Más que de un problema del eucalipto o del pino, se trató de un problema de abandono y de falta de gestión, que llevó a una excesiva acumulación de biomasa en el monte. Como vía para encarar esa situación de abandono, extensible a buena parte del monte gallego, el sector aboga por la potenciación del asociacionismo forestal, si bien la figura implementada por la Xunta para promoverlo está naufragando. Existen sólo media docena de Sociedades de Fomento Forestal (Sofor) constituidas en Galicia. Esa situación es considerada un retroceso por la oposición. "Sólo en los últimos meses del Gobierno Bipartito había 45 Unidades de Xestión Forestal (Uxfor) en perspectiva", recriminó el diputado del Bloque Xosé Luis Rivas "Mini", que pidió que la Xunta asuma el fracaso de las Sofor y busque nuevas vías para promover el asociacionismo.

«Estamos a favor de una regulación del eucalipto que sea explicable»

La asociación de productores de los montes de Castroverde quiere un debate público sobre el futuro del eucalipto en los municipios del centro y sur de Lugo, donde estaría prohibida la plantación de la especie, según un borrador de la Consellería do Medio Rural. "Los propietarios estamos a favor de una regulación del eucalipto que sea explicable" -defiende el secretario de la agrupación, Manuel Marey.- "El problema de esta regulación es que no tiene explicación y nadie de la Xunta quiere venir aquí a dar cuentas, a pesar de estar invitados". La segunda asamblea de la asociación de productores de Castroverde, con presencia también de las ejecutivas de colectivos de propietarios de Baleira y Baralla, permitió visibilizar el respaldo social a las demandas sobre el eucalipto. "Hay inquietud e incertidumbre porque el eucalipto en la actualidad es una de las alternativas claras para generar rentas en el rural", señala Marey. "Es una equivocación demonizar la especie, es una alternativa más. Queremos que nos expliquen por qué no se va a poder plantar eucalipto en suelo productor forestal de Castroverde. No hablamos de plantar en prados o sobre carballeiras", aclara. Las demandas del colectivo contaron en la asamblea con significativos respaldos, como el que prestó Antonio Oca, propietario forestal en A Mariña y director xeral en Medio Rural durante el Gobierno del Bipartito. Los propietarios de Castroverde advierten también de que la eucaliptización de la que se habla en Galicia poco tiene que ver con los ayuntamientos del centro y sur de Lugo. "Puede ser preciso regular el eucalipto y sobre todo, hacer cumplir las regulaciones ya existentes, pero da la impresión de que con este decreto se quiere sólo hacer un lavado de imagen a costa nuestra. Que vengan a Castroverde y expliquen por qué aquí no se va a poder plantar eucalipto y sí en el vecino ayuntamiento de O Corgo" -reitera Marey.- "Tiene mérito que a Baralla, Baleira o Castroverde nos quieran responsabilizar de la eucaliptización de Galicia", cuestiona.

"La incertidumbre aumenta las talas y las plantaciones"

El anuncio de la regulación del eucalipto en el centro y sur de Lugo, que lleva meses en forma de borrador pero que no se termina de sustanciar, genera una situación de incertidumbre entre los propietarios. En la segunda asamblea de la asociación de Castroverde, una de las principales preocupaciones que se constató es la de si se puede plantar eucalipto a día de hoy. Desde la asociación reconocen que hay propietarios que están plantando en los últimos meses o haciendo talas de pinares antes de turno con el objetivo de asentar los eucaliptos antes de que entre en vigor la posible nueva normativa. "Se está produciendo un desequilibrio en las talas y en las plantaciones que no es habitual. Son las consecuencias de la incertidumbre y de un proyecto de decreto que quiere meternos en la segunda división forestal", concluye Marey.

«Con la prohibición del eucalipto, la alternativa que quedaría es el abandono»

La posible prohibición del eucalipto en 21 municipios de Lugo y en Ourense es criticada por el empresario Daniel Villapol, el principal referente de la Asociación de Empresarios de la Primera Transformación de la Madera de Lugo. Villapol reconoce que los aserraderos pueden encontrarse en 12-15 años con problemas para abastecerse de pino, pero ve también una oportunidad en el eucalipto para la industria de la madera. "Nunca quedará eucalipto sin cortar en el monte", asegura. Su posición contrasta con la expresada por otros representantes de la industria de la madera, que se han declarado preocupados por una posible sobreoferta de eucalipto y por los problemas que enfrentarán los aserraderos que trabajan con pino. Hablamos con Villapol antes de su intervención en las jornadas sobre el eucalipto organizadas la pasada semana por la Deputación de Lugo, en las que se constató una polarización entre la visión ambiental del monte y la forestal.
"Si se cumpliese la legislación que regula las plantaciones de eucalipto, no habría que tomar más medidas"
- Explíquenos su postura sobre el decreto para regular el eucalipto que baraja la Xunta. - Desde el punto de vista de la plantación del eucalipto, nosotros entendemos que hay que mantener los criterios de biodiversidad que ya tenemos ahora mismo. Hay zonas donde no se puede plantar, como los bosques de frondosas caducifolias, espacios naturales protegidos o tierras de labor. También están reguladas las distancias que hay que respetar a ríos y carreteras. Por tanto, lo que hay que tratar es que eso se cumpla. Si se cumpliera la legislación que tenemos, no hay necesidad de tomar otras medidas. - Sin prohibiciones adicionales, resulta probable que las masas de pino del interior de Lugo e incluso de Ourense se sustituyan por eucalipto. ¿Existe un riesgo de desabastecimiento de pino a medio plazo? - Efectivamente, las empresas consumidoras de pino, no a corto plazo, porque ahora está sobrando, pero sí a medio plazo, van a tener problemas. Si no cambia la política de plantaciones de pino, a 12-15 años habrá problemas. Desde la perspectiva del propietario, el eucalipto nitens duplica la rentabilidad del pino y con un 40% de trabajo menos. En Galicia, la propiedad es privada, así que si no hay una regulación que lo impida, lo normal es que el propietario busque el mayor rendimiento posible para su explotación.
"Las empresas consumidoras de pino van a tener problemas. Para el propietario, el eucalipto duplica la rentabilidad del pino"
- A pesar del riesgo de desabastecimiento de pino, ¿no estáis en contra de la expansión del eucalipto? - Son cuestiones diferentes. Si no se busca otra alternativa, la única alternativa que quedaría con la prohibición del eucalipto es el abandono. No es el pino ni crear una masa de árboles autóctonos. Seamos realistas. Pensemos que en Galicia las superficies de los propietarios particulares son muy pequeñas, con costes de gestión altos, y no se rentabilizan fácilmente con otros árboles. Un tema en el que tenemos que pensar es en proteger el medio rural de la despoboación. Si no hay actividades productivas, y la madera es una, que mantengan al propietario en el rural, automáticamente lo abandona. Y aun así puede dejarlo. El propietario tiene que buscar lo que dé más valor. Si no, entre la pequeña dimensión de la parcela y lo cara que se hace la gestión, el riesgo de abandono es claro.
"En el mundo, el 'globulus' representa sólo el 15% de los eucaliptos y el otro 85% también se consume. No tenemos porque ser distintos"
- El eucalipto que se plantaría en el interior de Lugo es el nitens, con menores aptitudes que el globulus tanto para pasta de papel como para madera. ¿Cree que tendría demanda? - Claramente hay que defender el eucalipto globulus en aquellos espacios donde se pueda plantar, ya que tiene mayor calidad y posibilidades de aplicaciones. Ahora bien, el globulus tiene el problema de que no se da en altitud y presenta mayores dificultades por la plaga del gorgojo. Por tanto, cuando haya que plantar nitens, hay que decir que el eucalipto nitens tiene aplicaciones y tiene industria consumidora. Pensemos que en el mundo, el eucalipto globulus no llega al 15% de los eucaliptos y el resto son eucaliptos que está consumiendo la industria y aquí no tenemos porque ser distintos. - La expansión del nitens le hace pensar a parte del sector forestal que en un futuro habrá dificultades para la comercialización de toda esa madera. ¿Ve lógico ese temor? - Ahora mismo está consumiéndose todo el nitens que sale al mercado y en un futuro seguirá siendo así, sin lugar a dudas. Es rentable para pasta y estoy convencido de que el consumo de pasta de papel seguirá en aumento. También se usará para tablero e inclusive puede tener usos para madera serrada. ¿Va a tener menos valor el nitens que el eucalipto globulus? Sí, son maderas diferentes con usos diferentes, pero eso no quiere decir que no se vaya a consumir.

Los montes conveniados emplazan a la Xunta a consensuar todas las talas

Las comunidades de montes vecinales coinciden en la necesidad de que se mejore la gestión de las superficies que están conveniadas con la Xunta. La Organización Galega de Comunidades de Montes, que ha celebrado este fin de semana su asamblea anual, acordó emplazar a la Administración autonómica a ejecutar todas las talas con un acuerdo previo con las comunidades de montes. "En teoría, los montes conveniados deberían tener un plan de ordenación que regulara las talas, pero hubo un incumplimiento sistemático por parte de la Xunta y muchas carecen de ese instrumento de gestión" -señala el presidente de la Organización Galega de Comunidades de Montes, Alfredo Pereira.- "En tanto no se pongan en marcha los planes de ordenación que están pendientes, acordamos pedirle a la Xunta que toda corta se haga con un acuerdo anual previo con cada comunidad".
"Existe el miedo a que en aquellos montes con deudas, la Xunta trate de cobrar ejecutando talas excesivas"
Fin de los convenios La demanda de los montes vecinales nace del temor a que la Administración practique talas excesivas antes del final de los convenios y consorcios, que tienen fecha de caducidad en el 2021. "Existe el miedo a que en aquellos montes con deudas, la Xunta trate de cobrar el dinero pendiente haciendo talas a matarrasa. Si se aplicara el sentido común, no debería ser así, pero en cualquier caso, para garantizar una gestión forestal racional, la Xunta debería sentarse a hablar y llegar a acuerdos por escrito", señala Alfredo Pereira. Tramitaciones telemáticas Otro asunto que preocupa en las comunidades de montes es la obligación inminente de que todos los trámites con la Xunta se gestionen por internet. "Está claro que no todas las comunidades disponen de los medios técnicos necesarios y además en muchas zonas del rural no existe la tecnología idónea para hacer esos trámites", advierten desde la Organización Galega de Comunidades de Montes. El colectivo está de acuerdo en que hay que avanzar hacia el escenario de que todos los trámites se hagan por internet, pero precisa que hay que dejar una margen de tiempo para la adaptación.

Propuestas para la ordenación del eucalipto

La Organización Galega de Comunidades de Montes se posiciona a favor de la regulación del eucalipto en Galicia, pero no está de acuerdo con la propuesta de la Xunta, pues entiende que no se debe prohibir la especie en determinados municipios del interior de Lugo y en Ourense, tal y como pretende el borrador de decreto presentado por Medio Rural. Las comunidades de montes, que ya le han trasladado sus aportaciones a la Consellería, abogan por una regulación en toda Galicia que incluya la progresiva retirada de la especie de tierras agrarias y de las zonas de ribera, así como una normativa de plantación que establezca discontinuidades en las masas de eucalipto, evitando superficies continuas superiores a las 10 hectáreas. El objetivo es el de reducir el posible impacto de los fuegos. Madera de calidad También se propone que los montes vecinales que trabajen con eucalipto tengan que reservar una parte de la superficie para la producción de la especie con destino a madera, con turnos de tala en el entorno de los 30 años. "El eucalipto tiene sitio en el monte, pero siempre que las tierras y las masas boscosas estén ordenadas", concluyen.

«Hay preocupación en los aserraderos porque puede faltar madera en unos años»

Los aserraderos gallegos y los profesionales que cortan la madera en el monte, los rematantes, están preocupados por el progresivo cambio del panorama forestal en Galicia. El aumento de la superficie de eucalipto, que ya representa la mitad de las talas que se hacen en la comunidad, condiciona el futuro de parte de las empresas del sector. Así se puso de manifiesto en la última asamblea de Fearmaga, la federación empresarial que agrupa a los aserraderos y rematantes de la comunidad. En la asamblea, fue reelegido presidente Elier Ojea, también cabeza visible de Confemadera Galicia, la patronal gallega que agrupa a la mayoría del sector de la madera. Hablamos con él sobre el decreto de regulación de eucalipto que prepara el Gobierno gallego y sobre las necesidades y demandas del sector.
"La madera de calidad está desaparecida en Galicia. Necesitamos incentivos fiscales y plantas de buena genética para recuperarla"
- Estáis preocupados por el aumento de la superficie de eucalipto, pero también estáis en contra de la propuesta de la Xunta para regularlo. Explícanos vuestra postura. - Nosotros no estamos en contra de regular el eucalipto, lo que sucede es que proponemos una regulación distinta. Mantenemos la misma opinión desde hace años, no somos partidarios de penalizar ninguna especie, pero como pymes que somos, que trabajamos madera de calidad, tenemos que llamar la atención sobre un hecho. Hoy en Galicia la madera de calidad está prácticamente desaparecida. Se precisan apoyos fiscales y plantas de buena genética para incentivar a los propietarios a invertir en ciclos de cultivo largos y rentables, no sólo en plantaciones de eucalipto. - En la última década hubo un cierre de aserraderos y de pequeñas empresas del sector a causa de la crisis, entre otros factores. ¿Crees que el aumento de la superficie de eucalipto pone en riesgo la actividad de las empresas que quedáis? - La situación es complicada. Si no hay cambios de tendencia, muchas empresas se verán abocadas al cierre en 10 años por falta de madera. Hace 50 años, Galicia era importante en cantidad y calidad de la madera. Hoy en día seguimos siendo importantes en cantidad, pero no en calidad. Las dos principales empresas de la comunidad (en alusión a Ence y a Finsa) tienen madera de sobra, sin necesidad de importarla, pero el resto estamos en una situación delicada. Los aserraderos no pueden importar madera para aserrarla aquí porque no es rentable.
"Se habla de que en Galicia hay cientos de miles de hectáreas de frondosas, pero lo que no se dice es que sólo sirven para dar sombra"
- El mercado de la madera de pino, no obstante, no acaba de despegar. Hubo una caída de precios y de demanda en el 2008 que no llegó a recuperarse nunca. - Para el poco pino de buena calidad que hay, sí tenemos demanda. Para el malo, que es la mayoría, no. Si hablamos de las frondosas (robles, castaños, abedules, etc.), en el inventario forestal se dice que en Galicia hay no sé cuantos cientos de miles de hectáreas de frondosas, pero lo que no se dice es que sólo sirven para dar sombra. No estamos hablando de madera de calidad. - ¿Qué sería preciso hacer para poner en valor las masas de frondosas existentes y fomentar nuevas plantaciones de ellas en Galicia? - Pueden establecerse incentivos fiscales para ese tipo de plantaciones y poner a disposición del propietario planta de buena genética. Tenemos el ejemplo del trabajo de mejora genética que hizo el Centro de Investigación Forestal de Lourizán con el cerezo gallego, que se podría extender a otras especies. En Francia, sin ir más lejos, tienen haya, abeto y cerezo en cantidad, que nosotros importamos de allá. Nuestra tierra no es menos fértil que la francesa. La Administración tiene que buscar fórmulas.
"En Francia tienen haya, abeto y cerezo en cantidad, que nosotros importamos de allí. Nuestra tierra no es menos fértil que la francesa"
- Con este panorama que dibujas, ¿no estaríais a favor de una limitación de la superficie ocupada por el eucalipto? - Nosotros no entramos en lo que el propietario tiene que hacer. Lo que sí decimos es que a veces se habla muy fácil de la riqueza que genera el eucalipto para el propietario, pero también hay que pensar qué sucederá en diez años si resulta que se está sobreplantando eucalipto. Las industrias que consumen eucalipto en Galicia podrán ampliar sus compras, pero no hay perspectivas de que se vaya a asentar en la comunidad una industria de gran consumo que atienda toda la oferta de eucalipto que previsiblemente va a haber. Bien es cierto que como no tenemos inventarios forestales actualizados, resulta complicado hablar con cifras en la mano. En cualquier caso, es necesario buscar un equilibrio. Igual que en su día nosotros apoyamos la continuidad de Ence en Pontevedra porque pensábamos que a nivel económico y social era bueno para Galicia, el conjunto del sector de la madera está concienciado en que precisamos de manera proporcional madera para distintos usos. Para atraer industria de la madera necesitamos un recurso. Las fábricas que se fueron no volverán si no hay ese recurso y las que pueden venir tampoco lo harán.
"Siempre se insiste en la riqueza que da el eucalipto, pero ¿qué pasará en diez años?"
- ¿Hay posibilidades de nuevas inversiones en la industria de la madera gallega? - Las empresas que quedamos tras la crisis tenemos en mente emprender inversiones. Piensa que somos la primera industria del rural. Sería positivo también que Galicia atrajera inversiones en el sector, sobre todo en lo que es la segunda transformación de la madera. - Imagino que estáis satisfechos con la inminente creación de la Axencia da Industria Forestal de Galicia. - Desde luego pensamos que es una oportunidad. La Axencia está aún pendiente de definir y estamos a la espera de mantener nuevos contactos con la Consellería de Economía y con la de Medio Rural.

"Ya pasó suficiente tiempo para comprobar que las Sofor no han funcionado, busquemos otra fórmula"

- Aparte de tu papel como portavoz de Fearmaga y Confemadera, trabajas también en el sector a título particular. Cuéntanos con qué maderas y orientación estáis trabajando en vuestra empresa. - Tenemos un aserradero familiar (Maderas Ojea, O Carballiño) que cumplió ya 80 años. Antes de la crisis, trabajábamos con el pino, pero con la crisis nos quedamos sin márgenes de beneficio y decidimos reorientar la empresa. Ahora estamos haciendo transformación de madera en diversidad de piezas dirigidas al sector de la construcción, principalmente. Importamos madera laminada y noble de diversos orígenes y también trabajamos algo con pino gallego de calidad.
"Tengo que reconocer que muchas parcelas de monte de la familia aún no sabemos dónde están. El minifundio es malo para todos"
- Como propietario forestal, ¿qué especies tienes plantadas en tus parcelas? - Más que propietario, soy heredero forestal. Estamos en la provincia de Ourense, por lo que el pino y el roble son las especies predominantes. Con los robles que tenemos, estamos tratando de hacer podas y silvicultura, de cara a obtener una buena madera en el futuro. También tengo que reconocer que muchos montes de la familia aún no sabemos dónde están. El minifundio es un problema para todos. - Hace ya unos años que la Xunta lanzó la fórmula de las Sociedades de Fomento Forestal (Sofor) para promover el asociacionismo de los propietarios particulares y reducir el minifundio, pero los resultados son por el momento escasos. ¿Ves viable el camino del asociacionismo forestal? - No queda otra. Con parcelas de 400 metros cuadrados no se hace nada. O tiramos los vallados físicos y mentales o estamos condenados al abandono. Ya pasó tiempo suficiente para ver que la fórmula de las Sofor no ha funcionado. Tenemos que ser capaces entre todos de buscar una vía de sustitución que alimente la vocación de juntar las hincas y de hacer una buena gestión del monte.

El eucalipto ocupa unas 30.000 hectáreas en tierras agrarias

El Consello Forestal de Galicia, un órgano consultivo de la Xunta en el que participan empresas, asociaciones de propietarios y otros colectivos del sector, abordó hoy la propuesta de Medio Rural para prohibir el cultivo del eucalipto en el interior de Lugo y en Ourense. La postura mayoritaria fue contraria a las limitaciones propuestas por la Administración, si bien Fearmaga, la Federación que agrupa a aserraderos y madereros, sí apoya la medida. Antes de regular nuevas prohibiciones, gran parte del sector le pidió a la Consellería de Medio Rural que haga cumplir las actuales. El eucalipto ya está vetado en tierras agrarias y superficies de frondosas, en tanto en las zonas de Red Natura no puede aumentar su actual distribución. Sin embargo, en Galicia hay alrededor de 30.000 hectáreas de eucaliptos en tierras agrarias, según manifestó en la reunión Jacobo Feijoo, de Unións Agrarias. Superficies agrarias El dato de las 30.000 hectáreas es la proyección que calcula Unións a partir de las últimas cifras oficiales conocidas, que datan de 2008, cuando eran 13.000 las hectáreas agrarias ocupadas por la especie. La organización agraria le trasladó a Medio Rural la propuesta de que establezca una amnistía, permitiendo un plazo para que los propietarios de plantaciones de la especie en superficie agraria levanten los cultivos sin sanciones. Unións aboga porque transcurrido ese posible plazo se sancione de oficio a todos los propietarios de plantaciones en prados y tierras de labor. Desde la Consellería se trasladó que ya hay cientos de denuncias por cultivos de la especie en el campo, si bien desde el sector se cuestiona la escasa actuación de oficio que se percibe en la Administración. Proyecto de decreto El posicionamiento del sector forestal sobre el proyecto de decreto para regular el eucalipto quedó claro en la reunión de hoy. Alrededor de diez asociaciones, tanto de propietarios como empresariales, leyeron en el Consello Forestal un posicionamiento conjunto en el que expresaron su desacuerdo con las prohibiciones que ha diseñado la Xunta en el borrador del decreto sobre el eucalipto. Se encargó de la lectura, en calidad de portavoz, el director técnico de la Asociación Forestal de Galicia, Francisco Dans. La conselleira, con representantes del sector, antes del Consello Forestal. Los colectivos del sector transmitieron la idea de que sería positivo retrasar cualquier medida hasta que se culmine la revisión del Plan Forestal de Galicia, cuyo primer borrador está previsto para el mes de junio. Entienden que ese es el marco en el que se deben regular los usos del territorio, sin necesidad de discriminar a los propietarios forestales del interior de Lugo y de Ourense. Sobre la mesa dejaron la posibilidad de aceptar una regulación al cultivo del eucalipto, pero sin el establecimiento de líneas geográficas arbitrarias para vetar la especie. Se desmarcó de esa postura la Federación Empresarial de Aserraderos y Rematantes de Madera de Galicia (Fearmaga), que teme el impacto de la expansión del eucalipto nitens sobre las empresas que trabajan con pino. La Organización Galega de Comunidades de Montes, por su parte, expresó su postura favorable a regular el eucalipto y ordenar los usos del monte. Escuchados todos los puntos de vista, la Consellería de Medio Rural marcó un plazo de 15 días para recibir las alegaciones del sector y quedó de estudiarlas antes de adoptar una decisión definitiva.

Ampliación del plazo para la ordenación del monte

La normativa autonómica marca la obligación de que todas las comunidades de montes con una superficie superior a 50 hectáreas cuenten con un plan de ordenación forestal en el 2018. Medio Rural decidió ahora ampliar ese plazo hasta febrero del 2019, según anunció la Consellería en el Consello Forestal. Las comunidades de montes con menos de 50 hectáreas y los propietarios particulares, en el caso de no contar con planes de ordenación, pueden optar por comunicar su adhesión a los modelos silvícolas de referencia. Mesas de la Castaña y de la Madera La Xunta avanzó también en el Consello Forestal en las propuestas de reglamento de las Mesas de la Castaña y de la Madera, dos organismos consultivos que la Administración quiere poner en marcha con la participación de los distintos agentes de ambos sectores.