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Iseran, un herbicida para el control de las malas hierbas en maíz

En la campaña 2023, SIPCAM Iberia lanzó Iseran, un novedoso y sostenible herbicida para aplicaciones en pre-emergencia y en post-emergencia temprana de las malas hierbas.

Iseran se posicionó en el mercado como “una solución flexible para el cultivo de maíz”, según destacó en un inicio el Product Manager de SIPCAM Iberia, Pepe Martínez. Doce meses después de su lanzamiento, la compañía de sanidad vegetal ha demostrado el alto rendimiento de su nueva. herramienta.

En su primer año de uso comercial, más de 40 agricultores leoneses pudieron comprobar el pasado mes de julio cómo Iseran puede convertirse en la clave para lograr una campaña de éxito. De la mano del equipo de la compañía, comprobaron su efectividad en el control de malas hierbas durante una demostración en campo.

Demostración en campo del funcionamiento del herbicida.

“Pudimos observar que este herbicida tiene una alta eficacia frente a dicotiledóneas (malas hierbas de hoja ancha) y que, combinado con otras materias activas, es capaz de reforzar su efectividad para el control de monocotiledóneas”, analiza la delegada de Field Marketing Patricia de Blas.

Iseran nace fruto de la tecnología Microplus Technology ®, patentada por Sipcam-Oxon. “Está formado por Mesotriona en forma de suspensión concentrada, la cual actúa sinérgicamente con la Clomazona, que se encuentra en forma de suspensión de microcápsulas”, explica el Product Manager.

Acción
El herbicida ofrece un modo de acción diferente al resto, dada su composición. Las dos materias activas son absorbidas por las malas hierbas tanto por las hojas como por las raíces, translocándose por toda la planta y logrando que no nazcan las malas hierbas o una necrosis de estas.

Con este herbicida, SIPCAM Iberia ofrece una acción herbicida inmediata gracias a la Mesotriona, mientras que las microcapsulas de Clomazona se liberan de un modo controlado, gradual y continuo. De esta forma, se garantiza una eficacia máxima, así como mayor persistencia de acción y selectividad para el cultivo del maíz.

«Si se busca una estrategia para control de malas hierbas en pre-emergencia o post-emergencia, hasta tres hojas, Iseran es de los pocos herbicidas en el mercado que cumple esos requisitos»

Este formulado ofrece una dosificación flexible que permite controlar las principales malas hierbas de hoja ancha y estrecha de las zonas maiceras. Además, destaca por su capacidad de integración en cualquier estrategia herbicida y no tiene limitaciones de su uso en los años siguientes.

“Si los profesionales agrícolas buscan una estrategia para su campaña de 2024 con la que controlar las malas hierbas en pre-emergencia o post-emergencia temprana (hasta tres hojas), Iseran es uno de los pocos herbicidas que hay en el mercado con estas características. Además, es un producto compuesto con unas materias activas que no tienen restricciones”, concluye la delegada de Field Marketing de la zona.

Acerca de SIPCAM Iberia
SIPCAM Iberia es una empresa de I+D, marketing y comercialización de productos fitosanitarios, bioestimulantes y nutricionales especiales, tanto químicos como biológicos, con vocación de liderazgo, que elabora soluciones innovadoras de investigación y desarrollo agrícola, ofrece una amplia cartera de productos para los principales cultivos. La compañía destaca por una línea de productos seguros para el agricultor, el consumidor y el Medio Ambiente.

Para más información

Gustavo García: “LG lleva más de 40 años trabajando en seleccionar variedades de maíz con alta digestibilidad y ahora se ven los frutos”

Gustavo García, Xefe Rexional de LG A punto de dar comienzo a una nueva y apasionante campaña de maíz, Gustavo García, Jefe Regional de LG, y uno de los mayores expertos en maíz del norte de España, en colaboración con Delagro, nos explica todo lo que debemos tener en cuenta durante todo el proceso del maíz: desde la selección de la variedad hasta que cuidados debe tener el silo para evitar mermas. El maíz es uno de los cultivos de mayor importancia en la Cornisa Cantábrica, no sólo por su número de hectáreas cultivadas si no también por ser el sustento principal de muchas de las granjas. El silo de maíz ha demostrado ser un elemento fundamental en la ración que se suele traducir en mayores y mejores producciones de leche. Sin embargo, no todo el maíz es igual. Elegir la variedad que necesitamos puede ser clave y marcar la diferencia a la hora de conseguir un buen silo. Empresas como LG llevan décadas trabajando en seleccionar las mejores y más adecuadas para la zona de la Cornisa. Un buen silo empieza por escoger la variedad más adecuada, ¿qué consejo darías a los ganaderos para escoger la que realmente necesitan? A la hora de escoger la mejor variedad en cada zona es muy importante, en primer lugar,, conocer las características edafo-climáticas de la zona donde vayamos a cultivar el maíz y conocer el potencial productivo de las parcelas. En segundo lugar, debemos conocer el destino de ese maíz, para así planificar el cultivo en función del uso que le vayamos a dar. No es lo mismo maíz para grano, que maíz para silo, e incluso dentro del maíz para silo, debemos conocer a que tipo de animales va destinado, ya que cuanto más nivel de producción tenga la vaca, más importante será disponer de una alta digestibilidad en el ensilado.
Es clave elegir bien la variedad, que esté adaptada a la zona y fecha de siembra
De cara a maximizar tanto la calidad como la cantidad silo de maíz, ¿qué factores son clave? Es clave elegir bien la variedad, que este adaptada a la zona y fecha de siembra. Buscar variedades productivas, con buena sanidad y al mismo tiempo con una alta calidad, especialmente variedades que nos proporcionen una alta calidad de fibras, ya que es un factor que va muy ligado a la genética de la variedad escogida, y no es lo mismo hacer maíz silo que maíz grano. Si hablamos de digestibilidad, ¿qué variedad destacarías dentro de vuestro catálogo y por qué? Dentro del catalogo de LG tenemos variedades con alta digestibilidad de fibras en todos los ciclos, LG lleva más de 40 años trabajando en seleccionar variedades con alta digestibilidad y ahora se ven los frutos. Dentro de las nuevas variedades destacaría LG 31.459 y LG31.331 dos variedades con el Label LGNA y con altísima calidad. Entre las variedades ya consolidadas Bowen es un buen ejemplo, de una variedad con excelentes resultados, tanto agronómicos como especialmente de calidad con altos valores de almidón y digestibilidad de fibras. Como ejemplo, hay muchas muestras de ganaderías con más de 1.800 kg leche/por tonelada de materia seca, esto demuestra que esta calidad nos proporciona más leche.
De Bowen tenemos muchas muestras de ganaderías con más de 1.800 kg leche/ton MS Variedade Bowen, de LG
Korit Pro se ha demostrado como uno de los tratamientos más efectivos desarrollado por LG, aparte de funcionar como repelente de pájaros, ¿qué otros beneficios aporta al maíz? Cada vez tenemos más problemas de pájaros y Korit Pro ha demostrado en los dos últimos años que es la mejor opción para luchar contra este problema, ya que además de incorporar el Ziram, que es la materia activa repelente, añadimos un bioestimulante y dos elementos esenciales, como son el Zinc (Zn) y el Manganeso (Mn). Así conseguimos una nascencia más rápida, unas raíces más fuertes, y de esta forma reducimos el tiempo que los pájaros tienen para arrancar el maíz y se lo ponemos más complicado, gracias a una mayor superficie radicular en los primeros estadios. En un contexto climático de cada vez más sequía y todo lo que ello implica, ¿qué aspectos debemos tener en cuenta para evitar mermas en la producción de maíz Cada vez las condiciones climáticas son más cambiantes, hemos incrementado la integral térmica y en general tenemos menos problemas de fríos a finales de primavera por lo que en los últimos años podemos ver como las siembras tempranas durante el mes de abril se desarrollan perfectamente. Años atrás, en estas siembras tempranas era normal observar plantas con escaso vigor y con carencias nutricionales. Por lo tanto, si es posible, las siembras tempranas (siempre que tengamos al menos una temperatura del suelo de 10-12 ºC) están dando mejores resultados, pero al mismo tiempo es importante buscar variedades rusticas que se adapten bien. Dentro de Limagrain hemos desarrollado variedades que presentan una especial tolerancia a la sequía, son las que llevan el label Hydraneo, como por ejemplo LG30.500 o LG31.388 Variedade LG 31459 ¿Qué ventajas ofrecen las herramientas como Agrility y cómo el asesoramiento es clave en todo el proceso del maíz? Hoy en día la digitalización ha llegado al campo y aunque algunos no lo crean mucho más rápido que a otros sectores. En este sentido, Agrility es una herramienta que nos permite hacer un seguimiento vía satélite de nuestras parcelas para ver su índice NDVI, hacer siembras variables en función de la variedad o el potencial de la parcela, así como ver una estimación del rendimiento esperado o la fecha de cosecha. Todo esto nos permite llevar un mejor control y poder alcanzar mejores resultados. Para terminar, he elegido la variedad ideal, he hecho todo bien durante la fase de desarrollo de la planta y gracias a Agrility he cosechado en el momento ideal. ¿Qué errores debo evitar una vez hecho el silo? A la hora de ensilar es clave hacer un buen pisado, si queremos asegurar una buena conservación este es uno de los factores más limitantes, pues cada vez la capacidad de recolección de las cosechadoras es más grande y muchas veces no damos pisado el silo de forma adecuada. Una vez pisado otro factor clave es hacer un buen tapado, debemos garantizar que no entre nada de aire en el silo, ya que esto nos causaría fermentaciones aerobias y altas pérdidas en el silo.

Para más información:

Gustavo García Tel: 647 794 366 gustavo.garcia@limagrain-iberica.es

Juan Pablo Gnata: “ Cosechar el maíz forrajero en el momento ideal es clave para tener un ensilado de calidad”

Como cada año la campaña de maíz supone un reto tanto para ganaderos como empresas del sector. Delagro y Mas Seeds, que llevan años colaborando juntos con el objetivo de dar a cada ganadero la variedad que necesita. Al mismo tiempo, las herramientas informáticas juegan un papel claro y diferenciador para conseguir silos de máxima calidad. El control por satélite o del clima puede ser clave para seleccionar, por ejemplo, los momentos óptimos de cosecha.

Tras unas campañas marcadas por la inestabilidad del mercado, la tendencia del sector pasar por hacer reservas anticipadas de maíz que permitan al ganadero tener disponible la variedad que más le encaja, tal y como nos explican Juan Pablo a continuación.

¿Cómo se presenta esta campaña? ¿Se acabaron ya los problemas de disponibilidad de semilla?

Para la campaña de maíz ensilado 2024, recomendamos a los ganaderos y asesores técnicos estar muy atentos al desarrollo de insectos dañinos como la rosquilla Agrotis ipsilon y la oruga defoliadora Mythimna unipuncta. La campaña anterior hubo una fuerte presencia de estas plagas y es esperable que nos las volvamos a encontrar. Más allá del control químico, debemos tener en cuenta que reducir la presencia de gramíneas en la parcela y en los bordes de la misma, reduce la probabilidad de un ataque severo de Mythimna.

El maíz tiene un potencial productivo altísimo en condiciones ideales

La herramienta de Reserva Anticipada de MAS Seeds se viene implementando desde la campaña pasada con un éxito rotundo para aumentar la calidad de la atención a nuestros clientes fieles. Los clientes de siempre y los nuevos, confían y eligen su variedad ideal, con el apoyo técnico de nuestros distribuidores y el mío propio. La disponibilidad de semilla para esta campaña es correcta gracias a una buena meteorología en Europa la campaña pasada que permitió recuperar los stocks y al trabajo de nuestro departamento de Producción y Logística.

La reserva anticipada busca asegurar que ningún ganadero se quede sin la variedad que necesita

¿Qué importancia tiene la elección de la variedad adecuada? ¿Dentro de vuestro catálogo, cuáles serían las ideales para esta zona?

Los estudios indican que la variedad utilizada es la responsable del 15% de producción final. El asesoramiento profesional y cercano del técnico de confianza, es fundamental para elegir la variedad más adecuada y mejor adaptada a cada explotación.

Mas 54 H

En Galicia, Asturias y Cantabria, e inclusive País Vasco, para maíz ensilado nuestro producto estrella y en fase expansiva es MAS 400.D. Lo demuestra el altísimo nivel de satisfacción de quienes confían en él desde hace 2 campañas. Tras años de seguimiento en nuestra Red de I+D, en nuestra red de ensayos locales realizados junto a Delagro en 2021, 2022 y 2023, así como en los ensayos del CIAM Mabegondo, MAS 400.D demostró responder con creces a los aspectos que más importan a los ganaderos de la Cornisa: producción, calidad, ciclo adecuado para su siembra a lo largo del mes de mayo, tolerancia al encamado excepcional, buena sanidad de hoja al final del ciclo, y gran rentabilidad incluso en su año de lanzamiento 2022 que fue tan seco. Elegir MAS 400.D es un acierto enorme.

En la nueva gama de variedades MAS Seeds destacamos MAS 576.N, ciclo 500 de excelente rusticidad, al cual se le presenta el gran desafío de mejorar a MAS 54.H y MADIRAN. En ciclo 400, la prometedora novedad MAS 524.A que será un exitazo en Cantabria y A Coruña. Ha sido el híbrido de mayor producción de materia seca y % Almidón en los ensayos zonales. En ciclo 350, MAS 400.D es capaz de competir en producción con ciclos más largos. En ciclos cortos, para los terrenos más complejos, recomendamos CITADEL, MAS 282.K y MAS 24.C. Es una fortaleza importantísima contar con estas variedades que permiten buenas producciones en zonas de escasa humedad, como Chantada y Taboada.

Para Terra Chá, introducimos MAS 171.L un ciclo 200 de genética Green+, nuestra insignia para los maíces con máxima digestibilidad de almidón y fibras.

Sin duda, nuestra variedad estrella y la más demandada es la Mas 400.D

Una vez elegida la variedad, ¿qué prácticas podemos llevar a cabo para maximizar el rendimiento y calidad de la misma?

Mas 400 D en Chantada

El maíz tiene un potencial productivo altísimo en condiciones ideales. Cuanto más limitantes haya en su ciclo de vida, más lejos estaremos de alcanzar ese potencial. Es habitual escuchar que el rendimiento final depende casi exclusivamente del clima del año, pero hay aspectos muy importantes que podemos controlar y que influirán directamente en la rentabilidad de la explotación.

Los veranos son cada vez más secos, así que el maíz depende cada vez más de lo llovido en primavera. Por otro lado, con la rotación pradera-maíz, el agua y nutrientes consumidos por el cultivo inicial en mayo, reducen la disponibilidad de estos elementos para el cultivo de maíz.

Anticipar de 15 días la siembra del maíz respecto a la fecha habitual limita la competencia por agua y nutrientes con el cultivo anterior y reduce el estrés hídrico del cultivo en la fase de floración. Esto se traduce en +1 Tn MS/ha y +0.02 energía/kg MS por cada 15 días de adelanto de la siembra. Si la siembra se hace el 1 de mayo en lugar del 31 de mayo, estaremos ganando +2 Tn MS/ha y +0.04 energía/Kg MS. Invito a que cada uno haga este ejercicio para la toma de decisiones.

Otras prácticas de laboreo de conservación nos ayudarán también a reducir las pérdidas de agua en el suelo. Un ejemplo es el acortar los tiempos entre el laboreo y la siembra para reducir las pérdidas por evaporación.

Todo lo que sean técnicas de mayor eficiencia en el uso del purín y fertilizantes, como ajustar las dosis a las necesidades del terreno, harán aumentar la rentabilidad del sistema. Ya sea que las labores las hagamos nosotros o una empresa de servicios, hay que exigir o exigirse cumplir con las tareas en tiempo y forma.

Cantidad VS Calidad: ¿Cómo podemos maximizar este binomio? Lograr la mayor cantidad de silo sin sacrificar la calidad.

Hoy en día maximizar este binomio es todavía más fácil con la Agroservicio Nutriplus SAT® que nos da un pronóstico certero de la fecha en la que el maíz de nuestra parcela en cuestión llegará al 32% MS. Es ahí donde se encuentra la relación de óptimos entre estos dos elementos. Hoy en día con variedades tan productivas como MAS 400.D podemos cosechar muchos kilos de materia verde y de gran calidad por hectárea sin forzar la siembra de ciclos largos donde no corresponden.

Con Nutriplus Silo® somos capaces de encontrar oportunidades de mejora para hacer la confección del silo a la perfección

Nutriplus y Agrotempo, son herramientas que para muchos ganaderos ya son imprescindibles, ¿de qué forma puede marcar la diferencia entre un silo de máxima calidad y uno de calidad más baja?

Podemos haber hecho todo muy bien y tener un maíz excelente, pero si erramos de oportunidad de cosecha, estamos desperdiciando nuestro buen trabajo anterior. Nuestros Agroservicios, ponen a disposición del ganadero información contrastada de su propio maíz para una toma de decisiones bien informada. Gracias al diagnóstico de silos Nutriplus Silo®, somos capaces de encontrar oportunidades de mejora para hacer la confección del silo a la perfección.

Las mejores variedades de maíz para esta campaña: resultados de los ensayos de Mabegondo

El Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (CIAM) acaba de publicar la actualización para el año 2024 de los ensayos sobre el valor agronómico de las variedades comerciales de maíz forrajero en Galicia, una referencia que sirve de ayuda a la hora de escoger las variedades que mejor se adaptan a cada zona con vistas a la campaña de siembra que comenzará en las próximas semanas. Se trata de un análisis comparativo anual que se realiza desde el año 1999 con el objetivo de evaluar el rendimiento y calidad de las variedades comerciales más utilizadas en la comunidad. Los ensayos se hicieron en cuatro comarcas: Sarria, Trasdeza, Ordes y A Mariña lucense. En los campos de cultivo se utiliza un diseño en bloques a boleo con tres repeticiones, con una densidad de 90.000 plantas/ha. Se recogió cada variedad en el momento en que la línea de leche estaba a 1/3-1/2 del ápice (grano pastoso-vítreo) y se analizó la parte verde de la planta y las espigas por separado.

Variedades con un año de evaluación, con menor fiabilidad:

Variedades con dos o más años de evaluación, mayor fiabilidad:

Recomendaciones para elegir una variedad

A la hora de elegir una variedad, desde el CIAM recomiendan que lo primero que tenemos que tener en cuenta es el ciclo que resulte más adecuado al clima de la zona. En este sentido aconsejan que:
  • Si sabemos la fecha de siembra y sumamos los días que aparecen en la columna “Días S-C”, tendremos la fecha probable de recogida para una zona fría del interior.
  • Si es una zona cálida habrá que restarle 15 días.
  • También es importante la disponibilidad de maquinaria para esa fecha.
Dentro del ciclo elegido, desde el CIAM recomiendan escoger aquellas variedades que reúnan las dos condiciones siguientes al mismo tiempo:
  • Un elevado índice productivo (IP) (cuanto mayor sea el dato de la columna IP, mejor)
  • Una elevada calidad (cuanto mayores sean los datos de las columnas ESPIGA, DMO y PB, mejor).

Descarga aquí la actualización correspondiente al año 2024 del Valor Agronómico de las Variedades Comerciales de Maíz Forrajero en Galicia

   

Claves para mejorar la producción de las fincas de maíz

David Vilacoba, durante su charla en las jornadas organizadas por Seragro en la Facultad de Veterinaria de Lugo David Vilacoba Vieito, ingeniero agrícola y responsable de la ganadería Pacheco Meimendre SC, habló en las Jornadas Técnicas de Vacuno de Leche de Seragro de cómo aumentar la producción de maíz en Galicia. Durante los últimos 15 años David estuvo compaginando el trabajo en la granja familiar con el asesoramiento a nivel de campo para distintas casas de semilla. En la actualidad se dedica de pleno a su explotación, ubicada en el ayuntamiento coruñés de A Baña. “Es posible aumentar el rendimiento del maíz pero son muchos los factores que influyen y tenemos que pensar cuáles son los que tenemos capacidad de manejar y alterar para mejorar y los que no, aquellos que tenemos que adaptarnos a ellos”, indicó. “Podemos influir en las labores de preparación del suelo, en la elección de la variedad y la siembra, en el tratamiento fitosanitario para el control de plagas y malas hierbas o en el abonado. Y esas son las cosas en las que nos tenemos que centrar a la hora de mejorar el cultivo”, recomendó.
Podemos influir en la preparación del suelo, en la elección de variedades o en el control de plagas y malas hierbas, pero no en las condiciones climatológicas, a las que nos tendremos que adaptar
Por el contrario, explica David, hay otra serie de factores sobre los que no tenemos control, como los daños provocados por la fauna salvaje o las condiciones climatológicas, a las que sin embargo nos podemos adaptar con decisiones como la elección de las parcelas, la fecha de siembra o el tipo de variedad. Tomar decisiones en base a datos A la hora de iniciar la campaña de siembra, en primer lugar, dice, tenemos que planificar el cultivo y tener en cuenta las cosechas precedentes en cada finca. “Lo más lógico es recopilar datos del año anterior, pero tiene que ser de forma objetiva y totalmente autocrítica, sino no sirve de mucho”, matiza. “Es decir, si en una zona tuvimos mala cosecha porque acabamos el abono y por no volver a casa a por más no se lo echamos, hay que ponerlo”, ejemplifica.
Los datos de rendimientos de años anteriores tenemos que conservarlos, porque son la llave del cultivo
Para esta toma de datos de la cosecha anterior existen nuevas herramientas, como los mapas de rendimiento, que facilitan esa labor. “Esos datos tenemos que conservarlos, para tener información de más de un año, porque son la llave del cultivo”, indica también David. Fertilización y aprovechamiento del purín Un primer punto de mejora en el cultivo de maíz es el abonado. “La fertilización es quizás la parte más simple, porque es una cuestión matemática, una simple ecuación o regla de tres, ya que sabemos la demanda media que tiene el cultivo (para hacer unas 10 toneladas de grano por hectárea nos hacen falta 250 unidades fertilizantes de nitrógeno, unas 120 de fósforo y unas 230 de potasio; y si queremos aumentar la producción deberemos aumentar también en la misma proporción estas cantidades”, explica. David destaca la importancia del purín para el abonado de las fincas de maíz. “Unos 10 metros cúbicos de purín por hectárea, más o menos una cisterna de tamaño medio, equivalen a 125 kg de abono complejo NPK 12-12-24 más 33 kg de urea al 46% de nitrógeno”, detalla.
Hoy en día tenemos herramientas para saber cómo está el suelo (analíticas de suelo) y otras que nos dicen lo que le aportamos nosotros
“Esa cuenta tenemos que extrapolarla a la cantidad de purín que aportemos y restarla de la demanda real del cultivo (en función de la analítica de suelo y el rendimiento esperado) para calcular después la cantidad de abono mineral necesario”, añade. La mayores del encalado y del abonado de fondo de la siembra, destinado a corregir las carencias del suelo y cubrir las necesidades del cultivo, David recomienda “en la medida en que el bolsillo lo permita”, hacer un abonado nitrogenado en cobertera cuando el maíz tenga entre 8 y 10 hojas. Preparación del suelo “La preparación del suelo es un tema realmente descuidado en el que se puede mejorar mucho”, asegura David, que recomienda intercalar en las labores de preparación del suelo un subsolador para romper la suela de labor y facilitar que las raíces de las plantas de maíz puedan acceder a nutrientes y agua más abajo. “Cuando llevamos años trabajando con el arado nos deja por abajo un suelo duro que las raíces del maíz no son capaces de traspasar. Cuando viene tiempo seco esa capa superficial de tierra se seca y la planta sufre mucho más los efectos de la sequía y puede tener también muchos más problemas de caída. Por el contrario, cuando llueve mucho, se producen encharcamientos porque el terreno no drena. Por eso, con el subsolador, además de mejorar la estructura del suelo, mejoramos también la circulación del agua en sentido vertical”, cuenta.
El suelo es un recurso único e irreparable; no podemos perderlo y tenemos que tratar de mejorarlo
Existen distintos tipos de compactación: la compactación superficial en la capa arable por el efecto pisado de la maquinaria; la suela de arado; la compactación profunda, que se da a más de 30 centímetros de profundidad; y las costras en la superficie, que se producen cuando se desmenuza mucho el suelo en las últimas labores de preparación de la tierra en suelos con mucha arcilla y se dan lluvias posteriores, creándose una capa superficial dura que impide que el germen del maíz sea capaz de salir y provocando mermas de producción por pérdida de plantas en la nascencia.
La suma de maquinaria muy pesada y elevada humedad en el suelo hace que nuestros suelos se vuelvan durísimos, casi infértiles
Para evitar la compactación, “bajo ninguna circunstancia debemos trabajar el suelo mojado”, advierte, y menos cuando la maquinaria de laboreo, siembra o recogida de la cosecha es cada vez más grande y de un mayor tonelaje. “La suma de elevados pesos y elevada humedad en el suelo hace que nuestros suelos se vuelvan durísimos, casi infértiles”, dice. Los efectos de la compactación se dan también más en los bordes de la parcela por el efecto de las maniobras de giro, por eso David recomienda pasar el subsolador al menos por estas zonas del perímetro si no lo hacemos por toda la finca. Rotación de cultivos El responsable de la ganadería Pacheco Meimendre SC afirma que “no deben quedar las fincas desnudas” en invierno y destaca los efectos positivos de la rotación de cultivos: “Cuando una finca viene de una rotación de dos o más años con pradera tenemos gratis un 10% de producción de maíz”, dice. En función de las necesidades forrajeras de la explotación y del efecto que queramos lograr en el suelo introduciremos un cultivo de invierno u otro, teniendo en cuenta también las exigencias de la nueva PAC para cumplir con la condicionalidad reforzada y el ecorregimen de rotación con especies mejorantes.
Cuando venimos de 2 años de rotación con pradera tenemos un 10% de producción de maíz gratis
Las leguminosas (guisante, haba, altramuz, veza, alfalfa, trébol) fijan nitrógeno ambiental en el suelo y mejoran su estructura, mientras las crucíferas (rábano, rúcula, nabo) producen un efecto de desinfección en el suelo contra nemátodos y algunos hongos. Otras opciones para meter un cultivo intermedio entre maíz y maíz serían las oleaginosas (girasol, colza, soja) y las mezclas de cereal de invierno con especies pratenses forrajeras.
La lluvia se lleva el suelo y los recursos que tenemos en él; metiendo un cultivo intermedio evitamos la erosión y si tenemos falta de forraje lo podemos aprovechar
“Tenemos que rotar fincas e intercalar un cultivo intermedio entre maíz y maíz, no dejar nunca las fincas desnudas. Este año, después de haber caído 1.000 litros de agua las fincas vacías se han quedado sin prácticamente elementos finos y sin ningún tipo de microbiología que nos pueda ayudar. La lluvia se marcha con el suelo y con los recursos que tenemos en él”, advierte. Reducir el ‘efecto borde’ Otro aspecto a mejorar es el llamado efecto borde (sombra de árboles, menor fertilización, exceso de tratamientos por solape, mayor compactación del suelo, etc), en el que vamos a tener menos producción y eso va a bajar la producción media obtenida en las fincas de la explotación. Los efectos negativos se ven acrecentados en Galicia debido al minifundio. “Si tenemos una finca de 25 hectáreas y tenemos un perímetro de 10 metros de ancho afectados todo alrededor, serían 3 hectáreas afectadas, pero si tenemos 25 fincas de 1 hectárea el efecto borde se multiplica y ya serían 8 las hectáreas afectadas sumando todas las parcelas”, argumenta.
Los 10 metros de perímetro en una finca de 25 hectáreas son 3 hectáreas pero si las tenemos en piezas de 1 hectárea los bordes suman 8 hectáreas
Por lo que, dice, “la solución al efecto borde es meter subsolador y cuidar la fertilización de los perímetros, porque si la finca tiene media hectárea no se le puede poner ni sacar y en Galicia sabemos que abunda el minifundio”, lamenta. Elección de la variedad David recomienda labrar “variedades rústicas”. “Para mí una variedad rústica es aquella tolerante a estrés hídrico, que tenga un buen vigor de nascencia, que sea productiva pero a su vez digestible, que tenga un buen tallo frente a fusarium, y que sea resistente frente a algunas enfermedades foliares frecuentes como la rolla o el helminthosporium”, describe. Considera que se debe escoger el tipo de variedad en función de la finca y el destino final del cultivo, diferenciando por ejemplo el maíz para ensilado del labrado para hacer grano húmedo, aunque en caso de no tener claro a que se va a destinar “existen variedades polivalentes para ambas cosas”.
Yo aconsejo acortar el ciclo del maíz destinado a grano húmedo y labrarlo en fincas más secas para poder recogerlo justo después de acabar de ensilar y que no tenga que quedar un mes más
Lo que sí aconseja es acortar el ciclo del maíz destinado a grano para poder hacer la recogida del grano húmedo justo al acabar de ensilar el otro maíz “y que no pase lo que ha sucedido este año, que se puso a llover y estaba aún en las fincas el maíz para grano húmedo sin recoger”. Distribución uniforme de la semilla La siembra es la parte más delicada del cultivo, donde no tenemos margen de volver atrás. “Si dejamos este trabajo bien hecho, bien hecho queda, pero si lo dejamos mal hecho, mal hecho queda hasta el final del ciclo”, insiste, por lo que recomienda revisar el estado de la máquina que vayamos a emplear. “La fecha ideal para mí está entre el 10 y el 25 de mayo, porque antes de esa fecha hay más problemas de encharcamiento, posibles heladas y plagas como la mosca de siembra o el gusano blanco y una vez pasado el 25 de mayo la competencia con las malas hierbas es brutal, porque el desarrollo de las malas hierbas es mayor que el del propio maíz, a parte de la proliferación de ataques de insectos, en concreto lepidópteros”, describe.
Para mí, la fecha ideal para labrar está entre el 10 y el 25 de mayo
La profundidad a la que se debe labrar varía entre los 5 y los 8 centímetros, pues depende del momento en el que se realice la siembra y de la variedad elegida. “Debemos hacer siembras más superficiales cuando tenemos una semilla menuda o de poco vigor o si se prevén días de mucha lluvia posteriores a la fecha de siembra y, por el contrario, haremos siembras más profundas cuando tenemos un calibre de semilla muy grueso o se prevé sequía, porque nos hace falta un 30% del peso de la semilla en agua para que pueda germinar, por eso hay que variar la profundidad en función del tipo de semilla que vayamos a labrar y la climatología prevista”, recomienda. En cuanto a la velocidad de siembra (entre 4 y 7 km/h), hay que adaptarla siempre al estado de la máquina y al estado del suelo.
Si tenemos problemas de pájaros es recomendable labrar a mayor profundidad para dificultarles que puedan arrancar la semilla
A la hora de establecer la densidad óptima de semilla es útil aprovechar los datos que nos proporcionan los mapas de rendimiento de la cosecha de los años anteriores. La dosis habitual está entre las 90.000 y las 100.000 plantas por hectárea, pero la siembra variable permite meter más semilla en las zonas más productivas y menos en las zonas más conflictivas. “Podemos obtener un incremento sustancial en el rendimiento de las cosechas haciendo eso”, asegura David.
Podemos lograr un incremento sustancial de rendimiento haciendo siembra variable, metiendo más semilla en las zonas más productivas y menos en las más conflictivas
Con todo, dice, “es interesante abusar un poco del número de plantas porque de por sí vamos a tener bajas y si ponemos 80.000 plantas por hectárea y tenemos algún problema nos quedaremos con una densidad inferior a la recomendada”, advierte. Aconseja, eso sí, bajar la dosis de siembra en fincas más secas o destinadas a grano. La distribución de la semilla entre plantas tiene que ser “perfecta en toda la finca”, dice. “Si faltan plantas o las distancias no son uniformes estamos perdiendo capacidad de producción en nuestra parcela”, alerta. Defiende también estrechar las calles para poder aumentar la distancia entre plantas. “Si estrechamos un poco las mesas de siembra podemos distanciar algo más entre plantas y los recursos del suelo serán más aprovechables”, indica.
Es interesante estrechar un poco las calles y distanciar el espacio entre plantas
Considera además “opcional pero muy interesante” incorporar un abono starter en el momento de la siembra para mejorar la emergencia y el enraizamiento de las plantas de maíz. “Hace que tenga un mayor vigor en sus primeros estadíos, por lo que se puede defender mejor de adversidades climáticas porque tiene un mayor desarrollo radicular”, considera. Control de las malas hierbas La presencia de malas hierbas es “el principal problema en la producción de maíz”, afirma David, pudiendo llegar a perder hasta un 40% del rendimiento por esta causa. Pero, ¿a qué llamamos mala hierba? “Mala hierba puede ser cualquier hierba si no está en el lugar correcto”, describe. Las malas hierbas compiten por los recursos (el agua, los nutrientes y la luz) con la planta de maíz y son refugio de plagas y patógenos que causan posteriores daños en el cultivo. Además, algunas especies de estas hierbas presentes en las fincas de maíz segregan sustancias alelopáticas (nocivas para el maíz). Por ejemplo, el Chenopodium Album y la Setaria Viridis, que retardan la floración, o la Digitaria Sanguinalis y la Cyperus Rotundus, que reducen el crecimiento y producen una merma severa del rendimiento. Para combatir las malas hierbas David recordó algunas pautas a seguir: “lo primero es identificar las diferentes especies de malas hierbas presentes en las fincas (hoja ancha, estrecha o ambas) y saber en qué estadío se encuentran”, dice. A continuación, “tenemos que buscar una solución que sea lo más respetuosa posible con el cultivo, porque lo que queremos es matar a la mala hierba pero sin afectar al maíz”, evidenció.
Las malas hierbas son la principal causa de merma del rendimiento en el cultivo del maíz, pudiendo llegar las pérdidas al 40%
A la hora de aplicar el tratamiento es necesario tener en cuenta las condiciones climatológicas previas y posteriores a la realización de la aplicación y revisar el estado de la sulfatadora, para garantizar una aplicación correcta, poniendo boquillas antideriva para aumentar la eficacia y no dañar cultivos adyacentes. “Si tenemos un 10 o un 15% de producto que nos marcha en forma de nube estamos perdiendo un 10 o un 15% de efectividad en nuestro tratamiento”, razona David. En cuanto a las dosis, recomendó seguir las directrices del fabricante respetando las dosis fijadas, sin incrementarlas. “El fabricante es el mayor interesado en vender el producto, no le tenemos que ayudar nosotros aumentando las dosis”, argumentó. Para evitar las posibles resistencias no se debe usar siempre, año tras año, el mismo producto o materia activa. “El amaranthus es hoy la mala hierba que presenta mayor resistencia a los herbicidas”, reconoció.
Tenemos que buscar una solución que sea lo más respetuosa posible con el cultivo y con el medio ambiente
Un protocolo fácil de cumplir para el control de plagas y malas hierbas en el cultivo de maíz comenzaría con la aplicación de un insecticida más un herbicida de preemergencia tras la siembra, “lo que nos daría cierto margen para evitar que las malas hierbas se nos adelanten y que una posible plaga, como puede ser la rosquilla, pueda esperar hasta la aplicación del segundo tratamiento, el de postemergencia. Eso nos da cierta tranquilidad, porque en caso de venir después mal tiempo tendríamos a nuestro cultivo protegido; en caso contrario si hay un ataque de rosquilla y llueve, por lo que no podemos entrar a tratar, podríamos perder hasta un 15% de las plantas”, dice David. Existe también la posibilidad de aplicar tratamientos para evitar los ataques de pájaros o insectos, pero descarta “meterlos por sistema”.
Cada vez que entramos en la finca perdemos un 2% de las plantas
Una vez que se produce la nascencia hay que revisar que no hay ataques de pájaros, de gusano blanco, o de alambre y antes de hacer el tratamiento de postemergencia se debe revisar también qué tipo de malas hierbas son las que hay en la finca porque “si no hay hierbas de hoja estrecha no tenemos por que meter un herbicida de hoja estrecha; igual arreglamos solo con uno de hoja ancha”, argumenta. Esta aplicación de herbicida, que se haría cuando el maíz tiene entre 4 y 5 hojas, habría que acompañarla también de un insecticida “para que nos dé la garantía de llegar al final del cultivo sin plagas y con el maíz sano”, dice. Si esta aplicación combinada no fuera suficiente para controlar algún tipo de mala hierba o apareciera posteriormente alguna plaga, “habría que volver a entrar a tratar”, recomienda David. “Que no os dé perezca, porque aunque cada vez que entramos perdemos un 2% de plantas, si no tratamos los daños pueden ser mucho mayores”, justifica.

El agua, un factor cada vez más limitante para el cultivo de maíz en Galicia

Uno de los aspectos clave para el cultivo del maíz es el agua. “Si tomamos los datos de la precipitación acumulada este año entre el 1 de abril y el 30 de septiembre vemos una variabilidad muy grande de unas comarcas a otras. En Santa Comba, por ejemplo, llovió el doble que en Castro de Rei”, detalló David. “Sabemos que las necesidades del cultivo son de 350 litros por kilo de materia seca. Así pues, para obtener 13.200 kg de MS por hectárea (lo que equivale a 40.000 kg de materia verde por hectárea), necesitaríamos 4,6 millones de litros por hectárea de precipitaciones”, explica.
Dentro de Galicia, hay mucha variabilidad en las precipitaciones por comarcas. Este año, por ejemplo, en Santa Comba llovió el doble que en Castro de Rei
“Por eso, si tomamos el agua como factor limitante, con las precipitaciones que se dieron en Castro de Rei seríamos capaces de lograr 30.000 kg por hectárea, mientras en Santa Comba podríamos llegar a las 65.000”, añade. Pero para valorar el efecto de las lluvias, no solo debemos cuantificar las precipitaciones acumuladas como valor absoluto, sino que debemos ver cómo se producen a lo largo del ciclo del cultivo del maíz.
Las necesidades hídricas del cultivo de maíz son de 350 litros por kilo de materia seca
“En los últimos 5 años (2018-2022) vemos que la mayor parte de las precipitaciones nos caen en los meses de invierno. La línea de tendencia que muestra la media de precipitaciones en los últimos 30 años en nuestra comunidad indica que en los meses de verano, que son los meses fundamentales desde el punto de vista del cultivo del maíz, prácticamente no tenemos precipitaciones”, destaca. Recomendaciones frente al estrés hídrico Por eso, añade que “en Galicia dependemos del tiempo, porque no tenemos regadío. El tiempo no lo podemos cambiar, pero sí adaptarnos a él. Tenemos que intentar que la floración del cultivo no coincida con los meses de julio y agosto, que es el período crítico de precipitaciones en Galicia, que esa floración se produzca a poder ser un poco antes”, aseguró David.
En las fincas más secas hay que sembrar el maíz más temprano y hacer un ciclo más corto
Entre los consejos que da este ingeniero agrícola y ganadero está el de escoger para labrar el maíz las fincas que tengan mayor capacidad de retención de agua y darle mayor protagonismo a los cultivos forrajeros de invierno en las fincas muy secas. “Dentro de la superficie disponible que tengamos en nuestra explotación tenemos que intentar escoger para el maíz aquellas parcelas que tengan un mayor potencial hídrico y mayor capacidad de retener agua. En las fincas más secas es importante adelantar las siembras, sembrar ciclos más cortos y elegir variedades más rústicas resistentes al estrés hídrico que se produce en esas parcelas”, recomendó. Más de 5.000 hectáreas afectadas por la fauna salvaje Otro de los factores que escapa a la mano del ganadero en Galicia son los destrozos provocados por la fauna salvaje (jabalíes, tejones y cuervos). Se estima que de las 73.600 hectáreas labradas a maíz este año en la comunidad, el 7,5% de la superficie, es decir, unas 5.500 hectáreas, se vieron afectadas por daños provocados por la fauna. “Prácticamente es una hectárea por granja”, evidenció David.

Las exigencias de la nueva PAC para las tierras del maíz: rotación dentro del mismo año o cambio de cultivo cada cuatro

El actual período de la Política Agraria Común, que entró en vigor el pasado 1 de marzo, trae importantes cambios en lo que se refiere a las tierras del maíz, que deberán ser tenidos en cuenta por las ganaderías para no perder ayudas ni sufrir penalizaciones. Analizamos algunas cuestiones importantes a tener en cuenta de cara a la actual campaña de siembra de las praderas. En primer lugar, la rotación y diversificación de cultivos pasa a ser una exigencia para poder cobrar la PAC, por lo que dejar la mayor parte de las tierras vacías en invierno, una práctica frecuente hasta ahora en muchas explotaciones, sobre todo en las que tenían una mayor superficie agraria en comparación al número de cabezas, pasará a tener los días contados.
Si se echa en la misma parcela maíz sobre maíz durante tres años en el cuarto año habría que sembrar otro cultivo
Pero son varias las posibilidades para cumplir con esta exigencia de la llamada condicionalidad reforzada, que obliga a que todas las tierras cambien de cultivo al menos una vez cada cuatro años, excepto en explotaciones que labren menos de 10 hectáreas o dediquen más del 75% de su superficie a pradera. La otra de las grandes novedades de la PAC de este año es el ecorregimen de rotación de cultivos con especies mejorantes, al que se han acogido 57.428 hectáreas de tierras de cultivo en Galicia. El alta demanda de semillas y las dificultades para conseguir algunas de ellas, como la veza, ha hecho que se hayan disparado los precios. No se pueden dejar más de la mitad de las tierras vacías La rotación de cultivos está incluida como una obligación dentro de las Buenas Condiciones Agrarias y Medioambientales (BCAM 7), aunque ha quedado en suspenso en la actual campaña de la PAC a consecuencia de la guerra de Ucrania y solo tendrán que cumplir aquellas explotaciones que se hayan acogido al ecorregimen de siembra directa o rotación con mejorantes. Esta diversificación de cultivos es más exigente a medida que aumenta la superficie cultivada (si se labran más de 30 hectáreas son obligatorios 3 cultivos diferentes, sin que el mayoritario supere el 70% de la superficie y los dos más importantes el 90%).
Si una explotación se decanta por la rotación dentro del mismo año debe mantener esta práctica durante tres campañas
Otra manera de cumplir la BCAM 7 es la rotación dentro del mismo año con dos cultivos diferentes, si bien si se opta por esta práctica, deberá mantenerse al menos durante 3 campañas. Es decir, no se permite justificar el uso de cultivo secundario intraanual como opción para la rotación exclusivamente en el tercer año si no se usó en los 2 años anteriores. El FOGGA comprobará en el año 2025 el cumplimiento de la exigencia de rotación de cultivos teniendo en cuenta los declarados en cada parcela en los tres años previos. Esto implica que si en 2022 se repitió el cultivo de maíz en las mismas tierras sin labrar después nada en ellas en invierno, bien este año o el año que viene habría que sembrar un cultivo diferente al maíz en esas fincas.
Lo que se labre ahora en otoño será el considerado cultivo principal de cara a la solicitud de la PAC del año que viene
En caso de acogerse a la opción de rotación dentro del mismo año se mirarán solo los dos años anteriores. Esto implica que las explotaciones que sembraban hasta ahora maíz sobre maíz no podrán dejar las tierras vacías y este año ya tendrán que echar algo en esas parcelas de cara al invierno. El incumplimiento de los requisitos mínimos establecidos en cuanto a rotación y diversificación de cultivos se castiga con una rebaja en el monto de ayudas de la PAC de ese año de entre el 3% (incumplimiento no intencionado) y el 20% (incumplimiento intencionado).  Usar especies mejorantes Entre las principales novedades que introduce la Política Agraria Común para el período 2023-2027 están los nuevos regímenes en favor del clima, el medio ambiente y el bienestar animal (ecorregímenes), una serie de prácticas anuales de carácter voluntario primadas con pagos adicionales. Son dos los principales ecorregímenes aplicables en las tierras de cultivo: rotación de cultivos con especies mejorantes y siembra directa, una práctica poco habitual aún en Galicia. Consiste en no arar para echar el siguiente cultivo y el importe final a percibir es el mismo que en el caso de la rotación convencional con especie mellorante.
En el caso de la siembra directa se exige rotar el 40% de las parcelas, no el 50%, como ocurre en el ecorregimen de rotación con especie mejorante
Se puede hacer siembra directa siempre sobre la misma parcela, algo que se prima con 25€/ha adicionales, pero es necesario igualmente rotar los cultivos. El porcentaje de rotación sobre el total de las parcelas incluidas dentro del ecorregimen que se exige en este caso es del 40%, en vez del 50% que se pide para el cobro por rotación con especie mejorante. Si se opta por echar especies mejorantes del suelo, se exige que como mínimo se labren el 50% de las tierras de cultivo por las que se solicita el ecorregimen, aunque se cobraría por el 100% de la superficie. Se admite también en este caso como rotación la introducción de un cultivo secundario dentro del mismo año.
Una explotación con 100 hectáreas de cultivo deberá rotar como mínimo 50 y labrar al menos 10 con especies mejorantes, entre ellas 5 de leguminosas
Por lo tanto, las explotaciones que quieran solicitar el ecorregimen el año que viene deberán sembrar los porcentajes mínimos exigidos de especies mejorantes y leguminosas ya en este otoño, dado que será considerado el cultivo principal de cara a la próxima solicitud de la PAC. En la normativa aprobada tiene consideración de cultivo principal aquel que ocupe más tiempo en la parcela entre el 1 de enero y el 30 de abril de cada año, de manera que en Galicia el maíz está considerado el cultivo secundario. Como mínimo el 10% de la totalidad de las tierras de cultivo por las que se solicita el ecorregimen deben ser sembradas con especies mejorantes, de las cuales por lo menos la mitad serán leguminosas, que se permiten también como abonado en verde.
En el 5% de la superficie total de cultivo las semillas de leguminosas deberán ser mayoritarias en la mezcla
La rotación raigrás-maíz cumpliría para la BCAM 7 de rotación de cultivos, siempre que se haga todos los años, pero no serviría para cobrar el ecorregimen de rotación con especie mejorante, ni siquiera cuando lo que se siembra es una mezcla de raigrás con trébol anual, dado que se exige que en un 10% de la superficie la especie considerada mejorante, en este caso el trébol, sea mayoritaria en la mezcla (al menos el 51% de la semilla). El trébol solo cumpliría, al igual que distintas mezclas de leguminosas con cereales de invierno, como por ejemplo guisante con triticale o veza con avena, siempre que la leguminosa sea la predominante en la mezcla. Casi la mitad de las tierras de cultivo no han pedido el ecorregimen Al ecorregimen de rotación de cultivos con especie mejorante se han acogido en esta campaña 57.428 hectáreas de tierras de cultivo en Galicia. Es una buena práctica que se acomoda bien al sistema habitual de cultivo del maíz en la cornisa cantábrica aunque el desconocimiento y las obligaciones que conlleva han desincentivado su adopción por parte de los productores.
Una de las principales novedades de la nueva PAC son las primas por sembrar especies mejorantes, que quedan reducidas en un 20% para esta campaña
El importe final con el que se primará a las ganaderías que labren especies mejorantes en sus parcelas es de 68,64 euros por hectárea (48,05€ después de las primeras 30 ha), tras la reducción del 20% en el importe previsto inicialmente. Las explotaciones gallegas han declarado este año como cultivo principal en la PAC un total de 50.485 hectáreas de forrajes herbáceas y 21.837 de maíz. Poco más de la mitad (el 56%) del total de las tierras de cultivo declaradas en la comunidad (102.345 hectáreas) solicitaron acogerse al ecorregimen de rotación de cultivos con especies mejorantes o mediante la siembra directa. En concreto, han sido 55.745 hectáreas en secano húmedo y 1.676 en regadío.  

Se permiten las leguminosas para abonado en verde

El nuevo ecorregimen de la PAC permite también sembrar especies mejorantes para abonado en verde, una práctica que siguen desde hace años explotaciones en Galicia y que permite una mejora agronómica y una reducción de herbicidas.  En el listado de semillas admitidas para enterrar como abono en verde están leguminosas como guisante, alubia, altramuz, haba, veza o trébol; crucíferas o brassicas como colza, nabo o camelina y otras especies como el girasol o el cártamo. Este tipo de plantas actúan como cultivo regenerador y mejorante del suelo, de manera que favorecen una mejora en el rendimiento del siguiente cultivo por la fijación de nitrógeno y el aporte de materia orgánica.
Al enterrar los cultivos mejorantes en la profundidad del maíz (20-25 cm) se aportan nutrientes y materia orgánica
A mayores del nitrógeno atmosférico almacenado gracias a la acción del rizobium, y del resultante de la mineralización de la materia orgánica tras el enterrado, buena parte de estas especies mejorantes tienen una raíz pivotante que explora una profundidad mayor, captando los nutrientes que el suelo almacena y trayéndolos hacia capas superiores, donde pueden ser aprovechados por los demás cultivos.
La raíz pivotante del nabo o la colza explora superficies más profundas, trayendo nitrógeno y potasio y haciendo disponibles estos nutrientes para el siguiente cultivo
Ocurre en el caso de las brassicas, por ejemplo, que son ricas en nitrógeno y potasio, pues especies como el nabo o la colza tienen una raíz pivotante que se va a más profundidad que otros cultivos como el maíz, con raíces más superficiales (20-25 cm), haciendo emerger nutrientes que se van a zonas más profundas, como potasio o nitrógeno.

Buena producción de maíz en esta campaña en Galicia, excepto en A Mariña

Trabajos de ensilado de maíz en una explotación láctea de la comarca de Lugo La campaña de ensilado del maíz avanza en Galicia con buenas producciones y calidades, excepto por ataques puntuales de gusano en algunas fincas de A Costa da Morte o por los efectos de las primeras heladas de este pasado fin de semana en zonas del interior de Lugo. La cosecha será floja en la comarca de A Mariña, donde la sequía durante el verano ha hecho estragos en las fincas. Las más perjudicadas han sido las parcelas labradas a mediados de abril, ya que las lluvias de finales de agosto y principios de septiembre salvaron el cultivo que estaba más atrasado y retrasaron la maduración del que estaba más adelantado, pero no sirvieron para mejorar la situación de las plantas que no se pudieron desarrollar por la falta de agua en el mes de julio y en la primera mitad de agosto. La situación de merma en la producción se repite también en el occidente asturiano y la necesidad de comprar maíz para cubrir las necesidades de las granjas y de los centros de alimentación que operan en la zona (el de Agropres y el CAVI de Irmandiños) elevó los precios y obligó, por la escasez en A Mariña, a comprar forraje en otras comarcas.
La competencia entre Agropres e Irmandiños por comprar maíz elevó los precios en A Mariña. En el resto de Galicia hay ganaderías a las que les sobra forraje y están vendiendo los excedentes
El mercado de compra-venta de forraje sufrió este año un pico especulativo inicial que elevó los precios hasta los 80€ la tonelada de maíz picado en la finca, aunque ya se han ido moderando. Comarcas próximas, como la de Meira, donde en esta campaña va a haber una buena cosecha, están compensando la falta de producción en A Mariña y el occidente asturiano, haciendo bajar de nuevo los precios a los niveles habituales, en el entorno de los 60€ la tonelada.
Las lluvias de finales de agosto y principios de septiembre salvaron las siembra tardías y retrasaron la maduración en el maíz que se comenzaba a secar
Las plagas, rosquilla tras la siembra y gusano defoliador en las últimas semanas de maduración, afectaron este año a parcelas puntuales por toda Galicia, con más incidencia en comarcas como A Costa da Morte o A Terra Chá, y las heladas de los últimos días han quemado fincas en zonas del interior de Galicia. Excepto por estas circunstancias, la calidad del ensilado va a ser buena, con un buen desarrollo de la espiga y buena digestibilidad en el tallo, que se ha mantenido verde gracias a las lluvias de la última semana de agosto, retrasando una campaña de ensilado que se preveía más adelantada en un primero momento. Conocemos la situación en las distintas zonas productoras de Galicia:

O Xallas: “Las fincas este año están rindiendo más de lo habitual”

En la provincia de A Coruña la cosecha de maíz va a ser buena este año. “Las fincas están rindiendo más de lo normal en esta campaña. Este año vamos a llegar a unas 35.000 toneladas de silo”, explica Jesús Otero, de Ganxabar. El centro de alimentación ubicado en la parroquia de San Cosme, en el ayuntamiento coruñés de Mazaricos, es la tercera mayor instalación de ensilado de Galicia, después del CAVI de la cooperativa CLUN y de la planta de mezcla húmeda de Aira en Sarria. “Ahora mismo superamos las 60 toneladas por hectárea de media, pero están entrando las parcelas que se sembraron antes, por lo que la media al final va a ser menor, andará en unos 55.000 kilos de media, que está por encima de lo habitual en esta zona”, explica Jesús. Grano húmedo Ganxabar, que integran ocho ganaderías de Xallas y A Barcala que comparten recría y gestión de forrajes a través de Forxabar, lleva ensilado en este momento un tercio de la superficie. Han labrado en total 850 hectáreas de maíz, de las que 150 son para grano húmedo y el resto para silo. “Primero metemos el silo y después hacemos el grano húmedo, pero este año va a venir bastante antes; yo calculo que a finales de octubre estará ya recogido”, indica. Las parcelas para grano húmedo ya se planifican en la siembra. “Se escoge una variedad más orientada a grano y se echa en las fincas más secas”, explica. Introducido en la ración, el grano húmedo permite un ahorro en concentrado.
  

Láncara: “Se está retrasando la maduración; la calidad va a ser buena”

SAT O Palomar, una ganadería familiar ubicada en el ayuntamiento lugués de Láncara, labró este año 78 hectáreas de maíz, de las que por ahora solo han recogido 9. “Eran fincas labradas con ciclos cortos que se estaban secando. Las recogimos ya el 2 de septiembre y sacamos más producción de ellas que el año pasado”, explica Odón Castro. “Nos sorprendió, porque en esta zona hubo un verano crítico en cuanto a precipitaciones, pero aun así la producción fue mejor de la esperada”, dice. Las lluvias de las últimas semanas sirvieron para retrasar la maduración de la espiga y mantener el verdor en el tallo. “Vamos a tener mejor maíz este año en calidad y cantidad que el año pasado”, asegura.
El año pasado sacamos de media 68.000 kilos de maíz ensilado por hectárea, descontando ya las mermas, que pueden estar entre el 8 y el 10%
Pero la situación no es uniforme en toda la comarca. En el vecino municipio de Sarria hay ganaderos que van a acusar más la sequía de comienzos del verano. Para no estar a expensas del tiempo, en los últimos años SAT O Palomar ha hecho una apuesta por el regadío, con inversiones en sistemas de riego mediante aspersores. “Tenemos 30 hectáreas labradas en la primera semana de mayo con un ciclo 600, todas de regadío. Ahí la producción va a ser espectacular este año porque normalmente nos afecta mucho a la nascencia si hay humedad, pero este año ha sido muy buena y los herbicidas que empleamos, todos de preemergencia, han funcionado también muy bien”, cuenta.

Chantada: “La cosecha está entre un 15 y un 20% por encima de la del año pasado”

Efectos de las heladas del viernes en el maíz La cooperativa Aira cuenta con uno de los parques de maquinaria más grandes de Galicia y estos días está funcionando a pleno rendimiento. Solo en la comarca de Chantada labraron alrededor de 2.700 hectáreas de maíz, algo más que el año pasado, y ya llevan ensilado más de la mitad. “Con respeto al año pasado la cosecha es bastante mejor. La producción está entre un 15 y un 20% por encima”, calcula Jorge Meiriño, técnico de la cooperativa Aira en la comarca de Chantada. “Las siembras que se hicieron a finales de abril y las más tardías, hechas en mayo, aguantaron bien porque las lluvias de finales de agosto y principios de septiembre las salvó in extremis. Las que más han sufrido han sido las siembras de mediados de abril”, explica.
Las siembras tardías las salvó el agua de finales de agosto pero las heladas del viernes pasado han hecho estragos en el cultivo
Aunque existe una variación grande entre parcelas, algo frecuente en esta zona, la media resultante este año supera las 40 toneladas. “La producción media este año está entre 40 y 42 toneladas por hectárea”, calcula Jorge. En cuanto al estado sanitario del cultivo, el sur de Lugo se salvó de los ataques de gusano que se dieron en otras comarcas de Galicia, pero la llegada de las primeras heladas, el viernes y sábado pasado, han hecho estragos en el cultivo, quemando por completo las hojas en algunas fincas. “Hay también en algunas parcelas hay algo de maíz tirado por ataque tardío de rosquilla”, explica el técnico de Aira. 
Maquinaria de la cooperativa Cobideza trabajando este lunes en la comarca pontevedresa de O Deza

O Deza: "La media está en los 50.000 kg, pero hay fincas de 60.000 y 70.000"

La campaña de ensilado avanza también a buen ritmo en la comarca pontevedresa de O Deza, donde la cooperativa Cobideza tiene previsto finalizar de ensilar a mediados de octubre. "Nos quedará para dos semanas aproximadamente o algo más seguramente", cuenta Kiko Mosquera, el responsable de maquinaria. La cooperativa recogerá con su parque de maquinaria unas 500 hectáreas este año en una campaña que comenzó temprano y se alargará finalmente algo más de lo previsto inicialmente debido a la importante producción y al buen estado del cultivo.
Esta es una de las mejores cosechas de los últimos años
"Está habiendo buena cosecha, o muy buena. La media de producción puede andar en 50.000 kg por hectárea, pero hai fincas de 60.000 y de 70.000 kg. Quizás sea una de las mejores campañas de los últimos años", asegura Kiko. En cuanto a la calidad, también es excelente, ya que "el maíz no está seco ni con ataques de gusano". "Lo único que hay, como siempre, es algún daño por el jabalí", lamenta.

A Mariña: “Queremos sacar un corte de raigrás en otoño para compensar la escasa cosecha de maíz”

La comarca de A Mariña va a tener este año una cosecha escasa. La sequía del mes de julio y la primera quincena de agosto se dejó notar en el maíz pero las lluvias posteriores están ayudando a minimizar las pérdidas. “En las últimas siembras, las últimas lluvias de agosto cogió las plantas aún pequeñas y van bien, y al resto les está retrasando la maduración”, explica Juanjo Fraga, de la Ganadería Casa Barbeiro, con granjas en Alfoz y Ribadeo. De momento han ensilado solo 30 hectáreas, las primeras que sembraron en abril, y el rendimiento fue menor que el año pasado. “Era un ciclo 700 y hemos cogido 50.000 kilos por hectárea”, cuenta. Pero en el resto de las parcelas se nota la falta de agua en momentos críticos para el desarrollo de la planta, así que en el total de la campaña Juanjo no espera pasar de los 30.000 kilos de media. La larva defoliadora también les ha atacado, mermando a la mitad a producción en algunas fincas. “Tenemos más de 10 hectáreas afectadas en varias parcelas distintas. En cuanto detectamos la plaga tratamos, pero no la dimos frenado. Fue muy rápido el avance, en dos noches acabó con todo”, reconoce.
La escasez de forraje disparó los precios en un primer momento, llegándose a pagar a más de 80€ la tonelada
La escasez de forraje disparó los precios en un primer momento, llegándose a pagar más de 80€ por la tonelada de maíz picado en la finca, pero pasado ese boom inicial la oferta de otras zonas moderó los precios. “Aquí no hay oferta para comprar, pero en A Terra Chá sí. Allí hay ganaderías a las que les sobra, así que una zona va a compensar con la otra”, dice. Los precios ya están en valores habituales, alrededor de los 60€, que Juanjo considera que es el nivel a partir del cual ya no sería rentable comprar maíz para ensilar. “Hay que tener en cuenta que luego hay que transportar, ensilar, tapar y tienes que contar con las pérdidas, que pueden ser de entre un 5 y un 10%, cuando tienes maíz para moler puesto en la explotación a entre 200 y 220€”, compara. Siembras tempranas para ensilar en noviembre Para compensar la merma en la cosecha de maíz, Ganadería Barbeiro está haciendo siembras tempranas de pradera con mínimo laboreo (enterrando el purín con strep-till y atrás con grada rotativa) en las que espera coger ya un primer corte en el mes de noviembre. “Tenemos 20 hectáreas labradas en las que ya está naciendo el raigrás. Es una mezcla de raigrás híbrido con wester. De momento hace calor y yo le calculo que en 7 o 8 semanas, dependiendo de cómo venga el frío, tendremos hierba para segar. Eso nos va a dar un extra de forraje para aliviar el consumo de maíz y de hierba de calidad de primavera en la ración. Hay que buscar alternativas y antiguamente ya se hacía una corta de otoño en la hierba”, recuerda.

“Las vacas cruzadas van más al robot porque son más vivas”

Jose Rodríguez, al lado de uno de los dos robots de su establo, donde la mitad son ya vacas cruzadas En el lugar de Nogueiras, en la parroquia de Ferroi (Guntín), se encuentra Gallardo SC, una ganadería familiar que creció y se ha profesionalizado nos últimos 20 años, con un nuevo establo, ordeño robotizado y una apuesta clara en la actualidad por los cruces en el ganado. Buscaban animales versátiles y que se adaptaseb bien a los robots de ordeño para reducir la carga de trabajo. Jose Rodríguez atiende la granja con la ayuda de 3 empleados. Cuentan en la actualidad con 210 cabezas totales (110 vacas en ordeño, 20 secas y unas 80 terneras y novillas de recría) tras un importante crecimiento que se aceleró hace 5 años. “Mis padres tenían una ganadería pequeña con 19 vacas; cuando realmente se empezó a crecer fue cuando me incorporé yo en el año 2003. Hicimos un establo nuevo para 32 vacas que fuimos después ampliando a medida que íbamos creciendo”, explica. Nueva nave en 2020 Al ir aumentando de tamaño, Gallardo SC necesitaba unas nuevas instalaciones para la recría. Con esa intención diseñaron una nueva nave en el año 2019 para albergar a novillas preñadas y vacas secas pero un año después decidieron duplicar su capacidad, instalar dos robots de ordeño y pasar para ella a las vacas en producción, llevando los lotes de secas y recría para el establo antiguo.
Hicimos un primer establo en 2003, en el que ahora tenemos la recría y las secas, y en 2020 pasamos a todos los animales en producción a una nueva nave
Con esa decisión lograron tener unas cómodas instalaciones para todo el rebaño, que facilitan el bienestar del ganado y el trabajo diario en la granja. “El establo viejo no era muy antiguo y eso nos permitió lograr muy buenas condiciones para los lotes de recría y vacas secas, equiparables a los de las vacas en producción”, indica Jose. La próxima reforma estará pensada para mejorar el espacio destinado a las terneras más pequeñas, que son las que están en este momento un poco más apretadas, reconoce. Secado y postparto en sala Zona de separación junto a los robots para tener más vigiladas a las vacas recién paridas Siguen disponiendo de la sala de ordeño en el establo construido en el año 2003, lo que les permite utilizarla tanto para vacas recién paridas como para hacer el secado, de manera que minimizan los posibles problemas en los robots, al tener en ellos únicamente animales que ya están fuera de los períodos más críticos de la lactación.
El manejo del lote de producción en los robots se vuelve más sencillo al no meter a las vacas para secar y a las recién paridas
“Cuando tenemos 5 o 6 vacas para secar las llevamos para el otro establo, les cambiamos la alimentación, sustituyendo la ración de leche por la ración de secas, y las ordeñamos en la sala durante unos días hasta ponerles el secado”, explica Jose. Del mismo modo, el postparto también lo hacen habitualmente en la sala, aunque cuentan también con un espacio al lado de los robots en los que separar vacas para poder vigilarlas más exhaustivamente, sobre todo en el caso de las frisonas.
Para que una holstein llegue al cuarto o al quinto parto no puedes dejarla parir y olvidarte de ella, hay que cuidarlas mucho
“Para que una holstein llegue al cuarto o al quinto parto no puedes dejarla parir y olvidarte de ella, hay que cuidarlas mucho. Nosotros los primeros días las tenemos controladas al lado del robot. A las frisonas de más de 3 partos les ponemos calcio y un bolo de Kexxtone. Lo hacemos por sistema porque si una entra en cetosis y acaba en desplazamiento de abomaso supone más gasto”, razona Jose. “A la hora del parto miramos mucho por ellas, y en los primeros días de secado también”, reconoce. El control de la calidad de leche se lo hace Seragro y están haciendo secado selectivo. Venta de recría La longevidad es una de las características destacadas de esta explotación. “Intentamos llevarlas a los 5 partos pero en las frisonas no vamos más allá, porque irse a un sexto parto sería arriesgarse a tener problemas y como disponemos de recría de sobra vamos haciendo relevo de animales a través de descartes voluntarios”, explica.
A través del relevo voluntario vamos metiendo novillas más productoras para elevar la media de la granja
Tienen en la actualidad 210 cabezas totales y están vendiendo el excedente de recría, tanto terneras como novillas. “Con 30 al año ya nos sobraría para cubrir nuestra tasa de reemplazo. Como estamos muy por arriba de esa cantidad podemos permitirnos sustituir vacas por novillas más productoras para incrementar de este modo la media de producción de la granja y vender la recría que nos sobra”, indica. Cruces Empezaron a incorporar vacas cruzadas en el año 2017, en una fase de crecimiento de la granja, y al ver el rendimiento que daban optaron por inseminar con montbeliarde y rojo sueco también los animales de la casa. “Habíamos hecho un viaje a Portugal y habíamos traído 4 novillas a parir aquí. Vimos que eran animales con más fortaleza y a día de hoy ya inseminamos todo con Procross”, cuenta.
A veces invierten el orden de los cruces, poniendo primero rojo sueco para buscar animales de menor tamaño
“Hasta el año pasado estábamos cruzando la mitad de las vacas y la otra mitad no, pero vemos que funciona y ahora ya estamos cruzando todo, en este momento a ninguna frisona pura le estamos poniendo frisón, o bien la inseminamos con montbeliarde o bien con rojo sueco”, detalla. “Me gusta una vaca de tamaño medio, el cruce con rojo sueco a mí me gusta mucho porque es una vaca más pequeña y con muy buenas calidades de ubre”, asegura. La media mensual de células somáticas en esta granja está en las 123.000, con 12.000 gérmenes de bacteriología. Las camas de producción y de las vacas secas son de arena, las novillas están en colchoneta y las terneras en cama caliente de paja. 42 litros de producción por vaca y día Entregan la leche a Entrepinares desde el año 2014. Rondan los 42 litros de producción por vaca y día, con un 4,20% de grasa y 3,55% de proteína. “Son producciones de frisona pero con más calidades. Antes empleábamos esmartamina y ácido palmítico, pero ahora ya no. La producción se está manteniendo y para mí las cruzadas son vacas más resistentes y con más movilidad hacia el robot. Son vacas más activas, que acuden más a ordeñarse”, destaca.
Hay vacas Procross que pican muy alto y son superiores a muchas frisonas
Tienen los animales de producción repartidos en dos lotes, uno por cada robot. En uno están los de primera y segunda lactación, con un máximo de 57 vacas, y en otro las vacas multíparas, con entre 52 y 54 cabezas. No saturar los robots Gallardo SC tiene en este momento 110 animales en los robots. Prefieren no tenerlos saturados para tener en ellos un tráfico más fluido y alcanzar de esta manera medias de 3 ordeños diarios. “No queremos pasar de los 115 animales en los robots, sobre todo si hay muchas vacas con pocos días en leche, porque hemos comprobado que metiendo 120 animales logras a veces menos leche porque bajas en las medias de entrada al robot”, explica.
Procuramos no tener más de 115 animales en los robots, sobre todo si hay muchas vacas con pocos días en leche
En la sala llevaban ya 4 años haciendo tres ordeños al día y logrando altas producciones, por lo que no notaron un incremento importante en los litros por vaca al pasar a los robots, sino que el aumento de la leche en el tanque vino dado por el incremento de la capacidad de la granja en unos 25 animales más en producción. Un manejo diferente Además de destacar la mayor movilidad hacia el robot y el incremento de los porcentajes de sólidos, Jose asegura que las vacas cruzadas “no necesitan tantos cuidados porque son mejores en salud, patas y fertilidad”.
Las vacas cruzadas salen antes en celo y puedes conseguir un parto más en el mismo tiempo que dura una frisona pura
“No es una vaca que haya que manejar igual que una frisona. Las holstein tienen lactancias más largas. Las procross, sin embargo, salen antes en celo y puedes conseguir un parto más en el mismo tiempo porque puedes inseminarlas antes”, explica. Gallardo SC logra una tasa de preñez del 37% en las vacas procross, con 1,97 dosis de media, frente al 29% y 2,13 dosis de las frisonas, que representan el 57% del rebaño total de la ganadería en este momento, frente al 43% de vacas cruzadas.
Quiero vivir de las vacas y no para las vacas; para mí que no haya problemas es muy importante
“Las frisonas necesitan unas instalaciones perfectas y muchas más atenciones; a mismos cuidados, las cruzadas dan muchos menos problemas. En tema de medicamentos no hay que tratarlas tanto, es algo que notamos claramente”, asegura. Incremento de los ingresos de las vacas de desvieje Además de los ingresos por la venta de la recría sobrante, Gallardo SC está obteniendo también un mayor retorno por las vacas que manda al matadero. “El valor del desvieje aumenta. Las vacas cruzadas si les estiras la lactación cogen muchos kilos y con lo que te dejan en el matadero están pagando la novilla que queda en su sitio”, destaca Jose.
La mayoría de los descartes son voluntarios. Este año llevan vendidas 15 vacas, a una media de 1.800 euros
Este año llevan vendidas 15 vacas, a una media de 1.800 euros. La mayoría de los descartes son voluntarios, debido a la presión de las novillas, lo que hace que el porcentaje de primeros partos en el establo esté situado en el 35,5%. El promedio de partos de los animales enviados al matadero es de 3,5, con una producción vitalicia media de 44.886 kilos. Sexado y azul belga Jose tenía miedo cuando empezó a cruzar y prefirió no arriesgar. “Por miedo al cambio probé solo con la mitad del rebaño y no puse los mejores toros; ese fue un error que cometí, pero hoy lo tengo claro: se deben utilizar los mejores toros que se puedan, eso sí que se lo recomendaría a cualquiera”, insiste. “Cuando empezamos nuestra mentalidad era distinta y posiblemente nos equivocamos en eso. Hoy, sin embargo, estamos poniendo los mejores toros de cada raza y estamos usando sexado en las primerizas. De segundo parto para arriba, solo en las mejores vacas; nos sobran muchas terneras sólo con primeros y segundos partos, por lo que en el resto ponemos azul belga”, cuenta.
Destetan entre los dos meses y medio y los tres meses, dependiendo del tamaño de la ternera
Insemina a las terneras al año y logran que la media de edad al primer parto sea ahora de 22,3 meses. “Alguna podríamos inseminarla antes, pero como andamos sobrados no las apuramos, pero siempre paren antes de cumplir los dos años”, asegura. 4 hectáreas de regadío Gallardo SC trabaja 65 hectáreas, de las que echan a maíz 26. Rotan con hierba en casi todas, salvo en 3 bastante mojadas en las que es difícil entrar en invierno. Han aumentado la superficie en estos últimos dos años a medida que incrementaban el número de cabezas. De las 26 hectáreas labradas a maíz, 4 son de regadío. Están al lado del río y las riegan con un aspersor, lo que les permite garantizar en ellas producciones de más de 60.000 kilos por hectárea. Este año, además, sembraron un ciclo más largo. Procuran hacer ellos la mayor parte del trabajo agrícola, aunque en las campañas contratan fuera para agilizar las tareas de siembra y ensilado. “Nosotros aramos y pasamos la rotofresa, pero el purín nos lo vienen a sacar, porque sino a nosotros nos llevaría mucho tiempo hacerlo”, explica Jose.
En esta zona son fincas pequeñas porque no tenemos concentración parcelaria y es difícil trabajar, te lleva todo bastante más tiempo
“En esta zona son fincas pequeñas porque no tenemos concentración parcelaria y es difícil trabajar, por eso te lleva bastante más tiempo todo”, se queja. “Seis hectáreas que tenemos lejos las usamos para hacer un buen corte de hierba para ensilar”, indica. El coste de la alimentación en esta granja se sitúa entre 3,5 y 3,7€ el kilo de materia seca, con un suministro de 20 kg MS en pesebre y 6 más de media en el punteo del robot. Les viene el carro de la cooperativa Aira a hacer la ración todos los días y la están confeccionando en este momento con 24 kg de silo de maíz, 14 de silo de hierba y 8 de concentrado, más 6,5 kilos de concentrado a mayores de punteo del robot de ordeño.
Reportaje elaborado con la colaboración comercial de Global Genetics

Claves para controlar el gusano que arrasa las fincas de maíz

Fincas de maíz totalmente defoliadas y en las que solo queda el tallo. Este es el paisaje desolador que han tenido que comtemplar este año agricultores y ganaderos en Galicia. El causante es el Mythimna unipuncta o gusano soldado, una oruga procedente de Estados Unidos y que en la actualidad se ha expandido prácticamente a todos los continentes. Hasta ahora sus daños eran limitados en praderas y en algún rodal de maíz, pero la primavera seca y con temperaturas altas de este año ha adelantado su ciclo unas semanas de forma que la última generación de orugas de finales de julio y comienzos de agosto ha coincidido con el maíz aún con las hojas tiernas, lo que ha multiplicado los daños. Las fincas en las que el maíz se ha sembrado más tarde y en las que había presencia de hierba -especialmente gramíneas- han sido las más afectadas. Para conocer más sobre esta plaga, y como controlarla, hablamos con dos ingenieros agrónomos Pablo Amado y Adrián Cundíns.

¿De que se alimenta esta plaga?

El gusano soldado (Mythimna unipuncta) comienza su ciclo sobre pastizales de gramíneas adventicias (setaria, panico, digitaría) , y posteriormente se mueven a los cultivos como maíz, trigo, cebada, sorgo, avena, pero también tomate, lechuga o pimiento. Mythimna unipuncta provoca daños significativos en las plantas, dejando solo la nervadura central de la hoja. Suele comenzar a comer de la hoja más vieja a la más joven, comiéndose las hojas más jóvenes hasta el final. Usualmente se alimenta por la noche y por el día permanece enterrada en la raíz de la planta.

¿Cual es su ciclo?

El gusano soldado pasa el invierno como crisálida o larva enterrada en la tierra, en función de la temperatura de cada zona. El vuelo de adulto se inicia en mayo, con la generación procedente de la invernación, y finaliza en octubre. Estos se alimentan de polen y néctar de las flores. Tras la reproducción la hembra realiza la puesta en el envés de las hojas, o en la zona de inserción de la hoja con el tallo, en grupos o plastones de hasta 100 huevos que cubre con escamas de su propio abdomen. Cada hembra puede poner entre 500-1500 huevos en su ciclo. La duración media de la vida de los adultos es de entre 9 y 10 días para hembras y machos. Las larvas se localizan por el día en la base de las plantas y por la noche se alimentan de las hojas, completando su ciclo en 25-30 días, tras pasar por 5-6 estadios larvarios. Finalmente pasa a forma de crisálida, normalmente en el suelo en el interior de una capsula terrosa. Las generaciones -normalmente 3- tienen un promedio de vida de entre 30 y 50 días, en función de la temperatura, y se suceden hasta el mes de septiembre cuando, con las temperaturas frías, vuelve a invernar, completándose así el ciclo de vida de esta especie.

¿Como se combate?

Como paso previo se recomienda la instalación de trampas de feromonas en los bordes de las fincas de maíz para determinar el momento óptimo de tratamiento. Está sintetizada y se comercializa la feromona para Mythimna unipuncta . Las trampas sirven para capturar adultos y son indispensables para determinar el momento exacto en el que iniciar los tratamientos. En cultivos cabe vigilar desde mediados de junio a finales de agosto, donde los mayores daños vienen dados por la descendencia del segundo vuelo, es decir por la tercera generación de orugas. -Enemigos naturales del gusano soldado: Los escarabajos son sus enemigos naturales (carábidos), por lo tanto todo lo que sea promover este tipo de fauna a través de la colocación de cajas de insectos u otras medidas será beneficioso para controlar el gusano soldado. -Control biológico: Bacillus thuringiensis (aizawai y kurstaki) da buen resultado cuando las orugas son pequeñas, pero la frecuencia de tratamientos es mayor que en el resto, repitiéndose la aplicación cada semana aproximadamente. Es un insecticida autorizado en agricultura ecológica y se puede aplicar en cualquier cultivo. -Control químico: La lucha química, que se deberá realizar a última hora de la tarde, solo es interesante en función de la importancia de los daños y por cuestiones de rentabilidad. Es imprescindible llevar a cabo los tratamientos con las orugas en sus primeros estadios, cuando son más sensibles, y tratar de hacerlo principalmente con productos naturales para no eliminar la fauna auxiliar. Cuando el maíz ya está alto es difícil el tratamiento, limitándose a las zonas de bordes de las fincas. En caso de utilizarse cañón este solamente hará llegar el producto a las partes altas de la planta, lo que limita también su eficacia. Medidas culturales: Esta es una de mas medidas preventivas más eficaces y fáciles de aplicar. Es necesario mantener los bordes de la finca de maíz y la propia plantación lo más limpia posible de hierbas, especialmente de gramíneas adventicias (setaria, panico, digitaría), ya que son importantes reservorios de la plaga. Otra medida cultural es remover la tierra en los meses de enero o febrero -por ejemplo para sembrar un ano verde como guisantes o plantar cereal- ya que de esta forma se exponen al frío y mueren las crisálidas que están ivernando.

¿Merece la pena tratar ahora con insecticidas?

“Estamos al final del ciclo de esta plaga por lo que los daños en estos días van ir muy a menos. Por tanto, no sería rentable realizar un tratamiento con productos químicos en el maíz”, asegura Pablo Amado.

¿Ensilar o no las fincas defoliadas?

Cada finca de maíz es un caso particular, pero si el maíz aún no está cumplido no sería recomendable adelantar su ensilado, pues los daños a partir de ahora deberían reducirse notablemente. Donde también va a haber un daño elevado va a ser en la calidad del silo de maíz, ya que en las fincas con el maíz más afectado, este forraje solamente aportará fibra, muy poca proteína y casi nada de almidón. En caso de decidir ensilarlas, se recomienda mezclar bien este forraje con el de otras fincas aptas.

“En A Mariña la cosecha de maíz va a ser un desastre, no se recuerda un año tan malo como este”

Parcela de maíz en Barreiros, en la comarca de A Mariña, afectada por la sequía El cultivo de maíz viene adelantado este año en la mayor parte de Galicia y con resultados desiguales en cuanto a crecimiento y producción esperada en las distintas zonas. La más castigada está siendo la comarca de A Mariña, donde la sequía extrema ha hecho estragos este verano. En el resto de la comunidad, donde el maíz había tenido problemas de falta de agua el año pasado, este año las perspectivas no son malas. Las nieblas y las lloviznas de este fin de semana van a ayudar a aguantar verde el tallo y a completar la formación de la espiga, pero no servirán ya para recuperar aquellas plantas que no han crecido ni se han desarrollado a causa del estrés hídrico sufrido. El descenso de precipitaciones es una tendencia que se aprecia en los últimos años en la zona. Los datos de marzo a agosto indican claramente que se está produciendo una caída significativa en las precipitaciones acumuladas en el período que coincide con el cultivo de maíz: 360 l/m2 en el 2020, 332 l/m2 en el 2021, 298 l/m2 en el 2022 y 224 l/m2 en 2023 (datos de Ribadeo). 
Los resultados varían en función de la fecha de siembra y del tipo de terreno, con mejores perspectivas en las siembras tempranas de finales de abrir y comienzos de mayo
La falta de lluvias tras la siembra también multiplicó los problemas de plagas, sobre todo los ataques de rosquilla, y dificultó su tratamiento y control, un problema que se dio por toda Galicia, pero con mayor intensidad en la provincia de A Coruña. En zonas como Muxía, Santa Comba o Mazaricos al ataque de la rosquilla en los estadíos iniciales del cultivo se está añadiendo ahora el del gusano, que está saltando de las praderas para las fincas del maíz y provocando una defoliación importante en las plantas. Analizamos en detalle cómo está la situación en las distintas comarcas:

“Este es un año difícil, de 195 hectáreas que hemos labrado sólo hay 30 que se salvan”

Juanjo Fraga gestiona en A Mariña dos explotaciones lecheras que suman más de 1.000 cabezas. Para alimentarlas han sembrado este año unas 195 hectáreas de maíz en la zona de Ribadeo y de Alfoz pero la cosecha va a ser muy inferior a la habitual. “Este es un año difícil, yo no recuerdo en A Mariña ningún año tan malo como este. Nosotros tendremos unas 30 hectáreas buenas que se salvan y muchas otras fincas en las que habrá que valorar si se recoge o no”, indica. Juanjo es ingeniero agrónomo de formación y, además de la menor cantidad de cosecha, alerta de las consecuencias en cuanto a la pérdida de calidad del silo. “Con poca producción, cuando la espiga no se ha formado, la digestibilidad se pierde y el silo no aporta almidón y energía”, explica.
Con poca producción, cuando la espiga no se ha formado, la digestibilidad se pierde
Casa Barbeiro hizo este año en una parte de las fincas siembra directa y en ellas el resultado es semejante al que se da en las parcelas labradas al modo tradicional. “Tenemos parcelas sembradas con la nueva máquina que tienen buen maíz pero hay muchas otras en las que la planta tiene un metro de altura e intentará hacer espiga pero no va a llegar a tener grano”, asegura. El culpable de esta situación desastrosa fue el tiempo. De junio a mediados de agosto prácticamente no llovió nada y no hubo tampoco este año en la zona las nieblas habituales, que aportan humedad. “En las fincas sembradas temprano la planta está alta y tiene buen porte, pero está medio seca y no es capaz de espigar. Al llover estos días por lo menos la planta va verde para el silo y con digestibilidad, pero en general vamos a tener poca producción, muchas plantas sin espiga y poca digestibilidad”, resume. Un consejo habitual para evitar llevarse el tallo seco es cortar más alto, aunque en un año como este de escasa producción eso reduciría aún más la cantidad de silo.  Roturar parcelas muy húmedas de cara al año que viene Ante la situación vivida este año y con el temor de que el cambio climático acentúe estas anomalías, Juanjo ha tomado la decisión de preparar parcelas que eran muy húmedas y no se podían trabajar porque era muy difícil entrar en ellas para dedicarlas a cultivo de maíz en años sucesivos. “Para la producción de maíz dependemos del agua porque en fincas con la capa freática baja estamos a expensas de lo que llueva en verano. Normalmente sembramos escalonadamente y este año las parcelas que sembramos tarde no van a tener nada, excepto en las fincas que son húmedas, y el primero que sembramos cogió altura pero ahora está secando de pie sin acabar la espiga”, cuenta.
En una finca de 15 hectáreas más de la mitad nos la comió el gusano; el avance es muy rápido, en 2 o 3 días acaba con todo
A la falta de agua se añaden este año los ataques de la fauna salvaje y las plagas. “Tenemos el jabalí en las fincas buenas, la sequía en las intermedias y el gusano en las flojas. Primero fue la rosquilla y ahora el gusano defoliador. Las praderas permanentes nos las ha ventilado todas y el maíz de una finca de 15 hectáreas en Ribadeo más de la mitad nos lo comió. El avance es muy rápido, en 2-3 noches acaba con todo. Lo que hicimos para tratar de mitigarlo un poco fue aplicar tratamiento metiendo un tractor con rueda estrecha”, explica Juanjo.

“En alguna finca no merece la pena que entre la cosechadora”

Víctor Argul es técnico de Agropres, la empresa con sede en Barres que trabaja fincas tanto en el occidente de Asturias como en los ayuntamientos de la zona oriental de A Mariña. Su planta de mezcla húmeda trabaja con el silo de maíz como materia prima principal y siembran 1.000 hectáreas para suministrarla además de entre 700 y 800 hectáreas a mayores para ganaderías de la zona. “Este año el rendimiento va a ser bajo en un tercio de las parcelas”, calcula Víctor. “Las siembras tempranas, hechas en la segunda quincena de abril, fueron las que mejor aguantaron. Esas parcelas, si no tuvieron cultivo antes, tendrán rendimientos normales, pero las fincas que se sembraron después notaron el déficit hídrico porque veníamos ya de una primavera con poca precipitación y se arrastró esa falta de agua”, dice.
Veníamos ya de una primavera con poca precipitación y se arrastra esa falta de agua
“En las parcelas en las que hubo raigrás antes el resultado es nefasto por déficit de agua y abonado, porque se esperó por un corte más de raigrás postergando la siemba del maíz y después ya no llovió nada. En alguna finca no merecerá la pena que entre la cosechadora”, reconoce. Cosecha adelantada Agropres cosechó ya alguna parcela de maíz hace dos semanas. “Eran fincas en las que el maíz se estaba secando todo, pero en el resto empezaremos también en breve, yo calculo que en una semana o 10 días en las parcelas que van más adelantadas y después la intención ya es no parar, ir de seguido”, avanza Víctor.
Tuvimos que picar ya alguna parcela que se estaba secando toda
Tanto en A Mariña como en el occidente de Asturias hubo también bastantes ataques de rosquilla, aunque en las fincas labradas por Agropres no afectó demasiado. “Nosotros como aplicamos insecticida en la línea de siembra tuvimos casos muy pequeños pero por la zona sí que hubo bastante, y hacia Barreiros está habiendo ahora problemas con la oruga militar o gusano cogollero (Spodóptera frugiperda), que se come las hojas del maíz”, describe. Es una plaga contra la que poco se puede hacer, “únicamente tratar algo perimetralmente si la afectación no es muy grave para tratar de frenar o ralentizar su avance”, dice.

“Se prevé un incremento en el precio de compra”

Como Agropres, el Centro de Alimentación de Vacuno (CAVI) de la cooperativa Os Irmandiños, ahora integrada en CLUN, también emplea silo de maíz en su ración húmeda, aunque en este caso añadiendo también silo de hierba. José Ramón Loza es el responsable de cultivos en la zona y prevé que este año haya una producción al menos un 20% inferior. “La producción media por hectárea estará por debajo de las 35 toneladas, cuando el año pasado pasamos de las 42.000”, compara. La planta que el CAVI tiene en Vilamartín ensila unas 700 ha de maíz, 400 de gestión propia directa y el resto aportadas por los socios. Para llenar los silos este año habrá que recurrir a la compra externa y José Ramón prevé que haya una subida en el precio, que el año pasado se situó de media en los 58€/tonelada. 
Nosotros somos transparentes, pagamos el maíz que entra en la planta en función de la calidad que tiene
“Nosotros pagamos por fórmula, hacemos una analítica y pagamos en función de la calidad que tiene, en base al porcentaje de almidón y materia seca, somos transparentes en ese sentido. Un maíz aceptable debería tener un 33% de almidón y un 33% materia seca”, detalla. Un porcentaje, en el caso del almidón, que no va a ser fácil de alcanzar este año en muchas parcelas de la zona. “Lo que fue sembrado en abril y principios de mayor está relativamente bien pero las siembras de finales de mayo y junio han sufrido mucho la sequía. Estos días ha llovido y ha reverdecido un poco pero el maíz no va a crecer más, puede servirle para hacer algo de espiga y retrasar algo la fecha de cosecha; si no hubiese llovido tendríamos que empezar ya casi a recoger”, explica. SAT Casa Carballo, en Pol, tendrá este año una cosecha histórica de maíz

“Nosotros lo sembramos muy temprano y tenemos un maíz muy bueno, está altísimo, supera los cuatro metros”

En A Mariña el año pasado hubo buena producción mientras en el resto de Galicia sufrieron con la sequía, y este año ha sido al revés. “Para nosotros es el mejor año de todos de momento; la gente nos llama preguntando qué variedad hemos echado”, cuenta Iago Villamide, de la ganadería SAT Casa Carballo, de Pol, situada más hacia el interior, entre la Terra Chá y Meira. “Sembramos muy temprano y hasta ahora está muy bien, esperemos que no venga un septiembre muy seco y empiece a apretarlo. Está muy alto, por arriba de los 4 metros”, describe.
El maíz cada vez hay que echarlo antes, pero si quieres sacar hierba a veces es complicado
Esta ganadería con casi 500 animales en producción siembra 140 hectáreas de maíz y las 20 últimas van uno poco más pequeñas. “Siempre dejamos para el final las fincas que son mejores, en las que hacemos tres cortes de hierba, pero estamos viendo que el maíz cada vez hay que echarlo antes. Ahora en invierno ya no llueve como antes y puedes entrar antes en las fincas. Nosotros dos cortes de hierba las sacamos siempre y este año la primera la hicimos ya en febrero. Eso nos permitió empezar a sembrar el maíz a finales de abril con el segundo corte ya hecho”, explica.
La planta está en la floración y le queda como mucho un mes; si el tiempo viene como hasta ahora llegaremos a las 55 toneladas por hectárea
Iago prevé sacar este año entre 52 y 55 toneladas por hectárea, cuando el año pasado la media estuvo entre las 43 y las 45. “El año pasado fue un año muy justo pero este año si sigue el tiempo como hasta ahora la cosecha será muy buena. Aquí estuvo lloviendo continuamente hasta hace 3 semanas. El maíz ya está en la floración, le queda como mucho un mes”, calcula. Parque de maquinaria de la cooperativa Aira recogiendo fincas de maíz la semana pasada en Taboada

“La campaña viene 15 días adelantada”

Más al sur de Lugo ya han comenzado a cosechar. Se están empezando a ensilar parcelas sembradas a finales de abril con ciclos cortos. Aunque son fincas puntuales, Jorge Meiriño, técnico de la cooperativa Aira en la zona de Chantada y Taboada, asegura que “la cosecha en general va a venir adelantada, incluso en parcelas que no sufran sequía”. “Este año se adelantan los ciclos. Contra lo que se podía pensar, el tiempo estuvo estable y no hubo estrés de temperatura. Las fincas que se empezaron a ensilar la semana pasada son parcelas de mediados y finales de abril sembradas con ciclos cortos que están cumplidos y que se estaban empezando a secar, por eso se están segando”, explica.
Este año se pudo sembrar un poco antes y el tiempo estuvo bastante estable, sin altibajos de temperatura
“Otros años después había un parón, pero este año empezamos y ya no vamos a parar, según lo que hemos estado revisando en las fincas. Tenemos ya unas 150 hectáreas previstas para meter para esta semana de 4 o 5 granjas. Iremos despacio pero no se va a parar y en torno al 10 de septiembre ya se va a estar trabajando fuerte”, avanza Jorge.

“Tenemos previsto arrancar el 28 de agosto”

En Sarria la evolución del cultivo avanza también algo por delante de lo que es habitual en la zona. “Nosotros tenemos previsto arrancar el 28 de agosto, empezaremos 4 o 5 días para recoger lo que se secó, que es poca cosa, y luego pararemos una semana, porque el fuerte de la campaña no comenzará hasta mediados del mes que viene, en torno al 10-15 de septiembre. El año pasado ya había venido adelantado una semana y este año aún más, otros 8-10 días antes con respeto al año pasado, porque hubo muchas siembras tempranas y el verano fue más caluroso de lo habitual y poco lluvioso”, explica José Manuel López, responsable de la planta de mezcla húmeda de Aira en Sarria.
Esperamos una cosecha un 10% inferior a la del año pasado
“La cosecha el año pasado había sido buena, con cerca de los 40.000 kilos de media, pero con mucha variabilidad de las tierras buenas a las que no lo son tanto, y este año esperamos una cosecha algo inferior, alrededor de un 10% menos. De Lugo para abajo se nota mucho la escasez de precipitaciones”, afirma. La cooperativa Aira ensila cada año en su planta de mezcla húmeda de San Xulián da Veiga entre 15.000 y 16.000 toneladas de maíz, procedentes de unas 400 hectáreas. De ellas, 300 hectáreas se encuentran en la zona de influencia de la planta y compran a mayores maíz de otras zonas de Galicia para completar los silos, procedente de fincas en la zona de Meira, Pol, Cospeito y Xinzo. Parcela de regadío en el ayuntamiento de Bóveda, en el valle de Lemos

“Las siembras tardías no se han desarrollado, esas se han quedado por el camino”

Al sur de Sarria, en el entorno de Monforte de Lemos, el maíz se encuentra ya en una zona límite. La viabilidad del cultivo está asegurada únicamente por el regadío del Valle de Lemos, que lleva décadas sin ser modernizado, mientras que son pocas las ganaderías que se arriesgan a echarlo en parcelas de secano. Pablo Rodríguez, de la ganadería Xuíz, de Bóveda, sembró este año unas 40 hectáreas. “En nuestra zona todo iba bien hasta el mes de agosto, en el que el calor esta apretando mucho. Hizo aire y llegamos varios días a 37 y 38 grados y eso quema todo. Si sigue el calor ya veremos si da aguantado”, dice.
De Bóveda para abajo, hacia Monforte, en secano ya no echa maíz nadie, el que lo siembra lo hace en regadío
En la zona de regadío Pablo logra habitualmente cosechas de entre 45 y 50 toneladas por hectárea pero en las otras no pasa de las 35, y este año serán menos. “Las siembras tardías ya no se desarrollaron, esas se han quedado por el camino porque espiga no va a tener, y muchas veces no vale mucho la pena cosecharlas porque llevas solo el tocón para el silo”, argumenta. Pablo y otras ganaderías de la zona están a la espera de que la Xunta ponga en marcha un polígono agroforestal anunciado para incrementar su base territorial. “Esta es una zona buena para el maíz y si modernizasen el regadío podríamos obtener buenas producciones. Ahora regamos todo por manta; este año no hubo restricción de agua pero es un sistema menos eficiente. Habría que decantarse por los aspersores o por el riego por goteo”, defiende. Ganadería Xuíz tiene previsto ensilar a principios de septiembre el maíz labrado el 15 de abril, un ciclo 600. “El resto, el que fue echado a finales de mayo, que es un ciclo 400, vendrá hacia el día 20 de septiembre”, explica. Cosechadora de la cooperativa Cobideza trabajando este lunes en algunas parcelas de ganaderías de la zona

“En O Deza este año las perspectivas son buenas”

Al igual que en la comarca de Lemos, en O Deza la cosecha depende mucho del año. Y en la comarca pontevedresa éste no se prevé malo. “Hay fincas que están muy buenas, con buenas perspectivas de cosecha. La rosquilla y el taladro no han atacado mucho y de momento no hay gusano tampoco. Llovió este fin de semana y de momento va bien la cosa, pero aún puede venir mucho calor en septiembre”, explica Kiko Mosquera, de la cooperativa Cobideza, que labra unas 400 hectáreas de maíz para las ganaderías socias.
Puede venir aun mucho calor en septiembre, pero de momento va bien
El jueves y viernes de la semana pasada el parque de maquinaria de Cobideza comenzó ya a segar las primeras parcelas. “El maíz era de la altura de la cosechadora e iba en buen estado”, describe. “El año pasado había sido regular tirando a mal pero este año de momento va bien la cosa; paja por lo menos va a haber”, asegura. El fuerte de la campaña se prevé desde mediados de septiembre hasta la primera semana de octubre, “un poco antes que el año pasado porque se sembró también antes”, justifica Kiko. “Se ensiló más temprano la hierba y se echó antes el maíz, y después llovió algo en mayo y junio, no pasó como el año pasado, que no había caído nada”, recuerda.

“El principal problema que está habiendo en la zona de Muxía, Santa Comba y Mazaricos es el gusano defoliador”

En la zona de O Xallas, otra de las grandes áreas que acaparan el grueso de la producción de maíz en Galicia, este ha sido un verano en el que no ha llovido mucha cantidad, pero sí bastantes veces, por lo que a nivel climatológico no ha habido demasiado problema. Sin embargo, está habiendo contratiempos en relación a determinadas plagas. La cooperativa Ganxabar, que gestiona la alimentación en conjunto para 8 granjas de la zona, sembró 850 hectáreas de manera escalonada, por tramos, y el primer silo tiene previsto hacerlo en la segunda semana de septiembre. “De momento parece que el cultivo este año viene algo adelantado, pero va a depender de cómo venga el tiempo de aquí en adelante”, explican.
Va uno poco más adelantado, pero si llueve en estas semanas eso siempre retrasa un poco la recogida
En cuanto a los rendimientos esperados, se prevén producciones “correctas”, similares al año pasado, en el entorno de las 45 toneladas por hectárea de media. “No ha sido un año seco, creció bastante rápido y de momento se presenta muy bien. Está bastante adelantado pero si llueve en estas semanas eso siempre retrasa un poco la recogida”, indica Jesús Otero. “No recordamos nunca tanto ataque de rosquilla como este año” En la provincia de A Coruña las plagas castigaron con fuerza este año el cultivo de maíz. “En general hubo muchísimo problema con la rosquilla, no recordamos nunca tanto ataque, en el momento inicial se llevaron plantas por delante y hubo que resembrar bastante. En la zona de Mazaricos hubo granjas que tuvieron que volver a labrar más del 10% de la superficie, aunque no fue algo generalizado ni afectó a todas las explotaciones por igual. Esas fincas se trataron con herbicidas y hubo que volver a labrarlas con ciclos más cortos, por lo tanto las producciones en esos casos van a ser menores”, detalla Jesús.
Ahora no es recomendable entrar a tratar contra el gusano porque destrozas el maíz y con dron no está permitido, lo único que se puede hacer es tratar a mano por el exterior
Superado ese problema inicial, “en este momento el principal problema es el gusano”, dice. “Si tiene para escoger va primero a la pradera pero cuando acaban en la pradera saltan al maíz. En la zona de Muxía, Santa Comba y Mazaricos está habiendo bastante ataque, y donde entra afecta de manera muy importante a la planta, porque come toda la hoja y también a la mazorca”, explica.

¿Como lograr que el silo de maíz produzca más litros de leche?

En breve comenzará en Galicia la campaña de ensilado del maíz, el principal forraje de las ganaderías de vacuno de leche, y dependiendo de como lo hagamos (altura de corte de las plantas, picado de los granos de maíz y del resto de la planta), así como de cuando empecemos el silo, tendremos mayor o menor digestibilidad del mismo, o lo que es lo mismo, las vacas producirán más o menos leche, algo crucial para la rentabilidad de una granja. Para conocer cuales son las claves para medir y mejorar la digestibilidad del silo de maíz, la jornada Dekalb+Silo, contó con la ponencia de Ángel Ávila, experto consultor para ganaderías de vacuno de leche. Como regla general, subrayó que “los silos con menos materia seca y menos almidón tienen mucha más digestibilidad y más producción de leche, y por lo tanto debemos buscar silos muy digestibles tanto en almidón como en fibra”. Como ejemplo, puso dos silos de maíz: Uno en el que el maíz se ensiló más seco, con un 42% de materia seca y un 39% de almidón, y otro en el que el maíz se cortó más verde, con un 30% de almidón y un 30% de materia seca. Las analíticas concluyeron que en el primero la digestibilidad de la fibra neutro detergente materia orgánica (aFNDmo) a las 30 horas de ser ingerido por la vaca era del 56,62% y en el caso del almidón a las 7 horas del 77,76%, mientras que en el segundo la digestibilidad se incrementó hasta el 72,95% y 85,41%, respectivamente. “Esto es muy importante en términos económicos porque toda la fibra y almidón del silo de maíz que la vaca no digiere va a la fosa de purín”, advirtió Ángel Ávila. En este sentido, recomendó 5 vías posibles para mejorar y medir la digestibilidad del almidón del silo de maíz por parte del ganadero o técnico:

1)Prueba de flotación en cosecha fresca (grado de picado):

Consiste en evaluar la calidad del picado del maíz cuando se está realizando de una forma rápida y sencilla. -1. Para ello necesitamos un recipiente - un cubo o una jarra- con un litro de agua aproximadamente. Verteremos en el agua un litro aproximado de ensilado fresco de maíz. -2. Agite el contenido y espere aproximadamente dos minutos. -3. Los granos precipitan hacia el fondo del balde.. -4. En la superficie del balde quedarán todos los elementos fibrosos (hojas y tallos). -5. Remueva todos los componentes que se encuentran flotando y verifique el precipitado (encontrará todos los granos en el fondo). -6. Si en el contenido hay entre 0 y 2 granos enteros el picado es ideal. -7. Si hay entre 2 y 4 sería un picado adecuado. –8- Si hay más de 4 granos de maíz enteros el picado no es el adecuado y habría que regular la picadora. -9. Mientras más corto se pica el maíz, mayor cantidad de granos serán quebrados y molidos, y por tanto mayor será la digestibilidad del silo. Este análisis debemos repetirlo varias veces el día del picado.

2)Score de procesamiento del grano de maíz (Kernel Processing Score o KPS):

Otro sistema de medir in situ la calidad del picado del maíz es mediante el sistema KPS, por sus siglas en inglés. Consiste en medir el almidón del silo de maíz ensilado que pasa a través de un tamiz de 4,75 milímetros. -Si pasa más del 70% la calidad del picado es óptima. -Si pasa entre el 50 y el 70% sería un procesado adecuado. -Si pasa menos de un 50% sería un picado inadecuado, con muchos granos sin romper o de forma gruesa. A este respecto, Ángel Ávila expuso que según en estudio realizado en 5292 ganaderías de Estados Unidos, solamente un 31% registraron un procesado óptimo del maíz, en un 57% era adecuado y en un 12% deficiente. “La calidad del picado es determinante, pues cuanto peor sea el índice KPS de procesamiento del grano, mayor es el porcentaje de almidón fecal, que la vaca excreta sin digerir y que acaba en la fosa de purín”, subrayó.

3) Altura de corte de la planta:

La altura de corte es otro parámetro que influye de forma decisiva en la digestibilidad del silo de maíz y que podemos controlar durante el picado. “La parte inferior del maíz es lignina poco digestible, tierra y hongos que nos causarán problemas en el silo. La altura de corte debería ser de un mínimo de 39 centímetros”, defendió Ángel Ávila. El experto puso como ejemplo un estudio en el que se comparó un silo de maíz en el que la planta se cortó a 17 centímetros del suelo y otro en el que se hizo a 39 centímetros: El porcentaje de almidón pasó del 30,6% al 32,4%; la fibra digestible del 50,5 al 54% y la leche producida con la misma ración pasó de 45,2 a 46,7 litros diarios. “Estos datos extrapolados a una ganadería de 100 vacas en ordeño serían unos 30.000 euros más al año”, subrayó.

4) Cribado de heces y determinación de almidón en heces.

La cantidad de almidón en una muestra fecal está altamente relacionada con la digestibilidad total del almidón. En este sentido, Ángel Ávila recordó que varios estudios publicados han encontrado una correlación entre el almidón fecal y la digestibilidad del almidón en silo de entre el 73 y el 94%, dependiendo del marcador interno utilizado en el estudio. Así, un estudio en la Universidad de Pennsylvania (Estados Unidos) encontró que cada aumento de 1 punto porcentual en la unidad de almidón fecal era equivalente a 0,34 kilogramos de producción de leche perdida. Como muestra el impacto económico que supone, pasar del 2 al 5% de almidón fecal en un rebaño de 100 vacas en ordeño supone una pérdida económica de unos 165 kilos de leche, es decir, unos 90 euros diarios menos. “El objetivo es que el porcentaje de almidón fecal sea inferior al 4,5%”, destacó.

5) Momento de apertura del silo

El almidón del silo de maíz incrementa su digestibilidad con el tiempo. Como norma general, Ángel Ávila recomendó que los silos no se abran antes de marzo. Y es que la digestibilidad – y por tanto la producción de leche por KG de materia seca ingerida por la vaca- varía notablemente entre en silo de maíz de 2 meses y uno de 1 año: La digestibilidad del almidón al poco de ser ingerido pasa del 26 al 49% y a las 7 horas se incrementa de un 77 a un 91%.

Cuanto más digestible sea el silo de maíz, menos concentrado y mayor rentabilidad

El incremento de la digestibilidad del almidón del silo de maíz también redunda en una menor necesidad de harina de maíz en la ración, con el consiguiente ahorro en costes de alimentación. Así, Ángel Ávila también hizo referencia a un estudio de la Universidad de Wisconsin que muestra que la mejora de la digestibilidad total del almidón en tracto digestivo en solo 5 puntos reduce la alimentación suplementaria de harina de maíz en 0,7 kilogramos diarios, o lo que es lo mismo, 0,245 euros por vaca menos al día en costes de alimentación. Trasladado a un rebaño de 100 vacas en ordeño representa un ahorro de 8942 euros, a lo que habría que sumar un retorno en la producción de leche perdida al excretarse menos almidón en heces, unos 20.000 euros al año.

Experiencias de segundo abonado del maíz

El maíz es uno de los forrajes fundamentales para buena parte de las ganaderías de leche gallegas, por eso conseguir buenas producciones y cosechas es el objetivo de todas ellas. Para lograr buenos resultados, una de las claves es realizar una adecuada fertilización del cultivo. En la cooperativa agroganadera Aira, con sede en Taboada (Lugo), abordaron recientemente esta cuestión con sus asociados, procedentes de distintas zonas, en una jornada técnica celebrada en Sarria, en la que participaron técnicos de la cooperativa de las diferentes delegaciones. Una de las cuestiones en las que insistieron durante la jornada fue en repartir el aporte de nitrógeno que se hace al cultivo, en vez de proporcionarlo solo una vez, debido a las pérdidas que se producen. “La eficiencia del abonado aumenta mucho si la planta dispone del nitrógeno en los momentos de más demanda”, explican desde el servicio agronómico de Aira.
Recomiendan repartir en dos veces el aporte de nitrógeno granulado, para conseguir que la planta disponga de él en los momentos en que más lo necesita
Una de las opciones para repartir la dosis de nitrógeno que se aporta al maíz es hacerlo en dos veces, empleando en ambos casos fertilizantes granulados. Así, se realiza un primer abonado antes de la siembra y después se procede a un segundo abonado justo antes de que cierre el maíz, es decir, antes de que comience a encañar. “Hay que hacer este segundo aporte cuando el maíz tiene entre 8 y 10 hojas, de manera que aún se puede entrar sin dañar el cultivo”, apuntan desde el servicio agronómico de la cooperativa. Técnicos y ganaderos durante la jornada técnica celebrada en Sarria. En la jornada divulgativa se abordó este método de fertilización y los participantes vieron la aplicación de uno de los productos que se pueden utilizar en el segundo aporte de abono, cuando la planta comienza a encañar. En esta sesión demostrativa emplearon el abono Amidas, con una aplicación de 150 kilos por hectárea. Para su aplicación utilizaron una máquina de redrar que permite también aplicar el fertilizante. Ta y como señalaron los expertos, entre otras ventajas, este abono es concentrado, lo que permite emplear bajas dosis y ganar mucho rendimiento en la aplicación. “La aplicación resulta práctica y económica. Así es que con una aboadora de 1.500 kilos se pueden hacer entre 8 y 10 hectáreas en poco tiempo”, se explicó en la jornada.
En la jornada utilizaron el abono Amidas que permite emplear bajas dosis y ganar mucho rendimiento en la aplicación
De este abono se recomienda aplicar una dosis de entre 125-200 kilos por hectárea dependiendo de la producción esperada (35-70 toneladas por hectárea). En su composición, el Amidas incluye azufre, lo que ayuda a asimilar el nitrógeno por las plantas. Otra de las ventajas de este producto es que no daña el maíz produciéndole quemaduras, como acontece con otros fertilizantes.

Aportar fertilizante y redrar el maíz

La aplicación de este fertilizante granulado en la parcela de Sarria se hizo con una máquina de redrar el maíz. Este es uno de los aperos, junto con las abonadoras suspendidas, con el que aplicar el abono al cultivo en esta fase de crecimiento. Además, en la sesión también recordaron los beneficios que le proporciona al cultivo redrar la tierra. “Redrar el maíz aporta muchos beneficios al maíz. Es una técnica muy antigua que se dejó en desuso por los cambios en la mecanización de las granjas”, explican desde el departamento agronómico de Aira.
Recomiendan aplicar el abono con una máquina de redrar el maíz por los beneficios que reporta este proceso al maíz
En concreto, redrar el maíz permite romper la costra que se forma en la superficie de la tierra y las hendiduras que hacen que se pierda el agua en profundidad. Además, arrendar el regazo del maíz provoca que salgan nuevas raíces mejorando mucho la densidad de ellas y su eficiencia. También es una práctica que permite liberar la tierra de algunas hierbas que aún estén en ese momento en la finca. Además, al enterrar el fertilizante, las pérdidas son mínimas.

¿Por qué es importante aplicar un abono foliar al maíz?

En la jornada, en la Cooperativa también informaron a los participantes sobre el uso de abonos foliares, para aplicar junto con el herbicida. Los abonos foliares pueden proporcionar micronutrientes, aportar bioestimulantes y proporcionar nitrógeno, de manera que se completa la fertilización de la planta.
Los abonos foliares aportan pequeñas cantidades de nutrientes de una manera muy rápida y eficiente
“Los abonos foliares tienen una función diferente a la de los fertilizantes granulados. Los abonos foliares aportan pequeñas cantidades de nutrientes, pero lo hacen de una manera muy rápida y eficiente, lo que permite darle un impulso al crecimiento de las plantas”, explican los técnicos. Existen dos tipos principales de abonos foliares: -Aquellos que aportan nitrógeno. Son abonos que complementan al que las plantas reciben por las raíces en momentos de gran demanda. -Aquellos que aportan micronutrientes y estimulantes. Los micronutrientes son necesarios en pequeñas cantidades. Algunos de los micronutrientes son poco móviles, además de escasear en muchas tierras, por eso una incorporación vía foliar garantiza que la planta disponga de estos nutrientes esenciales y así crecer mejor. Los estimulantes tienen la función de reactivar la planta ante situaciones de estrés, como puede ser el propio efecto de los herbicidas, una sequía puntual, noches frías, etc. La aplicación de abonos foliares debe hacerse siempre bajo la prescripción de técnicos especilizalistas y recomiendan emplearlos cuando se aplica el herbicida. Los abonos foliares tienen un coste reducido y los beneficios que aportan son importantes. Además, como se apuntó en la jornada, es preciso falta tener en cuenta que la aplicación del abono foliar, al ir con el de herbicida, no supone un coste extra de aplicación.

El gusano gris, una amenaza para esta campaña del maíz: claves para controlarlo

Esta primavera muchas plantaciones de maíz están viéndose afectadas a causa del gusano gris (Agrotis segetum), conocido también como rosquilla del maíz, por ser una de las plantas de las que se alimenta. En algunas zonas está causando auténticos estragos en el cereal, obligando incluso a tener que volver a sembrar buena parte de la parcela. El gusano gris es una larva que suele estar presente en Galicia y dejar daños puntuales en los cultivos, pero esta campaña se ha registrado una explosión de la plaga, lo que provoca que algunas plantaciones se vean seriamente afectadas, sobre todo aquellas que fueron sembradas más tarde. Además del maíz, esta larva está afectando este año también de manera significativa a otros forrajes como el girasol, la alfalfa o cultivos como la cebolla o incluso la patata.
Las plantaciones en las que la siembra se hizo más tarde son las más afectadas
Están localizándose daños en toda Galicia, a excepción de aquellas zonas más frías, donde parece haber una menor incidencia del gusano. En las comarcas coruñesas de Ordes o Bergantiños se detectaron importantes daños en parcelas, lo que obligó a volver a sembrar. “Desde Oficinas Agrarias Comarcales de Coruña y Lugo nos informan de que está habiendo daños y llaman para preguntarnos cómo abordar la plaga”, apuntan desde el Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo (Ciam).

¿Por qué este año hay más gusanos?

Los expertos coinciden en señalar en que este año se dieron condiciones muy favorables para que buena parte de los huevos sobrevivan y haya una explosión de gusanos, que es la fase en la que causa mayores daños a los cultivos. En el caso del maíz, el propio ciclo de la plaga es bastante parejo al del maíz, por lo que es uno de los cereales más afectados.
“El invierno suave que hemos tenido este año es la causa de que se haya dado esta explosión de gusanos”: Jesús Collar, investigador experto del Ciam
“El invierno suave que hemos tenido este año es la causa de que se haya dado esta explosión de gusanos”, explica Jesús Collar, ingeniero agrónomo del Ciam y uno de los mayores expertos en Galicia sobre esta plaga. Los gusanos precisan de temperaturas cálidas para sobrevivir, entre 24 y 28 grados, así como un alto grado de humedad y sobrevive incluso en zonas anegadas, lo que está dejando una gran incidencia desde zonas de Mazaricos (A Coruña) hasta Allariz (Ourense), como apuntan desde el Ciam. Gusano gris al lado de una planta de maíz. “Otras primaveras se registra más frío en marzo y abril y buena parte de los huevos o los gusanos en las primeras fases acaban muriendo, mientras que este año el calor propició que sobrevivieran más individuos”, explica José Manuel Medeiros, ingeniero agrónomo y jefe de ventas en la cooperativa AIRA. También hay que tener en cuenta que es una plaga muy explosiva, es decir, con un rápido crecimiento, lo que provoca que tras detectar los primeros daños, si no se trata puedan verse afectadas muchas plantas.

Daños más allá del tiempo de la siembra

El gusano gris, a partir del tercer estadio, vive enterrado en el suelo, a una profundidad de entre 1 y 2 centímetros y se alimenta de la parte central del maíz en las primeras fases de desarrollo del cereal. El ciclo del maíz y el del gusano coinciden en el tiempo, por lo que la etapa más susceptible para el cereal es también la de desarrollo del gusano en la tierra. “En las plantas dañadas por el gusano gris durante el cuarto y quinto estadio los síntomas son fácilmente reconocibles: cortan o roen el cuello, lo perforan internamente y ascienden por la cavidad del tallo hasta cierta altura”, detalla un informe sobre la plaga elaborado por el grupo de trabajo fitosanitario de laboratorios del Ministerio de Agricultura. De este modo, las plantas aparecen secas y acaban por secar si el ataque se produce precisamente en las primeras fases de crecimiento.
El maíz es muy sensible al ataque del gusano mientras que no cuenta con 6 o 8 hojas, de manera que acaba secando cuando la rosquilla le roe el cuello
Mientras el maíz se encuentra en estado de plántula, es decir hasta que no se alcanza el cierre del maíz y el cereal no cuenta con 6 o 8 hojas, es la fase más delicada y donde el ataque de rosquilla puede dejar más daños, ya que hace secar la planta. Las altas temperaturas y el alto grado de humedad registrados están ocasionando que las plantaciones que fueron sembradas más tarde estén teniendo más daños. “Las plantaciones que se hicieron a mediados de mayo están teniendo más daños”, explica Juan Valladares, investigador del Ciam.
Recomiendan controlar la plaga en las fincas de maíz para evitar que los ataques tardíos, que afectan a las raíces secundarias, terminen por tumbar las plantas cuando estén próximas a la cosecha
Más allá de los daños que puede causar el gusano en las primeras fases de crecimiento del maíz, también es importante mantener a raya la plaga, ya que también puede causar daños en el desarrollo de la planta que finalicen por condicionar la cosecha. “Los ataques tardíos de rosquilla afectan ya no a la parte del tallo, sino a las raíces secundarias, que sirven de anclaje de la planta”, explica Medeiros. Raíces de una planta de maíz sana y una planta afectada por ataques de rosquilla. “Si los ataques de rosquilla son más tardíos le afectan a las raíces sustento y cuando la planta está alta puede acabar tumbada por el viento”, confirma Collar. Así, los ataques tardíos de rosquilla pueden provocar que la planta caiga antes de que llegue a criar espiga o a madurar, obligando a ensilar antes de tiempo, como ha ocurrido ya en otras campañas.  Mientras que los ataques cuando el maíz es más pequeño son fáciles de detectar, ya que las plantas acaban murchando, cuando se trata de ataques tardíos la planta no presenta daños aparentemente, por lo que es muy importante revisar la tierra para comprobar la presencia de gusanos.

Medidas para atajar la plaga

Al tratarse de un gusano que permanece enterrado, los expertos coinciden en la importancia de revisar los cultivos para conocer la afección real de la plaga. “Es necesario remover la tierra cerca de la planta para comprobar la cantidad de gusanos que hay”, explican los investigadores. Una vez constatada la presencia de la plaga recomiendan tratar para evitar que siga causando daños tanto inmediatos como con ataques tardíos. Recogemos algunas de las recomendaciones y consideraciones a tener en cuenta para atajar la plaga:

-Tratamientos

-Los tratamientos autorizados y más comunes para atajar la plaga son insecticidas piretroides como Delta EC Deltametrin o Lambda cihalotrin. -También hay tratamientos biológicos, muy empleados para cultivos de huerta, ya que carecen plazos de espera de seguridad que cumplir. “Dentro del Bacillus thuringiensis la variedad aizawai es la más eficaz para el gusano gris. También la variedad Kurstaki puede resultar útil”, explica Collar. Como reconoce el experto, estos tratamientos además de tener un coste más elevado, tampoco tienen gran eficacia si el gusano se encuentra en los estados finales de las fases de su evolución. -Hay expertos que apuntan también al empleo de nematodos entomopatógenos, como la Steinernema feltiae, que para los tratamientos de suelo pueden ser muy efectivos. -Aunque no hay consenso entre los expertos, Collar apunta que incorporar soluciones granuladas puede ser también una alternativa en las primeras fases de la plaga. “Si cuando se comienza a preparar la tierra para el cultivo se realiza un control previo y se comienzan a ver larvas es recomendable emplear estos granulados para atajar ya la presencia de la plaga”, concreta. Mientras, otros técnicos reconocen que estas soluciones no les resultaron efectivas.

-Método de aplicación

-Es recomendable emplear abundante caldo de agua para su aplicación, ya que así se consigue llegar mejor donde se encuentra el gusano. “Solemos emplear entre 800 a 1.000 litros por hectárea”, explica Juan Valladares. -Debe aplicarse en días nublados y sin lluvia, para evitar que el agua termine arrastrando el producto. -Se recomienda aplicar el insecticida en las últimas horas del día, ya que es una solución que se degrada con la luz y dado que el ciclo de actividad del gusano también es nocturno. “Es un insecticida por contacto, por lo que se busca que el gusano esté en contacto con él cuando sale a comer por las noches”, explica Collar. -Si hay mucha cantidad de gusano se recomienda tratar aunque el maíz ya tenga más de 8 hojas, para evitar que se produzcan ataques tardíos que afecten a las raíces secundarias y al anclaje de la planta adulta. -Aprovechar para aplicar un abono foliar. “Si es preciso entrar en la finca para aplicar el insecticida puede ser muy acertado aprovechar para aplicar un abono foliar, cuyo coste por hectárea es bajo y que sin embargo favorece mucho al desarrollo del maíz”, aconseja Medeiros.

Siembra directa de maíz con aplicación localizada de purín: una opción pionera en Galicia

Siembra directa de maíz sobre pradera en una parcela al lado del establo de Ganadería Barbeiro en Lagoa (Alfoz) Las limitaciones al uso de fertilizantes químicos y productos fitosanitarios, impulsadas desde la Comisión Europea, condicionarán en los próximos años la siembra del maíz, el principal cultivo agrícola que se lleva a cabo en Galicia. Ante esta nueva realidad, hay explotaciones gallegas que se están adelantando, con la adquisición de maquinaria de última generación que permite llevar a cabo una siembra de precisión, con reducción en el uso de insumos, al tiempo que se evita dañar la estructura del suelo mediante técnicas de mínimo laboreo. Ganadería Barbeiro, con dos granjas en la actualidad en A Mariña, ubicadas en Lagoa (Alfoz) y Arante (Ribadeo), está empleando en esta campaña de siembra del maíz una sembradora combinada de precisión que prepara la tierra, fertiliza mediante la aplicación localizada del purín y siembra en una sola pasada.
La cabeza tractora autopropulsada es holandesa y el apero de fabricación italiana
Esta máquina, la primera que viene para España, combina una cabeza tractora autopropulsada, de fabricación holandesa, con cisterna de purín y un apero hecho en Italia. “El strip-till es el único en Europa que trabaja con inyección de purín más siembra de maíz”, explica Juanjo Fraga, administrador de Casa Barbeiro SL, la ganadería familiar en Alfoz, y Narxosé SLU, adquirida en Ribadeo en 2018. Siembra directa La siembra directa avanza en el cultivo de cereales y oleaginosas en distintos países y gana terreno también en España pero no es habitual a día de hoy en el cultivo de maíz en Galicia. “Es un sistema que se está utilizando bastante fuera, en países como EEUU o Brasil. Es una mezcla de laboreo convencional y siembra directa, mediante un sistema de laboreo en líneas que lleva acoplada una sembradora de maíz”, explica Juanjo.
En EEUU y Brasil se está usando bastante este sistema
Una de las ventajas es la agilización de los trabajos de preparación de la tierra previos a la siembra y el ahorro de tiempo y combustible. “Con una sola pasada voy a hacer todas las labores. Acabas de ensilar y al día siguiente estás echando el maíz. Eso nos facilita las cosas. Trabajamos directamente sobre la pradera; antes había que arar, gradar, abonar y sembrar. Parte de esos trabajos los contratábamos, ahora lo haremos todo nosotros con una única máquina”, destaca. Fertilización solo con purín de las tierras del maíz La fertilización de las tierras del maíz es uno de los usos más habituales que se da al purín en Galicia. Las explotaciones lecheras reservan buena parte del purín almacenado en invierno para el momento de la siembra, pero la entrada en vigor, a partir del próximo 1 de enero, del Real Decreto de Nutrición Sostenible de Suelos Agrícolas, dificultará esta práctica, al menos debido a la prohibición del uso de cisternas de plato o abanico y a la limitación en las unidades máximas de nitrógeno por hectárea permitidas en los planes de abonado.
Acabas de ensilar y al día siguiente estás labrando el maíz; eso nos facilita las cosas
Por eso, la aplicación localizada del purín en la misma línea de plantación permite un aprovechamiento más eficiente del poder fertilizante del purín por parte de la planta y una reducción en el uso de abonos de síntesis química. “Nosotros este año no vamos a usar nada de abono mineral para labrar el maíz al estarle metiendo el purín localizado por debajo. La profundidad de siembra es la habitual, pero inyectas el purín entre 23 y 30 cm y la semilla va arriba. Al romper la estructura del suelo para la semilla es más fácil enraizar, porque no tiene suela de labor y profundiza más. El terreno queda medio acolchado al pasar por él”, explica. Juanjo espera también poder eliminar buena parte del uso de herbicidas habituales en la siembra del maíz por medio de una elección idónea de los cultivos en rotación. “Este año donde teníamos raigrás hemos metido un glifosato con insecticida y no hemos echado nada más, pero donde habíamos sembrado veza con cereal en invierno no hemos aplicado nada porque pensamos que no lo va a necesitar, porque ninguna de las dos, ni la veza ni el cereal, rebrota y nuestra idea es seguir rotando con la veza de cara al futuro”, argumenta. Mínimo laboreo La apuesta de Ganadería Barbeiro por el mínimo laboreo tiene que ver también con los beneficios agronómicos para la estructura del suelo. “Estamos intentando darle una vuelta a nuestras granjas hacia sostenibilidad, apostando por la agricultura regenerativa”, dice Juanjo, ingeniero agrónomo de formación. La siembra del maíz en Galicia está siempre condicionada por la climatología. La integral térmica marca el inicio de la campaña y las lluvias obligan en ocasiones a retrasar la preparación de las tierras. La siembra directa, sin embargo, no se ve tan afectada. “En Alfoz aunque llueva algo con este sistema puedes trabajar igual porque es suelo arenoso. En Ribadeo es más complicado porque tiene más arcilla”, explica. Búsqueda de la máxima productividad en las tierras El cultivo de las tierras es parte esencial del proyecto de crecimiento de las granjas de Lagoa y Arante, que están en proceso de ampliación para acercarse a las 500 vacas en producción en cada una de ellas. Este año echarán un total de 190 hectáreas de maíz en distintas ubicaciones, buena parte de ellas fincas arrendadas en distintos ayuntamientos de la comarca con las que han ido incrementando en los últimos años la superficie agraria a medida que crecían en número de cabezas para de este modo tratar de ser lo más autosuficientes posible en la alimentación del ganado.
Este año vamos a echar 190 hectáreas de maíz. Nuestra idea es rotar con veza
Para tratar de incrementar la productividad de las parcelas, su intención el año que viene es reducir la distancia de plantación. “Hasta ahora labrábamos con dos separaciones, a 60 y 75 cm. Este año estamos trabajando con 8 surcos a 75 centímetros entre filas, pero reduciendo a 13 centímetros la distancia entre semilla y semilla dentro de la fila para meter más plantas por hectárea. Para el año que viene vamos a probar a trabajar a 12 líneas con separación de 50 cm entre ellas”, avanza Juanjo.

Una técnica poco implantada en Galicia

La siembra directa alcanzó en el año 2021 un total de 845.000 hectáreas en España, lo que supone un incremento del 65% en la última década, con una implantación destacada en cereal (casi 750.000 hectáreas), lo que equivale al 12% de la superficie total de cultivo, según los datos de un estudio reciente elaborado por el Ministerio de Agricultura. Por comunidades autónomas, destaca Castilla y León, mientras en Galicia es residual. Según los datos de la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de Cultivos (ESYRCE), en el año 2021 se labraron en Galicia un total de 707 hectáreas mediante siembra directa, lo que representa únicamente el 0,8% de las tierras de cultivo de la comunidad. Por provincias, Lugo concentra la mayor parte de las hectáreas labradas con esta técnica (428 ha). La empresa Agroamb, de Ponte de Outeiro (Castro de Rei), lleva haciendo siembra directa varios años en las tierras que gestiona. Por superficie, a Lugo le siguen A Coruña (152 ha), Ourense (109) y Pontevedra (17).
La siembra directa se emplea ya en el 12% de la superficie destinada a cultivo de cereal en España, pero solo en el 2,3% del maíz forrajero
En el caso del maíz forrajero, se labraron con siembra directa en 2021 en el conjunto de España tan solo 2.181 hectáreas, lo que representa el 2,3% de las 94.000 hectáreas que se siembran cada año (71.000 solo en Galicia). Nuevo ecorregimen en la PAC La nueva PAC incluye un ecorregimen denominado Agricultura de conservación: siembra directa, que se paga a 87,72€ por hectárea en las primeras 30 hectáreas. A partir de ese umbral se aplicaría degresividad, con lo que los importes a percibir se reducirían, aunque nunca podrán ser inferiores al 70% del importe planificado. A mayores, hay un complemento adicional de 25€/ha por hacer la siembra directa en las mismas parcelas que el año anterior. Este complemento no estaría afectado por la degresividad. La siembra directa se encuentra encuadrada dentro de las prácticas de la agricultura de carbono, al favorecer la conservación de los suelos, permitiendo reducir las emisiones de CO2, y aminorando los riesgos de erosión del suelo. Para cobrar el ecorregimen se exige rotación de cultivos en el 40% de la superficie total por la que se solicita el ecorregimen.