La enfermedad llegó a Europa por Francia en 1949 y su fitoplasma afecta a ocho de los principales países productores de uva de la UEEn el caso de la Flavescencia dorada, está causada por un fitoplasma (bacteria de pared celular) y es un parasito obligado que vive en insectos y plantas. El agente bacteriano ha sido nombrado recientemente Candidatus Phytoplasma vitis, y su vector es el cicadelido de la subfamilia Deltoceplhalinae, Scaphoideus titanus. La infección puede matar a las vides jóvenes y reducir en gran medida la productividad de las vides viejas. Su vector insecto, S. titanus, es nativo del este de los Estados Unidos y Canadá, y se cree que fue introducido en Europa durante la II Guerra Mundial o antes, con portainjertos estadounidenses traídos para combatir la filoxera. Actualmente es una enfermedad bien conocida en Europa, porque lleva aquí desde 1949 que apareció en la región de Armgnac. Cabe puntualizar que su fitoplasma ocurre únicamente en Europa, en ocho de los principales Estados miembros de la UE productores de uva (Austria, Croacia, Francia, Hungría, Italia, Portugal, Eslovenia y España), así como en Suiza y Serbia.
En Italia se ha demostrado que la variedad Moscato es tolerante a la FD e induce una alta mortalidad de S. titanusEl profesor destacó la termoterapia, como un tratamiento eficaz. Se tratan con agua caliente (45 minutos a 50ºC) a los patrones en estado de reposo y esquejes injertados. “Es eficaz para eliminar tanto el fitoplasma como los huevos del vector”. También recalcó la importancia de las plantas certificadas de variedades y patrones de vid, que pueden evitar la Flavescencia dorada. En cuanto a las variedades tolerantes a FD expone los resultados de un estudio que realizó en el CSIC un investigador de la Universidad de Turín (Italia). En el mismo se indica que ninguno de los genotipos explorados es inmune a la Flavescencia dorada de la vid, pero se encontraron algunos genotipos poco susceptibles disponibles para identificar rasgos genéticos involucrados en la tolerancia/resistencia a la FD. Se evaluaron las variedades Barbera, Barchetto y Moscato mediante la técnica Electrical Penetration Graph y los resultados afirmaron que la variedad Moscato, además de ser tolerante a FD, indujo una alta mortalidad de S. titanus.
Aumento en 114 hectáreas en la superficie vitícola respecto de 2022En parte este incremento de la producción se debe al aumento de la superficie vitícola. En concreto, en este último año se sumaron 114 hectáreas de viña, una superficie que se reparte entre 22.808 parcelas atendidas por 5.033 viticultores.
Se prevé que en algunos viñedos la vendimia no se haga hasta mediados de octubreLas previsiones iniciales apuntaban también a que puede ser una campaña con buena cosecha en cuanto a cantidad se refiere, aunque ha podido verse reducido el número de kilos final por la sequía de los últimos meses. Con todo, podría volver a situarse en las medias de los últimos años o superarse. El año pasado en esta DO se recogieron un total de 10,3 millones de kilos de uva.
Están teniendo unos rendimientos de 11.000 kilos por hectárea con una uva excelente, con un sabor, acidez, grado alcohólico y pH muy buenos“Están entrando racimos con un buen peso y una buena calidad. Todo apunta a que sea una vendimia espectacular, porque la piel de la uva está resistente, la uva tiene sabor y tiene acidez y pH muy buenos”, indican en las valoraciones iniciales desde el departamento técnico. También están teniendo unos buenos rendimientos, que se sitúan alrededor de los 11.000 kilos por hectárea, lo que hace prever que se superen también los 7,5 millones de kilos de uva entre blancos y tintos. Así, esperan recoger más de 5 millones de kilos de uva solo de las variedades blancas. Pese a las buenas previsiones generales, algunas pequeñas bodegas tuvieron problemas con el mildiu que afectó de manera considerable a la producción. “No fueron despistes, sino que fueron tratamientos con los que no se acertó en su aplicación y luego fue muy difícil de controlar”, apuntan. Aunque son casos puntuales, las pérdidas por el mildiu llegan a reducir a la mitad la cosecha.
Esperan que lleguen lluvias en estos días que contribuyan a la maduración de la uva y a paliar la sequía que acusan en estos mesesAdemás, la uva recogida tiene una muy buena calidad. “Esperemos que llueva algo para que dé un último empujón a las viñas que aún no maduraron”, apuntan desde el departamento técnico. Pese a que las cepas más viejas tienen una gran resistencia a la sequía, en esta DO no se produjeron lluvias desde las tormentas de junio y las plantas más jóvenes acusan la escasez de agua y en algunas parcelas las viñas tienen ya las hojas secas e incluso hay racimos con cierta deshidratación. En cuanto a rendimientos, las previsiones iniciales apuntan a que se puedan situar cerca de los 6 millones de kilos que se obtuvieron el año pasado, ya que los ataques de mildiu y la sequía afectaron en cierta medida.
Cuentan superar los 6,4 millones de kilos de uva recogidos el año pasado, ya que se está incrementando la superficie de viñedoAunque en algunas parcelas hay ya plantas con cierto grado de estrés hídrico, las abundantes precipitaciones de junio y la capacidad de resistencia de la planta, hacen que las cepas vayan resistiendo. El estado sanitario de la uva a comienzos de la campaña era excelente. Esperan superar las cifras del año pasado, en el que se habían recogido 6,4 millones de kilos de uva, ya que se ha incrementado la superficie de viñedo. “La demanda constante de nuestros vinos hace que también aumente el número de hectáreas plantadas”, apuntan. La demarcación cuenta a día de hoy con 720 hectáreas de viñedo.
Las restricciones al empleo de las materias activas clásicas de protección de los cultivos y la dificultad por parte de las empresas fitosanitarias para registrar nuevas obliga a procurar alternativas en los tratamientosDesde la bodega también señalan que optaron por estudiar los beneficios del uso del ozono para procurar una reducción de usos de plaguicidas. Además, los cambios que se produjeron en los tratamientos, luego de las restricciones al empleo de las materias activas clásicas de protección de los cultivos y la dificultad por parte de las empresas fitosanitarias para registrar nuevas materias activas obliga a procurar alternativas. El uso del ozono se estudió en este proyecto para combatir el mildiu, pero también podría ser una alternativa para otras plagas que afectan a los viñedos. “Intuitivamente nos parecía que incluso podía ser más efectivo contra el oídio que contra el mildiu, pero durante las campañas en que se llevaron a cabo los trabajos de investigación casi no hubo incidencia de oídio en los viñedos y no vimos grandes avances con el tratamiento”, concretan desde Martín Códax. Dejan la puerta abierta aún a poder estudiar la aplicación de ozono contra otras enfermedades, en especial contra el oídio. El uso del ozono también se emplea en el cultivo de la viña tras la vendimia, ya que el ozono tiene un efecto positivo en polifenoles, permite incrementar la concentración de compuestos aromáticos y contribuye a la reducción de levaduras. Además, ya se está empleando en el propio viñedo, a través del riego, por el efecto vigorizante que proporciona a la planta, así como en los viveros para mejorar la sanidad de los injertos.
“Una vez que aumenta la presión, el ozono deja de ser efectivo, tanto en los ataques en la hoja como en el racimo”: Emilia Díaz, técnica de la EvegaAunque se trata de datos recogidos durante una única campaña, se muestra que el tratamiento con ozono puede ser efectivo para controlar las plagas solo durante las primeras fases, ya que después el grado de infección se incrementa significativamente, mientras que con tratamientos químicos convencionales se logra un mayor control. Así, aunque en las primeras etapas no se encuentran diferencias y el ozono pueda ser una alternativa contra el mildiu, en cuanto se incrementa el riesgo y la presencia del patógeno es preciso optar por otras soluciones para mantener la plaga a raya. “Una vez que aumenta la presión, el ozono deja de ser efectivo, tanto en los ataques en la hoja como en el racimo”, explica Emilia Díaz, técnica de la Estación de Viticultura y Enología de Galicia (Evega), dependiente de la Agencia Gallega de Calidad Alimentaria (Agacal).
Aconsejan a los productores y bodegueros afectados solicitar asesoramiento con la OAC de Monforte y Castro CaldelasAsí, José Luis Cabarcos comprometió en su visita todos los mecanismos al alcance del Gobierno gallego para que técnicos especializados puedan asesorar convenientemente a los viticultores en la recuperación de los viñedos dañados. En ese sentido, los productores y bodegueros afectados puedan resolver dudas y solicitar asesoramiento en el teléfono 982 889 112, correspondiente a la OAC de Monforte. Cabarcos también señaló que estas recomendaciones fitosanitarias serán enviadas a la oficina agraria comarcal de Castro Caldelas, por cercanía también a las zonas afectadas, cuyo número de teléfono es el 988 788 827.
Conocer el proceso del injerto y sus peculiaridades puede ayudar a mejorar la longevidad de los viñedosEn su participación en la jornada técnica organizada por la Estación de Viticultura y Enología de Galicia (Evega) y la Agencia Gallega de Calidad Alimentaria (Agacal) sobre el injerto y el portainjerto, Gonzaga apuntó algunas claves para mejorar esta práctica. Además, el investigador recordó que el injerto ha sido la tabla de la salvación del viñedo frente a la filoxera.
"Se han producido enormes cambios en la producción de injertos tanto a nivel técnico como empresarial"Uno de los principales cambios, al igual que ocurrió con otros procedimientos de la agricultura en general o de la viticultura, es que se ha pasado de un procedimiento muy manual a contar con un mayor grado de mecanización. Además, durante mucho tiempo, lo más frecuente era injertar en el campo o el injerto en hendidura en taller. Sin embargo, en los últimos años se ha hecho una apuesta clara por el injerto en Omega. Otro de los cambios significativos que se han producido a la hora de realizar injertos ha sido la introducción de las cámaras de callogénesis, que sustituyen al proceso tradicional en el que el callo se realizaba en campo.
En los campos de plantas madre deben extremarse las medidas de desinfección para evitar la aparición de hongosLas cepas suelen cultivarse en 'cabeza de mimbrera', el sistema más habitual en España, aunque hay plantaciones realizadas en espaldera en otros países, de climatología más lluviosa. En esta fase Gonzaga Santesteba señala que uno de los puntos críticos podría ser el sistema de conducción. "La cabeza de mimbrera podría aumentar el riesgo de infección por hongos del suelo, sin embargo no disponemos aún de estudios que lo demuestren", concreta. "Son plantas con muchos cortes y heridas por año, por lo que la higiene de herramientas puede ser clave para evitar la entrada de hongos", apunta el experto. También debe prestarse atención al marcado y retirada de plantas enfermas, ya que puede ser un factor de riesgo por ser fuente de inóculo de patologías. En cuanto al remplazo de las plantas, tal y como indica Santesteban, "lo normal es que se haga entre los 15 y 25 años de las cepas", explica.
En la fase de conservación es muy importante evitar que la planta se deshidrate y conservarla en condiciones higiénicas y en fríoA continuación, es turno para realizar el estaquillado del portainjerto, que deberá tener unos 40 centímetros de largura y entre 7 y 15 milímetros de grosor. Es en este momento también cuando si procede al desyemado de los sarmientos de dónde se obtendrán las estacas, para evitar la aparición de rebrotes de la vid americana en el viñedo.
“La investigación en umbrales de tratamiento y métodos de control debe ir aparejada con dicha evolución”Mildiu, Oídio, Botritis o la Polilla del racimo fueron algunas de las patologías en las que se centró De Prado y sobre las que aportó información en cuanto a la lucha integral que se está realizando desde el centro especializado de León. La especialista incide en la importancia de la detección de las plagas y la necesidad de ajustar el tratamiento a la fase en la que se encuentre, para lograr una mayor efectividad.
Pasados esos dos primeros días, en los siguientes días de fase de crecimiento del hongo dentro del tejido de la vid, no es eficaz aplicar tratamientosDurante la fase de crecimiento del hongo dentro del tejido de la vid, que puede durar entre 8 y 20 días, no es eficaz aplicar tratamientos. Mientras, transcurrida esta fase, cuando los síntomas se manifiestan y aparecen manchas en las hojas, pelusilla en el envés de las hojas, los racimos, en flor, o en recién cuajados es momento de aplicar tratamientos antiesporulantes. En el caso del Mildiu, la prevención es fundamental. “Se debe tratar cuando hay condiciones de riesgo, pero en todo caso en el Bierzo debemos tratar preventivamente para proteger el racimo desde que aparecen los botones florales separados hasta el envero”, detalla la ingeniera agrónoma.
“El tratamiento más eficaz para la sanidad de la viña en cuanto a oídio es una buena aireación”“El tratamiento más eficaz para la sanidad de la viña en cuanto a oídio es una buena aireación. Todo lo que facilite la aireación de la vegetación y los racimos y conseguir que los tratamientos cubran bien los racimos es fundamental”, explica De Prado. Por eso, es recomendable evitar el exceso de vigor, realizar poda en verde, así como llevar a cabo deshojados y desnietados de las cepas. También aconsejan colocar los pámpanos en la espaldera y tener en cuenta la orientación de las plantaciones para favorecer la ventilación y aireado de las plantas. En cuanto a los tratamientos para atajar el oído, es necesario ajustar el tratamiento al estado fenológico del viñedo. Así, durante la brotación y la floración es recomendable utilizar tratamientos penetrantes o sistémicos. Mientras que, cuando el racimo está en grano guisante y durante el envero será más adecuado emplear azufre.
Para minimizar la aparición de resistencia a los tratamientos es importante utilizar fungicidas de diferentes familias químicasAdemás, la especialista incide en la importancia de utilizar fungicidas de diferentes familias químicas para minimizar la aparición de resistencias por parte de estos patógenos a los tratamientos. En estas soluciones también resulta vital tratar todas las calles del viñedo para que la aplicación cubra por completo todos los racimos.
En la lucha contra la Polilla del racimo pueden emplearse trampas de feromonas así como métodos biológicos e introducir un depredador naturalAl emplear confusión sexual los difusores deben colocarse antes del primer vuelo del insecto. Además, deben situarse en superficies amplias para que resulten eficaces y reforzando los bordes del viñedo. También se puede optar por emplear la feromona pulverizada. Otra de las opciones para atajar la polilla es la lucha biológica e introducir un insecticida natural como es el Bacillus thuringiensis.
Eliminar otras plagas como el Oídio o la Polilla es una manera de reducir la incidencia de Botritis en el viñedo ya que pueden contribuir a su apariciónUna de las formas para reducir la incidencia de Botritis es atajar otras plagas que puedan desencadenarla, como la Polilla o el Oídio. De Prados también recomienda alternar en el uso de familias químicas y respetar escrupulosamente el plazo de seguridad de la última aplicación. Deshojar el viñedo en espaldera es una medida para reducir el riesgo de Botritis al tiempo que no se reduce el grado alcohólico en cosecha.
"Tengo algún vino fuera de la DO porque está elaborado con variedades autóctonas que por desgracia aun no están amparadas por el Consejo Regulador, pese a ser de esta zona"- ¿Con qué variedades trabajas? -Ahora mismo tengo un poco de todo. De hecho, incluso tengo algún vino fuera de la DO porque está elaborado con variedades autóctonas que por desgracia aun no están amparadas por el Consejo Regulador, pese a ser de esta zona. En tinto tengo Carabuñeira, que es una variedad que muy poca gente conoce, Espadeiro (de la que hay muy poca) Raposeira y Ferrón. En blancos trabajo con Albilla del Avia o Lado, entre las variedades más desconocidas. Luego tengo Sousón, Caíño, Brancellao, Treixadura o Godello. -¿Por qué te decidiste a apostar por ellas? ¿Qué te resulta atractivo de estas variedades? -Comencé a interesarme por ellas un poco por recuperar el patrimonio que teníamos. Son variedades muy delicadas y que fueron cayendo en desuso por ser menos productivas. Un año tienes cosecha y otro puede que casi no tengas nada. Muchos dejaron de tener estas variedades porque no se lograban grandes cantidades de uva cuando, en pleno auge del Ribeiro, las grandes bodegas sólo buscaban tener kilos de uva. Se fomentó que mucha gente injertase estas variedades y fue una lástima porque muchas de ellas son resistentes incluso a enfermedades como la filoxera. Además, estaban adaptadas a las condiciones de aquí. Para mí lo realmente interesante de estas variedades es que son uvas de mucha calidad y eso es lo que te permite elaborar un vino diferenciado. -¿Cómo está resultando el proceso de recuperar estas variedades? -Tengo la suerte que al tener la empresa de servicios recorro mucho viñedo y siempre encuentras plantas interesantes. Incluso he llevado a la Evega plantas para que las identifiquen porque no éramos capaces de saber qué casta era. Tienes que andar buscando por plantas en viñas muy viejas, como algunas de las que tengo que tienen más de 80 años. De ahí vas aprovechando algún testigo para poder ir injertando. Lo malo es que antes no plantaban con criterio. Si se secaba una planta podían plantar una cepa tinta en medio de una parcela de blanco. Así, ahora resulta más difícil hacerte con ellas. Es una labor importante, pero que ya estoy haciendo para los que vienen detrás, realmente yo poco provecho le voy a sacar. -¿Qué superficie manejas? -Mías tengo sobre unas 3 hectáreas. Ha sido muy difícil llegar a tener esta superficie. Partíamos de 3.000 metros heredados de mi abuelo y mis tíos. Para juntar esta tierra tuvimos que comprar 178 parcelas, muchas de ellas de propietarios que estaban emigrados. Esto retrasó muchos años el proyecto. Luego tengo también sobre 8.000 metros cuadrados de viñedos alquilados. Son viñedos muy viejos, normalmente con accesos complicados y que no se pueden mecanizar.
"Hago coupage de variedades y de zonas porque cada casta se comporta de distinta manera dependiendo del sitio y da un vino muy diferente"-¿Dónde tienes estas viñas? -Hago coupage de variedades, pero también hago coupage de zonas. Así, tengo viñas en las tres subzonas más marcadas del Ribeiro, ya que si algo he aprendido en estos años con la empresa de servicios es que cada variedad se comporta de distinta manera en cada zona y da un vino muy diferente. Para mí es muy interesante tener un poco de todos los suelos, así tenemos zonas de cuarzo, de granito, de esquistos... -¿Has pensado incrementar la producción? -Soy más de hacer un producto diferenciado que de apostar por grandes cantidades. Además, lo que plante ahora voy a tener que esperar unos 8 o 10 años para poder elaborar con esas uvas y ya me pillaría con 68 años... Sí es verdad que sigo cogiendo fincas que me resultan interesantes, de gente que se va jubilando y que tienen variedades de las que no tengo.
"Al día siguiente de recoger las uvas entra un rebaño de ovejas en el viñedo que ya se encargan de desbrozar y del abonado"-¿Qué manejo haces del viñedo? -Nosotros hacemos vinos naturales, apostando por la mínima intervención, aunque no estamos en ecológico. Aquí es bastante sencillo hacer un vino ecológico en bodega, pero en la viña es prácticamente imposible, según me ha demostrado la experiencia. Digamos que hago una viticultura ecológica con sentido común, ya que no me puedo permitir el lujo de perder toda la cosecha, puesto que vivo de esto. Hacemos muy poca intervención, de hecho no aplicamos ningún herbicida. Tenemos un manto verde todo el año, con vegetación espontánea, ya que lo que nazca en cada sitio te indica las carencias de la tierra con el manejo que estás haciendo y te guía un poco sobre lo que tienes que hacer. Damos mucha desbrozadora de mochila, cuando hay mucha vegetación. Al día siguiente de coger las uvas entra un rebaño de ovejas en el viñedo que se encargan del desbroce y abonado y echan allí 6 meses. Como vamos a producciones bajas, de 1,2 kilos por planta aproximadamente, nos llega con este abonado sin más aporte. Tampoco empleamos insecticidas, ni acaricidas o productos sistémicos. -¿Estás ti sola en la bodega o cuentas con colaboración? -Cuento con Benigno Freijedo, mi pareja y la mitad imprescindible de este proyecto. Yo son más la que matina en las elaboraciones, pero él se encarga del cuidado en gran medida del cuidado de las venías y de echar una mano en la bodega.
"Todos mis vinos son de guarda. Me parece muy interesante cómo evolucionan los vinos del Ribeiro y creo que se pierde mucho vendiéndolos pronto"-En una tierra como el Ribeiro, ¿cómo resultó apostar por vinos de guarda? -Fue una de las cosas que la gente no entendía al principio, sobre todo los viticultores del Ribeiro. Me decían que el Ribeiro es un vino para beber en el año, que sino se estropea. Ahora eso ha ido cambiando y la tendencia es a ir esperando para venderlos y no perder en el camino todo lo que pueden aportar estos vinos. Me parece muy interesante cómo evolucionan y creo que se pierde mucho vendiéndolos muy pronto. -¿Cómo ves el Ribeiro en la actualidad? -O Ribeiro está en un muy buen momento, si lo sabemos aprovechar creo que va a ser muy interesante. Se están elaborando vinos de muy buena calidad y eso se nota en el mercado nacional e internacional, ya que cada vez viene más gente para ver si es verdad lo que contamos. Estamos despertando el interés fuera, se nota que la gente viene buscando el Ribeiro. Se hay relevo generacional, que es el problema más grave que tenemos, esto puede llegar la muy buen puerto, porque el Ribeiro acaba de renacer.
"Estuvimos más de un año sin vender una botella de vino. Al abrir de nuevo la hostelería, en 2 meses lo vendimos todo"-¿Hubo otros inconvenientes por el coronavirus? -El Covid-19 nos frenó en todo, excepto en la viña donde tuvimos que seguir trabajando. Estuvimos más de un año sin vender ni una botella de vino, al cerrarnos la hostelería. Además, me pilló con la página web a medio hacer. Al abrir de nuevo la hostelería, en 2 meses lo vendimos todo hasta quedar sin vino preparado para sacar al mercado. No fue solo que no se vendiera el vino, ahora tenemos dificultades para encontrar desde botellas, hasta etiquetas o corchos. Así tengo el vino del 2020 aún todo en depósito. -¿Cambiaron también las visitas a la bodega por la pandemia? -El Covid-19 hizo que mucha gente se acercara por primera vez a la bodega, ya que era una alternativa de ocio segura. Nosotros reducimos mucho el aforo de la visita, con un máximo de seis personas cuando antes llegamos a tener visitas de más de un centenar. El poco vino que sacamos en la pandemia fue así, con las visitas de la bodega. Nos ayudó a salir del paso y nos dio la oportunidad de enseñarle nuestro trabajo y historia a gente que no habría venido en otras circunstancias. Vino mucha gente joven. Hicimos cultura del vino, que es uno de los retos del sector.
La bodega, propiedad del murciano Pedro Martínez, está centrada en el Albariño y ofrece también una oferta enoturística con visitas y la preparación de eventosAdemás de la elaboración de los vinos, Granbazán lleva 20 años trabajando con la vista puesta en el enoturismo y la restauración vinculada al atractivo que suponen sus viñedos. En 2001 construyeron una nueva edificación pensada especialmente para acoger celebraciones y donde la cocina gallega ha sido siempre protagonista. Tras un año marcado por la pandemia y la reducción de eventos, este verano retoman poco a poco la actividad con veladas en las que maridan sus vinos con sesiones musicales, así como con bodas y banquetes.
Uno de sus Limousin, la añada 2017, logró en esta edición del Concurso Mundial de Bruselas una medalla de plataPor su parte, el Granbazán Don Álvaro de Bazán, es el único que conserva en su etiqueta el emblema del barco, empleado en sus primeros vinos. “Es nuestro vino más salino. Es un vino muy indicado para pescados y mariscos”, apunta Carina Vázquez, responsable del área de enoturismo y quien guía a las visitas en su recorrido por las instalaciones. El vino Don Álvaro de Bazán lo elaboran con las uvas procedentes de las cepas más viejas y de la parte más alta de la finca principal de la bodega, situada en Tremoedo, según detalla Adolfo Picáns, director financiero de la bodega.
En sus viñedos han eliminado casi por completo el uso de insecticidas“El principal enemigo de nuestros viñedos es el mildiu y para atajarlo trabajamos siempre con una mínima planificación y previsión en la medida de lo posible, al ser una patología muy ligada a las condiciones atmosféricas”, explica Carlos Fernández, técnico de campo de la bodega. Para atajar el mildiu aplican tratamientos sistémicos y en campañas como la de este año, con abundantes lluvias que han propiciado el desarrollo de la planta, también optan por soluciones penetrantes. En la bodega trabajan actualmente unas 20 personas, un número que se incrementa considerablemente durante la vendimia. “Estamos tratando de conseguir producciones menos agresivas con el medio ambiente, así hemos eliminado casi por completo el uso de insecticidas”, apunta Fernández. En su lugar han optado por tratamientos a base de feromonas. “Son tratamientos que, además de ser más respetuosos con el medio ambiente nos proporcionan otros beneficios, ya que son alternativas que no precisan de unos plazos concretos de aplicación como los herbicidas o larvicidas para conseguir resultados óptimos”, detalla el técnico de campo.
Están incorporando medidas para mejorar la biodiversidad. Estudian colocar posaderos para aves rapaces que espanten a los estorninosEn sus viñedos cuentan con una cubierta vegetal que les ayuda tanto a la gestión de las cepas y es fuente de biodiversidad. “Por las características del terreno sería muy desaconsejable labrar la tierra, ya que las lluvias terminarían arrastrándola, por eso nos decantamos por las cubiertas vegetales”, explica el técnico de campo. Además, por las condiciones climáticas de la zona, esta cubierta apenas necesita mantenimiento durante 6 meses. “En la primavera, los viñedos se llenan de pájaros como jilgueros o verderones que vienen a comer las semillas de las hierbas”, detalla. Ahora quieren ir más allá y utilizar sistemas que mejoren la presencia de aves que también contribuyan a la gestión del propio viñedo de una forma sostenible. Así, están valorando la colocación de posaderos para aves rapaces que puedan espantar a las bandas de estorninos, que suponen una amenaza para la uva madura. “Hace 10 años, en una de las fincas de nuestros proveedores, una banda de estorninos redujo la cosecha de uva de 2.000 kilos a poco más de 500 en un solo fin de semana”, recuerda el técnico.
Hace falta adoptar medidas preventivas con la aplicación de bioprotectores ecológicos sin plazo de seguridad o de bajo plazo"Estamos estudiando cual va a ser la mejor forma de actuar y, en algunos casos, tratar de salvar la cosecha del año que viene", añade Inma Pazos. Esta última tormenta los cogió en el peor momento. A escasos 15 días de comenzar la vendimia de albariño y godello, los viticultores de esta bodega ya habían comenzado a deshojar las viñas de las uvas blancas para acelerar la maduración: "El granizo ha caído justo cuando dejamos los racimos más desprotegidos", explica la enóloga del Coto de Gomariz. En este sentido, la Evega advierte que hace falta adoptar medidas preventivas con la aplicación de bioprotectores ecológicos sin plazo de seguridad o de bajo plazo. Especialmente para prevenir y frenar, dentro de lo posible, la evolución de los daños en los racimos y sin que afecte a la higiene de la cosecha. Se trata de minimizar el incidente de dolencias en los racimos, la causa de este episodio adverso.
Los seguros agrarios están ahí y son extremadamente útiles. Es muy recomendable contratarlos y así se lo hacemos saber a los viticultores de la DOEn el Consello Regulador coinciden con la consellería que lidera José González Vázquez: "Los seguros agrarios están ahí y son extremadamente útiles. Es muy recomendable contratarlos y así se lo hacemos saber a los viticultores. Sin embargo, no debemos olvidar que, en cualquier caso, es una decisión personal de los profesionales y debemos respetarla", argumenta Juan Manuel Casares. La Xunta de Galicia recuerda a los viticultores que el plazo de contratación de las líneas de seguros está abierto hasta el 15 de noviembre -según la línea de la que se trate- y que la ayuda correspondiente se recibe en el momento de la contratación. La Xunta concede estas ayudas de forma directa a los agricultores y podrán ser beneficiarios los asegurados que sean titulares de explotaciones agrarias gallegas, siempre que suscriban pólizas de seguros de líneas agrícolas del Plan 2021 formalizadas este año.
Medio Rural quiere buscar fórmulas para asegurar todos los viñedos de la denominación de forma conjuntaAnte la magnitud de los daños, el conselleiro de Medio Rural, José González, avanzó que hay previstas varias reuniones con diferentes entidades aseguradoras y con los consejos reguladores para buscar mecanismos que permitan la posibilidad de tener asegurada la totalidad de la denominación de origen, “trabajando de forma colectiva y conjunta”. -- Información actualizada el viernes 3 de septiembre a las 8 horas.
Seipasa, empresa española especializada en el desarrollo y formulación de bioinsecticidas, biofungicidas y bioestimulantes para la agricultura, ha obtenido la ampliación del registro fitosanitario del bioinsecticida Pirecris en España por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
La nueva certificación se aplica al control de cicadélidos (mosquito verde, Scaphoideus titanus y otras especies de insectos) en viña y uva de mesa. Se añade al registro fitosanitario que el producto ya posee en España para el control de pulgón y mosca blanca en una amplia variedad de cultivos.
Para Javier Nácher, director técnico de Seipasa, esta nueva ampliación de etiqueta del bioinsecticida Pirecris consolida la apuesta de Seipasa con la agricultura del futuro: “Estamos muy contentos de haber recibido, tras muchos años de esfuerzo, la autorización definitiva que nos permite ofrecer a los productores españoles de vid una solución nueva y diferente, desarrollada durante años en los viñedos y parrales más exigentes de Europa. Desde España e Italia, pasando por Francia y Portugal, hemos sido capaces de demostrar su eficacia, rapidez y espectro de acción”.
El director técnico de Seipasa ha recordado que Pirecris ya había obtenido previamente la ampliación de etiqueta para el cultivo de vid en otros países europeos en los que ha demostrado ser una herramienta útil y contundente para el control de cicadélidos, tanto en agricultura ecológica como convencional, que facilita el establecimiento de programas de Gestión Integrada de Plagas. “Gracias a su rápida acción y efecto de choque Pirecris logra un control total sobre las poblaciones plaga evitando el daño sobre las vides o parras”, explica Nácher.
Pirecris es un bioinsecticida diseñado a partir de una exclusiva formulación gracias al perfecto equilibrio de las moléculas PI y PII que componen la sustancia activa, y que aportan la máxima eficacia insecticida tanto en campo abierto como en invernadero.
Las micromoléculas que componen su formulación condensan y generan una red estable y equilibrada en toda la disolución. Proporcionan un efecto insecticida que actúa bloqueando el sistema respiratorio sobre huevos y larvas, y procuran una cobertura perfecta sobre la hoja y el insecto.
Además de en España, Pirecris está registrado en Portugal, Francia, Italia, Grecia, Chipre, México y Marruecos, entre otros países.
Seipasa es una empresa española pionera en la biotecnología aplicada a la agricultura. Diseña, registra y comercializa soluciones de origen botánico y microbiológico para la protección, la bioestimulación y la nutrición de los cultivos a nivel global.
La compañía nació en 1998 a partir de la visión empresarial de anticiparse al cambio y a la transformación que la industria agrícola vive hoy en día. 23 años después, Seipasa ha impulsado el modelo Natural Technology® a partir del cual desarrolla soluciones de alto valor tecnológico, alineadas con la sostenibilidad y que se aplican en las agriculturas más exigentes del planeta. Sus productos se exportan a 25 países en todo el mundo.