La venta de las queserías Lácteos Pérez Olveira (Santa Comba) y Alimentos Ruta Xacobea (O Pino) está pendiente de la decisión del juzgado que gestiona el proceso concursal de ambas sociedades. Hay dos ofertas sobre la mesa por ambas unidades productivas, una del Grupo TGT, la principal industria de quesos a nivel estatal, y otra de Dairylac, la sociedad participada y liderada por las cooperativas Icos y Codeira. Hablamos con José Luis López, el abogado que representa a Lácteos Pérez y a Alimentos Ruta Xacobea, para explicar el posicionamiento de las sociedades concursadas en el proceso.
La solicitud de venta de las queserías de Santa Comba y de O Pino partió esta primavera de las propias Lácteos Pérez Olveira y Alimentos Ruta Xacobea, que trasladaron su petición al juzgado que tramita el proceso concursal. "La solicitud la hicimos nosotros aportando la única oferta de compra que teníamos entonces, que era la de TGT" -explica José Luis López-. "Después apareció otra oferta más, la de Dairylac, que se presentó directamente en el juzgado".
Situación del proceso
El juez tiene que decidir ahora si autoriza la venta de las unidades productivas de las concursadas. En caso de aprobar esa venta, se espera también que se defina sobre cuál es la oferta más beneficiosa en el marco del concurso de acreedores.
"Hay que precisar que estamos en un momento del proceso en el que las propias sociedades concursadas, junto con la intervención del administrador concursal, son las que tienen la capacidad de venta. Por tanto, el papel del juez no es adjudicar las unidades productivas a nadie, es autorizar o no la venta, y en caso de que se autorice, definir a quién se le puede vender", aclara José Luis López.
"En la actual fase del concurso, el papel del juez es autorizar o no la venta, no adjudicarle las queserías a nadie"
El abogado de las sociedades concursadas indica que el juez autoriza, pero que la voluntad de vender depende del administrador social de ambas unidades productivas, Jesús Pérez, con la intervención del administrador concursal. "No podría venderle a una oferta que no fuera la elegida por el juzgado, pero en caso de que las concursadas mejoraran su situación económica y llegaran a presentar una propuesta de convenio con los acreedores, podría no venderle las unidades productivas a nadie", señala. "En la actual fase del proceso, el juez autoriza a vender, pero no obliga a vender".
Valoraciones de las ofertas
A la hora de valorar las dos ofertas económicas que se presentaron por las queserías, el representante de Lácteos Pérez Olveira se decanta por la del Grupo TGT "por razones económicas", ya que la considera más beneficiosa para el concurso, de cara a garantizar el futuro de ambas plantas.
"TGT llegó a un acuerdo con el acreedor principal para el pago y cancelación de la garantía hipotecaria, que supera los 4 millones de euros"
"Si se me pide que compare la oferta de TGT y la de Dairylac, o casi mejor habría que hablar de las sucesivas ofertas que Dairylac fue modificando, hay una diferencia fundamental. TGT ha llegado a un acuerdo con el acreedor principal, que tiene una garantía hipotecaría que supera en la actualidad los 4 millones de euros" -indica López-. "Ese acuerdo incluye el pago y cancelación de la hipoteca, en tanto que Dairylac no oferta el pago, oferta la subrogación de la hipoteca y su pago conforme al contrato de garantía hipotecaria, que además habría que dilucidar se está o no vencido, como argumenta el acreedor".
Sobre la posibilidad de que Dairylac adquiera las unidades productivas con la subrogación de la hipoteca, el representante de Pérez Olveira reconoce que sería una alternativa posible de acuerdo con la legislación, si bien precisa que, en ese caso, la Ley Concursal establece que el juez debe velar por la solvencia del comprador.
"No queremos juzgar el proyecto de Dairylac, que podría ser exitoso con independencia de que adquiera o no estas unidades productivas"
Desde la perspectiva de Lácteos Pérez, Dairylac no ofrece esas garantías de solvencia, pues apunta que la compañía cerró el ejercicio 2015 con unas pérdidas de 659.000 euros después de impuestos, una cifra a la que el abogado de Pérez Olveira suma las pérdidas de anteriores ejercicios, correspondientes a Lasurgal, una sociedad previa en la que no participaban las cooperativas ganaderas.
"Por nuestra parte no queremos juzgar el proyecto de Dairylac de cara al futuro, que podría ser exitoso con independencia de que adquiera o no estas unidades productivas. Sólo valoramos si su oferta es buena o no para el concurso, no si su proyecto es bueno o no para Galicia", precisa el abogado que representa a Pérez Olveira.
Contexto
En el sector lácteo, es conocido que Lácteos Pérez participó en las negociaciones que estuvieron en el germen del proyecto de Dairylac, si bien finalmente no llegó a sumarse al proyecto. La distancia ahora entre ambas partes es patente.
"Nuestra preferencia por la oferta de TGT deriva de que pensamos que es la mejor. También valoramos el hecho de que dialogara con nosotros"
El abogado de Pérez Olveira admite que Dairylac se interesó en su día por presentarle una oferta de compra por las unidades productivas de Santa Comba y de O Pino, aunque esa propuesta no llegó a materializarse. "Dairylac nunca nos presentó una oferta ni dialogó con nosotros sobre la propuesta que entregó en el juzgado. Cuando decidimos solicitar la autorización de venta, la única oferta que teníamos era la de TGT. Nuestra preferencia por esta oferta deriva, en primer lugar, de que pensamos que es la mejor oferta para el proceso y además valoramos que se dialogar con nosotros a la hora de formalizarla", explica José Luis López.
También menciona el abogado de Lácteos Pérez una diferencia entre ambas ofertas que califica de "anécdota curiosa": "Tanto TGT como Dairylac se comprometen a mantener los alrededor de medio centenar de puestos de trabajo que hay en las dos unidades productivas, si bien la de Dairylac precisa que excluye de ese compromiso a dos trabajadores, Jesús Pérez y su hijo".
Lácteos Pérez y Alimentos Ruta Xacobea producen en estos momentos a un 30-40% de su capacidad
Futuro de las plantas
Lácteos Pérez y las dos empresas interesadas en la compra de sus unidades productivas esperan ahora por la resolución judicial que decida sobre el caso. Desde Pérez Olveira confían en que la venta pueda repercutir en una optimización de la producción de las dos plantas, con los conseguientes beneficios que esa optimización llevaría consigo para trabajadores y ganaderos proveedores.
Las queserías de Santa Comba y de O Pino están procesando en la actualidad unos 70.000-80.000 litros diarios, lo que representa un 30-40% de su capacidad, que llega a los 200.000 litros día. Tanto si adquiere ambas unidades TGT como si lo hace Dairylac, la perspectiva es de un aumento de la actividad en ambas plantas. Estos días trascendió en la prensa que Dairylac contaría con el apoyo de García Baquero, una firma referente en el sector, en el caso de adquirir finalmente las queserías de Lácteos Pérez.