Los productores de vacuno de carne entran en la segunda semana de movilizaciones sin obtener respuesta positiva a sus reivindicaciones, relativas a lograr un precio de venta de los terneros que cubra sus costes de producción y a la modificación de los criterios fijados para el reparto de las ayudas de la nueva PAC.
La subdelegada del Gobierno en Lugo recibía ayer a una delegación de la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema, convocante de la marcha del pasado martes en Lugo, comprometiéndose a dar traslado de sus demandas al Ministerio de Agricultura, mientras la Xunta no ha movido ficha aún, a pesar de asistir la semana pasada parte de sus representantes a la protesta delante de su propia sede en Lugo.
Mientras esperan medidas concretas por parte de la dos Administraciones, los ganaderos mantienen su presencia diaria delante de las dos instituciones y advierten que estudiarán “medidas más contundentes si las soluciones siguen sin llegar”.
Igualdad con las explotaciones de leche
Los productores de vacuno de carne se sienten “discriminados” frente a los de leche en la nueva PAC y piden que la ayuda asociada por vaca nodriza, establecida en 85€, se incremente hasta igualar a la fijada para las vacas lecheras, que es de 158€ para el nuevo período que entra en vigor a partir de este año.
Piden que el precio de venta de los terneros se establezca por encima de 7€/kg frente a los 5,60€/kg actuales
Del mismo modo, reclaman “soluciones” ante la actual situación de “venta a pérdidas” y “prácticas abusivas” por parte de los mataderos que compran y sacrifican sus terneros. “Los ganaderos nos sentimos indefensos ante un sistema dominado por el monopolio de la industria”, se quejan.
Ampliar a 90 hectáreas el pago íntegro de las ayudas agroambientales
El pasado 29 de noviembre la Asociación Gandeiros Galegos da Suprema registró un escrito dirigido a la Consellería de Medio Rural advirtiendo de las “consecuencias negativas” de la nueva PAC para el sector del vacuno de carne y pidiendo una serie de cambios que no fueron tenidos en cuenta en la orden aprobada el pasado 20 de marzo y que regula el reparto de ayudas de la PAC para el período 2023-2027.
La nueva PAC supone condenar al cierre a un número considerable de explotaciones
Entre las novedades establecidas, la Xunta introduce un criterio de degresividad en los pagos que hace que a partir de las 50 hectáreas de superficie se apliquen descuentos en el importe de las ayudas. Esta decisión, “penaliza la extensificación y no prima a quien quiere producir”, explica Santiago Rego, presidente de la asociación de productores de Suprema, que pide que se amplíe hasta las 90 hectáreas el pago de la totalidad de las primas por prácticas agroambientales.
Línea de ayudas anual para servicios de asesoramiento
Los productores de vacuno de carne ven como la nueva PAC “incrementa exponencialmente la burocracia”, con una mayor complejidad en la tramitación de las ayudas y unos requisitos de control cada vez mayores, por lo que reclaman “una línea de ayudas anual convenientemente dotada presupuestariamente de cara a subvencionar un servicio de asesoramiento a los productores de vacuno de carne”.
El lobo está presente en el 94% del territorio gallego y no hay barreras físicas entre municipios que impidan que ataque en cualquier lugar
En relación a los problemas de convivencia con el lobo, exigen ampliar las ayudas a todos los ayuntamientos, dado que “un estudio publicado por la propia Xunta dice que el lobo está presente en el 94% del territorio gallego y no hay barreras físicas entre municipios que impidan al lobo moverse y atacar en cualquier punto de la geografía”.