Estos días el agricultor Luis Carlos Fernández está instalando en A Limia un sistema de regadío por goteo para las casi 90 hectáreas de maíz que cultivará este año, unas 45 para forraje y otras 40 para grano.
"Con el regadío logro un promedio de 75 toneladas de materia húmeda por hectárea, con un 34% de almidón y un 38% de materia seca", comenta. Unos rendimientos impensables en cultivo en secano y que le compensan con creces el gasto que tiene que realizar tanto en el equipo como en la tarifa del agua.
Carlos explica que empezó a interesarse en aplicar el regadío por goteo al maíz hace cuatro años: "Junto con otro agricultor de Cortegada fui a Badajoz a aprender como cultivan allí el maíz en regadío y comencé a aplicarlo en mis parcelas en A Limia", explica.
Los costes por hectárea rondan en su caso los 500 euros: Las mangueras por goteo son de un solo uso y le salen en unos 200 euros por hectárea. Las extienden con un aparato diseñado por el propio Carlos cuando el maíz llega a los 40 centímetros y una vez cosechado el maíz las vuelven a recoger con una cultivador que pasan con el tractor de través. Sin embargo, a medio plazo este agricultor prevé probar con mangueras de mayor duración.
En cuanto al coste del agua, le sale en unos 300 euros la hectárea. El riego está totalmente automatizado y programado y en el futuro prevé controlarlo desde el teléfono móvil. La mayor inversión son los filtros de limpieza del agua-emplea 1 por cada 10 hectáreas de terreno- que le salen en unos 3.000 euros, y en los reguladores, sobre 180 euros cada uno, y las mangueras de arrastre que llevan el agua hasta las gomas de goteo. En todo caso, la vida útil de este equipo, que le adquiere a la empresa gallega Azul y Verde, es de varios años.
Carlos sembró el maíz entre el 4 y el 15 de mayo y si todo va según lo previsto cosechará el destinado a forraje entre el 10 y el 15 de septiembre y el de grano entre el 10 y 15 de octubre.