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Curso en Becerreá de reciclaje de la cera de abeja

La Consellería de Medio Rural, a través de la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria, tiene previsto celebrar los días 3 y 4 de noviembre un curso sobre el reciclaje de la cera de abeja. Esta formación tendrá lugar en el Centro de formación y experimentación agraria de Becerreá y en horario de mañana, de 9,00 a 14,00 horas. El objetivo de esta jornada es fomentar la competitividad y la eficiencia de los recursos apícolas, contribuyendo al mismo tiempo a la sostenibilidad de la economía rural. En este sentido, se fomenta la transferencia de conocimientos y de innovación en este sector, concretamente en los distintos usos de la cera. Así, el curso versará sobre los tipos y calidades de cera, la preparación y el fundido. También se abordarán los distintos tipos de laminación y estampación, así como los residuos que pueda tener este producto natural. Esta iniciativa está dirigida en general a cualquier persona vinculada profesionalmente con los sectores productivos relacionados con la agricultura, ganadería, industria agroalimentaria y cadena forestal-madera, así como a jóvenes del medio rural gallego y a personas con expectativas de incorporación al sector. La inscripción puede hacerse en el siguiente enlace: https://ovmediorural.xunta.gal/gl/consultas-publicas/accions-formativas El coordinador se pondrá en contacto con las personas interesadas a través del correo electrónico comunicándoles si están o no admitidas. Para consultar cualquier duda, puede llamarse al teléfono 982 828 370, o enviarse un correo a cfea.becerrea@xunta.es

Curso de reciclaje de cera de abeja en Boqueixón

El Centro de Formación y Experimentación Agroforestal (CFEA) de Sergude, en el ayuntamiento coruñés de Boqueixón, acoge este sábado, día 20, un curso sobre el reciclaje de la cera de abeja. La jornada será en horario partido, de 10.00 a 1400 horas y de 15.30 a 19.30 horas. El objetivo de esta jornada es fomentar la competitividad y la eficiencia de los recursos apícolas. El curso versará sobre los tipos y calidades de cera, la preparación y el fundido. También se abordarán los distintos tipos de laminación y estampación, así como los residuos que pueda tener este producto natural. La acción está dirigida en general a cualquier persona vinculada profesionalmente con los sectores productivos relacionados con la agricultura, ganadería, industria agroalimentaria y cadena forestal-madera, así como los jóvenes del medio rural gallego y personas con expectativas de incorporación al sector. Las personas interesadas en el curso pueden obtener información adicional en el teléfono 881 867 331. Para formalizar la inscripción en la jornada deberá descargarse el formulario y remitirlo cubierto a la dirección electrónica cursos.agacal.sergude@xunta.gal. El curso se incluye en la oferta formativa que la Consellería de en medio Rural está llevando a cabo a través de la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria (Agacal).

El abejero, un aliado eficaz contra la vespa velutina

Al margen de los apicultores, hay quien también ha puesto en su punto de mira a la avispa asiática y se ha vuelto un auténtico especialista en su captura: el abejero europeo (Pernis apivorus). Se trata de un ave rapaz migratoria que es un depredador natural de la vespa velutina y, por tanto, se ha convertido en un aliado para frenar su expansión. Solo en el último año, los investigadores estiman que la población de estas aves en O Morrazo, ha consumido unos 922 nidos, una cantidad muy pareja a la de nidos se han retirado en estas zonas, según los registros de la Xunta.
Solo en el último año, la población de estas aves en O Morrazo ha consumido unos 922 nidos
Esta ave ha hecho de la vespa velutina su principal sustento y esto posiblemente ha provocado que también aumente la presencia de la rapaz en la comunidad gallega. Así lo ha constatado un estudio realizado por un equipo de investigación de la Universidad de Alcalá de Henares, coordinado por el profesor titular Salvador Rebollo, y en el que participa el ornitólogo José Manuel Fernández, que en días pasados presentaba algunos de los datos de su investigación en unas jornadas apícolas desarrolladas en el CFEA Lourizán (Pontevedra). Aunque los ornitólogos se muestran muy cautos frente a las primeras cifras de la investigación, puesto que se trata de datos provisionales que “no pueden tener consistencia si no se amplían los años de estudio”, constatan el potencial del abejero en el control de la vespa velutina. También apuntan que, pese a que el abejero es un ave presente históricamente tanto en Galicia como en el resto de la cornisa cantábrica, sigue siendo un gran desconocido y apenas se han llevado a cabo estudios sobre la especie. “El abejero europeo es una rapaz territorial y muy discreta que puede pasar fácilmente desapercibida si no se realiza un estudio a fondo para localizarlo”, concreta Fernández.

La velutina, el eje de su dieta

El abejero se ha ganado el calificativo de especialista en la caza de velutina al convertir estos insectos en su principal alimento. Esta ave basa casi el 70% de su dieta en las avispas asiáticas según han comprobado en esta primera fase de la investigación. “Esta especialización en la avispa asiática es muy importante porque es la respuesta ideal de los depredadores que pueden usarse en el control biológico de plagas Esta especialización reduce los “efectos colaterales” debido al consumo de otras especies beneficiosas. En este caso es muy importante que el abejero europeo no consuma abeja doméstica", especifica el ornitólogo. Una de las imágenes tomadas por los ornitólogos en las que se observan panales con celdas grandes (vespa velutina o vespa crabro) y pequeñas (avespas) en un nido de abejeros. Foto: J.M. Fernández. Para conocer la dieta del abejero, los expertos han vigilado, mediante cámaras fotográficas instaladas en los nidos existentes en las penínsulas de O Morrazo y O Salnés. También recolectaron restos de presa en los nidos y al pie de los mismos. “La grabación de los nidos es una técnica que ya ha habíamos utilizado con otras especies y que no interfiere ni molesta a las aves”, apunta Fernández. El registro fotográfico de 66.000 fotografías les ha permitido descubrir la presencia de restos de panales de celdas grandes, es decir pertenecientes a vespa velutina o vespa crabro (autóctona de Galicia y muy similar a la asiática) en los nidos del abejero. Sin embargo, los análisis realizados en el laboratorio determinaron que en su gran mayoría se trata de panales de vespa velutina. El resto de la dieta del abejero, según los aportes a los nidos, se compone de panales de celda pequeña (otras avispas sociales) así como de pequeños roedores, aves, reptiles y vertebrados sin identificar.
El abejero basa casi el 70% de su dieta en las avispas asiáticas. La disponibilidad de alimento llevó a que su población en el Morrazo se triplicase
El hecho de que el abejero comenzara a alimentarse principalmente de velutina ha propiciado posiblemente un incremento de las aves localizadas en estas dos zonas. “El abejero se ha especializado en la especie invasora y la abundancia del ave se produce pareja a la de la velutina”, especifica Fernández. Tanto es así, que el estudio constata que la población de abejeros casi se ha triplicado en estas zonas. “Hemos pasado de 1,3 parejas reproductoras en la zona del morrazo a 3,3. Además, ha coincidido con los años en los que la vespa velutina se ha propagado más”, apunta el ornitólogo.

Un depredador en el bosque y bajo tierra

El sistema principal de localización de nidos de la avispa asiática por parte del abejero es la localización de flujos de movimientos de velutina que se producen en los recorridos que hacen desde su nido a la fuente de alimento. Esto es posible gracias a la potencial vista que tiene. Pero, además, también es un especialista en localizar los nidos que están soterrados. "Una vez detectado el lugar aproximado del nido de velutina, y si este esta enterrado en el suelo, el abejero aproximara el oído al suelo para poder escuchar mejor el sonido que produce la actividad de las larvas y adultos en el nido enterrado y así precisar mejor el lugar donde escarbar”, concreta el ornitólogo. De hecho, los expertos tienen sospechas de que hay un contingente importante de nidos de avispa asiática en las masas forestales dado que ya se encontraron nidos de la avispa asiática desenterrados por el abejero europeo en el interior del bosque. Restos de un panal de vespa asiática desenterrado por el abejero europeo. Foto: J. M. Fernández. Son aves que están adaptadas para la extracción de nidos enterrados al disponer de una especie de rejilla de ventilación en las narinas, que les permite realizar estas excavaciones sin dificultades. “Es muy probable que la mayoría de los restos de panales localizados pertenezcan a nidos desenterrados puesto que en los análisis se encontraban restos de tierra”, explica.
Los ornitólogos sospechan de que hay un contingente importante de nidos de avispa asiática en las masas forestales
También sus patas y garras están reforzadas para mitigar las picaduras y su pico en forma de pinza les permite extraer las larvas de las celdas sin destrozar los panales, a diferencia de otros animales, “este detalle nos ha permitido descartar otras especies cuando encontramos los panales desenterrados”, precisa el ornitólogo. En el futuro proyecto que aguardan realizar para dar continuidad a esta primera investigación pretenden colocar radiotransmisores por satélite a los abejeros adultos. Este sistema les permitirá, entre otras cosas, crear un mapa en el que ubicar dónde esta capturando los nidos de vespa velutina.

La amenaza de los nidos de velutina envenenados

Los descubrimientos de esta investigación, iniciada en 2018, alertan de nuevo de la amenaza que supone el uso de insecticidas para la eliminación de los nidos, ya que pueden terminar afectando a esta ave. Al transportar las celdas con insecticida de los panales de la velutina hasta su propio nido, el riesgo se incrementa. Por eso, los expertos recomiendan evitar métodos como el conocido ‘troyano’ que consiste en rociar a las velutinas con insecticidas, sin matarlas, para que vuelvan a sus nidos y contagien al resto de la colmena, ya que el nido quedaría impregnado del veneno. Tampoco convencen los métodos que consisten en inyectar insecticidas en los nidos de velutina, si estos no terminan destruyéndose totalmente después.

¿Cuántos abejeros se precisarían para controlar la vespa velutina?

Una de las cuestiones que surgen en el marco del estudio es determinar el número de abejeros y el nivel de consumo de velutina que serían precisos para controlar la expansión de la avispa asiática en la zona de estudio del Morrazo. Para ello, el equipo de investigación contará con la colaboración del matemático especialista en este tipo de modelos de simulación, Marcos Marva, profesor de la Universidad de Alcalá. Por este motivo, ya están trabajando en recopilar datos necesarios para la estimación tales como la capacidad de carga, la tasa de crecimiento del abejero y las tasas de depredación del abejero sobre la velutina.
Los expertos inciden en la importancia de fijar medidas de conservación de las poblaciones de abejeros y de sus hábitats
Además, para poder medir de una manera directa los posibles beneficios que pudieran tener sectores como la uva, la fruta y la apicultora por la presencia del abejero procederán a realizar diferentes estudios de campo consistentes en la colocación de colmenas, cajas con frutas o uvas, con sistemas de control que contabilicen el número de velutinas. Estes focos de alimento para las vespas velutina los colocarán a diferentes distancias del nido del abejero europeo, partiendo de la hipótesis de que cuánto más cerca esté una explotación (colmenas, viñedos o frutales) del nido de abejero, más beneficiada se verá. Para esta tarea solicitan la colaboración de los apicultores con el fin de localizar los colmenares existentes en la zona de O Morrazo y O Salnés, el área de estudio, para idear la mejor ubicación para que los colmenares existentes no interfieran en los datos que se obtenga.
Solicitan la colaboración de los apicultores de la zona para estudiar de forma controlada la población de abejeros
Los expertos inciden  también en la importancia de establecer medidas de conservación de las poblaciones naturales de abejeros y de sus hábitats así como la inclusión del ave en un Plan de lucha integral contra la velutina. Sin embargo, descartan la introducción del abejero en zonas en los que no tenga presencia, por el impacto que esta práctica pueda ocasionar. Además, puntualizan que en este caso no parece ser necesario su introducción puesto que el ave ya esta aumentando su población de una manera natural.

Jornadas sobre la vespa velutina y alternativas a la miel en el CFEA Lourizán

El Centro de Formación y Experimentación Agroforestal de Lourizán (Pontevedra) celebra la próxima semana unas jornadas apícolas centradas en el control de la vespa velutina y distintas alternativas a la miel. Las sesiones se llevarán a cabo el lunes 23 y el jueves 26 en las instalaciones del centro educativo. Están dirigidas a técnicos y propietarios agroforestales así como a titulares de explotaciones y empresas vinculadas con el aprovechamiento apícola. Detallamos el programa de las jornadas: LUNES 23 - 16:00-18:00 h. Métodos de lucha y control de la Vespa velutina. Sandra Victoria. Universidad de Vigo. - 18:00-20:00 h. Abejero europeo. Respuesta natural contra la invasión de la Vespa velutina. Primeros resultados y futuro de la investigación. Jose Manuel Fernández. Naturalista ornitólogo del Departamento de Ciencias de la Vida de la Universidad de Alcalá de Henares. JUEVES 26 - 15:30-20:00 h. Alternativas a la miel: cera, paquetes de abejas, reinas y realeras, xalea, propóleos, polen. Producciones industriales: aguamiel, alimentación. Apiterapia. Román Cid. Presidente de la asociación apícola Abejas Madres.  

¿Cómo conseguir una cera de calidad en la colmena?

Conseguir una cera de calidad y que no rechacen las abejas en la colmena está siendo cada vez más complicado para los apicultores. Muchas de las láminas de cera o panales que se venden a día de hoy son luego descartados por las abejas por distintos motivos. La cera influye directamente en la salud de las abejas, de ahí la importancia de prestar atención a proporcionarle cera de calidad a la colmena. Aunque las propias abejas se encarguen de producir la cera, este proceso les supone un elevado coste energético y repercute directamente en la producción de miel.
Las abejas consumen entre 4 y 12 kilos de miel por kilo de cera producido
Así, tal y como apunta el veterinario de la Asociación Gallega de Apicultura (AGA), Gonzalo Calvo, las abejas consumen entre 4 y 12 kilos de miel por kilo de cera producido. Además, no siempre se dan las condiciones idóneas dentro de la colmena para que las abejas elaboren la cera. Por otra parte, la falta de renovación de la cera puede suponer un riesgo para la colmena al funcionar como un reservorio para enfermedades y contaminantes que afectan directamente a las abejas. Así, es preciso renovar periódicamente la cera de la colmena.

El alto coste de la producción de cera

Durante años se pensaba que la cera tenía un origen vegetal, pero ya a mediados de 1740 se averiguó que la cera procedía del cuerpo de las abejas. Ellas elaboran la cera a partir de los nutrientes presentes en la miel y algunos componentes del polen, que consumen y que absorben a nivel intestinal. Las abejas jóvenes producen la cera en su abdomen. La cera procede de un producto segregado por las abejas jóvenes, de 10-15 días de edad, elaborado por las llamadas glándulas cereras, que se sitúan en el abdomen. La cera se secreta líquida y aparece en el cuerpo de la abeja en forma de pequeñas escamas. "Una vez secretada, con el tercer par de patas, la llevan a la boca y la moldean añadiéndole un pegamento especial para construir los panales", explica el veterinario. Para que en la colmena se produzca cera tienen que darse una serie de circunstancias. La principal es que haya una gran cantidad de abejas jóvenes que son las que pueden realizar la cera. También es preciso que haya mucho alimento, tanta miel como polen, ya que ambos son fundamentales para poder producir la cera.
Para que se produzca cera tiene que haber gran cantidad de abejas jóvenes, mucho alimento y una elevada temperatura
Asimismo, en la colmena debe conseguirse una temperatura de entre 33 y 36 grados, que facilite a la abeja el proceso de moldeado de la cera.

La importancia de renovar la cera

Los expertos inciden en que es fundamental renovar los cuadros de la colmena dado el deterioro que van presentando los panales y los riesgos que implican. En este sentido, Gonzalo Calvo apunta a que, como mínimo, es necesario que se renueve el 30% de los cuadros de la colmena cada año. En concreto, Calvo explica que hay distintas formas para renovar las ceras. Una de ellas, práctica que se hace rutinaruiamente, es retirar dos o tres ceras por la derecha, correr todolos cuadros hacia la derecha e introducir las ceras nuevas por la izquierda. Los panales nuevos deben colocarse entre la cría y el alimento. "Por lo general, nunca se puede romper el nido de cría para meter nuevos panales", detalla el veterinario. De localizarse cría, otra posibilidad, segundo indica Calvo, es situar la cría en el centro de un alza o colmena ya dedicada a eso.
Como mínimo es preciso renovar el 30% de los cuadros de la colmena cada año
Para Calvo, renovar la cera se vuelve fundamental para mejorar la salud de la colmena ya que con el paso del tiempo, la cera se va oscureciendo cuando la abeja cría en la celda, debido a los capullos que quedan adheridos en la pared. Así, las celdas se van engrosando y esto provoca, entre otros problemas, que sea más difícil conseguir la temperatura idónea para que la cría se desarrolle, que debe ser de entre 35 y 36 grados. La cera sirve como aislante y el calor que generan las abejas en los pasillos no llega a las celdas. La cera vieja también dificulta la limpieza y 2siempre hay más enfermedades en colmenas con cuadros viejos. Además, la polilla de la cera se siente más atraída por este tipo de cera", comenta Calvo.

Factores que afectan a la calidad de la cera

A la hora de llevar a cabo a renovación de la cera en la colmena, Calvo incide en la importancia de tener en cuenta distintos factores que afectan a la calidad de la cera. Están detectándose alteraciones, adulteraciones y contaminación de la cera que pueden resultar determinantes para la vida de la colmena. Es fundamental evitar la alteración de la cera, es decir, evitar que varíen las características físico-químicas. Para eso, segundo explica Calvo, se deben evitar las altas y prolongadas temperaturas cuando se funde la cera. El veterinario también recomienda emplear recipientes de acero inoxidable, ya que otros como el hierro o el cobre rematan por oscurecer la cera. La cera es uno de los productos empleados para estudiar la contaminación medioambiental dado que por su naturaleza es un reservorio de sustancias tanto del medio ambiente como del propio apicultor, como pueden ser los acaricidas que se emplean en la colmena.
La presencia de pesticida en la cera merma la fecundidad y la cría de la colmena
Debido a esta característica de la cera es habitual que se acumulen en ella los pesticidas trayendo consecuencias para la colmena. Así, cuando se detecta un elevado nivel de este tipo de contaminantes en la cera la cría se resiente y mucha de ella muere. Lo mismo ocurre cuando los pesticidas se depositan en el polen almacenado. La presencia de los pesticidas en la colmena amenaza directamente la supervivencia de la colmena y también merma la fertilidad de los zánganos y provoca que el 20% de las reinas criadas en cera contaminada termine muriendo. "Cuando se detectan pesticidas, además de estos problemas en la reproducción de la colmena debemos preguntarnos en qué estado se encuentran las abejas que sobreviven", reflexiona el veterinario.

La adulteración de la cera, uno de los principales problemas

Pese a ser un producto originalmente puro, en los últimos tiempos se está viendo adulterado al añadirle substancias de escaso o nulo valor, como alerta el veterinario. Las principales adulteraciones que se detectan tienen que ver con la parafina, las grasas animales o vegetales. La presencia de parafina en la cera ocasiona un debilitamento estructural del panal y que las obreras rechacen la cera y construyan paralelamente sus propios panales. Además, provoca inquietud y estrés en las abejas debido a los olores extraños y una merma de la cría.
Las ceras se ven adulteradas con parafina que afectan a la salud de la colmena y provocan que las obreras rechacen los panales
A parte de estas consecuencias directas en la salud de la colmena, estos tipos de aditivos en la cera hacen que el apicultor pague un elevado coste por un producto de menor calidad. Frente a esta problemática, Calvo recomienda a los apicultores contar con un proveedor de confianza o laminar la propia cera de la colmena, echando mano de un fundidor y de una laminadora. De escoger tratar la cera, el veterinario incide en la importancia que tiene hacer un enfriado de las láminas muy lento, para que la cera sea flexible y no rompa.
La buena calidad de la cera facilita que la cría salga adelante.

Medidas para mantener la calidad de la cera en la colmena

El veterinario incide en la importancia de una serie de medidas a tener en cuenta por los apicultores para mantener la calidad de las ceras y favorecer el funcionamiento de la colmena. Recogemos a continuación sus indicaciones: -Evitar tener los acaricidas en la colmena más tiempo del estrictamente necesario y nunca dejarlos olvidados. -Utilizar productos orgánicos para el tratamiento contra la varroa, para reducir la presencia de contaminantes en la colmena. -No sobrecalentar la cera para garantizar que las propiedades no se vean afectadas. -No mezclar la cera de opérculos, aquella que recubre las celdas de los panales, con ceras de peor calidad, que contenga impurezas. -Conservar las ceras cerradas para que no se sequen -Sustituir un 30% de las ceras anualmente utilizando ceras de opérculos o ecológicas. Aunque Calvo reconoce que las ceras totalmente ecológicas no existen ya que siempre hay una mínima presencia de pesticidas en ellas. El veterinario recomienda optar siempre por la cera de opérculos, ya que es la de mejor calidad. Junto con estas recomendaciones, Calvo también incide en la necesidad de elaborar una norma de calidad para la cera estampada, de manera que se proporcionen unas mínimas garantías en este producto clave para las colmenas.