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La Consellería de Medio Rural presentará “en próximas fechas” el Decreto de Artesanía de Galicia para amparar los alimentos artesanos y caseros producidos en Galicia. Así lo anunció este martes la directora general de Ganadería, Agricultura e Industrias Alimentarias, Belén do Campo, en su comparecencia en la Comisión de Agricultura del Parlamento de Galicia.
Docampo respondía a una pregunta del diputado del PsdeG-PSOE, Pablo García quien lamentaba que “Galicia sea una de las pocas Comunidades en las que no están regulados legalmente los productos alimentarios artesanos, lo que sitúa a nuestros productores en desventaja frente a los de otras autonomías”, al no poder utilizar la palabra artesano en el etiquetado de sus productos. García recordó que en el 2008 el entonces conselleiro Alfredo Suárez Canal anunció un borrador de Decreto de Artesanía Alimentaria de Galicia que finalmente no llegó a ser aprobado.
La directora general de Ganadería, Agricultura e Industrias Alimentarias justificó la demora de estos años en regular los alimentos artesanales en la necesidad de esperar a que la Comisión Europea y el Parlamento Europeo aprobaran cambios legislativos relativos al etiquetado y a los regímenes de calidad de los productos alimentarios.
“Esperamos a que se aprobasen los cambios legislativos a nivel europeo”
“Ahora que está aclarada y cerrada la normativa europea relativo a esto, la Consellería estuvo trabajando en los últimos meses en un borrador de decreto que contempla los últimos cambios de la normativa europea”, explicó Belén do Campo. De este modo, y una vez que el texto ya obtuvo el visto bueno de la Mesa de Coordinación de la Calidad Alimentaria -en la que están presentes otras consellerías con competencias en la materia como la de Sanidad o la de Industria- Belén do Campo avanzó que “en las próximas semanas vamos a presentar y comenzar la tramitación del Decreto de Artesanía Alimentaria de Galicia”.
La representante de la Consellería de Medio Rural aseguró que la nueva normativa contemplará, entre otras, un nuevo etiquetado para los productos caseros y de cercanías; la creación de un Registro de Artesanía Alimentaria en el que deberán inscribirse los productores; la emisión de una Carta de Artesano Alimentario, así como “la exigencia de garantizar un mínimo de profesionalización o que sean explotaciones consideradas prioritarias”.
