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Manuel Vidal forma parte del servicio de podología de Seragro
La dermatitis es una enfermedad ulcerativa de origen infeccioso que afecta a la epidermis y en casos graves también a la dermis. Su origen es multifactorial (traumatismos en la piel, falta de higiene) y es muy contagiosa afectando a día de hoy al 80% de las explotaciones lecheras.
Fue diagnosticada por primera vez en Italia por Morterallo en 1974, por lo que también es conocida por ese nombre. Aparece como una lesión típica en forma de fresa de color rojizo por encima de los bulbos del talón de las vacas.
Del control y prevención de la dermatitis en las granjas lecheras habló Manuel Vidal durante las últimas Jornadas Técnicas de Vacuno de Leche organizadas por Seragro. “La dermatitis no se erradica, se controla simplemente”, aseguró.
La dermatitis no se erradica, se controla simplemente
Una vez que se introduce en el rebaño, se reproduce con grande facilidad, por lo que la identificación precoz es fundamental para su aislamiento, evitando que se extienda al conjunto de animales. “Hay que prestar especial atención a las novillas y a las vacas secas, ya que va a afectar a su posterior lactación”, indicó el podólogo de Seragro.
Factores de riesgo
La higiene es una cuestión fundamental para evitar la dermatitis. “Que tengamos un buen nivel de limpieza en el establo no quiere decir que no tengamos puntos críticos, como las humedades alrededor de los bebederos o los pediluvios sucios cuando no los usamos”, dijo.
La introducción de nuevos animales en el rebaño es también un factor de riesgo para el contagio, al igual que los cambios de lote. “Especial atención a la recría próxima y a las vacas secas. Las vacas deben parir con dermatitis cero y es muy importante que no tengamos dermatitis en las novillas porque las las novillas que tuvieron un caso de dermatitis antes de parir repiten la dermatitis durante la lactación en un 45% de los casos”, detalla Manuel.
Las novillas que tuvieron dermatitis antes de parir la van a arrastrar durante la lactancia
A las vacas al inicio de la lactancia les bajan las defensas y es más fácil que cojan dermatitis. Igual que les ocurre a los animales jóvenes, que tienen la piel más sensible. La temperatura y humedad, lo mismo que el estrés por calor, son un caldo de cultivo perfecto para la enfermedad.
“Los suelos no deben ser agresivos, que provoquen daños en los pies por los que la dermatitis penetre. Y que tengamos parrillas no quiere decir que no tengamos que limpiarlas, por ejemplo en la recría”, ejemplifica.
Prevención
La mejora de los pediluvios y de la higiene general de la granja es la principal medida de prevención frente a la dermatitis. También la optimización de minerales antes del parto en vacas secas y novillas.
Es fundamental a higiene general del establo y la optimización de minerales antes del parto
Todos los oligoelementos son importantes para la salud del ganado vacuno y la dieta debe ser equilibrada para que los animales sean más resistentes a las bacterias causantes de la dermatitis, pero hay determinados minerales que son fundamentales.
El zinc, que ayuda a la producción de queratina, favorece la cicatrización de las heridas y la reparación de los tejidos; el cobre es necesario para la composición y mantenimiento de los tendones, cartílagos y ligamentos; el magnesio para las articulaciones y la densidad ósea; y el selenio es un excelente antioxidante.
Detección
La prevención y la detección precoz son factores esenciales para mantener una baja incidencia de la enfermedad en el rebaño. “En la sala de ordeño es muy fácil controlar las dermatitis, porque nos quedan las patas a la altura de la vista. En cuanto veamos una, debe ser tratada lo antes posible, en estado M1, que es cuando comienza a romper la piel”, indica Manuel.
Las revisiones de podología y el paso de todos los animales por el potro es una oportunidad para evaluar el estado de todos los animales, identificando el tipo de dermatitis y la prevalencia existente en la granja.
La sala de ordeño y las revisiones generales del podólogo son momentos idóneos para la detección de la dermatitis en la granja
“El recorte funcional de pezuñas es importante porque nos permite revisar y controlar las dermatitis activas”, dice. Una vez más, es importante no olvidarse de la recría. “En animales jóvenes que pisan mal durante mucho tiempo se provocan modificaciones en la estructura ósea. Las novillas cojas o que anden mal se deben corregir lo antes posible. Además, en esos casos la piel es más fina y el avance de la dermatitis es más rápido”, explica el podólogo de Seragro.
Frecuencia del baño de pezuñas
En cuanto al baño de pezuñas, “no es curativo, sino preventivo, para evitar que las dermatitis se vuelvan crónicas”. Por eso, dice el podólogo de Seragro, “todas las dermatitis tienen que ir desactivadas al baño para que sea efectivo al 100%”.
El baño no es curativo, sino preventivo, por lo que todas las dermatitis tienen que estar desactivadas con anterioridad para que sea efectivo al 100%
La frecuencia varía en función de la incidencia de la enfermedad. “Todos los establos son diferentes, por lo que cada establo debe tener unos protocolos diferentes. Hay establos que con poner el baño cada dos meses tienen la dermatitis controlada y otros que necesitan ponerlo varias veces a la semana”, explica Manuel.
La frecuencia va a depender del número de casos que tengamos
Los baños no deben estar mucho tiempo puestos, porque “una vez que se manchan los pediluvios son un foco de contaminación y trasmisión de dermatitis”. “Una vez que todas las vacas pasan 4 o 5 veces por el baño ya se puede retirar, no es necesario tenerlo varios días colocado”, detalla.
Una vez que todas las vacas pasan 4 o 5 veces por el baño ya se puede retirar porque una vez que se mancha es un foco de contaminación
Las novillas si no tienen dermatitis no es necesario pasarlas por el baño. “En el momento que apareca algún caso la curamos y después ponemos el baño. Sí que se deben pasar por el baño las novillas en el momento de pasarlas al lote de secas o preparto, porque una vaca seca con dermatitis es capaz de contagiarnos a 10 novillas”, argumenta. Por eso, es importante que las vacas secas pasen también por el baño.
Ubicación y medidas del pediluvio
El pediluvio debe ser lo suficientemente largo para que los animales sean capaces de dar 4 pasos en su interior. “Lo ideal es un largo de 3,5 a 4 metros para que dé varios pasos con cada pie por el baño. Si tiene solo 2 metros de largo va a pisar una vez con cada pie y si tiene menos de 2 metros a vaca no va a pasar con todos los pies por el baño, y seguramente deje sin pisar el pie que tiene la dermatitis porque le duele”, razona Manuel.
Después del baño los animales deben salir a una zona seca, porque la efectividad va a ser mayor
En cuanto a la anchura, debe estar entre 50 y 70 centímetros, con una profundidad de unos 25 centímetros para que al menos 10 sean de agua. Los laterales deben tener una inclinación del 70% para evitar la pérdida de líquido y es aconsejable un sistema de vaciado que facilite su limpieza.
El baño desde que pasan 150 o 200 animales pierde mucha efectividad. Por eso, en los casos de explotaciones con muchas cabezas, debe cambiarse el agua “porque sino el tratamiento a los últimos animales no va a ser el idóneo”, asegura.
En explotaciones con muchos animales es aconsejable vaciar el pediluvio en la mitad del ordeño y poner uno nuevo
En los casos de robots una opción es ponerlo a la salida del robot. “Pero el baño debe colocarse desde el primer día, porque si primero adaptamos a las vacas al robot y después ponemos el baño, va a suponer un nuevo estrés para la vaca que va a hacer que se retrase en la salida a la hora de ordeñarse”, indica.
Los tres factores van de la mano: higiene, dimensión del baño y ponerlo los días programados para que funcione
Hasta ahora el producto más empleado en las ganaderías para el baño de pezuñas era el sulfato de cobre, pero el cambio en la normativa europea obliga a buscar alternativas. “La legislación europea solo permite usar los sulfatos como correctores en la alimentación, por lo que si se usan en los baños se corre el riesgo de ser sancionados. Hay otros productos en el mercado que funcionan como el sulfato. En general, todos los productos funcionan bien, pero ninguno es milagroso, va a depender más de lo que hagamos nosotros que del producto que usemos”, concluye el podólogo de Seragro.
“Una dermatitis nos va a costar de 180 a 200 euros por animal en la lactación”
La dermatitis se clasifica en 5 fases en función de la evolución de la enfermedad, siguiendo una escala de gravedad. Una dermatitis tarda de 5 a 10 días de cambiar de estado, desde el principio de la activación a la lesión con el dolor, que es una fase que ya cuesta dinero a las explotaciones, porque hay bajada de producción del animal.
A día de hoy la dermatitis representa un problema económico importante en las ganaderías lecheras. “Esta enfermedad contagiosa es la causante de muchas cojeras, con la consiguiente bajada de producción del ganado y merma de la fertilidad”, afirma Manuel.
¿Cuánto le cuesta a una granja la dermatitis en su ganado?
“Una dermatitis nos va a costar de 180 a 200 euros por animal en la primera lactancia. Es mucho dinero y nos da para hacer mucha prevención”, razona.
Afecta a una cuarta parte de los animales en producción y a una de cada tres novillas antes de parir
La dermatitis se encuentra en tercer lugar de las patologías podológicas generales del rebaño. Según un estudio realizado por Seragro en 29 de sus granjas entre enero de 2019 y junio de 2021, el 23% de los 20.410 animales en producción revisados en el potro tenían dermatitis. En el caso de las novillas, la incidencia es aún mayor, convirtiéndose en la patología más frecuente (32,31%).
Causante de cojeras y bajadas de producción
La vaca siempre pisa primero de talón, por lo que es importante que esté sana esa zona. “Cuando tenemos ahí una dermatitis perdemos amortiguación y el animal pisará de punta”, explica.
Cuando la dermatitis está en la parte contraria, en la zona interdigital, el animal va a pisar de talón y puede derivar en enfermedades más graves. El talón debe tener una altura entre 3,7 y 4 centímetros, que es lo ideal para que el animal pise bien.
¿Qué significa desactivar una dermatitis?
“Desactivar una dermatitis significa curarla, pero desactivar una dermatitis no significa que no pueda volver a activarse si no seguimos una buena rutina de prevención”, advierte Manuel, que destaca el gran poder de curación que tienen los animales jóvenes, que en una semana pueden estar perfectamente recuperados.
Los productos deben usarse en las dosis indicadas, porque podemos quemar la dermis
Para eso se emplean medicamentos de uso tópico que no llevan antibióticos y no causan dolor al animal. Estos productos deben usarse en las dosis recomendadas. “No por echar más cantidad de producto vamos a curar mejor al animal; los productos deben usarse en las dosis indicadas, porque podemos quemar la dermis”, alerta.
