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El conselleiro de Medio Rural, José González, presidió esta mañana la reunión del Consejo Forestal de Galicia, que tiene lugar en el Pazo de Quián, en Sergude (Boqueixón) y en el que evaluaron diferentes líneas de trabajo en desarrollo de lo establecido en el Plan Forestal de Galicia 2021-2040 «Hacia la neutralidad carbónica».
Por parte de la Xunta se presentaron a los representantes del sector forestal una serie de documentos, la mayoría en fase de borrador, que tienen que ver con la futura estrategia para el fomento de la gestión activa de las masas de frondosas o con el próximo libro blanco sobre la reforma de la regulación de los montes vecinales en mano común.
También se evaluó la próxima orden por la que se publicarán los modelos orientativos de estatutos y el modelo para la constitución de derechos de uso y aprovechamiento a favor de las agrupaciones forestales de gestión conjunta. Otro tema abordado en este encuentro es el análisis de los datos del Inventario Forestal Continuo de Galicia.
En cuanto al borrador del libro blanco sobre la reforma de la regulación de los montes vecinales en mano común de la comunidad autónoma, se trata de un documento previo de trabajo, participativo y de reflexión, que se somete al Consejo Forestal para seguir avanzando hacia la reforma y actualización de esta normativa, que ya tiene 30 años de vigencia, por lo que se trata de ajustarla. En este documento se evalúan aspectos como el propio concepto del monte vecinal, la condición de persona comunera o la gobernanza de estos terrenos forestales, entre otras cuestiones.
Otro asunto abordado fue el borrador de la futura orden sobre los modelos voluntarios de documentos para agrupaciones forestales de gestión conjunta, una figura de la Ley de recuperación de la tierra agraria de Galicia. «Se trata -subrayó el consejero- de facilitar unos modelos útiles a los que se puedan acoger, de manera voluntaria, los gestores de estos terrenos forestales, diferenciando -por un lado- los estatutos para entidades sin ánimo de lucro o para comunidades de bienes y sociedades civiles y -por otro- los contratos que permiten regular las relaciones y compromisos entre los propietarios forestales y las agrupaciones en las que se integran». Estos últimos pueden ser de prestación de servicios silvícolas o de cesión de uso y aprovechamiento forestal.
Por último, sobre el Inventario Forestal Continuo -que también se evaluó en esta reunión-, el conselleiro destacó que ofrece datos de gran interés, como las casi 620.000 hectáreas de superficie de monte gallego ocupado por frondosas y que se configura además como un instrumento de control y planificación básico tanto para la Administración como para todos los actores de la industria.
