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La Facultad de Veterinaria de Lugo acogió hoy la novena edición de la Jornada Técnica de Producción de Leche organizada por Africor Lugo y la revista Afriga, e inaugurada por Ángeles Vázquez, conselleira del Medio Rural; Álvaro Santos, diputado provincial; Laura Lema, responsable de Negocios y Sector Primario de la delegación territorial de CaixaBank en Galicia, y José Carlos Vega y Juan Novo, presidentes de Africor Lugo y Afriga, respectivamente.
En la primera conferencia del día quiso abordarse el cruce industrial de ganado frisón con razas de aptitud cárnica, una práctica cada vez más habitual en las ganaderías que debe hacerse bien para que suponga un valor añadido. María Traba, veterinaria de Acruga, resaltó la dificultad de parto, la duración de la gestación y la fertilidad como los tres parámetros fundamentales a tener en cuenta y ofreció las conclusiones de un estudio específico hecho con datos del control lechero de la provincia de Lugo de 2010 a 2014 que sitúan la raza Rubia Gallega como la más equilibrada para los dichos cruces, puesto que sus toros son los más fértiles y tiene una facilidad de parto elevada.
Seguidamente intervino el también veterinario Christoph Egli, director mundial de marketing de Idexx, para presentar una nueva herramienta con la que diagnosticar la preñez de las vacas a partir de una muestra de leche, un servicio que viene de implantar el Ligal y cuyo objetivo es la mejora de la eficiencia reproductiva.
Sirve para detectar las glicoproteínas asociadas a la gestación que se producen a nivel placentario y que aumentan hasta el momento del parto y puede hacerse a los 28 días postinseminación.
Destacó entre sus ventajas que es fácil de usar, da buenos resultados y comporta beneficios económicos, por ejemplo, al reducir el número de días de vacas vacías porque las descubre con anterioridad.
El público asistente pudo escuchar además a Fernando Fariñas, codirector del ImmuneStem de Málaga, quien explicó en un par de charlas, de una manera amena e ilustrativo, la inmunología en el periparto de la vaca. Comenzó por describir el sistema inmune del animal y el tipo de respuestas de este contra las infecciones para enfatizar que cuando una vaca está gestante, en el denominado periparto (los 90 días de este período crítico), parte de ese sistema está bloqueado y la hace más vulnerable, lo que sumado al estrés fisiológico, a una mala alimentación con un balance energético negativo y a la inmunodepresión en la glándula mamaria va a generar una bajada de defensas que puede desencadenar un aumento de mamitis, metritis y retención de placenta en el posparto.
En sus palabras, “los problemas del día a día en el posparto tienen que ver totalmente con e sistema inmunológico” y “el futuro está en el uso de fármacos inmunomoduladores para equilibrar todo este proceso”. Su segunda intervención ahondó precisamente sobre la inmunomodulación en la mamitis cómo medio de prevenir las complicaciones infecciosas secundarias relacionadas con la inmunodepresión.
La mesa redonda
El periodista Xoán Ramón Alvite moderó un debate sobre la disponibilidad de tierras para usos agrarios en Galicia en el que participaron Ramón Saavedra (Colegio de Ingenieros Agrónomos de Galicia), Antonio Crespo (Agader), Quico Ónega (Laboratorio del Territorio de la USC) y César Resch (Centro de Investigaciones Agrarias de Mabegondo), que acercaron distintos puntos de vista.
Saavedra hizo hincapié en la necesidad de respetar la ordenación para que sean compatibles la producción forestal y la agroganadera, de canalizar las denuncias de forma anónima e incluso de “forzar la movilidad” de tierras.
Crespo defendió que se dieron una serie de pasos, como el Banco de Terras, la Ley de Montes o la Ley de Mejora de la Estructura Agraria de Galicia, pero reconoció que esta legislación “tiene poco reflejo”, por lo que remarcó que “hay que acercarle a la gente lo que está hecho” para que se aprovechen mejor estos instrumentos.
Por otra parte, afirmó que sería interesante cuantificar que necesidad hay de tierras, en alusión a parcelas que llevan años metidas en el Banco y que no fueron solicitadas para uso agrario, cuestionando el interés real en ellas.
Ónega interactuó con los ganaderos para poner de manifiesto que hablar de tierras es diferente para cada explotación y los animó a reivindicar este tema porque “es algo en el que tiene competencias la Administración, más que para marcar un precio mejor”. Cree que las leyes en vigor son suficientes pero hay que aplicarlas y dotar de recursos humanos y económicos las herramientas con las que ya se cuenta, y valoró la tierra como “una de las pocas cosas que nos permitiría diferenciarnos en el mercado internacional”.
Para Resch el problema es mayor y coyuntural y la solución está en la creación de sistemas resistentes ante contextos de incertidumbre de los mercados, en la puesta en marcha de una “estrategia de sector” aquí como la que pudo observar en su estancia en Irlanda, con la que en épocas de bonanza no ganan mucho pero en épocas de crisis aguantan; en este sentido, echa de menos la definición de un modelo productivo a largo plazo, un plan de futuro “que tiene que establecer la Administración”.
