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El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció tras el Consello da Xunta que se aprobó destinar un total de 17,9 millones de euros “a la restauración” del Pazo y el recinto de Lourizán, en Pontevedra así como a “diseñar su programa de usos y actividades”. De este modo, la Administración autonómica actuará de inmediato, tras asumir la titularidad de las instalaciones –algo que está previsto que se formalice próximamente– para poner en valor este patrimonio que, según resaltó Rueda, destaca “por su valor histórico y natural”.
El Pazo de Lourizán se encuentra en las cercanías del Centro de Investigación Forestal de Lourizán y del Centro de Formación Agroforestal de Lourizán. En conjunto, estas tres instalaciones y la finca que las alberga constituirán lo que la Xunta denomina ‘Campus Lourizán’, que se quiere convertir en el principal centro de la comunidad en formación, investigación y divulgación forestal.
Entre las primeras actuaciones, está prevista la restauración del edificio histórico y los itinerarios e instalaciones que hay en el jardín botánico; habilitar una sala polivalente de conferencias en un nuevo edificio de madera y se abre la posibilidad “de dedicar parte de la edificación a alojamiento turístico o de restauración”.
A continuación, se impulsará un ecosistema de estudio y análisis estadístico, investigación, formación y divulgación forestal. Será un espacio de encuentro entre los agentes públicos y privados de la cadena forestal gallega, potenciando en sus instalaciones a transferencia del conocimiento al ámbito empresarial.
Las actividades principales de investigación se complementarán con un programa ampliado de divulgación y formación, reglada y no reglada. La transferencia de la información y del conocimiento alcanzado se reforzará con el establecimiento de lazos colaborativos con el sector empresarial, que tendrá presencia en las instalaciones a través de la creación de incubadoras y aceleradoras de empresas forestales.
Características e historia del Pazo
El recinto de Lourizán se encuentra en el lugar de Herba Longa, en la parroquia de Santo André de Lourizán, en el ayuntamiento de Pontevedra. Se trata de una superficie de 46,55 hectáreas de extensión, formada por 4 parcelas catastrales. Su propietario más famoso fue el político gallego Eugenio Montero Ríos, que adquirió la propiedad junto con su esposa Avelina Villegas en el año 1879 y que fue quien encargó a Jenaro de la Fuente a reforma y diseño del pazo como una residencia de verano por la que pasaron importantes personalidades de la época. En sus salones se negociaron cuestiones políticas de máximo interés, como el Tratado de París de 1898, por lo que se cedieron las últimas tierras coloniales que quedaban: Puerto Rico, Filipinas, Cuba y Guam.
En el año 1943 el lugar de Lourizan fue comprado a través de escritura pública por la Diputación de Pontevedra y se sucedieron continuados convenios de colaboración entre la propia Diputación y las diferentes consellerías competentes para su cesión (plazos de 30 años), y estuvo vinculado a un uso científico y formativo (capacitación agraria).
El 6 de julio de 2022 la Diputación de Pontevedra y la Xunta de Galicia firman un Protocolo general de intenciones para la transmisión de la titularidad del predio de Lourizán y de la Escuela de Cantería de Pontevedra a la Comunidad Autónoma de Galicia, un proceso que se espera que culmine próximamente.
El conjunto de Lourizán está formado por la Escuela de Capataces-CFEA, el Centro de Investigaciones Forestales-CIF, la Red de Observación Ambiental de Galicia, el Pazo y sus construcciones anexas y, finalmente, el Arboreto, que reúne un extraordinario elenco de especies de plantas, flores, arbustos y árboles plantados en el predio desde el siglo XIX hasta la actualidad.
El Pazo de Lourizán forma parte del Catálogo del patrimonio cultural de Galicia en virtud del artículo 30 de la Ley 5/2016, de 4 de mayo, del patrimonio cultural de Galicia, y cuenta con un nivel de protección integral en el vigente plan urbanístico del término municipal de Pontevedra, al estar recogido en el Catálogo de edificaciones y elementos para conservar de la ciudad y del medio rural de Pontevedra, aprobado el 28 de abril de 1994. Tal y como adelantó el presidente, la previsión “es comenzar las obras de rehabilitación este año y que estén finalizadas en 2026”.
