Los ensayos realizados en diferentes parcelas en estos últimos tres años confirman la eficacia del abonado integral de ICL para el cultivo del maíz desarrollado por la firma especializada en fertilización agraria Agromaster. El programa de ICL para el cultivo del maíz consiste en la aplicación de tres productos: Agromaster con tecnología de encapsulado E-Max, Agromaster Start Mini con tecnología Poly-S y el abono foliar Agroleaf Power, con M-77.
Con el plan de abonado de ICL, han podido comprobar a lo largo de estos tres años el buen estado sanitario del maíz en todas las fincas, con un buen color y sin ningún tipo de carencia. “Las cosechas han sido excelentes tanto en calidad como en cantidad, observando a simple vista todas las espigas perfectamente cuajadas y demostrando con hechos la eficacia y rentabilidad de la solución integral para maíz de ICL”, reivindican desde Agromaster.
Tecnologías E-Max y Poly-S
ICL cuenta con una amplia experiencia en la fabricación de encapsulados para crear productos con un tiempo de liberación muy preciso que se indica en cada producto. Así, el fertilizante Agromaster utiliza la tecnología E-Max, que es una tecnología de liberación controlada consistente en una cubierta de polímero que mejora la utilización eficiente del nutriente. La liberación de los nutrientes se basa en la humedad y en la temperatura, ofreciendo valores de longevidad predecibles y reduciendo la cantidad de nitrógeno que se libera ineficazmente a la atmósfera, los costes de aplicación y los valores excesivos de salinidad perjudiciales para la planta cuando se aplica el fertilizante de forma localizada. Además, aumenta la seguridad, rentabilidad y eficacia del fertilizante.
Por su parte, Agromaster Mini utiliza la tecnología Poly-S, que es otra tecnología de ICL basada en un encapsulado de azufre y un polímero. La liberación del nutriente con la tecnología Poly-S es menos dependiente de la temperatura y el componente de azufre del encapsulado añade valor nutritivo al producto. En este cultivo de maíz se ha utilizado Agromaster Mini 21-21-5, a una media de entre 30 y 50 kilogramos por hectárea localizado en la zona de siembra. Con eso conseguimos un mejor arranque independientemente de las condiciones que tengamos.
Recomendaciones para el abonado ICL
Desde Agromaster proporcionan unas recomendaciones a seguir en el plan ICL para lograr buenos resultados en el cultivo del maíz:
– En siembra recomiendan aplicar Agromaster 27-10-10 con el 30% del Nitrógeno encapsulado con E-Max de 3-4 meses de longevidad, a 500-1.000 kilos por hectárea, así como el fertilizante starter Agromaster Start Mini 21-21-5 con el 40% del Nitrógeno encapsulado y tecnología Poly-S, a dosis de 30-50 kilos por hectárea y aplicado cerca de la semilla.
– A las pocas semanas es preciso aplicar el herbicida, mezclado con un abonado foliar, Agroleaf Power 31-11-11, a dosis de 4-6 kilos por hectárea. “El abonado Agroleaf Power ayuda a que la planta salga antes del estrés provocado por el herbicida y a que éste actúe con mayor eficacia sobre las malas hierbas”, detallan.