Español
A Universidad de Vigo activa por tercer año consecutivo la búsqueda de empresas, asociaciones y organismos de los ayuntamientos gallegos de menos de 5000 habitantes que quieran participar en la 3ª edición del Programa Campus Rural, una iniciativa puesta en marcha en 2022 por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, en colaboración con el Ministerio de Universidades y las universidades públicas, que permite al alumnado universitario realizar prácticas profesionales en zonas rurales con problemas de despoblación, incentivando así la llegada de capital humano que ayude a dinamizar estas zonas.
En 2023 fueron más de medio centenar de entidades las que respondieron a la llamada realizada por la Universidad de Vigo para acoger al alumnado universitario en sus instalaciones y en esta ocasión se espera que la respuesta sea similar o superior. Las entidades interesadas tienen de plazo para inscribirse hasta el próximo 20 de marzo. Esta es la primera fase del programa, una vez inscritas las empresas y organismos interesados, se hará una nueva llamada, en esa ocasión al alumnado. Será ya en el mes de abril, una vez pasada la Semana Santa.
Estadías de entre 2 y 4 meses y 1000 euros brutos mensuales
Las prácticas contarán con una prestación económica de 1000 euros brutos mensuales por estudiante, junto a la obligada cobertura de gastos derivados de la Seguridad Social, que serán abonados por el ministerio a través de la Universidad de Vigo.
El año pasado, la duración de la estadía tenía que ser superior a 3 meses, pero este año se flexibilizó más la duración, de modo que el alumnado que participe podrá hacer estadías con una duración de 2 a 4 meses en el período comprendido entre el 15 de mayo y el 15 de noviembre. “Además, y dado que uno de los mayores obstáculos de estas estadías reside en la disponibilidad de alojamiento en el municipio de , se está pidiendo un mayor esfuerzo a las entidades que se adhieran al programa para que propongan soluciones de residencia para el alumnado y existe un compromiso de prestación de ayuda en su búsqueda”, apunta la directora del área de Empleo y Emprendimiento, Maruxa Álvarez.
Balance muy positivo para empresas, alumnado y Universidad
Como balance de las dos ediciones anteriores, Álvarez destaca que, en líneas generales, tanto el alumnado como las entidades mostraron una gran satisfacción con el programa. En este sentido explica que para muchas entidades participar en este programa constituye su primera experiencia acogiendo estudiantes de la Universidad en un período formativo. En el caso del alumnado, para algunos estas ayudas les permiten volver al origen de sus familias y re-conectar con vínculos que algunos fueron perdiendo con el tiempo. Para otros, les brinda la posibilidad de tener una nueva experiencia con un entorno rural que hasta ese momento era desconocido para ellos o ellas. “En todo caso, todas las personas participantes sobresalen siempre la oportunidad de tener una experiencia profesional real y acercar valor sobre lo terreno”, apunta Álvarez.
Desde el punto de vista del área de Empleo y Emprendimiento, este programa le permite a la Universidad acercarse a entidades con las que antes no tenía colaboración, con vistas a establecer nuevos canales de comunicación y nuevas sinergias en otros programas, además de darles a conocer los servicios que se ofrecen desde el área y de los que pueden beneficiarse.
