La sección ‘Noticias de empresa’ incluye informaciones de actualidad empresarial, así como las notas de prensa de firmas colaboradoras.

“Para que las vacas den buena leche, hay que tratarlas con cariño”

Entrevista a Ana Chao, ganadera lucense certificada en Bienestar Animal que lleva más de 30 años colaborando con el Grupo Lactalis

“Para que las vacas den buena leche, hay que tratarlas con cariño”

Ana Chao, con su rebaño en los pastos.

Ana Chao lleva más de 30 años al frente de una granja en Lugo. La colaboración con Lactalis viene de lejos, cuando su madre entregaba la leche a la empresa hace más de 45 años. Una relación muy estable y de la que Ana Chao comenta sentirse muy segura y apoyada. Cuando Ana cogió las riendas de la explotación, contaba con 12 vacas y en la actualidad supera las 80.

La ganadería de Ana es una de las 900 que Lactalis tiene certificadas en bienestar animal. La certificación Welfair™ avala ante los consumidores que la leche ha sido obtenida de vacas que viven en condiciones éticamente responsables de bienestar, conforme a los protocolos establecidos en los proyectos europeos Welfare Quality y AWIN.

– ¿Desde qué año cuentas con la certificación de Bienestar Animal? ¿Te ha resultado complicado obtenerla?
– Cuento con la certificación de Bienestar Animal desde hace más de dos años. Cuando la entidad encargada de la certificación visitó la explotación, pudo comprobar en primera persona que reunía los requisitos para poder obtenerla, ya que los animales respondían a los criterios principales de evaluación: están bien alimentados, el alojamiento es cómodo, gozan de buena salud y tienen un comportamiento adecuado. Resultó todo muy sencillo.

– ¿Por qué apostaste por este tipo de certificación? ¿Qué supone esta certificación para la explotación?
– Aposté por esta certificación porque pone en valor el esfuerzo y sacrificio que desarrollamos a diario para que las vacas estén en las mejores condiciones posibles. Un trabajo y dedicación que tiene su reflejo también en una mejor calidad de la leche. Para la explotación se trata de un reconocimiento que nos motiva a seguir trabajando en los mejores estándares de calidad posible.

– ¿En qué condiciones tienen que estar los animales? ¿Es importante tener unas vacas cuidadas para que den buena leche?
– Uno de los aspectos que más se valoran para estar certificado bajo los estándares de Bienestar Animal es que las vacas pasten en libertad y lo ideal es que lo hagan un mínimo de 216 días al año y 6 horas al día, a parte de disponer de suficiente cantidad de alimento y agua. Deben contar con confort en el descanso y facilidad de movimiento, que tengan ausencia de heridas y enfermedades… En definitiva, tratarlas con cariño. Sin duda, es muy importante que las vacas estén bien cuidadas para que den buena leche. Por ejemplo, una vaca coja, adelgaza y la calidad de la leche ya no es la misma. El podólogo vacuno realiza una labor muy importante.

– Durante la pandemia, ¿seguiste trabajando al mismo ritmo?
– Por supuesto, era muy importante seguir suministrando leche a las fábricas. El consumo en los hogares había crecido exponencialmente y había que responder a esta demanda. Incluso en los meses más duros de la pandemia, durante el primer estado de alarma y el confinamiento domiciliario, Lactalis siguió cumpliendo con su compromiso de recogernos leche cada 24/48 horas. Fueron meses de mucha intensidad, de mucho trabajo, pero donde los ánimos siempre estuvieron arriba porque de alguna forma, estábamos colaborando y aportando nuestro granito de arena para garantizar el suministro.

– Dentro del sector, ¿hay diferencia de trato por ser ganadera?
– Al principio, cuando empecé sí que notaba cierta diferenciación por el hecho de trabajar en un sector más vinculado al ámbito masculino, pero hoy en día no percibo discriminación alguna por el hecho de ser mujer. Siento que se me respeta, pero considero que, aunque se ha avanzado mucho, todavía queda camino por recorrer.

En este sentido, la educación juega un papel fundamental. Las mujeres del rural somos independientes y representamos gran parte de la mano de obra agrícola y ganadera. Nuestro papel es fundamental para garantizar la continuidad de todo lo que implica el medio rural.

En este punto me gustaría destacar también el papel tan importante que juegan los centros educativos en la proyección de nuestra profesión. Mi experiencia me dice que hay mucho desconocimiento. Muchos niños hoy en día no saben de dónde viene la leche o que las gallinas ponen los huevos. Creo que es fundamental poner en valor la importancia del trabajo que se lleva a cabo en el rural, sobre todo en Galicia, y que es tan importante para la alimentación.

Ana Chao, con su madre.

Ana Chao, con su madre.

– El trabajo en la explotación, ¿te permite conciliar con tu vida personal y familiar?
– Sí, por la mañana me dedico por entero al ordeño y cuidado de las vacas; a partir del mediodía realizó algunas tareas en el hogar y por la tarde tengo tiempo para mí. Este trabajo siempre me permitió conciliar, sobre todo cuando mis hijas eran pequeñas, ya que la casa en la que vivimos está ubicada junto a la explotación y mi marido y yo nos organizábamos para ir a llevarlas y recogerlas al colegio.

– ¿Cómo se presenta el futuro de la explotación a medio – largo plazo?
– Somos optimistas, operamos en un entorno en el que nuestra actividad es esencial y donde nos sentimos muy apoyados por nuestro principal recogedor, que es Lactalis. Producimos anualmente sobre 350.000 litros de leche y esperamos seguir al mismo ritmo durante los próximos años, con una apuesta firme por la calidad para poder seguir respondiendo a los estándares que Lactalis nos pide.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *