El próximo martes 26 de marzo tendrá lugar a las 11:30 horas delante de la Delegación de la Xunta de Galicia en Ourense una concentración de protesta «frente al sacrificio obligatorio de cientos de animales y las indemnizaciones de miseria vinculadas a la declaración de Zona de Prevalencia 0 de Tuberculosis en el territorio gallego».
En el año 2021 Galicia fue declarada libre de tuberculosis o zona de Prevalencia 0. Esta clasificación le permite a la Xunta “flexibilizar” las medidas de lucha contra esta dolencia, por ejemplo reduciendo el saneamiento anual a un saneamiento cada tres años, pero en las granjas implica que con un único positivo en laboratorio son sacrificados todos los animales (vaciado sanitario).
Con un único positivo en laboratorio son sacrificados todos los animales de la granja, procediendo a su vaciado sanitario
Contradictoriamente, si una granja en la que se identifican positivos está en una comunidad que no tenga declarada la prevalencia 0, las pruebas se repiten a los 45 días y no matan a todos los animales.
Por eso, desde el Sindicato Labrego Galego denuncian el carácter «discriminatorio y desproporcionado» de estas medidas, que suponen, dicen, «una ruina para las personas ganaderas que se puedan ver afectadas» por ellas.
Animales de otras comunidades con más tuberculosis, en las que no obligan a hacer estos vaciados sanitarios, entran a diario en nuestro territorio
«Esta situación es aún más injusta si cabe si términos en cuenta que, a pesar de la cualificación de prevalencia 0, animales de otras comunidades con más tuberculosis, en las que no obligan a hacer estos vaciados sanitarios, entran a diario en nuestro territorio. Además, está científicamente demostrado que la tuberculosis bovina se mantiene en reservorios silvestres, como las poblaciones de corzos, cérvidos en general o jabalí», argumentan desde el SLG.
El caso de una granja afectada en Manzaneda
En las últimas semanas el SLG se ha hecho eco del caso de una granja de Manzaneda, a la que por tres positivos van a proceder a sacrificarles 40 animales, redundando en una pérdida económica superior a los 30.000€, así como en dos años como mínimo de ausencia de beneficios económicos (el tiempo medio estimado de recuperación de esta unidad productiva). «Pero esta situación se viene repitiendo desde hace tiempo: el año pasado obligaron a matar 400 animales de una granja de A Terra Chá», añaden en el Sindicato Labrego.
«La situación es grave. Han sido solicitadas varias reuniones urgentes y trasladada una batería de medidas, pero hasta ahora no hemos obtenido respuesta. Consideramos una absoluta irresponsabilidad que la Consellería de Medio Rural no esté manteniendo un diálogo con el sector a fin de abordar esta realidad», concluyen.