El Sindicato Labrego ha desarrollado una concentración delante de la Consellaría de Medio Rural, en Santiago de Compostela, con el lema «Por el plan de saneamiento frente a la tuberculosis bovina y contra el sacrificio obligatorio de animales sanos y las indemnizaciones de miseria».
En la concentración, la secretaria general del Sindicato Labrego (SLG) reiteró el apoyo a la granja de Manzaneda a la que obligaron a sacrificar todos los sus animales en el mes de marzo, y subrayó que a día de hoy no hubo ningún tipo de reunión por parte de la Consellaría con los ganaderos afectados: “ni siquiera se reunieron con la granja de Manzaneda para indicarle qué derechos económicos tiene o incluso cuál es el procedimiento para esta granja para la entrada o salida de animales, pese a que el conselleiro dijo que Jorge Mourelo, subdirector general, sí que iba a hablar con ellos; entonces, esto no se dio y sigue sin darse”.
En la misma línea, Xosé Manuel Parente (SLG Ourense), lamentó la dejadez de responsabilidades en la que dice, está enrocada la Consellaría, a pesar de a la creciente preocupación en el campo gallego: “Lo triste es que parece ser que vamos a seguir sin respuesta porque no se quiere reunir con el Sindicato Labrego. Lo único que hace es intercambiar notas de prensa en los periódicos. Es lamentable que ante esta situación en la que están apareciendo casos de positividad y se hacen vacíos sanitarios, nadie de la Administración sea capaz de sentarse a hablar con los titulares de las explotaciones que están viendo como se rompen sus vidas”.
«En zonas con prevalencia superior de tuberculosis no se sacrifican todos los animales de una granja en caso de un positivo. Esto es discriminatorio para Galicia» (Isabel Vilalba)
Isabel Vilalba volvió a incidir además en que la catalogación ‘prevalencia 0 de tuberculosis bovina’ en Galicia, declarada desde el año 2022 -a pesar de estar constatada científicamente su presencia en reservorios de fauna salvaje-, está acarreando graves consecuencias para las granjas de nuestro país: “la primera es matar animales sanos, muchos animales sanos, lo cual no va a llevar a ninguna situación de erradicación de la enfermedad ni de un mejor control. La otra cuestión es que las indemnizaciones son totalmente insuficientes para que estas granjas continúen, es decir, significa para muchas cerrar de un día para otro”.
Vilalba también llamó la atención sobre lo contradictorio de esta medida: “mientras tanto, a las granjas con la misma situación pero en territorios con prevalencia superior solo se les sacrifican los animales positivos. Es decir, podemos llegar al caso de que en una granja gallega a la que le acaben de matar todos los animales entre ganado nuevo de otra en la que también se detectó un positivo, pero en un territorio con prevalencia superior. Es totalmente absurdo y discriminatorio para Galicia”, valora.
El Sindicato Labrego dude de que se vaya a aplicar el mismo protocolo en granjas de mayor dimensión
El Sindicato Labrego duda además de que se vaya a aplicar el mismo protocolo en todos los casos: “Le queremos preguntar al conselleiro si en una de esas granjas que le gusta a él visitar, de 400 o 500 animales, si cuando aparezca el primer positivo las van a matar a todas también o si sólo esta cuestión le parece bien cuando son granjas más pequeñas”, cuestiona Seivane.