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Los molinos siempre fueron un espacio de reunión del vecindario, ya que mientras se esperaba a que se moliera la harina se echaba un cuento e incluso se tomaban unos vinos. Actualmente, pocos quedan que sigan funcionando y uno de ellos es el llamado Muiño del Frouseiro. Está situado en la parroquia de Goá, en Cospeito (Lugo), y trabaja con el agua del río Anllo. Actualmente sigue a ser rentable y, por eso, su propietario José Engroba busca quien lo quiera alquilar para que no deje de trabajar.
José Engroba afirma que «no quiero que quede parado, ya que toda la vida estuvo produciendo con fines comerciales». El molino fecha del siglo XVIII en el Catastro de la Ensenada, que es cuando hay la primera referencia, y fue restaurado hace cinco años. Aun así, la maquinaria sigue a ser a misma con la que molía desde hay más de cien años. Cuenta con dos piedras, una de origen francés y otra del país y las turbinas, que siguen trabajando, se renovaron en 1926. Estuvo trabajando hasta ahora, produciendo un promedio por piedra de 500 kg aunque «todo depende de la época, porque no se trabaja igual si hay mucha agua o muy poca, aunque en buena parte del año esa sería su producción media».
Cuenta con certificado sanitario hasta el día de hoy «y es una pena que se quede sin trabajar». Además, demuestra que tiene una actividad rentable. En él se muelen distintos tipos de harinas, desde la de trigo, centeno, la de espelta o de Callobre y Caaveiro. «Algo que tiene mucho éxito es que el cliente traiga el cereal que sea, venga a moler y recoja su propia harina. Cada vez valoran más esto, poder confiar en que te están moliendo tu propio cereal». Añade que desde la pandemia se valoran más las harinas artesanas, por eso El Molino de Isabel, que era a firma que lo explotó hasta ahora desde hace siete años, tuvo tanto éxito.
El propietario afirma que hasta el molino se acercaron personas de Asturias, Ferrol, A Fonsagrada, además de clientela de toda la Terra Cha «ya que no quedan en funcionamiento molinos con estas características». Hay que añadir que las ventajas que ofrece internet propicia que el molino cada vez sea más conocido y genere más interés para ir a ver como funciona.
Con todas las ventajas que ofrece el molino, «produciendo una harina de manera tradicional y de calidad, con una producción alta», Engroba anima a quien quiera ponerse al frente de este molino que lo llame a través del contacto 637039525, para que «juntos podamos conseguir que este molino siga girando».
