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La Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria, dependiente de la Consellería de Medio Rural, pone en marcha por quinto año consecutivo los controles en la vendimia para asegurar y preservar la calidad de los vinos de las denominaciones de origen (DO).
Este es un plan propio de la Xunta -complementario del que realizan los propios Consejos Reguladores-, aL que se destinan cerca de 200.000 euros, y que tiene como principal objetivo evitar situaciones fraudulentas que se puedan producir desvirtuando el sistema general de control de calidad diferenciada de los vinos gallegos con sello de calidad.
El Plan de control de la vendimia 2023 cuenta con un equipo formado por 18 personas, de las cuales 15 son inspectores de campo y tres son ingenieros agrónomos. Este programa se puso en marcha en coordinación con todos los consejos reguladores de cada una de las denominaciones de origen (Rías Baixas, Ribeiro, Valdeorras, Ribeira Sacra y Monterrei).
En el año 2022 los inspectores realizaron el control sobre 3.400 parcelas, que corresponden a un total de 200 viticultores de las diferentes denominaciones.
Durante la presente campaña se realizarán los mismos controles que en las anteriores. Así, se harán inspecciones a viticultores, bodegas, transporte (verificación de cargas y descargas), controles de centros de aprovisionamiento, controles de capacidad y vigilancias nocturnas y diurnas.
Entrada de la uva en las bodegas
Una parte muy importante del control se lleva a cabo durante la vendimia con el fin de verificar la entrada de la uva en las bodegas, su origen y la producción máxima que establece cada pliego de condiciones para las distintas variedades de uva de cada DO.
También se estimará la posible cosecha para así tener información detallada y poder comparar con la producción real que se entrega en la bodega.
Asimismo, se realizarán controles terrestres de uva en las cercanías de las bodegas y en las vías de comunicación en el entorno de las parcelas de vendimia.
También se controlarán los centros de aprovisionamiento o puestos de compra-venta de uva que puedan existir en el ámbito geográfico de actuación, para garantizar que estén dados de alta en el respectivo consejo regulador. Una vez rematado el período de inspecciones, con los datos recogidos se realizarán informes técnicos, estudios estadísticos y comparativas.
