En la actualidad, las colmenas más utilizadas se denominan movilistas (de crecimiento vertical u horizontal) porque están provistas de panales móviles o cuadros, que se pueden separar tanto para la recolección de la miel como para la limpieza o tratamientos. La utilización de láminas de cera estampada sobre estos cuadros es una práctica habitual en la apicultura contemporánea ya que supone un ahorro energético para la colonia que podrá invertir en otras tareas como la recolección y/o la producción.
Estas láminas de cera se colocan en el interior de la colmena y después de ser estiradas por las abejas obreras, actuarán como alojamiento de la descendencia de la colonia («cuna de la cría»), así como de almacén de los alimentos que serán utilizados tanto por las propias abejas como por nosotros mismos. Una vez que la cera es usada por varias generaciones, va envejeciendo y estaríamos hablando de cerón. Estos panales viejos son renovados por los apicultores anualmente en un porcentaje variable que puede oscilar del 20 al 30%.
El recambio de la cera es fundamental para el buen estado sanitario de la colmena
El recambio de cera es una práctica de manejo sanitario fundamental del apicultor para el buen funcionamiento de la colonia, principalmente por las consecuencias que pueden tener sobre la cría y el alimento: la acumulación de restos de mudas de la cría de abeja, los residuos químicos y las formas de resistencia de microorganismos patógenos que se alojan de forma habitual en esta matriz.
Los residuos químicos provienen fundamentalmente de los tratamientos usados frente a Varroa destructor y de los productos fitosanitarios que se emplean sobre la flora que rodea al colmenar. Si bien la mayoría de estos compuestos se aplica bajo las fórmulas comerciales, en muchos casos los apicultores han utilizado los mismos principios activos de un modo artesanal, con dosis y duraciones del tratamiento no supervisadas por un veterinario.
Como consecuencia, estos tratamientos además de resultar ineficaces frente a V. destructor, dejan residuos en los productos de la colmena fundamentalmente en la cera donde se almacenan con más facilidad debido a su naturaleza lipofílica. Todo ello contribuye a la necesidad no sólo del recambio de esta cera sino también a la limpieza de la misma.
Esta fue una de las necesidades detectadas por BIOPYC. SOLUCIONES APÍCOLAS, una empresa dinámica que cree en la mejora continua y trabaja para solucionar los problemas del apicultor, facilitando de este modo el ejercicio de su actividad.
El contacto continuo y directo con todos los integrantes del sector apícola: apicultores, técnicos, veterinarios, empresarios apícolas, investigadores, etc., tanto a nivel nacional como internacional ha permitido a esta empresa encontrar un servicio de limpieza del cerón que en los últimos años estaban demandando insistentemente los apicultores.
Servicio de limpieza del cerón
El servicio de limpieza de cerón que se ofrece desde BIOPYC. SOLUCIONES APÍCOLAS se lleva a cabo en la Baja Sajonia (Alemania) de la mano de Andreas Müller, Director General de la empresa que lleva su mismo nombre y uno de los mayores proveedores de las empresas apícolas.
El servicio consta básicamente de los siguientes puntos:
1) Lotes mínimos de cerón de 500 Kg.
2) Costes del servicio:
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Transporte
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Limpieza de acaricidas
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Laminación
3) Punto de recogida común y único
4) Recogida: en bloques regulares paletizados
5) Devolución: en bloques rectangulares regulares o láminas
6) Tiempo del servicio: 3 semanas aprox. (incluyendo transporte)
7) Pérdidas en el proceso:
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Residuos sólidos que no son cera (se devolverán junto a la cera procesada)
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Mermas propias del proceso de limpieza ( ≤ 10 %)
8) Límites mínimos de limpieza de acaricidas (Certificado Universidad Hohemheim, Stuttgart):
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Coumaphos: 80 %
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Tau – Fluvalinate: 20 %
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Amitraz y sus metabolitos: 80%
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Otros: a Determinar su presencia y límites.
El proceso de limpieza del cerón que utiliza Andreas Müller, es un proceso desarrollado y patentado por Bayer, en concreto por el Dr. Dieter Ulrich (experto en tratamientos de sólidos y tecnología de aguas residuales en BAYER SERVICIOS TECNOLÓGICOS) que aplicó su experiencia en separación sólido-líquido para este fin.
Si bien se trata de un proceso mucho más complejo y largo, las bases fundamentales son las que se detallan a continuación:
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Fundir cerón
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Adición carbono activado a la cera líquida
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Producción de una mezcla homogénea
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Reposo (de 30 a 90 min)
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Filtro a presión (4 a 6 bar).
Los puntos críticos de dicho proceso y que constituyeron el gran desafío para el Dr. Dieter Ulrich y Andreas Müller, son esencialmente el tipo de carbono activado empleado procedente de una región concreta de Irlanda y el sistema de filtración y presión utilizada para eliminar el polvo de carbono a partir de la cera líquida.
Cera limpia y sin resíduos
Como se ha comentado anteriormente, se trata de un proceso mucho más largo y complejo, pero que ofrece al apicultor la posibilidad de recuperar una cera limpia, con una baja carga de residuos químicos que pueda llegar a comprometer el desarrollo de las colonias de abejas.
La detección de esta necesidad y de otras muchas que tiene el apicultor en sus labores cotidianas, desde el instante en el que sale al campo para trabajar con sus abejas hasta el momento en el que quiere posicionar sus productos en el mercado internacional, ha hecho que BIOPYC. SOLUCIONES APÍCOLAS apueste por un sector que en ocasiones se ha sentido olvidado y marginado dentro de la ganadería nacional.
Con el propósito de que la apicultura llegue a consolidarse como una actividad agropecuaria a la altura de las demás, la empresa aragonesa ha apostado por la inversión en un amplio catálogo de productos y servicios que intenta dar cobertura a todas las peticiones del apicultor, entre ellas el servicio de la limpieza del cerón que se ha detallado en este artículo.